Colombia
_¡¡Lucero.!! ¿Qué carajos haces?_
En un tono extremadamente fuerte y lleno de rabia, el hombre se acercó arrebatando la copa de vino de la mujer que ya estaba en los seis meses de embarazo, como podía ser tan irresponsable y no pensar en su bebé.
_Por favor, déjame en paz, bastante tengo con tener esta criatura dañando mi imagen._
¿La rabia e indignación mataban al hombre, no sabía cómo terminó en esa situación, como no se dio cuenta de la mujer que tenía a su lado? O tal vez sabía ya, pero la quiso así, Pero por qué acepto tener un hijo?, Pudo haber dicho que no, tanto la amaba que todo lo quería con ella.
¿_ Lucero, mi amor, No quieres a nuestro hijo.?
¿El amor por esa mujer, era tan fuerte, que tenía miedo de perderla, la acepto como era, pero nunca vio un cambio, acaso no valoro nada? El error estaba en él, no busco la manera de ayudarla y lograr ser una familia feliz.
_Solo quiero vivir bien, que tú estés feliz con tu hijo, él estará bien en esta familia..._
¿Sus manos tocaban su rostro, sentía tanta pena, por él, por ella y por ese niño, donde terminaría todo? ¿En qué condición nacería su hijo? ¿Eran tantas preguntas, que no sabía a quién preguntarlas, solo le arrebató la copa, la llevo en brazos para bañarla y acostarla, acarició el vientre y lloraba, lloraba de miedo, que pasaría después?
Los días pasaban y ya el vientre de Lucero estaba aún más grande, su niño se movía tanto, que ya sentía que le fastidiaba, le dolía, sus noches no eran igual, su vida de salir y bailar junto a su novio no eran igual, él trabajaba y ella en casa, no era divertido para ella.
_Quiero que me saquen a este niño..._
Lucero no estaba bien, su deseo por salir a divertirse eran bastante, sus mañanas eran de gritos, molestias y más.
_¿Nena, como vas a decir eso? Aún faltan casi dos meses, ven..._
Su intento de abrazarla y besarla fueron en vano, ella no quería eso, quería ser libre.
_No quiero estar más así, se mueve mucho, no me deja dormir, no me deja divertirme..._
Sus pasos eran muy apresurados, y los de su pareja también, trataba de calmarla, solo tenía siete meses, podría ser muy peligroso, pero no, no le importaba nada que no fuera su imagen, sus salidas, dormir bien...
_Por favor, lucero, falta poco, valdrá la pena._
Con sus manos suplicantes, que culpa tenía esa criatura de tener a una madre sin una pisca de sentimiento, no sintió la necesidad de verlo a los ojos, no necesitaba hacerlo, siguió su camino hasta pisar mal y caer, un desesperado hombre la tomo en brazos y la llevó a la clínica más cercana, lleno de miedo y rabia, por qué no pensó bien las cosas, ¿por qué no se detuvo un momento a pensar en las condiciones en las que estaba su pareja mentalmente? La inmadurez, la desesperación de ser padre no cegaron.
Horas después
_La señorita entró en labor de parto, su hijo nació prematuro, lo tendremos en la incubadora hasta ver que esté bien._
¿Las palabras del médico sonaban en su cabeza, como martillo, apenas estaba creciendo como empresario, solo asociado, con un trabajo fuerte y complicado, como cuidaría a su hijo en una clínica? Serían tal vez meses los que pasaría, no sabía que pensaba su mujer.
_Luce..._
_No lo quiero, no puedo criar a ese niño, esta..._
Sus palabras salían tan llenas de inconformidad, quería un niño sano, un niño que no llorará, un niño que tuviera a su pareja tranquilo y feliz, pero ese pequeño había nacido sietemesino.
_Es nuestro hijo, nos necesita, es tan pequeño..._
¿Su mirada estaba en otro lugar, menos en los ojos de su amado, que vida estaban viviendo? ¿Que pensaban hacer? Qué futuro tendría ese niño?
6 años después
_Les dije que no quiero que me molesten..._
_Senor, es su hijo..._
_¿Ahora que hizo?_
Su asistente no sabía cómo hablar, como decirle la misma
_No quiere escribir, solo camina toda la clase..._
Las manos del hombre pasaron sobre su rostro, estaba agotado, el comportamiento del niño, era muy difícil, muy hiperactivo, su cuerpo tenía que estar en constante movimiento, no prestaba atención a las palabras de nadie y solo su padre lo podia dominar con sólo hablarle, a veces el pensaba que era miedo lo que tenía.
_Deja la reunión para mañana._
Su semblante era oscuro, sus pasos firmes y sin ningún gesto de agrado, esos seis años habían sido tan duros para el, era triste ver qué la relación con su hijo, no era lo que espero, no podía jugar con el, pasar tiempo con el, tanto que el niño solo aprendió a verlo y decirle papá, casi no hablaba, solo era feliz caminando.
_¿Cuándo entenderás, que vienes a escribir al colegio? Los juegos son en casa._
_No quiero escribir..._
_No se trata de no querer, tienes que escribir o te castigo._
El niño no dijo nada, solo tenía su mirada en todos lados, menos en su papá, sus pensamientos eran salir rápido de esa conversación y seguir buscando algo que llamara más su atención.
_Bien, ya se que no hablaras, mañana no quiero problemas, puedes ir a tu habitación._
El chico de casi seis años, subió y empezó a sumergirse en su mundo, un mundo donde las cosas no estaban tan claras para el, donde el amor de sus padres era tan necesario, la compresión.
5 meses después
_Hola, se que ya estás adaptada, así que vamos al colegio donde trabajo siempre, te encantara._
Oriana ya tenía una amiga en Colombia, aunque el viaje solo era de tres meses, ya tenían 5, su compañera era una chica de su edad, psicóloga infantil y con un sentido del humor único,
_Bien, con gusto nena._
Ambas salieron una sonrisa, fue algo difícil adaptarse sola, pero con Aurora fue fácil todo.
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Venezuela
_¿Lucca, que carajos te pasa? Ahora vives borracho todos los fines de semana._
Ofelia estaba molesta, no era capaz de decir las cosas que sentía y ahora vivía molesto, tomando y amaneciendo con diferentes mujeres.
_Estoy en negocios mamá..._
_Hermano, no mientas, sé que te gusta mili, ¿por qué no le dices nada? ¿Te odiará si sigues así, mira todas las mujeres que has tenido?_
Su hermana le mostraba fotos que subía la prensa, de un posible compromiso, pero lucca estaba lejos de eso.
_¿Crees que le gustará alguien como yo?_
En un tomo molesto.
_¿Que tonto eres hijo, sabes cuántas modelos tuve yo? Mejor ni te digo, ¿por qué me enamoré de mi esposa, de su físico y todo, que te hace pensar que a milagros no le gusten como tú?_
Lucca se quedó pensando un momento, ¿acaso podía ser posible eso? ¿Pero ella lo trataba con indiferencia o se lo había ganado él.?
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Colombia
_Senorita García, es usted una mujer muy hermosa e inteligente._
Besando el dorso de su mano, mili sonrió amablemente, pero el guapo hombre que tenía frente, no era su fuerte y grandulón hombre, ese que amaba a morir, pero que la decepcionaba cada vez más.
_¿Muchas gracias, es usted muy caballeroso, empezamos?_
Ya eran meses donde la empresa que dirige Mili, organizaba eventos, no solo de cantantes, también de lanzamientos de productos y más, la idea de salir le fue genial.
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_Ya veo por qué no sales de aquí._
Autora era la psicóloga principal del colegio, Oriana caminaba entretenida con autora, hasta que sintió un golpe en la pierna, su reflejo hizo que tomara al niño para no dejarlo caer.
_¿Estas bien?_
El niño asintió sin problema, pero quería seguir corriendo, Ori se agachó y lo tomo por sus hombros.
_¿Me llamo Oriana y tu?_
_Soy Axel._
_Que lindo nombre, Axel._
El niño beso su mejilla y salió corriendo, no era de ser cariñoso, no sabía darlo, ya que no lo recibía a menudo, el beso fue una manera de salir rápido del compromiso.
_Que sorpresa, Axel es un niño muy imperativo y para nada sociable, lo de el es caminar y observar, siento que puede tener algún caso en particular, pero su padre no deja que nadie se le acerque._
Oriana vio como alguien bajaba de un auto y lo recibía, sin abrazo, ni beso, volteo sin ver la cara del hombre, le pareció muy seco de su parte.
_Es muy guapo y cariñoso, solo necesita confianza y algo de ayuda._
Las dos mujeres seguían su camino, hablaban de casos especiales de niños, hasta llegar a su destino, oriana sería alguien muy importante en la vida de ese niño, que sin saber desde el vientre de su madre, sentía rechazo, aunque siempre pidió amor.
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Venezuela
_Tio, en Colombia está el empresario que quiere trabajar en un proyecto, ayudame a revisarlo, tu que has viajado más._
Robert tomo los documentos y se sorprendió al ver el nombre.
_¿Alejandro Caicedo?_
_¿Lo conoces ?_
_Claro, es un viejo amigo, es empresario, tiene su empresa de accesorios para teléfonos inteligentes y quiere innovar en autos, es bueno en lo que hace._
Lucca sonrió, ya tenía la excusa perfecta para viajar a Colombia.
_Acompaname, no estaría más actualizarme un poco, aunque ya seas mi socio, otro no caería mal._
Robert sonrió, también sabía lo que realmente quería su sobrino, iría en busca de cuidar a su amor, lastima que para el, ya no estaba en su lista de cosas importantes.
La noche para Oriana, era solo pensar en Axel, así que no lo pensó mucho y quiso acompañar a Aurora nuevamente, quería ver a ese chico y hablar con él, aunque aurora le dijera que no podía, ella no sé, resistía a saber más de él, algo tenía que le hacía sentir curiosidad por conocerlo.
_Hola, Axel._
El niño al voltear y ver que era ella, le devolvió la sonrisa que Oriana tenía al verlo, aunque no tuvo mucho su atención, el objetivo del niño, era subir a un banco y caminar sobre él, demostraba interés en ella y se lo quería hacer saber con un poco de su hiperactividad.
_¿Puedo hablar contigo? Tengo un secreto que contarte._
Orí le dio la mano y el chico accedió, un niño de 6 años, que no actuaba como tal, se podía decir que era uno de 4 años.
_¿Si me dices un secreto es por qué Somos amigos?_
Su atención fue puesta sobre Oriana, él sabía muchos secretos que no entendía y con su condición, donde solo su cuerpo expresaba lo que quería y sentía, era muy difícil que dijera algo.
_ Claro que sí, ¿sabías que Yo sé jugar a la cámara lenta?, ¿quieres que te enseñe?_
_Siii, enséñame._
Su cuerpo empezó a moverse, sus pies no tocaban casi el suelo de los brincos que lograba hacer, Orí lo tomo de sus manos y hacían movimientos que parecían unos perezosos, pasaron diez minutos en eso, Oriana grabó todo y le enseña haciendo que el niño tomara interés en ver y hacer tal cosa, su objetivo era saber que tanto podía controlar su cuerpo o cuanta atención podía prestar en eso.
_Eres idéntico a un perezoso._
_Sii, ja, ja, ja._
Esa sonrisa encantadora que llenaba el alma de Oriana, su mente viajo a Alejandro, como podía estar tan cerrado a ver la sonrisa de su hijo, una sonrisa que cura el alma del más condenado, pero no era nadie para juzgar, sabía que detrás de todo eso, había una historia y una tal vez muy dolorosa, que no era una excusa para no ver el daño que le causaba a su hijo.
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Venezuela
_Maldición..._
El teléfono de lucca sonó sobre el escritorio, Solo ver a esa mujer ojos claros, cabello castaño medio largo, piel canela y unas curvas que lo tenían delirando, moría de celos al verla abrazada con otro, mostrando su sonrisa perfecta, dejo de divagar por sus redes y se concentró en revisar correos, tenía muchas propuestas y era hora de seguir creciendo.
_¿Colombia?_
Leía ese correo que al ver que era de Colombia, le intereso mucho, ese país estaba en su cabeza desde hace cinco meses, todo lo que pasaba era de su importancia.
_Luc, amor..._
Su ceño fruncido fue lo que la chica recibió, lucca podía tener a cualquier mujer, para él solo lo buscaban por su dinero y eso siempre era así, ahora tenía a una mujer que ni recordaba ya, llamándolo amor.
_¿Solo nos vimos una vez, que no recuerdo, tuvimos sexo y ya, que te trae por aquí?_
La chica se sentó en su regazo y sonrió, jugaba en su gran pecho y sonreía, como cuando una niña quería un juguete, sin prestar atención a sus palabras.
_Mi auto está pasado de moda, me gustaría..._
_¿Tener uno nuevo?_
Ella sonrió muy traviesa y feliz, estaba A punto de obtener lo que quería, ya no tendrá que seguir viendo a ese chico, para ella, solo le quería sacar beneficio, sin saber que ese hombre no le importaba lo que todas las mujeres pensaban del, solo una y esa era capas de decirle todo lo que era sin pensarlo.
_El problema es que tenemos que ir donde mi padre, yo administro todo, pero él sigue siendo el dueño, veré en cuanto nos deja..._
_¿Espera, está no es tu empresa? ¿No eres el dueño?_
_ No mi amor, eso dicen para despistar todo y no dañen a mis padres _
Estaba disfrutando la rabia que tenía la chica, se acostó con él para sacarle beneficio y resulta que de nada le valió.
_Eres un mentiroso, me acosté contigo..._
_Solo fue sexo, ni siquiera quise besarte, mis besos solo serán para una sola mujer, ya ve a sacarle a otro._
A empujones la saco de su oficina, su padre le tocó ponerse a un lado de las pataletas que la chica hacía.
_¿Ahora que pasó con esta?_
_Quería un auto nuevo..._
_De esto se entera Ella y seguro se molestará._
Lucca sonrió, deseaba ver su cara de celosa, esas cosas le decían todos, pero no lo sabía, no lo veía, no lo escuchaba, la extrañaba tanto, aunque si solo fuera para pelear.
_Me gustaría creer todo lo que dicen._
A pasos lentos camino a su silla ofreciendo una a su padre, olvidó que le había escrito para qué lo ayudará con ese negocio en Colombia.
_Se ve muy interesante hijo, sería bueno avanzar en tecnología, mandaré a investigar más._
_No te preocupes, papá, llamará a mi tío Robert, ese sabrá qué hacer._
Esas fueron las palabras que terminaron de cerrar la conversación, lucca descanso sobre su silla y veía su teléfono, muchas fotos de ella.
_Eres demasiado hermosa y perfecta._
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Colombia.
_Grandísimo idiotaaaa._
El teléfono en sus manos voló lejos en cualquier lugar de ese sofá, su prima y amiga, solo veía la escena, perdería tiempo si trataba de darle terapia.
_¿Para qué buscas noticias de él, si solo sufrirás.?_
_Es que me llegan solas._
_Cambia de correo, deja de seguirlos, no sé..._
Sus palabras se detuvieron al verla llorar, ya era demasiado tiempo esperando por ese amor.
_No llores, ¿por qué no sacas todo eso? Y decides buscar un amor que si te corresponda._
Mili no dijo nada, su cabeza reposaba sobre las piernas de mili, en silencio se quedó, ni siquiera sabía si de verdad su amor no era correspondido, hasta quedar dormida, no quería, no podía. Olvidarlo.
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_¿Señorita Aurora, su padre contrato a un nuevo experto en seguridad y tecnología, desea conocerlo?_
Una chica que se caracterizaba por su amabilidad y sencillez, no se daba a conocer y menos decir que tenía mucho dinero, le gustaba la vida de solo ser una psicóloga, feliz, libre y en busca de un amor a primera vista, un hombre que la dejara sin alientos al verlo.
_No, señor Romero, dejé que mi padre se haga responsable, estaré muy ocupada estos días._
La chica le dio una sonrisa y salió de su oficina, Iba algo distraída en unos documentos, que chocó con un hombre de unos 36 años, metro ochenta, piel no tan blanca, de lentes, ropa casual.
_Disculpe, señorita._
Levantó los documentos que aurora sostenía en manos y se los entrego, el hombre sonrió al ver que ella se quedó estática, solo veía todo de él, para autora era el hombre más perfecto, el amor de su vida.
_Tran. Tranquilo, Gra. Gracias._
Todo su cuerpo sintió la sensación más bonita, su cabeza empezó a trabajar en una locura de amor, mientras que ese caballero camino a su destino.
_Hija, hijaaa_
Su padre la llamaba, pero ella solo tenía su mirada en la dirección donde se dirigió su gran amor.
_Papá, me he enamorado a primera vista, es el hombre más guapo que mis ojos han visto._
¿Su padre levantó ambas cejas, acaso su hija se había vuelto loca? ¿La tomo de los hombros sentándola, que pasaba con esa muchacha?
_¿Estás bien?_
Su mirada seguía Perdida, no quería olvidar a ese guapo hombre, era perfecto en todos los aspectos, su padre se asustó al ver que su hija reaccionó de golpe.
_Su nombre papá..._
Salió corriendo, pero ya era tarde, no lo veía por ningún lado, aunque el sí, ya conduciendo su auto, sonrió al verla buscar algo como loca, le pareció tan graciosa y bella a la vez, borró su sonrisa al recordar ciertas cosas que no eran de su agrado.
_No lo conseguí, papá, pero seguro lo veré pronto._
_Búscalo en las cámaras._
_No, creo en el destino, sé que un día lo veré y si eso pasa, no lo dejaré ir._
Su padre negó con la cabeza y en un abrazo salieron, que hacía con su loca hija.
>>>
📲_ Sobrino, qué sorpresa?_
📲_ Lo dices, como si nunca te llamará._
📲_ Exactamente._
Una carcajada de lucca se escuchó al fondo.
¿📲_ Ja, ja, ja, cuando vienes? Quiero pedirte un favor._
📲 Justo terminé un trabajo aquí, mañana salgo a primera hora, Tengo muchos encargos de Mía Isabella._
Lucca sonrió, esa niña ponía a parir a todos, ya le había dicho como quería su auto en el futuro, ambos quedaron en reunirse y ver qué proyecto era.
_Solo espero no sea una excusa para venir por mi sobrina._
Se sentó a un lado de la maleta que arreglaba y recordó a la chica que ayudó, por qué la pensaba tanto.
_Ya deja de pensar Robert..._
Se puso ambas manos en su rodilla y así se levantó para preparar algo de comer, mientras que en otro lugar, una chica seguía recordando a ese hombre, que para ella, era perfecto, esos lentes lo hacía ver educado, centrado, maduro, se imaginaba como era en la intimidad.
_Ya aurora... calma._
El deseo de volver a verlo era tanto, que tal vez el destino los cruce y sea autora quién ponga a disfrutar a un hombre que ya no creía tanto en el amor.
Los días seguían pasando, aurora no dejaba de pensar en su hombre, si pudiera mandar en el destino, le abría exigido que su galán apareciera frente a ella, Oriana visitaba a Axel seguido, le enseñaba a descubrir cosas, le pidió a la maestra que le diera la oportunidad de usar el receso para sacarlo al patio, enseñarle cosas nuevas y hacer que tomara más interés en lo más esencial, la mujer, ya cansaba de tener que estar atrás de él, sin obtener nada, no tenía la idea de negarse, y con la pequeña mentira de Oriana tampoco tendría problemas, sería perfecto para descansar un rato, la intención de Oriana era poder descubrir si Axel tenía una condición que debía tratarse a tiempo.
_Nena, tendrás muchos problemas cuando ese hombre se entere lo que haces con su hijo._
Su amiga hablaba mientras ayudaba a subir unas cosas al auto, si Oriana lograba aceptar en su diagnóstico hacia Axel, sería muy importante para ella ayudarlo y le costará lo que le costará, lo haría, aunque su padre se molestará y no la dejara verlo, buscaría las formas posibles, sabía que si le decía a ese hombre que necesitaba llevar a su hijo a un profesional de la salud mental, era como querer morir de inmediato.
_No te preocupes, tú sigue pensando en tu Nerd, yo me encargo de lidiar con ese hombre, si me descubre algo se me ocurrirá o simplemente no lo dejo que se dé cuenta._
Aurora suspiró, algo que aprendió de esta chica en lo poco que la conoce, es la perseverancia por lograr algo, subió junto a ella, pensar en su nerd, su corazón latía fuerte, pero más latía de miedo al pensar cuando ese hombre se entere de todo lo que hace y seguirá haciendo esa chica, su corazón bondadoso no le permite ver los límites, su objetivo era ver bien a quienes quiere.
>>>
Venezuela
_¿Madre, Ori cuando regresa? No me acostumbro a tenerla lejos._
Mateo visitaba a su madre, Matías vivía en la academia de música de su mamá y sus estudios, Oriana no estaba y el casado más el trabajo en la empresa, no le daba tiempo de visitarla.
_No lo sé mi amor, todos los días dice que se viene pronto, sabes cómo es ella cuando se encariña con los niños._
_Claro que lo sé, es igual a ti, ya tiene un niño o niña?._
_Si, un niño, pero su padre no le gusta que lo traten, no me contó mucho._
Caminando al jardín con una taza de café, sonreía al ver los celos de Mateo, Ori es su princesa, su hermana y no quería que la hicieran sufrir, ya sabía más menos de su historia con su ex.
_No me gusta eso, no quiero verla sufrir._
_Ella es fuerte, mi amor._
_Sabes que en el amor no es tan fácil._
_Lo sé mi amor, pero Cambiemos de tema._
Orella no quería seguir pensando en eso, no quería llegar a pensar que su hija tuviera un desamor nuevamente, había cerrado su corazón al ser herido una vez.
_Está bien, ¿No te sientes sola?_
_¿Sola? No cariño, siempre tengo a mis locas amigas aquí, y mis nietos, pero cuéntame tú, cómo estás con windy._
Una sonrió bastó para entender o saber lo que diría, el amor entre ellos era más grande, cada día que pasaba.
_Feliz madre, tengo una familia, soy muy feliz, me siento pleno, lleno._
_¿Te lo dije, cómo están?_
Abraham llegó beso a su esposa y abrazo a su hijo, Era tan lindo escuchar eso, se regocijaban al saber que su TeoTeo era feliz, que su vida no fue fácil, pero todo tenía su recompensa.
_Estamos bien papá, mejor que ustedes._
_Ja, ja,ja Me alegra mucho, solo falta ver a mis otros dos felices, pienso que Oriana no quiere saber más del amor, se encerró en su carrera, que olvido lo que se siente amar._
Sus palabras salían llenas de preocupación, miedo, eso lo sabía Mateo, quien se acercó y lo abrazo, para todo había tiempo y el tiempo de Oriana podría llegar pronto.
_Todo tiene su tiempo, confío en mi princesa._
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_Familiaaa._
_Hermanooo, que bueno que llegas, como está mi princesa?_
Con Beso y abrazo, recibió Pris a su hermano, moría por saber la verdad, una cosa decían esas chicas y otra su hermano.
_Haciendo dinero, lo que tiene de loca lo tiene de inteligente para los negocios._
Priscila si sonrió, lo único que sacó de ella, lo loco y directa, lo demás, era de su padre.
_Deja de ofender a mi hija, es la más preciosa de todas._
Su padre la consintió bastante, siempre sería su princesa y cada día estaba más orgulloso de ella, por un momento pensó que no se dedicaría a estudiar, que sería inmadura, pero no, era toda una empresaria.
_¿Mis padres se perdieron otra vez?_
_Siiii, Anna y Samuel se los llevaron, están viejos ya, solo les queda disfrutar, gastar y vivir felices._
Pris los llevo al jardín y sirvió café, era rara vez que veía a su hermano en casa, se dedicó a viajar y llevar su talento al mundo.
_¿Y eso que viniste cuñado? Ya me imaginaba que te casarías por Colombia._
Una sonrisa forzada salió de sus labios, esa palabra era muy dura para él, de la cual no quería saber.
_No, para nada, tengo muchos encargos para Mía Isabella y solo yo, los puedo traer, también me llamo lucca..._
_Aah, ese sinvergüenza..._
Interrumpió con un tono sarcástico, ganas de agarrarlo a golpe le sobraban.
_¿Sinvergüenza por qué?_
Brais y Robert vieron como Pris cambio su cara rápido, si no fuera por qué Orella y Ofelia le dicen que eso es entre ellos, ya le habría dicho un montón de cosas.
_¿No ven las redes? Una mujer diferente cada fin de semana._
_Pero todas interesadas, las saca de la empresa casi a patadas, llegará la que de verdad lo ame por lo que es._
Ella no dijo nada, si ellos supieran cuanto sufre su hija, no lo defenderían así.
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Colombia
_¿Amparo, como se porta Axel?_
La señora sonrió, el niño tenía una actitud diferente, su cuerpo ya no estaba tan inquieto, jugaba más a la cámara lenta y a hacer yoga de una manera divertida.
Flash
_Traje algo divertido._
Con una sonrisa de emoción, Axel ayudo abrir las pequeñas corcha.
_Juguemos a que grabamos una película, yo haré movimientos que parezcan una caída._
Hacer yoga de una manera que fuera divertida para él, así controlaría un poco su cuerpo.
Fin del flash
_Señor, Axel está más tranquilo, hizo la tarea solo, juega en una colchoneta solo y..._
_Bien, me avisa cualquier cosa._
Esas fueron las palabras que dijo, la señora veía como se marchaba sin tomar interés en saber más y verlo, que culpa tenía ese chico de todo lo que pasaba, él nos le exigió que lo tuvieran, fueron ellos los irresponsables y ahora no tenían el valor de hacerse responsable.
_También sonríe, una sonrisa muy linda._
Eso solo lo dijo que solo lo escucho ella, no dejo que terminara de decir todo y lo más importante.
>>>
_¿Tú crees que sea así?_
_No sé, quiero hablar con ese señor, quiero tener más tiempo con Axel, conocer el lugar donde vive..._
_Ay no amiga, ese hombre es capaz de meterte en problemas, puedes perder tu carrera._
Los ojos de autora fueron abiertos, grande y su cara era un poema, por qué arriesgaba tanto, si su padre no quería que lo trataran, tenía que dejarlo solo.
_No me importa, vivo de otra cosa._
Como si eso fuera un problema, Oriana tenía quien la cuidara, una familiar completa de millonarios, pero ella solo actuaba como una mujer que solo vivía de su carrera, era una de las razones por la cual decidió irse, donde nadie sabía quién era.
_Ya quita esa cara, no pasará nada, no hagas nada loco, me voy, tengo otra despechada en casa._
Autora no muy convencida, se quedó tranquila, tendría que ver qué pasaba más adelante con ese ser, por qué estaba segura de que ese hombre se molestaría bastante.
>>>>
_¿Dónde estabas? _
_Donde aurora, también tiene mal de amor._
Mili volteó los ojos, fue por café y ambas se sentaron sin decir una palabra por un momento.
_Pensé que estabas con un galán._
Una sonrisa de burla se dibujó en mili, soñaba con ver a Oriana en un estado de enamorada.
_¿Eres loca? ¿Mejor cuenta como vas del Cora?_
_Mal, como es que uno se puede enamorar tan profundamente._
Oriana pensó un momento en su único amor, la verdad se había enamorado, pero no fue de la persona correcta.
Flash
_Chamo, ¿por qué le haces eso a Oriana? Es una excelente chica._
_¿No puedo dejar de hacerlo, ella me gusta mucho, podría decir que la amo, es una excelente chica, pero también me gustan todas esas mujeres bellas, y ella no sale, que hago?_
Esas palabras las escuchaba Oriana y eran como dagas a su corazón, no podía creer que su gran amor, quien pensó que la respetaba, que la quería por lo que era, tenía a muchas.
Días después
_¿Qué dices Ori? Qué hice?_
_No hiciste nada que no quieras hacer, luke, me iré a otra ciudad a estudiar lo que quiero y ya la relación no será lo mismo._
Oriana lo pensó en días, no sabía cómo hablar eso con él, la solución fue terminar la relación con excusas que no eran las verdedadera razón.
Fin del flash
_¿Te hice recordarlo?._
Mili se dio cuenta de que Ori se quedó pensando en esa persona, ese chico que no solo recibió el amor de ella, también la primera vez, el respeto y la fidelidad.
_Solo recordé en la decisión que tome y pienso que fue la correcta._
Una sonrisa de ambas y un abrazo era un lindo consuelo.
_Solo espero que nunca más lo veas, es un idiota._
Un idiota, que amo bastante y nunca espero que la traicionará así, ahora entendía que en el amor, hay muchas caras.
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