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Amor En La Isla

Los planes de boda

Azalia es una chica de 28 años, estudio diseño de interiores en la Universidad de Ámsterdam, de las mejores Universidades en el área de diseño y arquitectura. Reconocida internacionalmente.

De su madre aprendió a amar la simpleza de la naturaleza, su sentido de la estética hacia que fuera realmente buena en lo que hacía, tenía un espíritu libre, elegante y refinado de ver las cosas pero también podía ser fresca y salvaje.

Cada diseño que realizaba tenía un sueño característico.

Junto con su amiga Sofía, comenzaron una pequeña empresa, en ella pusieron sus sueños y ahorros.

Comenzando de la nada poco a poco comenzó a posicionarse en la industria de la floristería ya que sus diseños simples e innovadores cada vez son más buscados para eventos exclusivos, sitios de alta gama, galerías de arte y diseño, salones de eventos, restaurantes exclusivos, hoteles 5 estrellas, por mencionar algunos.

Ahora que esta por llegar a cumplir su sueño de tener éxito en lo que es su pasión el arte y los diseños de floristería, esta lista para dar el siguiente paso casarse con el primer y único amor Ruben.

Azalia y Rubén se conocen desde hace muchos años atrás, fueron a la misma Universidad, desde entonces todo comenzó como una amistad.

Los edificios estaban muy cerca el uno del otro, se 3ncontraban de forma continua, primero fueron miradas después sonrisas, cada acto que hacía Azalia no pasaba desapercibido por Rubén que quedó fechado de su simpatía, belleza y audacia.

Con el paso del tiempo la amistad se fue transformando en amor, un amor tierno y lleno de confianza, no hay nada que Azalia no sepa de Rubén, a su vez Rubén sabe todo de Azalia.

Después de titularse Azalia trabajo un poco en un despacho de Arquitectura, allí gano un poco de experiencia y el dinero base para su propio negocio, en la misma empresa entro a trabajar Rubén como miembro del equipo Arquitectos.

Ambos han tenido altibajos, como cuando la secretaria de Rubén en un viaje de negocios se metió en la cama de Rubén mientras el dormía.

La muy descarada tomo fotos que le envió a Azalia. Pero su amor y confianza era tan fuerte que todo se acomodo en su lugar.

En algún tiempo también tuvieron que lidiar con un hombre conflictivo, todo comenzó cuando un cliente de Azalia la invitaba de forma tan insistente a salir, hasta que ese insistencia se volvió una obsesión que puso en peligro su vida.

La seguía de forma constante, la acechaba, pero con el apoyo y compañía de Rubén pusieron una demanda y solicitaron una orden de restricción y todo acabo de buena manera. Por lo menos para la feliz pareja.

Ambos han pasado por muchas cosas, buenas y malas, para Azalia nada ha sido tan fuerte como su amor sincero, pasa el tiempo y ellos siguen enamorados tanto que ya pusieron fecha para la boda y ya esta todo listo para el gran día.

Después formarán una familia ya tienen los nombres de los hijos que tendrán, a que escuela asistirán, toda la vida planeada.

Sofía la socia y amiga de Azalia, que es atrevida y desenfrenada le propuso un último viaje de diversión antes de la ya muy esperada boda, el viaje será a Cuba, la isla detenida por el tiempo.

Así que planeron los días que se irán de viaje para que todo salga a la perfección.

En el departamento que comparten Rubén y Azalia se escuchan su plática.

-Amor estoy cansada, me puedes dar un masaje por favor - Dijo con voz ronca y sensual.

-Azalia estoy cansado, mañana te vas de viaje y tienes que dormir temprano.

-Pero Rubén necesito amor, para que te recuerde. - Azalia insistía con su voz melosa y dulce como la miel.

-Azalia cuando regreses te daré todo el amor que quieras.

- Rubén si entiendes que quiero sexo antes de irme de viaje, sino será un fin de semana muy largo. - Ya estaba un poco enfadada, pero trato de contenerse.

Como ese hombre se resistía a sus encantos, ella es una mujer además de inteligente, refinada es muy atractiva.

-Esta bien Azalia pero esto será rápido por que de verdad estoy cansado y tu tienes que viajar, sino descansas bien llegarás cansada y no disfrutaras tu viaje. Pasarás durmiendo en un hotel, eso no es como quieres pasar tu despedida de soltera ¿cierto?.

Ella puso una mirada tierna como de cachirrito abandonado, Rubén sonrió y se acercó a ella.

Comenzó a besarla en los labios, después unos cuantos besos en el cuello, ella comenzaba a sentir que se perdía en esos besos y caricias.

Rubén acarició lentamente el cuerpo de Azalia, con el rose de sus dedos ella sentía que su piel se derretia.

En cuanto se sintió listo se colocó dentro de ella, después de poco tiempo él terminó.

Ella se sintió un poco herida, a veces sentía que el no deseaba tener intimidad con ella.

Inevitablememte se sintió insatisfecha y frustrada, pero no tenía caso insistir, parecía como si no le gustara hacer el amor con ella.

Rubén al terminar se dio la vuelta y adormilado le dijo a Azalia

-Azalia ¿ya estas contenta?, ahora duérmete. - Le dejo Rubén mientras le daba un beso en la frente y se daba la vuelta en la cama para entrar en un profundo sueño.

Azalia quedo descontenta y algo molesta en la cama, sin poder dormir por su deseo sexual insatisfecho, se levanto de la cama, se dirigió a su cómoda en su cajón secreto tenía varios juguetes los cuales usaba de forma continúa pues aun que amaba a Rubén el nunca se preocupaba por que ella llegará a sentirse satisfecha.

Azalia sacó un pequeño juguete, le coloco las baterías, se fue al baño y jugo con el por un rato, cuando se sintió satisfecha regreso a dormir, dejándose perder en sus sueños.

-Azalia, despierta ya es hora de levantarse...

Le decía Rubén mientras brincaba de la cama al baño para darse una ducha.

Azalia con pereza trato de abrazarlo, pero él escapo de sus brazos y se lanzó directo al baño.

De mala gana Azalia se levanto, se vistió, entro al baño, se lavo la cara, se ato el cabello en una coleta.

Bajo a la cocina, preparo el desayuno, cuando bajo Rubén vestido un ropa casual Azalia se puso un poco romántica, pues amaba el cuerpo de Rubén, esa era una de las razón por lo que ella continuaba con él, amaba besar ese cuerpo, amaba verlo, tocarlo, y eso encendía su deseo.

Sin embargo pese a que Azalia era una mujer de curvas , senos firmes, caderas amplias, labios tentadores y mirada profunda, Rubén ya se había acostumbrado tanto a ella que la pasión ya se había perdido, era como si fueran un matrimonio de años; él estaba a gusto con esa situación.

Azalia no estaba tan a gusto sintiéndose siempre un poco rechazada y un poco insatisfecha pero lo aceptaba pues lo amaba y creía que no existía mejor hombre para ella que Rubén.

Con una carrera exitosa, teniendo renombre en tan poco tiempo, siendo juntos una pareja de éxito. Con un futuro brillante esperándolos.

El viaje

Azalia pidió un ubery paso por su querida amiga a su con dominio; Rubén es un hombre muy ocupado y no quiso o simplemente no se le pego la gana llevarla al aeropuerto.

Azalia realmente lo ama, de otra forma no toleraría tanto desapego.

-Chica ya sal, el uber cobra su tiempo, si tardas más tu pagaras la tarifa - le grito por el auricular del celular a Sofía que ya había tardado demasiado en bajar de su departamento.

- Ya voy pero no grites me duele la cabeza -dijo Sofia con una voz apagada

Por fin bajo cargando una pequeña maleta.

En su cara se notaba que el día anterior se había ido de parranda, las gafas oscuras son clásicas de ella cuando tiene ojeras pronunciadas, por las marcas en su cuello y los labios inflamados había tenido una noche de mucha acción.

Azalia veces siente un poco de envidia, Sofía es tan liberal, no le interesa la opinión de los demás; Azalia quisiera ser un poco más como ella, pero es demasiado miedosa para arriesgarse, tontamente cree que su vida esta arreglada y no necesita más, tal vez la aventura es para los valientes y sin duda ella es una cobarde.

-Azalia date prisa, no eras tu la que hace unos momentos me estaba gritando.

-Ya voy Sofí, mi batería se descargo y estoy buscando la batería de carga rápida.

-Anda la sigues buscando en el avión.

-Bien, bien, ya voy.

Decía Azalia mientras seguía hurgando en su bolsa de mano y con cara de fastidio y frustración por no encontrar lo que buscaba

-Deje la batería en la maleta, que documente, hasta que lleguemos a Cuba podre sacarla y cargar el celular- gruñó para si misma mientras caminaba.

El viaje fue rápido, y ya le urgía disfrutar de la playa y la piscina del hotel.

Cuando llegaron al hotel fueron recibidas por unos hermosos hombre de tez morena, por la emoción de por fin llegar a su destino o por el clima tan agradable se olvido por completo del celular.

Azalia estaba súper dispuesta a refrescarse en la alberca del hotel, pero como era de esperarse Sofí ya había hecho planes, tendríamos un paseo en lancha para ver algunas bellezas naturales de la zona.

Así que de resigno, tomo su bolso y salió a toda prisa.

-Oye...amiga, ya viste lo guapo que es el lanchero.

-Sofí eres un demonio de la lujuria - dijo entre risas y susurros

-No soy un demonio de la lujuria, tengo un libido completamente normal, lo que pasa es que tu tienes una alma vieja, no me entenderías jamás.

Subieron a la lancha, íban solo las dos, ya que a Sofí no le gusta compartir y pidió fuera el servicio exclusivo, primero visitaron los manglares, los pequeños cangrejos andaban entre las raíces de los arboles que salían del agua, se escuchaban varios sonidos de la fauna silvestre.

Pasaron por un criadero de cocodrilos, la piel se le erizo, son animales a los que les guardo mucho respeto, por no llamarlo miedo.

Fueron a un restaurante que es del hotel donde se hospedan, este chico guapo de la lancha, es más que un simple lanchero, sin dudas esta capacitado para ser un guía de turista, ya que al llegar al restaurante, logro ver como interactuaba con otros comenzales, a los cuales les hablaba en sus idiomas, de forma que Azalia noto que ese "lanchero, " hablaba por lo menos cinco idiomas diferentes además de que tenía la habilidad para mostrar el lado mas amable de la Isla.

Después de comer un delicioso pescado a la plancha, algunos otros mariscos y beber unos cuantos mojitos subieron de nuevo a la lancha.

Dario (el guía de turistas) le pidió a ambas chicas que se colocaran el chaleco salvavidas, ya que es una regla, Sofia hizo caso de forma inmediata; sin embargo Azalia fue otra historia, ella se sentía tan satisfecha por la comida que no quería colocárselo.

Azalia hizo un gran berrinche, hasta que Dario se dio por vencido ya que estaba oscureciendo y no era recomendable andar por ahí de noche, ya que los cocodrilos suelen confundirse con troncos, golpear las lanchas y estas pueden llegar a volcarse, obviamente el final sería trágico.

Subieron a la lancha, sin duda no colocarse chaleco salvavidas fue un gran error.

El movimiento de la lancha, el estómago demasiado lleno y los mojitos en apariencia inofensivos, hicieron que Azalia tuviera grandes deseos de vomitar, se acerco a la orilla de la lancha.

La lancha golpeo con algo y de repente dio un salto, la chica no se sostuvo lo suficientemente fuerte y cayo por la borda

Sin duda entro en pánico, al parecer se a calambro y no podía nadar a la superficie.

En esos momentos de desesperación probablemente creo que moriría, y por la situación solo había había dos posibilidades;

a) moría ahogada o

b) moría comida por un cocodrilo

Azalia poco a poco iba perdiendo la conciencia.

Lo ultmo que alcanzo a sentir fue el fuerte agarre de unos brazos fuertes me la halaban, seguido de unos labios tibios que de pegaban a sus labios, después se perdió por completo.

Servicio a la habitación

Cuando intente abrir los ojos, una luz intensa me lo impidió. Me di la vuelta y entre abrí los ojos; trate de reconocer el lugar, pero no me era familiar.

Cuando por fin mis ojos se ajustaron a la claridad de ese lugar, noté que estaba en una cama de hospital, en mi brazo tenía una intravenosa, sentado en una silla al parecer muy incomoda estaba Dario, en el sofá de a un lado estaba Sofí.

En cuando Dario se dio cuenta de que había despertado, movió a Sofí, y le dijo

-Tu amiga ya despertó, me retiro

- Sofí aun medio dormida asintió con la cabeza e hizo un movimiento con la mano.

Un rato después recobro la conciencia por completo y brinco del sofá, se acerco a la cama y entre lágrimas me regaño.

-Eres una tonta, casi mueres ahí

-¿Qué pasó?

-Te caíste al mar, la lancha rozo un tronco y tu caíste por la borda, pero cerca había un cocodrilo hembra y son sumamente territoriales, estuvo a punto de atacarte, si no fuera por Dario que lo lastimo para alejarlo, no estarías aquí.

- Por que él se fue, sin decir nada, le tengo que agradecer.

-Dario a perdido su empleo, rompió reglas por ti, primero en permitirte abordar la lancha sin chaleco salvavidas y segundo, lastimar a un cocodrilo hembra, en época se reproducción.

-No fue mi intensión dañar a nadie.

-Pero lo hiciste, pero ya como sea, deja que hable con el médico para ver si ya nos podemos ir al hotel. Lo importante es que estas bien, casi muero de la preocupación. Le marque a Rubén pero no me contesto, solo entra buzón, tan vez esta trabajando. Le deje un mensaje, tal vez intento comunicarse contigo.

-Olvide mi teléfono en el hotel y además esta sin batería desde que abordamos el avión.

-Voy a ver al médico, y si todo esta bien voy por algo de ropa al hotel y me encargó de tu celular, ¿en dónde esta la batería de repuesto?.

-¡Oh! Perfecto!, el teléfono esta en el tocador y la batería en mi maleta en el compartimento de ropa interior.

Me acomode de nuevo en la cama, sintiendo un poco de pena por Dario, por mi culpa fue despedido; creo que esta vez me pase de imprudente, tendré que buscarlo y disculparme.

Un rato después Sofí regreso con los papeles de alta, un conjunto de ropa deportiva, mi teléfono y la batería. Ella siempre respeta mucho las cosas de los demás así que ni siquiera ella cambio la batería, me dio ambos objetos.

Me paso también la ropa. Primero le cambie la batería al teléfono, lo dejé sobre la cama y me dirigí al vestidor para quitarme lo que llevaba puesto, que era una de esas batas donde enseñas el trasero, ¡que vergonzoso!.

Cuándo salí de cambiarme tome el teléfono, me marcaba varios mensajes de whatsapp, messenger y mensaje normal; no tengo instagram por que ya con los medios que manejo muchas veces me saturo, una app más y me la viviría en el móvil, ¡no tendría tiempo de trabajar!, del instagram de la empresa se encarga Sofí.

Primero abrí los mensajes normales, todos eran avisos de las llamadas pérdidas.

Eran de un número desconocido, curiosamente ninguna llamada era de Rubén.

Después abrí los mensajes de messenger, eran mensajes de clientes que habían visitado la página, solicitaban información y cotización.

Por último los mensajes de whatsapp, era de amigos, muchos preguntando cuando nos veíamos, algunos otros preguntaban como había estado el viaje y finalmente llegue a un mensaje de un número desconocido, el mismo número de las llamadas.

El mensaje decía, "te deje un regalo en tu correo, no tienes que agradecer, ya tuve mi recompensa".

Tal vez algún amigo que cambio su número me dejo una tarjeta de felicitación por mi próxima boda -pensé-

Bueno primero salir del hospital y después veo el vídeo.

Sofí y yo tomamos un taxi, un auto Ford de hace tantos años que se considera una reliquia en mi país.

Hay que recordar que Cuba es un lugar detenido en el tiempo, un pedazo del pasado por el embargo comercial. Pero esto no es una clase de historia.

Después de abordar el auto iba platicando con Sofí, le pregunte si estaba segura de enviarle mensaje Rubén, ya que no sé nada de él, ni mensaje o llamada, es muy extraño, pronto seremos esposos, creo que debería preocuparse más por mí.

Bueno como sea, tal vez esta trabajando mucho para irnos de luna de miel sin pendientes.

Sofí tenía mala cara, le pregunte que le pasaba

- Creo que la fiesta se acabo, no creo que tengas ganas de ir de fiesta nocturna después del accidente, es una lástima hay demasiados chicos guapos.

-Pero que dices tonta, solo dame algo de tiempo para que me recuperé un poco y alimente mi cuerpo, recuerda que todo lo que comí lo vomite. Es cuestión de un poco de tiempo, solo una horas, y para las 10 p.m. estaré perfecta.

Llegamos al hotel, pedí servicio a la habitación mientras tomaba una ducha.

Tocaron la puerta, yo aún en toalla abrí pensando que era el servicio.

Cuando abrí... Un hombre moreno de ojos claros estaba frente a mí, pero sin carro de servicio, se me hizo conocido pero no lo creó, nunca he estado aquí para poder conocerlo.

-Hola, soy Dario, estoy aquí solo para saber si ya estas mejor.

-G-Gracias estoy bien , te debo una disculpa. Te buscaría más tarde. Dame un momento por favor.

No podía dejarlo afuera, tampoco podía vestirme frente a él.

Tomé mi ropa de la cama y regrese al baño a vestirme, cerré la puerta, pero casi de inmediato, toco la puerta del baño. -Que quiere este hombre, acaso quiere entrar...

-No puedo abrirte, dime ¿Qué es lo quieres?

-Se te cayo algo.

Entre abrí la puerta y él estiro la mano con mis bragas, lo tome, me giré, mi cara se puso roja y caliente de lo apenada que estaba.

Comencé a vestirme, salí de inmediato, cuando salí Dario estaba sentado en la cama, extremadamente ruborizado, esquivaba mi mirada, tenía sus manos sobre su regazo, como si ocultará algo.

¡Que paso!... cuando me senté en la cama junto a él ¡entendí!. Deje la puerta abierta y él me había visto desnuda.

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