¿Por qué?” fue lo único que pensé al ver como la persona que más amé y en la que yo confié y que consideraba como parte de mí “familia” me ha traicionado.
Ahí estaba yo… arrodillada con las manos atadas y con la cabeza abajo… y para rematar con un arma apuntando hacia la frente… solo podía pensar en “¿Qué hice mal en todo esto?” “No…. simplemente fue culpa mía”, “mi debilidad fue confiar ciegamente en él”…
Mi padre siempre me enseñó a no confiar en nadie… mucho menos tener sentimientos ya que solo serían un estorbo.
- Arwen..- él me llamó e inmediatamente alce mi cabeza para observar su rostro lleno de lágrimas
Ja, patético
- Perdóname…pero tengo que hacerlo o la mataran ella –
No quiero escucharlo
- Todo este tiempo… mientras yo te entregaba todo de mí y te apoyaba, tu siempre me engañabas –
Que estúpida soy, confié demasiado en él y ahora ya no me queda nada, mi familia está muerta y solo quedo yo.
– Dispara…porque si no lo haces y sigo viva, juro que iré tras de ti y de esa perra asquerosa –
Adiós Arwen
Fue lo último que escuche cuando jalo del gatillo impactando una bala en mi cabeza y de pronto todo fue oscuridad… Sentí como mi cuerpo flotaba y alrededor se sentía tan cálido que no quería despertar.
De pronto veo como un halo de luz cubrió todo mi cuerpo.
Se siente tan familiar.
Una luz tan blanca comenzaba acercarse y cada vez se hacía más grande, hasta que cerré los ojos y traté de abrirlos.
¿ummh?
Mi visión está borrosa
Poco a poco su vista se fue aclarando hasta que observó que estaba en un cuarto pequeño y la decoración parecía de la época antigua.
¿Dónde estoy?...
El sonido de la puerta abriéndose la sacó de sus pensamientos.
-Ah ya despertó… - dijo esa persona en tono de reproche
¿Eh? ¿Una sirvienta?
-Suficiente tengo que alimentarme… y ahora debo asistirte…. - dijo aquella sirvienta con un tono molesto.
-¿Quién eres tú?- preguntó la chica poniéndose de pie fuera de la cama
-¿Acaso el golpe en tu cabeza te afectó tanto?- dijo aquella sirvienta para mirarla con indignación.
-No te lo repetiré otra vez, ¿Quién eres tú? - dijo aquella joven con una mirada seria.
La sirvienta apretó sus puños por la forma en que aquella chica le hablaba
-¡Cómo te atreves a hablarme así niña malcriada!-
La sirvienta rápidamente se acercó para golpearla… pero cuando alzó su brazo la chica lo detuvo.
-Nunca en tu vida te atrevas a ponerme un dedo encima- ella tenía una mirada sombría y apretó fuerte el agarre de las muñecas de aquella sirvienta hasta que sus huesos tronaron- ¿ENTENDISTE?
-S-Sí señorita Kiara, d-discúlpeme no lo volveré hacer- dijo aquella sirvienta con una mirada de horror.
La joven la soltó haciendo que la mujer cayera sentada.
-Largo de aquí-
La sirvienta aún se encontraba sentada mirándola con horror.
-¿Que no oiste? - la miro de manera amenazante - ¡LARGO!
-S-Sí señorita Kiara- y como un caballo de carreras salió rápidamente de la habitación.
Después de que la sirvienta salió, la joven se quedó pensando en que es lo que había sucedido.
Recibí un tiro en la cabeza…. entonces, ¿por qué sigo viva?....Espera un momento… esa mujer me llamo Kiara
- Un espejo, necesito un espejo –
Rápidamente se dirigió al espejo que se encontraba en una esquina y cuando se vio en él, sus ojos se agrandaron de sorpresa
¡Oh Mierda!
Kiara pudo divisar a una chica de unos 15 o 16 años de edad con la piel clara con el cabello rojo como el fuego, era muy precioso… pero lo que más le llamó la atención fueron el color de los ojos.
Tonos de colores entre verde, azul y rojo cristalinos casi como el amanecer tan claro, era tan hermoso y las facciones del rostro son tan delicadas, y su cuerpo estaba bien formado, en serio que la chica que tenía enfrente era muy hermosa, como una muñequita de porcelana.
Kiara se sorprendió demasiado por el cambio ya que en su anterior vida su cabello era negro sin rasgos delicados… y ahora era una total belleza… Intrigada por lo que sucedía, empezó a buscar algo que la ayudara a ubicarse
Así que fue hasta su tocador y pudo divisar un diario muy bonito, así que procedió a abrirlo y leer el contenido, cada vez que iba leyendo sus ojos se agrandaban mucho más.
- ¡No puede ser! - ella soltó el diario que tenía entre sus manos- No, no y no-
¡Maldita sea!, ahora entiendo todo… estoy dentro de esa cochina novela.
“El loto de Hielo de la santa”
En mi anterior vida tenía una compañera, ella se llamaba Isabela, le encantaban las historias de romance bastante clichés, un día mientras estábamos en una misión, estuvimos tres horas esperando a nuestro objetivo, así que ella aprovecho y me contó que había comprado un nuevo libro que era muy exitoso.
Siendo sincera yo no tenía interés por esas cosas y tampoco me interesan porque simplemente son aburridas y ridículas.
Pero aun así ella me obligó a leerlo y cada vez que salíamos a una misión me preguntaba cosas acerca del libro, en verdad lo odie… pero no quería escuchar sus sermones, así que tuve que aprenderlo todo.
En fin… esta historia comienza en la academia para jóvenes que poseen mana y un guía espiritual, María quien era la hija menor de la familia Lombardi, era una chica tierna e inocente con una gran belleza que embelesaba a cualquiera que la viera... se sabía que ella era la elegida por una diosa para ser la próxima santa y protectora del imperio, así que fue bendecida con su guía espiritual, una bestia legendaria, El Fénix de Hielo.
Sucede que ella conoce al príncipe heredero Christopher y este quedó sorprendido por tal belleza que comienzan a frecuentarse y ahí nace el amor.
Asco
Pero había un pequeño detalle… El príncipe ya estaba comprometido, pero eso no le importo ya que estaba enamorado profundamente de la protagonista, así que comenzó a buscar mil maneras de romper ese compromiso y comprometerse con María ya que ambos estaban enamorados.
Sin embargo María también llega a conocer al segundo protagonista, Gael quien es un mago de alto nivel, que también se enamora de María y estaba dispuesto a ganarse su amor, así que siempre estaba detrás de ella junto con el príncipe heredero, ellos eran sus perros guardianes que juraron protegerla de todo el mal.
y ahora viene lo bueno o más bien lo peor…. los villanos , el primero es el Príncipe Heredero del imperio Drenai que llega a la academia de intercambio y se encuentra con la protagonista de la cual termina enamorado… o mejor dicho como su perro faldero.
La belleza y la actitud de la protagonista lograron conquistarlo, pero al ver que María solo le prestaba atención al Príncipe Christopher, lo reta a un duelo de guías espirituales y una batalla de cuerpo a cuerpo… Pues quería vencerlo y demostrar que solo él podía ser digno del amor de María y esta al ver que su amado casi termina muerto, despierta a su guía espiritual para ayudar a su amado a vencer al villano y terminan triunfando.
Esto no puede ser mas patetico
La segunda villana es la media hermana mayor de María, “Kiara”, quien es hija del Duque Mikhail Lombardi con su concubina que falleció en el parto, sin embargo él nunca la quiso ni la vio como una hija, ya que en la novela dicen que la concubina sedujo al Duque para concebir a Kiara y cuando nació la mantuvo apartada de él y de sus hijos mayores… y desde entonces todo el mundo odio a Kiara por ser hija de una mujer mala.
Cuando ella tenía 5 años fue escogida personalmente por la emperatriz para que fuera prometida del príncipe heredero Cristopher y cuando lo conoció por primera vez, ella quedó perdidamente enamorada de él y siempre trataba de captar su atención.
Pero todo cambia cuando María le roba la atención del príncipe y Kiara al sentir celos comienza a acosarla en la academia, los protagonistas al ver los abusos hechos por Kiara comienzan a reunir pruebas en su contra y que también le ayudarán a Christopher a romper su compromiso.
Kiara al sentirse acorralada decide contratar mercenarios para secuestrar a María y llevarla a una cabaña que se encontraba en un bosque alejado del imperio, así ella podría torturarla y luego asesinarla.
Así que todos los protagonistas y el villano al enterarse se unen para confrontarla, aunque Kiara no tenía un guía espiritual poseía poco mana y con ayuda de los mercenarios se enfrentaron en una batalla, pero al final Kiara fue vencida, así que la capturan y la llevan frente al emperador quien al enterarse de que casi asesina a la elegida de la santa rompe el compromiso entre ella y el príncipe…. y la sentencian a ser quemada en la hoguera.
Al final los protagonistas ganan y el príncipe Christopher logra comprometerse con María, los demás al ver que María lo eligió por amor, se retiran como buenos perdedores.
y así los protagonistas tienen su final feliz.
- Joder ¿Qué hare ahora? –
Yo… una antigua sicaria hija de un narcotraficante, como es que terminé en este maldito mundo y lo peor de todo es que yo soy la jodida villana.
Kiara se sentó de golpe sobre la cama con sus manos en su cabeza tratando de procesar lo que estaba sucediendo.
Bueno… si no quiero tener un final estúpido solo no debo involucrarme con nadie mucho menos con María la protagonista.
- Ahora solo debo saber en qué parte de la novela me encuentro y planear mi próximo movimiento – dijo en voz baja
Porque no pienso quedarme un minuto más en esta estúpida trama y morir quemada.
-Me iré lejos donde nadie pueda molestarme y estar en paz-
toc toc
El sonido de la puerta interrumpió sus pensamientos
-¿Si? – dijo mirando la puerta
Espero que no sea la estúpida familia
-¿Señorita Kiara? Soy yo Cecilia su criada-
Menos mal no son ellos
– Adelante – dijo poniéndose de pie para recibirla
La puerta se abrió dejando ver a una mujer mayor de unos 25 años.
Ahora que recuerdo esta mujer murió por la culpa de Kiara
Cecilia era como su nana, siempre estaba al pendiente de ella, era la única en todo ducado que la amaba, al final, cuando sentencian a Kiara a ser quemada viva, Cecilia va hacia el emperador y pide de rodillas que liberen a su señorita, su amor por Kiara era tan grande que pidió que la mataran a ella en su lugar pero al final la mandan a la orca por ser su cómplice.
En serio esta chica sí que fue una tonta
Teniendo a alguien que la amo hasta el punto de dar su vida y Kiara únicamente se dedicó ir tras la miseria del príncipe buscando su cariño… pero lo entiendo un poco, puesto que ambas tuvimos una vida similar, crecimos sin afecto y eso que en mi anterior vida aprendí a no rogar por nada ni nadie.
Cecilia entró y cerró la puerta.
-Señorita ¿Cómo se encuentra? la sirvienta coraima salió asustada de aquí diciendo que ya despertó - dijo preocupada.
- Eh si, disculpa, estoy bien -
-¿Está segura? Puedo llamar a un médico- comentó insistiendo
- Oh no no, estoy bien de verdad-
No puedo dejar que descubra que no soy la verdadera Kiara.
- Está bien mi señorita- dijo Cecilia mirándola no muy convencida.
Necesito saber que sucedió
- Cecilia ¿Que me paso?- Pregunto quiera con un semblante serio
La mujer se quedó sorprendida por la pregunta de Kiara
-¿No lo recuerda mi señorita?- preguntó la mujer juntando ambas manos en su pecho -
- Lo siento Cecilia, no recuerdo mucho- Kiara optó por hacerle creer que había perdido la memoria.
Así puedo obtener más información.
- Te caíste al agua y te golpeaste fuerte la cabeza, el cochero Manuel te trajo inconsciente, estuviste dormida por dos días, así que yo y otras sirvienta te hemos asistido mientras estabas inconsciente-
Kiara estaba seria por lo que había dicho esa mujer.
-Ya veo-
¿Es que la antigua Kiara habrá hecho una rabieta por la atención del príncipe?... Rayos… no puedo ver sus recuerdos de esta chica…
- y…¿Dónde están el Duque y sus hijos?-
-Ellos no están aquí señorita, el Joven maestro Evan llegó ayer por la mañana y para celebrarlo, se fueron de paseo por petición de su hermana menor- dijo Ceciclia algo nerviosa.
-Entiendo-
Si que era enserio que a él nunca le interesó Kiara
Cecilia se sorprendió por la actitud de Kiara, ya que siempre se ponía a llorar cuando el Duque no la llevaba con ellos.
Como sea, no quiero encontrarme con esa estupida familia
Mientras ella pensaba unos toques a su puerta la interrumpieron.
toc toc
-Adelante-
La puerta se abrió dejando ver a una niña pequeña de unos 8 o 9 años de edad vestida de sirvienta.
-¿Como se encuentra mi señorita?- preguntó la niña algo temerosa
Kiara se sorprendió ya que la sirvienta que tenía delante de ella era una niña pequeña, pero lo que más la dejaba aturdida es que esa niña nunca apareció en la novela.
Debo preguntarle a Cecilia
-Estoy bien, muchas gracias por preguntar- dijo Kiara con una sonrisa amable.
La niña y Cecilia se sonrojaron inmediatamente y bajaron sus cabezas bajo la atenta mirada de Kiara.
-¿Qué sucede?- Pregunto algo confundida
-Mi señorita usted es muy hermosa cuando sonríe, mucho más que la señorita María - dijo la pequeña con un brillo en los ojos - usted antes no sonreía de esa manera
Annita - reprendió Cecilia
- Está bien Cecilia- contestó Kiara. - ¿Dime Annita porque dices que antes no sonreía?-
-Porque usted siempre estaba con la mirada vacía, siempre bajaba la cabeza y nunca nos dedico sonrisas así ni a mi ni a Cecilia- dijo la niña algo triste
Kiara se sorprendió por las palabras de la niña, pues se suponía que como la villana era una persona celosa y arrogante que le hacía la vida imposible a todos, en especial a la protagonista.
Kiara observó por unos segundos a la niña… En su anterior vida careció de afecto por parte de su padre pero sonrisas no le faltaron, así que con esta niña no debía ser la excepción.
-No te preocupes Annita, a ti y a Cecilia siempre les voy a sonreír- dijo Kiara con una sonrisa sincera.
-Woaaaaaaa- dijo la niña sorprendida y feliz- Mi señorita su sonrisa es muy cálida y gentil me gusta-
La niña comenzó a reír y saltar, mientras que Cecilia quien observaba todo saltaba de felicidad por sus adentros pues también estaba emocionada que su señorita le dedicara una de sus hermosas sonrisas.
Kiara quien observaba a la niña, por primera vez se sintió feliz, lo que la hizo olvidar el problema en el que estaba metida.
Se siente bien
- Tengo un poco de hambre, me gustaría comer algo- dijo Kiara interrumpiendo el momento de felicidades de ambas sirvienta.
-Mi señorita, yo iré a prepararle el almuerzo- dijo Annita con la mano alzada- y tambien le preparare su postre favorito, así que con su permiso me retiro.
Sin más la niña salió corriendo de su alcoba emocionaba porque su señorita le había dedicado una sonrisa y quería prepararle una deliciosa comida como gratitud.
Kiara al aprovechar que la niña se fue aclarada su duda con su sirvienta.
-Cecilia ¿Cómo llegó la niña al ducado y porque está bajo mi servicio? - dijo Kiara de manera seria.
-Por lo que se, el padre de la niña estaba en deuda con el duque, así que le entregó a su hija para liberarse de su deuda, cuando llegó a la mansión, la niña iba a ser enviada a trabajar en la casa de un marqués, pero usted lo impidió y rogó para que la niña estuviera bajo su servicio y desde entonces usted la cuida-
Kiara no podía creer que lo escuchaba.
¿Qué está pasando?
En la novela nunca la describieron como una persona benevolente ni mucho menos caritativa, pues ese era el trabajo de la protagonista… pero realmente estaba sorprendida por lo que la antigua Kiara hizo.
-¿Y el padre de la niña nunca la ha venido a ver?- pregunto Kiara de manera seria.
-No mi señorita, supe que después de que entregó a su hija, él se fue para no ser visto nunca más- dijo Cecilia con un semblante triste.
Tsk, que hombre mas patetico
-Entiendo, pero por lo que veo, ella es feliz aquí- dijo Kiara mirando a la ventana.
- Si señorita, la niña es feliz, pues usted siempre la cuida y la malcria un poco- dijo Cecilia cruzando los brazos con un ligero puchero.
Aunque Kiara siempre mantenía su semblante serio, al ver la actitud de sus sirvientas le causaba risa por sus adentros pero no dejaría que lo supieran..
Esta sirvienta es graciosa.
- Creo que Annita ya debe tener listo el almuerzo, así que la ayudó a vestirse mi señorita- dijo Cecilia acercándose a ella.
Kiara aceptó no muy convencida ya que en su anterior vida no le gustaba que la tocaran… pero ahora todo es diferente.
Mientras ella se arreglaba, observó que la alcoba donde ella residía era pequeña, algo oscura y la decoración era sencilla sin ningún color chillón o llamativo, más que solo grisecos.
Es tan deprimente
Cuando por fin terminó de vestirse, salió de su alcoba para ir al comedor siendo guiada por Cecilia, el camino era demasiado largo y tenía que cruzar un sin fin de pasillos… Ahí se dio cuenta que la antigua Kiara estaba recluida lejos de la mansión principal.
Al llegar al comedor, noto que este era muy grande, con una mesa larga con muchas sillas a su alrededor.
Pero lo que más le impresionó, eran los platillos que estaban servidos en la mesa.
-¿Acaso todo esto lo hizo Annita?- pregunto Kiara
-Si señorita, a usted siempre le encanta que Annita le cocine, ya que siempre dice que su sazón era único y delicioso- dijo Cecilia con una sonrisa
Kiara se sorprendió así que se dispuso a comer y cuando dio el primer bocado sus ojos se agrandaron, el sabor era exquisito, nunca había probado un sazón igual, siguió comiendo hasta que Annita apareció.
-Mi señorita guarde espacio para su postre- dijo la niña con una sonrisa
Annita colocó una tarta de manzana con jalea al centro de la mesa.
Kiara estaba sorprendida pues en su vida anterior también ese era su postre favorito.
-Muy bien, guardaré espacio- dijo Kiara con sonrisa
Cecilia y Annita estaban felices de ver a su señorita sonreir.
-Por cierto mi señorita- dijo Cecilia - Ya casi se acerca el festival de las estrellas ¿Ya pensó que deseo pedir?-
Kiara se quedó por unos minutos pensando.
El festival de las Estrellas
En el libro se menciona dicho festival… Es un día en donde las personas de todos los estatus colocan sus deseos en tiras de papel de colores y las cuelgan en el gran árbol sagrado del templo para que la diosa los cumpla, después realizan un día de campo en sus villas.
- Esta vez tal vez el Duque la lleve con ellos, cada año usted siempre prepara la canasta del picnic con mucho esmero- dijo Cecilia apenada
¿Qué?
-Pero si al Duque no le gusta llevarme, ¿Porque yo hacía eso ?- pregunto Kiara incrédula
-Bueno es que usted siempre busco que el Duque le de una muestra de gratitud y cariño - completo Annita triste - a pesar de que usted siempre se esforzaba él nunca la felicito, pero no se rindió y siguio preparando lo mejor con la esperanza de que su familia estuviera feliz con usted.
Qué estupido, ¿rogar por cariño? es ridículo, ¿preparar algo para que otros lo disfruten mientras yo me quedo encerrada aquí? esto es una porqueria
-Entiendo, bueno la verdad es que no me interesa, de ahora en adelante que otros preparen lo que el Duque y sus hijos vayan a comer en el festival- dijo Kiara secamente
Esta familia es una mierda.
-P-pero mi señorita….-
-Ya déjala nana Ceci- dijo Annita cruzando los brazos con un puchero - el Duque se lo pierde, es un idiota.
-ANNITA- regaño Cecilia
-¿Qué? es la verdad nana- dijo Annita - mira que no llevar a mi linda señorita a un festival con lo hermosa que es… que desperdicio.
Kiara mientras comía reía por sus adentros por las ocurrencias de la pequeña.
Me encanta la personalidad de esta niña
La manera en como esa niña le contestaba a Cecilia y sin tenerle miedo a ella era impresionante para su edad y esa actitud le gustaba.
Al terminar de comer Kiara se limpió la boca con una servilleta y se levantó de la mesa, no quería regresar a su alcoba, así que se dispuso a recorrer la mansión en compañía de Cecilia.
Esta mansión es gigantesca.
Kiara estuvo por unas horas vagando por los pasillos, hasta que llegó a una puerta que daba al jardín, al salir pudo ver que era muy grande lleno de muchas flores y árboles gigantes también había un Kiosko.
Es muy fresco
Kiara se dispuso a respirar el aire, el delicioso aroma de los lirios inundaba sus fosas nasales, era tan relajante que no quería regresar a su alcoba… quería quedarse y sentir la brisa golpeando su rostro… Por primera vez sentía que podía olvidar el pasado y el ahora.
-¡Hermana!-
Lastima que ese gusto le duraría muy poco.
Kiara dirigió su vista en donde provino esa voz chillona que la llamó.
Lo que no quería que pasara esta pasando.
Ahí estaba la protagonista principal con el séquito Lombardi y ¿El príncipe heredero?, todos se estaban acercando…
Carajo
-¿Qué haces aquí? ¿Quién te permitió salir?-
Ahí estaba, el segundo hijo mayor… Lucas Lombardi
Un chico presumido y poco arrogante pero con María se comporta como un hermano amoroso que la protege de todo.
Escoria
-Supe que tuviste un accidente, debes mirar bien por donde caminas o ¿acaso tienes mala vista?-
Kiara se posó en aquel hombre alto y fornido que estaba al lado de Lucas
Aquí tenemos a Evan Lombardi, el hermano mayor de estos tontos.
Kiara lo miró de arriba a abajo examinando cada parte de él.
Si es muy atractivo
És el hijo mayor del Duque… El es el capitán general del escuadrón imperial Garra sagrada, su trabajo es combatir las amenazas que acechaban al imperio... hace un mes se fue de expedición y hora él había regresado.
Siempre estaba al pendiente de María y de cada expedición le traía una hermosa joya valiosa para demostrarle cuánto la quería..
Estupido
-Veo que ya puedes caminar bien para tener el valor de estar aquí-
Kiara dirigió su mirada hacia la otra persona que habló en un tono frío.
y ahí está… la principal cabeza de la familia y la persona que más la odia… el Duque Mikhail Lombardi-
Un hombre serio y frío que emanaba un aura fuerte, quien quiera que lo viera bajaría la cabeza y temblaba de miedo… pero para Kiara no era así… a ella no le daba miedo en lo absoluto, él solo se comportaba gentil y dulce con María.
En el libro mencionan que él es la mano derecha del emperador, pero para mi solo es su lamebotas, imbécil.
-¡Por Favor no la traten así, también es de nuestra familia!- dijo aquella chica rubia con tono melancólico.
Era María.
Vaya sí que la protagonista es muy linda, creo que la novela no mentía cuando dijo que María hipnotizaba a cualquiera que la viera…. si que es una chica preciosa.
-Hermana me alegro que estés muy bien, estoy feliz de verte. dijo con un brillo en los ojos.
María quería abrazar a Kiara quien al darse cuenta de lo que la chica iba hacer retrocedió dos pasos hacia atrás de manera disimulada, dejando desconcertada a María
Kiara divisó a otra persona acercándose a ella.
Vaya vaya, pero si es el perro guardian número uno de su séquito..
El príncipe Heredero del imperio de Galaad… Christopher De Ascart Benthel
- Señorita Kiara me alegra que ya se encuentra mejor- dijo el príncipe de manera cortés.
Le queda el papel del estupido príncipe azul.
-¿Si verdad?- Dijo María sonriendo - Hermana acompañamos a tomar el té, el príncipe nos acompañará.
Kiara se sorprendió de ver al príncipe con interactuando con María pero luego cayó en cuenta cuenta de que estaba rodeada de chicos guapos
Son atractivos…. pero son unos completos imbéciles.
-Majestad, Duque, Buenos tardes- dijo Kiara haciendo una elegante reverencia- como verán estoy perfectamente bien, así que no tienen que preocuparse- dijo de manera fría.
Nunca se preocuparon idiotas
- No nos interesa- contestó Lucas
-¡Lucas! - reprendió María
-Hermana quédate te divertirás con nosotros! ¿Verdad padre? - María volteo a ver al Duque para sonreírle -
El Duque asintió y le acarició la cabeza mientras le sonreía con cariño
Patético
Kiara no pensaba quedarse y tampoco quería cruzar palabras con ellos, así que optó por retirarse de ese lugar.
-Si me disculpa tengo que hacer- dijo de manera fría- así que me retiro, que disfruten su tiempo en familia-
-Hermana pero…-
Sin más Kiara dio una pequeña reverencia y salió de ahí siendo seguida por Cecilia que todo ese tiempo solo estaba observando, tampoco le agradó la forma en que trataban a su señora… Había dejado a todos sorprendidos, pues nunca pensaron que les hablara en ese tono y mucho menos que los ignorara.
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