...“*Dulce amo**r*"...
Como en toda historia se tiene la heroína, el protagonista y la villana. En esta no cambia nada ese cliché, o tal vez un poco, cuando realmente la historia comienza con el personaje secundario, tan solo una aparición que no dura mucho en la historia y solo al comienzo.
Empezando este amor con Giselle, una joven doncella hijas de unos simples barones, que fue comprometida por el príncipe heredero del reino vecino, este trato se llevó a cabo por el rey de este país para llevar una alianza y fortalecer su reino, además que aunque la familia de Giselle sean unos barones, su hija era la indicada por su belleza genuina y única, ya que era una dama pelirosa con ojos ámbar. Pero... Ella no quería casarse con él, pues a oído rumores extraños que el príncipe Rember era un monstruo, además que era un poco mayor, se decía que era un verdadero tirano.
Así que la joven por llevarse de las palabras ajenas ella misma decidió no casarse con él ya con el compromiso pactado. Giselle le envío una carta al país vecino, y eso le llegó al príncipe Rember, donde anunciaba que ella no se iba a casar con él ni porque fueran órdenes del rey, así que escapó para ya no volver. Huyó sin que sus padres supieran a donde y sin que la encontraran.
Con esto, el príncipe se lo tomó mal. Como podía esa chiquilla romper el acuerdo que tuvo con el rey de Arnol y huir. Obviamente el reino del príncipe le envío un gran comunicado sobre lo sucedido, y si esto no se lograba solucionar podría haber una guerra por parte del reino del príncipe.
Ante nada, el rey de Arnol no sabía que hacer, esto era un desastre solo porque la hija de los barones fue cobarde y egoísta al no ver el caos que provocó en huir de esa forma. Sin embargo, apareció la heroína, Aída de Rumper, hija de unos campesinos humildes.
Aída se había enterado de la situación del país, ya que esto era un caos que el mismos reino sabía, no obstante, Aída se presentó ante el rey solo por su familia, pensó que si se casaba con el príncipe vecino, la paz reinaría. El rey aceptó, pues solo tenía hijos varones, y nadie más quería casarse con el príncipe por sus rumores.
El rey tan solo ordenó educar a Aída para que fuese una señorita de clase y se hiciera pasar como una mujer de la alta sociedad. Aída era muy hermosa, sencilla pero lo mas importante, aprendió rápido en la hora de ser educada, con clases y sobretodo una mujer elegante sin perder su humildad.
Era el momento, el rey envío una carta al príncipe sobre su nueva prometida, donde se trataba de Aída, describiendo en cada línea que la joven era ideal para él y ella deseaba conocerlo.
Así fue tal, que el príncipe le escribió que si ella quería conocerlo, que la enviara a la frontera de ambos reino, donde ahí se conocerán, sin embargo, si veía algún miedo demostrando que la obligaron a verlo, éste causaría la guerra de inmediato.
Pero no había que temer, pues Aída realmente hacía esto por voluntad propia, y en el momento de conocer al príncipe vio que no era como en los rumores; al contrario de ello, éste príncipe mostraba gran gracia y pulcritud en su rostro, aunque cabe mencionar que portaba unos ojos del color carmesí que lo hacía lucir como gran villano.
Su primer encuentro fue el comienzo de una bonita relación, Aída no mostraba algún miedo, solo atracción por aquel ángel que lo comparaban con un demonio, y él solo le encantó lo genuina que fue ella. Además, fue ahí donde descubrió el porqué los rumores no eran ciertos.
El trato nuevamente fue llevado al éxito, donde el príncipe aceptó a su nueva prometida y que muy pronto se llevaría la alianza entre ambos reino.
Aún así, está historia no puede quedar así, ya que faltaba la villana de esta historia.
Luego de casarse, Aída se muda al reino del príncipe, donde vivirá como reina. Aún así, sus problemas no acaban puesto a que llega Maya, una mujer que es hija de unos de los ministros del palacio, Maya estaba enamorada del príncipe. Así que cuando Aída llegó, Maya fingió ser su amiga para fines atroces.
Como la heroína tenía un bondadoso corazón, confío en Maya que mostraba una sinceridad pura y gran amistad con ella. Pero no, meses después, Aída cae en una terrible enfermedad que hace que el príncipe Rember se preocupe de más por su salud. Entre ellos dos la confianza había crecido, Aída se había enamorado profundamente de él y él de ella. Los médicos no sabían que hacer, nada le hacía devolver esa vitalidad que Aída poseía, y en cada día iba empeorando.
El príncipe estaba tan desesperado por ella que de inmediato fue a preguntar a los magos de su palacio ya que está enfermedad le resultaba extraña, Aída era una joven saludable y que de la noche a la mañana cayera en una terrible situación no era nada normal, presentía una conspiración en su propio hogar. Y así fue, los magos le costó pero descubrieron que Maya había envenenado poco a poco a Aída desde que llegó y en el momento de que su cuerpo ya no soportó más, colapsó.
Con saber solo eso, los magos encontraron una solución ante la salvación de Aída, debían purificar su cuerpo completo.
Lograron salvar a la protagonista y Maya fue ejecutada por el mismo príncipe Rember.
Ambos tuvieron su dulce final. Que apesar de que Aída lo hizo para salvar a su reino de una guerra, logró algo más y fue tener un dulce amor...
...“Ese fue una hermosa historia... O eso fue lo que pensé antes de la tragedia de mi vida y despertar en otro lugar"...
— ¿Eh?.... ¡¿Que diablos?!...— no se cómo, pero desperté en un lugar diferente después de morir.
“Oh, discúlpeme... No me he presentado, mi nombre es Natasha o mejor dicho era, una simple mujer que amaba la literatura. Como dije, morí, y no en un accidente de tráfico, sino de avión, lamentablemente algo falló y los pilotos perdieron el control causando que el avión se estrellara de una manera falta. Antes de que eso pasará, yo leía la historia “ amor trágico" para calmar mis miedos en la altura, pasé el viaje leyéndolo y sin darme cuenta ya lo había terminado antes de llegar a mi destino, estaba segura de que llegaría bien... Pero ocurrió el fatídico evento que acabó con mi vida y desperté aquí."
“Ahora que lo comprendo... Me convertí en ella... En Giselle, en ese personaje secundario que solo aparece y desaparece al principio de la historia..."
Sin saber cómo reaccionar la chica, ella se miraba en el espejo.
“no lo puedo creer... Soy tan diferente. Sé que soy Giselle Whitney por los recuerdos que me acaban de llegar. Uff, aún me duele la cabeza...— se pellizca la mejilla con fuerza, siente dolor— no es un sueño, así que posiblemente morí y renací aquí. Ésto sonaría como una locura pero es lo más lógico que puedo pensar"
Todo lo que pudo hacer era pensar sentada en la cama. Si bien no aparece mucho en la historia, algo sabe del final de su vida. Así es, este personaje que no tuvo mucha aparición, en el extra de la historia, Giselle es atrapada por el rey de Arnol, su rey, y castigada con la cárcel por haber roto su compromiso y casi causar una gran guerra.
” yo... Yo no pienso acabar así. Tengo que ser lista si no deseó un final en un calabozo que pasaré trabajo... "
— señorita... señorita Giselle...— entra luego de tocar, era una criada de aspecto mayor— la escuché que ya estaba despierta... ¿Quiere ya arreglarse?
“por lo que recuerdo, ella es Romina, la sirvienta de esta casa y la que está a cargo de mí"
— recuerde hoy debe ir al palacio con su padre.
“ir al palacio... Ya veo, estoy en el punto donde comienza la historia. Dónde me anunciará que estoy comprometida con el príncipe"
Giselle ahora comprendía más su realidad, de que tiene que cumplir con solo una cosa si no quiere ser acusada de traición o de provocar una guerra entre países, y que nadie tome sus problemas.
— Romina... Por favor, ayúdame en arreglarme, si he de ir al palacio tengo que asistir presentable...— por suerte, la nueva Giselle había leído suficiente historia de época y sabe cómo hablar y comportarse.
Ésto le sorprendió un poco a la criada, tal vez Giselle en la historia original era un poco simple y no le gustaba más nada que vestido sencillo y sin gracias, era una joven sin mucha carisma, pero acepta porque es lo ordenado.
Luego de arreglarse, Giselle sale más entusiasmada.
“... Yo, yo no seré como la cobarde de Giselle, que huyó de su responsabilidad y no pensó en el bienestar de su reino, y todo por llevarse de eso rumores que no son ciertos, aún así, si yo no supiera de eso de igual forma cumpliría mi deber... Además, recuerdo la descripción del personaje del príncipe... Un rostro tallado por los ángeles, pectoral de acero y abdomen de lavandero... Como podría dejar pasar a semejante hombre, aunque sea un matrimonio por conveniencia, ser su esposa podría tener muchas ventajas"
— ¡Lo aprovecharé al máximo...!— pensó en voz alta con gran gozo.
— ¿Señorita?— se detuvo Romina al frente de Giselle.
— ¿Eh?... Yo... Humm... Quise decir que aprovecharé al máximo la visita al palacio, tengo ganas de saber que me dirá su majestad.
— oh... Entiendo... Pero aún así, no creo que sea una noticia agradable, señorita... Acuérdese de lo que habló con su padre.
— Ah, sobre mi compromiso con el príncipe Rember... Ya recuerdo.
Mirando al alrededor, la criada se acerca a la joven y le susurra.
— he escuchado mucho sobre él, que es un monstruo y un hombre violento... No creo que sea un hombre bueno.
“Ahora sé, que Giselle se dejó llevar por los demás al escuchar que ese príncipe era un villano..."
— tengo miedo por usted... Señorita, creo que su destino será algo trágico si se casa con él...— termino de susurrar.
— Romina... No entiendo porque me dices eso... Pero todo lo que dices no es nada favorable, mi destino lo decido yo, así que no hables como si supieras mi futuro de esa manera. Ni tú ni yo conocemos al príncipe para hablar así de él... No es justo juzgar antes de saber quien es.
— yo. Lo siento, señorita... Creo que hable de más, espero que me perdones... Yo solo me preocupaba por usted.
— está bien, solo no hables de una forma tan negativa... Si tiene aprecio por mi solo pido que desee mi suerte, no decirme que será una tragedia... Sigamos, no hay que hacer esperar a mi padre.
— D-De acuerdo...
En el camino al palacio, Giselle se encontraba viendo la ventanilla del carruaje, pensando en la actitud tan pesimista de su criada, pero no solo por ella, las demás sirvientas comentaban del príncipe solo por sus rumores.
“escuché de esos rumores de que el príncipe Rember era una bestia, mataba si lo hacían enfurecer y que su apariencia no era nada digna de un príncipe... Pero eso no importa, aunque no supiera la verdad, aún estaría dispuesta a casarme con él, no voy a huir. Ya no quiero ser la espectadora que ve esas historias sin vivirla, ni mucho menos ese personaje secundario tan cobarde... Quiero ser la protagonista para ese supuesto villano"
Con ese pensamiento claro, Giselle llegó al palacio del rey sin comentarle nada a su padre, total, la verdadera Giselle es una mujer callada asi que no quiere llamar la atención antes de casarse. Tanto ella como su padre tenía acceso directo a la sala del trono donde esperaba su majestad.
— saludo a la gran estrella del reino Arnol— presentó el barón, Giselle sigue la reverencia.
— es un placer que atienda mi llamado, señor Whitney. Aunque ya sabe el porqué estamos aquí, su hija necesita más información. señorita Giselle, le pedí a su padre que yo le diría la situación...
— así es, su majestad— respondió Giselle.
Es cuando el rey le comienza a platicar sobre el reino vecino y de quería hacer una alianza con un compromiso entre ella y el príncipe. Aunque su familia era algo baja de estatus, su majestad vio que la hija de los Whitney era la ideal, así que confía en que ella aceptará.
La verdad Giselle aceptó al principio, sentía una gran obligación y presión ante esto, que se arrepentiría después; enviándole una carta nada más que a su prometido para romper y lo demás ya se sabe. Pero...
— aceptaré esto, su majestad. No le defraudaré si ha confiado en mí como la prometida del príncipe del reino Rember...
Esta Giselle está dispuesta a salvar su destino, y si la única forma de eso es casándose con el príncipe sin algún inconveniente, tal vez pueda vivir mejor de lo esperado.
— me alegra saber que está dispuesta a ello, es una gran responsabilidad y veo que eres lo suficientemente madura con tu respuesta. Pido que se queden, le invitaré un poco de té...
Ambos aceptaron la invitación y se quedaron en el palacio un rato.
En el jardín principal, el rey, le comentaba lo siguiente a Giselle luego de que le sirvieran té.
— y bien... ¿Que le parece mejor, señorita Giselle?... ¿Quiere conocer al príncipe antes de su boda o prefiere esperar?
La antigua Giselle había preferido no conocerlo aún, pues tenía miedo por los rumores pero esto sería una buena idea, conocerlo antes haría que ambos tuvieran una relación más solida.
— su majestad, conocerlo ahora sería una gran oportunidad para empezar con buenos resultados en mi unión con él.
— ya veo. Le enviare un comunicado, esperemos que el quiera verla también. Aunque yo le sugerí eso, todo depende del príncipe... Pero tengo fe que dirá que si... Además, barón, si está unión se lleva a cabo, usted será ascendido a duque.
— es un gran honor, su majestad, ya verá que todo saldrá como lo planeado.
El rato paso de una manera agradable, el rey quedó encantado con Giselle que era muy buena escuchando y era encantadora. Al final, su majestad se despide de esta agradable reunión, el siente que está alianza entre ambos reino se llevarán excelente.
______________________
En el regreso a su mansión, Giselle escucha la quejas de su padre sobre ella.
— debiste mostrar más elegancia en el té, Giselle. Tu postura no era la adecuada y menos tu hablar, estabas al frente de rey, ¿Que pasó contigo hoy?... Eso es culpa de tu madre, que es muy dócil contigo.
Giselle ignora todo, pues sabía cómo era su padre, luego piensa mirando el paisaje del viaje.
“esto era la vida normal de la original Giselle. Déjeme y le cuento que esto no salía en la historia, pero si en los nuevos recuerdos que poseo. Giselle ha vivido en una familia disfuncional, donde su padre, el gran barón tiene una amante que vive bajo el mismo techo que nosotros. La madre aceptó esto, ella no tenía mucha voluntad dentro de su casa ni de su vida, y para completar siempre se la pasaba enferma por sus depresiones. Así que la amante se fue ganando el lugar de baronesa, no tenían hijos ya que él quedó estéril por una enfermedad. Por esa razón, Giselle no era muy feliz en su casa"
Giselle vuelve a verlo con determinación.
— padre... No culpes a mi madre, ella no tiene la culpa de nada... De hecho, ella nunca hace nada...— la madre de Giselle ya no se preocupaba por ella desde que llegó la amante de su padre—... Ella siempre ha estado pendiente de algo sin sentido como lo es tu amanta...
— ¿Que dijiste?— preguntó en modo brusco.
— Sasha no tiene nada de gracia, es una mujer superficial así que no entiendo cómo mi madre se deja intimidar por ella.
El barón se inclinó un poco he intentó darle una bofetada a Giselle, sonó solamente el impacto pero de la mano de ella tomando la muñeca de su padre.
— no hagas nada estúpido, padre...— él miraba asombrado, jamás pensó que ella detendría el golpe—... Ya estoy cansada de esto.
Y así era, su padre cada vez que podía la corregía a golpes, ya que su madre ni siquiera estaba ahí para protegerla, pero está Giselle no se dejará ante nadie.
El barón jala su brazo y se queda quieto, solo con el ceño fruncido y mirando a la ventanilla se quedó callado hasta que llegarán a la mansión.
____________________
Cuándo llegaron, Giselle pidió un baño para quitarse el sudor y descansar de este agotador día. Primero que nada hoy tuvo mucho acontecimiento, despertó en una realidad algo desconocida, trató de hacer lo mejor posible para adaptarse, así que por lo menos quiere cerrar los ojos por un instante. Aún así, antes de llegar al baño, Giselle se detiene al ver un cuadro de su familia cuando era una niña.
— todo estaba bien, antes de que llegará ella. No había amor entre ellos pero si una buena relación, pero Sasha manipuló desde el principio a mi padre...
Con ello, Giselle se marcha a su baño muy cansada.
______________________
Cuando el barón se va a la sala de estar a descansar también, aparece Sasha, la amante de él. Con una sonrisa lo recibe.
— bienvenido a casa, mi señor.
Si bien la mujer no quería aparentar su edad, le era imposible con todos es maquillaje. Ella se sienta al lado y el barón le cuenta.
— muy pronto Giselle se casará con el príncipe Rember y con ello me convertiré en duque... Nos convertiremos en personas de alta sociedad, Sasha.
— oh, cariño... Solo falta que te divorcie de tu esposa... Llevamos casi tres años y nada...
— lo iba hacer hace años, pero cayó en esa enfermedad que no la ha sacado de la cama y mi reputación se dañaría si me divorcio de una enferma. Quiza su depresión la mate primero, me sería mas fácil ser viudo que divorciado... Y tú, mi querida Sasha, seras mí esposa.
Con una sonrisa, Sasha lo abraza, está cumpliendo el sueño de toda amante, quitarle todo a la esposa.
Muy cerca de ahí, había una mujer un poco mayor de cabellos rosado, escuchando todo a escondidas. Ella se veía muy mal de salud, pero con todas sus fuerzas apretaba sus puños para luego irse.
.
.
.
.
.
••••••••••••••••••••••••••••••
🙋🏾♀️ hola mi hermosa gente, espero que esté bien, bueno, aquí le he traído una nueva historia, que por lo visto es algo diferente a lo que he hecho, aún así, sería un gran placer saber que le gusta y si es así seguiré subiendo más capitulo. muchas gracias por leer 😉 y espero que me sigan a través de esta historia.
Download MangaToon APP on App Store and Google Play