Rey Carlos V

Mi reino fue maldecido por una hechicera muy poderosa, porque su esposo fue asesinado por uno de mis soldados, nada germina, y los árboles quedaron petrificados.

Mi esposa está embarazada y la misma hechicera llamada Morgana que reveló que serán dos niñas.

Con la trágica muerte de su marido por un grave error de mi soldado acudí a ella, si nada germina en mi reino, ya que mi esposa que ya está en el séptimo mes de gestación tendrá hijos sanos.

Monté en mi caballo llamado Ajax, un corcel negro muy rápido que hace honor al nombre y voy al reino de las hadas para tener una audiencia sin marcar con Morgana, la reina de las hadas, montar y ver los árboles y cultivos totalmente petrificados, millas y millas de destrucción.

Llego al reino de las hadas, el único que no está maldecido por la revuelta de Morgana, la hechicera.

Humilde le pido a una de las hadas que le comunique que el rey Carlos V del reino de Avalon quiere hablar con ella.

El hada advierte voluntariamente a Morgana que me da la bienvenida a su castillo muy triste.

— Sé a qué vino el rey Carlos de Avalon, y estoy dispuesto a ayudar y revertir la maldición en su reino por bendiciones, pero hay una condición.

- Qué Morgana estoy dispuesto a aceptar cualquier condición.

Junto a Morgana, la hechicera es un niño de unos cuatro o cinco años y estoy impresionado por la belleza de su cabello rubio y sus llamativos ojos azules.

— Mi condición, rey Carlos V de Avalon, es que una de sus hijas, la qué nací primero, sea domadora de lobos y se case con mi hijo Natanael.

Acepto su condición, después de todo tengo que asegurarme de que mis hijas nazcan sanas y tengan una vida feliz en el reino de Avalon.

Inmediatamente, la hechicera deshace su maldición y acordamos que una de mis hijas aprendería a domar lobos y se casaría con el príncipe del reino de las hadas, y que el matrimonio se haría oficial cuando cumpliera veintiún años.

Morgana me advierte que este matrimonio es necesario y fortalecerá a los dos reinos contra una guerra que tendrá lugar entre el reino de Avalon y el reino de Ascaban donde hay magos que practican magia negra, con lobos domesticados para hacer el mal, y estos hechiceros los controlan solo con la fuerza del pensamiento.

- ¿Cómo sabré cuál de mis hijas será la domadora de lobos?

— Ella tendrá contacto con los lobos y ellos se han inclinado ante ella y será respetada ante la manada Ahora vaya el rey Carlos V de Avalon, no sabremos cuándo será la guerra contra los magos de Ascaban.

Vuelvo a mi reino en mi veloz corcel Ajax y tan pronto como cruzo las puertas veo a mi esposa comiendo una manzana debajo del manzano felizmente se acerca a mí y le pregunta sobre la conversación que tuve con Morgana.

Rosangela, mi esposa, me agradece por mi coraje y acepta dar una de nuestras hijas gemelas al hijo de Morgana, Natanael, en matrimonio.

Beso a mi esposa y acaricio su vientre.

Podré criar a mis hijas que se convertirán en princesas con buena salud y en una tierra hermosa, y así esperaré a que pasen los años.

Veintiún años después

Destacó mi hija Talía, ella que fue elegida por la manada para domar a sus lobos y ellos los respetan.

Recuerdo hasta el día de hoy cómo fue que mi hija se acercó a la manada, fue en un hermoso día soleado cuando fuimos cabalgando por el reino de Avalon como familia, una manada nos atacó y tan pronto como llegó Talia, los lobos se inclinaron ante ella comenzando por el Alfa que se acercó a su caballo y se inclinó llevando a los otros lobos a hacer lo mismo. En el momento en que Talía tenía siete años, mi esposa y yo nunca escondimos de las gemelas Talía y Talita que una de ellas sería la domadora de lobos y se casaría con Natanael de Avalon.

Talita nunca se sintió atraída por la idea, siempre estuvo claro que nunca se casaría con alguien que no conoce y mucho menos con el hijo de una hechicera, ya que Talía siempre estuvo dispuesta a cumplir el diseño del destino si era elegida por la manada, porque fue elegida incluso en la infancia hoy en día está preparada para casarse y con su madre se encarga de los preparativos de la boda, lo que alivió a su hermana Talita, que siempre expresó su disgusto con el trato que hice con Morgana, la hechicera, y siempre esperó que ella no fuera la elegida por los lobos.

La manada que se inclinó ante Talía ahora vive en las afueras del castillo y ha sido muy bien entrenada por Talía desde el alfa hasta el más joven de los lobos y entienden lo que mi hija quiere que hagan solo con una mirada que mi hija les dirige

Y en su boda, que se celebrará la tarde siguiente, la manada estará presente y ella vivirá con Talía y Natanael en el reino de las hadas y allí serán entrenados para la guerra contra los magos de Ascaban una guerra que no sabemos ni el día ni la hora que sucederá.

Hoy Talía está realizando la última prueba de su vestido de novia que usará en la boda de mañana, muy emocionada, está acompañada por mi esposa Rosangela y su hermana Talita, quien a pesar de no estar de acuerdo con la decisión de su hermana desea que sea feliz con el príncipe de hadas Natanael.

Y yo, como Rey de Avalon, siento que mi hija, la Princesa Talía, tomó la decisión correcta para proteger el reino en el que nació, el mismo reino que una vez fue maldecido por la hechicera Morgana hace veintiún años, cuando todavía estaba en el vientre de su madre, mi amada Reina Rosangela de Avalon.

Incluso sin conocer el rostro de Natanael, ella lo acepta como su esposo, y para ser honesto, ni siquiera conozco su rostro, porque cuando lo vi solo tenía entre cuatro y cinco años.

Talía

Fui elegida por la manada para domar a sus lobos cuando era solo una niña de siete años, mi hermana gemela Talita y yo siempre supimos del trato que mi padre hizo con la hechicera Morgana para salvar el reino de Avalon de la destrucción cuando mi hermana y yo todavía estábamos en el vientre de nuestra madre, la reina Rosangela de Avalon.

Y hoy, a la edad de veintiún años, mi madre y yo nos ocupamos de los preparativos para mi matrimonio con el hijo de la hechicera Morgana, Natanael, a quien nunca he visto la cara por la que estoy feliz, porque sé que estoy haciendo lo correcto para proteger al reino de Avalon de la guerra que sucederá en el futuro contra el reino de Ascaban, Un lugar donde entrenan lobos para protegerlos y no sabemos el día ni la hora en que atacarán nuestro reino, y para ello tenemos que estar preparados y entrenados.

Hoy estoy realizando la última prueba de mi vestido de novia acompañada por mi madre, la reina Rosangela de Avalon, y mi hermana Talita, la princesa de Avalon, que piensa que estoy cometiendo una locura al casarme con un hombre que ni siquiera conozco para honrar un acuerdo que nuestro padre, el rey Carlos V, hizo con la hechicera Morgana.

Ella puede decir lo que quiera, siento que estoy haciendo lo correcto, para proteger el reino en el que nací y tuve una infancia feliz junto a mis padres, mi hermana pequeña y la manada que me eligió.

Me miro en el espejo y me emociono, nunca imaginé que se vería tan hermoso en el vestido de novia que mi madre y yo elegimos con tanto cariño y cuidado y espero que este vestido y mi apariencia agraden al príncipe de hadas Natanael, y espero que nos gustemos a primera vista.

No conozco su rostro, y mi padre no puede ayudarme en ese sentido, porque vio al príncipe solo una vez cuando tenía unos cuatro o cinco años. Como papá me dijo, estaba encantado con el cabello rubio y los ojos extremadamente azules, ojos que según ellos son impactantes.

Pero no importa ahora, aunque estoy deseando conocer al príncipe tengo que esperar hasta mañana por la tarde para conocerlo y casarme con él, mi padre que celebrará la ceremonia y estoy muy ansiosa y emocionada, para saber que estoy haciendo lo correcto para proteger el reino que crecí y que viví una infancia maravillosa, Debo proteger a mi pueblo de cualquier mal que quiera devastar el reino de Avalon y no permitiré que los magos de Ascaban vengan y destruyan lo que es más hermoso entre los ciudadanos de Avalon: su buen entendimiento y complicidad.

Mi madre me besa la mejilla y contemplo mi imagen en el espejo y a través de él veo que mi hermana Talita también está emocionada.

Natanael

Mañana por la tarde me caso con la princesa Talia de Avalon, hija del rey Carlos V, esta fue la condición que mi madre impuso para deshacer la maldición que había lanzado sobre el reino de Avalon para vengar la muerte de mi padre que murió por un error de un soldado del rey.

Hasta el día de hoy mi madre no me dijo qué error cometió el soldado y no la presiono, la muerte de mi padre Sirius causó mucho dolor en mi madre, perdió por un error al hombre que amaba y al rey de las hadas.

Espero conocer a mi futura esposa y junto a ella entrenar a los lobos para ayudarnos en la próxima guerra contra los magos de Ascaban que está a punto de tener lugar.

— Hijo, ¿cómo te sientes acerca de todo esto?

— Madre cumpliré mi destino y junto a mi esposa Talía saldremos victoriosos en esta guerra que está por suceder. Espero que nos enamoremos a primera vista madre para que podamos vivir en paz y juntos entrenar a la manada que vendrá aquí para la guerra que sucederá.

- Sé que te enamorarás, aunque nunca se han visto sigo a las gemelas desde lejos y puedo decir que ambos están dotados de gran belleza y sobre todo carácter.

Mi mamá arregla la pajarita que llevo puesta, hoy fue la última prueba de mi disfraz de novio y estoy deseando casarme con la mujer que mi mamá eligió para mí.

- Hijo, mañana le daré como regalo a tu esposa la unidad de la naturaleza, el mismo poder que dominas a mi hijo, entrenarás a tu esposa, dos personas de la naturaleza pueden realizar la exclamación de la misma, un poder muy poderoso que terminará esta guerra cuando esté en su apogeo.

- Podríamos terminarlo antes de empezar mamá.

- Eso sería violar lo que está escrito por las fuerzas divinas para el destino de Avalon, así que hijo mío, no podemos cambiar lo que escribió lo divino más, podemos ganar esta guerra que sucederá.

Mi madre tiene razón y ayudaré a mi esposa a dominar este poder que mi madre le dará.

Tomo la cajita en la que están nuestros anillos y se la muestro a mi madre.

— Hijo, son hermosos, a la princesa Talía le encantará.

— Yo mismo los forjé con mucho cariño, forjé oro y lo dejé blanco", tenía ganas de hacerlo y siento que a mi futura esposa le gustará.

Mi madre me acaricia la cara y con su mirada me di cuenta de que entiende mi talento para forjar joyas y forjar armas.

Mañana será mi boda y veré por primera vez a mi eterna novia.

Talita

La tarde de la boda llegó mi padre, estaba delante de todos esperando a la novia que entrará en el salón del castillo real de Avalon.

El príncipe Natanael también está presente esperando a mi hermana gemela que entrará acompañada por dos hadas del reino de las hadas.

El príncipe es muy guapo, pero no me hizo la cabeza, lo que me llamó la atención en él fueron sus ojos de un azul profundo, pero definitivamente lo encontré una persona común.

Morgana, la hechicera, estaba en la primera fila de sillas en el salón real acompañada por mí y mi madre que estaba sentada a su lado.

La decoración es perfecta, digna de la boda de una reina, el príncipe se ve tranquilo y mi padre también.

Al sonido de la marcha nupcial entra mi hermana acompañada por las hadas que vuelan a su lado, y mi hermana mira la cara del príncipe y yo como su hermana gemela siento su emoción, esta es una cualidad de los gemelos uno siente la emoción que el otro siente el príncipe también se enamora de mi hermana y ambos se enamoran a primera vista.

Las hadas entregan a mi hermana al príncipe y mi padre el rey pronuncia las palabras a ambas.

— Este matrimonio será para unir los dos reinos, el de las hadas y el reino de Avalon, y este matrimonio es la voluntad de los jóvenes, No tengo mucho que decir, solo que sean felices y que se amen, la princesa Talía y el príncipe Natanael, los declaro por mi poder como magistrado de este reino, marido y mujer.

El príncipe y mi hermana se besan y siento la emoción de mi hermana Talía, tal vez encuentre ese amor a primera vista.

Los lobos de la manada que mi hermana entrenó y domesticó hacen un coro de aullidos para celebrar a la pareja.

Intercambian anillos sobre la melodía que los lobos "cantan" y pude ver lo hermosas que son ambas alianzas.

Después de la rápida ceremonia, llegó el momento de que Morgana pronunciara las palabras de bendición a nuestro reino.

— Yo, Morgana, bendigo el reino de Avalon con luz y gran cultivo, el reino tendrá mucha riqueza y tus repentinos tendrán éxito en todo lo que hagan, siempre y cuando sea por el bien de todos.

Se acerca a mi hermana y balancea su varita cerca de ella y la bendice con el poder de la unidad de la naturaleza que aprenderá a controlar para ayudarnos en la guerra que está a punto de suceder, aunque creo que no habrá basura de guerra en absoluto, que esto fue solo un pretexto para que uno de nosotros se casara con su hijo y si es así, actuó. Mucha mala fe.

Pero en una cosa la hechicera Morgana lo hizo bien, los lobos se inclinaron ante mi hermana y la aceptaron como su domadora y la obedecen desde el alfa hasta el más joven de los cachorros, así que no sé qué pensar sobre esta guerra profética.

Después de que Morgana bendijo a mi hermana con la unidad de la naturaleza, fuimos al salón de baile real para que ella bailara el vals primero con mi padre y luego con su esposo, el príncipe del reino de las hadas.

La canción la toca mi hermana gemela baila el primer vals con mi padre el rey de Avalon quien después de bailar con su hija la entrega al príncipe que baila con ella y la sintonía entre los dos es increíble puedo apostar que si no se enamoraron en la boda se enamoraron en ese mismo momento.

Los invitados de mi padre también bailaron, fueron atraídos por la afinación de la pareja, las hadas bailaron, la gente del reino también mi padre a ese evento invitó a todo el reino y la fiesta es muy animada, los cocineros reales hicieron maravillas para que todos comieran, después del vals donde todos bailaron todos se hartaron de la comida más deliciosa, mi hermana se despidió de nosotros y acompañó al príncipe y a su madre Morgana al carruaje y vimos que el carruaje partía por un camino iluminado por la varita de Morgana.

Mi hermana partió para una nueva vida en el reino de las hadas y nos quedamos aquí, la manada acompañó al carruaje un total de cincuenta lobos contando con el alfa y su compañera y los lobos todos corrieron tras ella en una hermosa escena para contemplar.

Los invitados también se fueron a sus respectivos hogares y el castillo de Avalon quedó vacío, dejando solo a mi padre el rey, mi madre y mi reina y yo la princesa de Avalon.

Mi padre siempre fue un hombre justo y al final de la fiesta le pidió a Pietro, su fiel escudero, que reuniera algunos soldados para llevar la comida a las familias más necesitadas de Avalon y pueblos vecinos. Así se hizo, Pietro partió con algunos soldados, llevando suministros a las ciudades vecinas de nuestro reino.

Yo, a su vez, me retiré a mi habitación y allí me quedé pensando en mi hermana y en la noche de bodas, después de todo, ella tendrá que consumar su unión acostándose con el príncipe Natanael.

— Espero que el príncipe sea cariñoso con mi hermana y no la lastime, porque de lo contrario me verá.

Dejo de pensar en mi hermana y me preparo y tomo un delicioso baño. Talía tenía una opción que ella se negara a casarse, pero prefería honrar los tratos de mi padre con la hechicera Morgana, la reina de las hadas. Me pregunto cuál sería la reacción de Morgana si mi hermana se negara a casarse con su hijo. Tal vez no era lo mejor y el reino de Avalon podría sufrir la ira de una poderosa hechicera.

- Pero se casó con Natanael y se le presentó la unidad de la naturaleza, todo salió bien al final.

"Quizás conozca al hombre de mi vida tarde o temprano", simplemente no aceptaré un matrimonio arreglado.

"Talía le desea a mi hermana domadora eres feliz."