que no entiendes maldita, John jamás me toco, solo tú fuiste tan estúpida para creerlo.
Ella me sonreía con burla mientras yo seguía en el suelo, estaba golpeada brutalmente y violada incontables veces.
- yo que te hice? Diana, porque.
Mi voz se quebró al por fin al darme cuenta de toda la situación.
Diana era mi mejor amiga, siempre le permití todo asta entrar a mi hogar, solo para que ella hiciera todo para quedarse en mi lugar.
- yo siempre amé a John íbamos a casarnos, y tu maldita simplemente te metiste, ahora morirás como la mujerzuela que eres y sabes lo gracioso.
Ella se acercó lentamente.
- que tu misma me diste el poder sobre tu hogar, ahora será mío y nadie se acordara de la princesa que huyo con su amante serás la vergüenza de tu familia.
Siento un fuerte dolor en mi pecho, bajo la mira viendo que Diana tenía en sus manos una pequeña daga, con incrustaciones de diamantes y rubíes, lo gracioso de esto es que yo le regale esa daga.
- sabes me hubiera gustado verte sufrir aún más, pero mi futuro esposo me espera en casa y estará muy dolido al saber que te has ido con tu amante así que debo aprovechar esa oportunidad, gracias, querida Atenea.
El dolor en mi pecho se vuelve más intenso, al fin puedo descansar de tanto sufrimiento de estos últimos días.
Lo único que lamento y me arrepiento es no haberle dicho a John cuanto lo amaba, de decirle que en mi vientre yacía un pequeño ser que anhelaba conocer a sus padres, pequeño que ahora me llevo conmigo.
Te amo John, lamento no decirte que te amo.
Lamento dejarte en estos momentos pensando en que estoy en los brazos de otro hombre.
Lamento haber dejado que una víbora como Diana entrara en nuestro hogar.
Y sobre todo lamento llevarme conmigo a ese pequeño ser que algún día te llamaría padre, pero prometo que lo cuidaré muy bien y le hablaré de ti.
Te amo amor mío
Sierro mis ojos y en mi último pensamiento lo único que puedo desear es haberlo amado más.
Mis ojos se siente pesados y estoy demasiado cansada para poder seguir teniéndolos abiertos, imágenes de mi vida a lo largo de los años pasan por mi mente, desde mi niñez, asta la adolescencia y mi vida como adulta, las veces que discutí con mi padre por no poder cumplir con mis caprichos, el dolor que le cause por haberlo hecho a un lado por mi abuela, la mujer más maldita de todas que solo le importaba mantener su estatus y poder, la vez que le grite a mi hermano y le dije que lo odiaba por defender a mi padre y su matrimonio con mi tío, hermano de mi madre, la vez que hice llorar a papá al decir que era una abominación haberse casado con otro hombre solo porque eso es lo que mi abuela me aconsejo.
Ahora sé que fui una estúpida niña que se dejó influenciar todo este tiempo por personas equivocadas, perdónenme padres, hermano y perdón amor mío.
Siento mi cuerpo pesado y mi respiración se vuelve más lenta de pronto siento que alguien me mueve y mientras escucho la voz de mi nana hablar.
- princesa levántese hoy es el primer día de su entrenamiento, su papá ya la espera para desayunar, también recuerde que hoy llegan los emperadores de Cristal.
Atenea: hay nana deja dormir.
De pronto abro los ojos y de un salto quedo de pie.
Miro a la mujer frente a mí, una señora de aproximadamente 50 años tan sabia, ella es mi nana la única mujer que siempre estuvo para mí en las buenas y en las malas, ya que mi abuela me abandonó después de que decidiera casarme con el duque. Mis ojos se llenan de lágrimas al recordar el día en que le grite cuando deje que mi mejor amiga entrara a mi hogar.
Mis lágrimas empiezan a caer por mis mejillas, ella estaba viva? O yo soy la que está muerta? Porque ella falleció meses después de que Diana empezara a vivir en la mansión y ella me dijera que no confiaba en ella, ya que sé la paresia muy falsa y envidiosa, la encontré muerta había caído por las escaleras y aunque siempre pensé que había sido un accidente ahora pueda estar segura de que eso no fue así.
- pero mi niña porque lloras? Si es por lo que le dijiste a tu papá ayer de que no querías entrena como un hombre porque tú eres una dama, hija recuerda que tu papá solo quiere lo mejor para ti.
Ella hablar y yo aún no me podía dar cuenta que era verdad y que era mentira.
Atenea: nana tú en verdad estás aquí? Tú estás viva?
- pero por supuesto que estoy aquí, fui la doncella personal de tu madre y el día en que ella falleció yo jure protegerte siempre e ir contigo a donde sea que vayas, que tienes hija porque lloras.
Atenea: nana que año es este.
Mi voz suena diferente.
- bueno es el año 1520 tú acabas de cumplir 12 años, pero porque preguntas? Sigues dormida porque no vas a la tina yo ya vuelvo te traigo tu té para que despiertes ok, pero apúrate tu papá te a de estar esperando en el comedor, hija tu padre solo quiere lo mejor para ustedes, él te amo a ti y a tu hermano, el quedo muy devastado cuando tu madre falleció sé que para ti no es bien visto que se haya casado con tu tío y más que este es un hombre, pero entiende hija en el corazón no se manda y tu padre no por eso los hizo a un lado, ustedes son el pilar de su mundo y si tú le faltas él se derrumba, no le hagas caso a tu abuela esa mujer solo quiere dañar la familia por su ambición de poder ahora ves a bañarte anda vamos.
Yo aun algo desorientada entro al cuarto de baño, frente ami ay un espejo donde me deja ver perfectamente, mi cuerpo es pequeño delgado y sin curvas, tengo 12 años, me pellizco mis mejillas para saber si es verdad que estoy aquí.
El dolor causado y el enrojecimiento en esa zona me termina de abrir los ojos.
...Atena:...
Es verdad, en realidad estoy aquí, en realidad volví
O por dios en serio soy yo.
Eso quiere decir que volví al pasado, tengo una nueva oportunidad, gracias dios mío, en serio gracias, ahora tengo la oportunidad de empezar de nuevo y tomar las decisiones correctas, pedirle perdón a mi padre y a mi tío así como también a mi hermano y primo, también podre decirle a mi abuela cuanto la desprecio.
Ella solo está en el palacio de la emperatriz porque yo les pedí a mis padres que la dejaran vivir ay, así que a partir de hoy ya no seré una tonta niña ingenua que se dejaba engañar e influenciar por víboras.
Yo soy la primera princesa Atenea Mondragón Benavides, hija del emperador Maximiliano Mondragón y la princesa Tea Benavides, mi tío y actual esposo de mi padre el emperador Leonardo Benavides
Soy Atenea y esta es mi historia y no dejaré que nadie me quite mi lugar ni a mi esposo, en estos momentos tengo 12 años, regrese de la muerte y de un futuro donde mis actos me llevaron a las desgracias y a perder a mis seres queridos todo por querer ser perfecta para que mi abuela la madre de mi mamá y de mi tío se sintiera orgullosa de mí, importándome menos lo que mis padres y mi amado hermano pensaran.
Pero ya no más, esta es mi vida y he vuelto para cambiar mi trágico final
John mi amado duque, prometo volver a enamorarte y volver a casarme contigo, también prometo vengarme de esas personas que nos separaron y que nos hicieron daño así como también hicieron que nuestro hijo muriera
Llevo mis manos a mi vientre.
Mi bebe, no pude hacer nada para protegerte, mi padre siempre me dijo que si yo sabía defenderme sola, podría vencer el mundo, pero yo por caprichosa altanera y arrogante siempre le dije que para eso se le pagaban a otras personas para que ellos nos protegieran con su vida.
Pero ahora entrenaré para ser fuerte y defender a mi familia en el futuro.
Les contaré un poco de mi futuro de horror.
Futuro que yo misma forje hasta terminar así.
La verdad es que mi hermano y yo le decíamos papá a ambos, pero un día llego la bruja de la abuela y ella poco a poco empezó a llenar de ideas mi mente hasta el punto de que empece a desobedecerle a mi padre.
Cuando tenía 12 años mi padre Max quiso que mi hermano y yo empezáramos a entrenar junto al príncipe heredero o sea nuestro primo. Pero mi abuela se había encargado de mis clases de etiqueta y una de esas es todo lo que debe ser una dama.
Le dije a mi padre que no lo haría, yo era una princesa estaba para que me protegieran no para proteger así, mi padre intento persuadirme, pero yo me empeñe, le dije todo lo que según yo debía ser una dama, al igual que los hombres llamándolo abominación por estar casado con un hombre y no cualquiera sino que nada más y nada menos que mi tío el hermano de mi madre.
lo vi quedarse callado y levantarse del comedor, ya que estábamos desayunando.
sus ojos estaban cristalizados, él solo me miro y se levantó con su elegancia que lo caracterizaba siempre y se fue, al principio quise ir tras él y pedir perdón, pero una princesa no pide disculpas ni se retractaba de sus palabras, mi padre dejo de verme a los ojos, pero aun así él siempre estaba al pendiente de hacerme saber cuanto me amaba y yo me empeñaba a ignorarlo tal y como la abuela decía, conforme iba creciendo, me fui enamorando poco a poco de John, consejero real y duque de York, él un hombre alto, sus ojos era una combinación de azul y verde, piel blanca, cabello negro, aaahhh el hombre más hermoso del país después de mi papá y mi hermano claro esta. El problema, era que el duque a pesar de ser un hombre muy influyente en el país, gran amigo del duque David Carson de Golden el cual también es concejero real en su país, de ser el 3 hombre más rico de Diamantino, era 15 años mayor que yo. Aun así con todo pronóstico encontrá al cumplir los 14 años de edad le pedí como. Regalo un beso, beso el cual después de mucho insistir me lo dio, él me lo iba a dar en la mejilla, pero yo no lo quería así, así que en un descuido le plante un beso en los labios siendo así mi primer beso, después de eso, este siempre estaba avergonzado para verme a los ojos. A los 15 entre a la academia junto a mi hermano y mi primo, ahí conocí a Diana quien se volvió en una amiga y la única, ya que su padre era un conde muy influyente, la consideraba mi mejor amiga, un día le conté de mi amor secreto así el duque de York, al volver de vacaciones me lleve la dolorosa noticia de que mi amiga se había comprometido con John, me sentí herida, luego ella dijo que no sabía nada, pero cuando volvió a casa por vacaciones su padre la había llevado a una cena para que conociera a su prometido y resulta que era el duque. Yo le creí porque normalmente los padres buscan maridos influyentes y ricos para sus hijas, días después la veía feliz, me contaba que el duque le mandaba cartas diciendo cuanto deseo tenía de casarse con ella, así que decidí desistir de algo con él y aunque dolía sabía que tenía que olvidarlo.
Ellos se casarían después de que ella saliera del instituto y eso seria a los 18.
Las clases dieron fin y al volver a casa, mi papá dio un banquete por su cumpleaños, muchos emperadores y figuras importantes de país asistieroAtenean, entre ellos llego Damián el príncipe heredero de Silver, el quería proponer una alianza de paz con un matrimonio y aunque el non tenía hermanos si andaba buscando prometida
...Atenea:...
Mi padre quiso negarse, pero mi abuela me convenció de aceptar, ya que a ese banquete había asistido Diana y John, mi abuela dijo que con mi boda asegurábamos la paz, el crecimiento del país por un tratado comercial y mi ascenso como una emperatriz, regente de un país y no la simple esposa de un duque plebeyo que solo había obtenido el título de noble por ser el lamé botas del ex emperador mi abuelo Uriel, así que mi compromiso con el príncipe fue aprobado, nos casaríamos después de que terminar la academia.
Mis estudios desde ese día se multiplicaron, debía aprender muchas cosas de política idiomas, números, bueno de todo, debía ser la muñeca perfecta.
Al cumplir los 18 y terminar el instituto fui enviada al país de Silver, ya que sería el baile donde me presentarían oficialmente como prometida del príncipe heredero. Me quedaría a partir de ese día en el país para aprender todo sobre este y desempeñar mi papel como emperatriz, por un lado, me serviría, porque la boda de John y mi amiga diana se llevaría a cabo casi durante esa fecha. Los meses fueron pasando y entre mis estudios y los preparativos de la boda y la coronación nunca veía a mi prometido y la verdad eso no me molestaba, ya que no lo amaba.
2 semanas antes de la boda Damián llego a mi habitación y quiso que me entregara a él, lo cual accedía, puesto que a final de cuentas era algo que tenía que pasar. Todas las noches iba a mi habitación y hacia lo que quería conmigo, 3 días antes de la boda después de haber tenido relaciones conmigo se vistió como las noches anteriores y en lugar de irse me dijo que el matrimonio se cancelaba.
Yo estaba en shock
Él dijo que quería una mujer que lo complaciera en la cama y yo solo abría las piernas para él y no movía ni un solo músculo, eso en teoría era cierto, ya que él no despertaba nada en mí, pero lo que si me molesto fue que al otro día canceló oficialmente la boda, y presento a su prometida, yo estaba furiosa no por él, o porque estuviera despechada, estaba furiosa por haberme hecho pasar 6 meses de desvelo y estrés, con mis estudios de emperatriz y los arreglo de la boda y la coronación, a demás de que me había entregado a él, quien me querría así, mi padre estaba furioso exigió una disculpa pública y demás, al volver a mi país era a burla de la sociedad, mi abuela me abofeteo por no saber complacer a un hombre y por haber perdido mi oportunidad, pero eso no fue lo peor, lo peor vino cuando me desmaye y al llamar al médico real este dijo que estaba embarazada, mi padre estaba realmente furioso, pero eso no quedo así, la noticia de mi embarazo se regó por el país, era la vergüenza de la familia y la deshonra de la corona, aunque mi padre jamás me juzgó, yo no quería ese bebe, sentía que era una inútil una basura, una noche, hombres encapuchados entraron a mi habitación y me golpearon hasta casi matarme, si no fuera porque papá llegó a tiempo lo hubieran logrado aunque la verdad eso hubiera estado mejor.
Los bandidos lograron escapar, pero yo sabía que ellos habían sido enviados por Damián, no dije nada, pero a despertar había perdido al bebe.
Días después llego una carta al palacio exigiendo que me enviaran al imperio Silver como concubina del nuevo emperador, yo me negué al principio, pero luego pensé en que era lo mejor ser concubina y seguir dándole vergüenza a mi padre, peri cuando iba a aceptar a los representantes de ese país John dijo que él y yo estábamos comprometidos y que nuestra boda ya era un decreto real.
Lo cual me sorprendió, ellos se fueron molestos.
John no me dio la cara, él se quedó hablando con mi padre mientras a mí me sacaron de la sala, al otro día mi padre aviso que mi boda se celebraría 3 días después, lo único que debía buscar era el vestido de novia.
Yo no sabía lo que pasaba, por un lado, estaba feliz porque me casaría con el gran amor de mi vida, pero por oto estaba triste, ya que pensaba que solo lo así para proteger el honor de la familia real, a demás de que también estaba un poco desorientada, puesto que John se iba a casar en una semana con Diana.
Aun así me prepare, el día de mi boda llegó y a pesar de todo estaba feliz, me case y la noche de bodas llego, estaba bastante nerviosa porque ya no era virgen, me sentía sucia por ello, aunque John no me reprochó nada y me entregue a él, lo hicimos toda la noche, John es un hombre bastante apasionado y viril me hizo tocar las estrellas y a partir de ese momento los encuentros entre nosotros eran frecuentes, dormíamos juntos, él iba a mi oficina cuando yo estaba haciendo mis deberes como a duquesa y terminábamos entregándonos a la pasión y la lujuria, un día John tubo que salir aúna misión con mi padre, se iba por 3 días, al otro día de que él se fuera llegó Diana a La mansión llorando, su padre la había corrido de casa sin nada solo por el compromiso roto, me sentí culpable, ya que o fui la que me había metido en ese compromiso y bajo la insistencia de mi nana en que no le hiciera caso y que todo era mentira de ella aun así la acepte en mi hogar, me sentía responsable, le di una mesada para que ella comprara lo que le hiciera falta, John volvió y aunque al principio no le agrado la idea, pero después de una tarde apasionada aceptó mi decisión.
A partir de ahí todo empezó a ir de mal en peor, Diana siempre estaba metida entre mi esposo y yo, y yo nunca pensé que su plan era separarnos, pero así fue, poco a poco las discusiones de mi esposo y yo eran más frecuentes, había días que no me tocaba, días pasaron hacer semanas, y yo estaba desesperada porque no lograba concebir.
Download MangaToon APP on App Store and Google Play