Hace muchos años en la ciudad de Lioth (mundo demoníaco) había un joven que le gustaba mucho el mundo humano, gracias a unos libros que un viajero le regalo, leyó muchas cosas y su curiosidad crecía cada vez más, su padre Asmodeus el rey de los demonios tenía prohibido la salida a todos los demonios a la tierra, amenos que sea para infundir miedo en la humanidad, Asmotiel estaba triste, moría por salir a conocer ese mundo, pero un día conoció a dos demonios que se hicieron sus amigos, ellos eran Agares y Painon unos chicos aventureros hijos de dos comandantes, al pasar el tiempo ellos se escapaban al mundo humano, traían cosas de ese mundo para su amigo, el príncipe atesoraba todo lo que le regalaban, un día Agares escucho una conversación que le preocupo de sobremanera, le contó a su padre que era el amigo y comandante de la Reina, el le pidió que se escaparan llevando con ellos al príncipe Asmotiel, ya que se avecinaba una guerra interna por el poder y así lo hicieron, al llegar a Eslovosquia, Asmotiel estaba muy emocionado, jamás pensó poder conocer aquella ciudad, Agares ya había conseguido una casa donde se instalaron para vivir, el príncipe era feliz, pensó que no podía con tanta felicidad hasta que conoció a Eva, una humana humilde, pero de buen corazón, ella vivía con sus padres y hermanos, tenían una granja donde criaban vacas, gallinas y otros animales, Asmotiel se enamoró de aquella muchacha y decidió ayudarla en la granja; sus amigos que no estaban dispuestos a dejarlo solo se quedaron con él, al pasar los meses ellos se enamoraron y decidieron casarse, él quería contarle quien era en realidad, pero temía ser rechazado o que lo tuviera miedo, no sabía qué hacer hasta que un día unos bandidos atacaron la aldea, sin pensarlo dos veces uso su poder para detener una flecha que iba directo al padre de su amada, cuando se dio cuenta lo que hizo, miro a su futura esposa que lo miraba con los ojos rojos a causa de las lágrimas, él pensó que lloraba porque le tenía miedo, así que retrocedió intentando huir del lugar, hasta que sintió unos brazos en su cintura que le impedía moverse.
*No te atrevas a dejarme Asmotiel, no me importa quien seas, lo único importante es que me ames tanto o más que yo* Dijo Eva acurrucando su cabeza en su pecho.
Asmotiel, sin importarle que sus padres estén presentes, la beso apasionadamente que tuvieron que separarlos, el sin perder más tiempo pidió la mano de la joven.
*Señor, pido la mano de su hermosa hija, quiero casarme con ella lo más pronto posible, no creo soportar más tiempo estar dejos de ella* Pidió haciendo una reverencia, cosa que no le gusto a sus amigos, dado que el es un príncipe y no estaba bien visto que bajara la cabeza frente a personas inferiores a él, pero para Asmotiel su suegro era una persona digna de respeto por eso no lo pensó 2 veces antes de inclinarse ante él.
*Asmotiel eres un buen hombre y mi hija te ama, quien soy yo para alejarlos* Contestó el señor con una sonrisa.
*Entonces para cuando sería la boda* Pregunto la mamá de Eva emocionada.
*Yo creo que debería ser en una semana, por lo que veo los dos no aguantan estar lejos uno del otro* Dijo su hermano mirándolos.
*Gracias por siempre apoyarme, los amo mucho* Dijo Eva corriendo a los brazos de sus padres.
Así paso la semana entre preparativos para la boda, llegó el gran día donde el padre les dio la bendición, Asmotiel no creía en el dios de ellos, pero lo respetaba, por eso no le dio importancia, terminó la boda y comenzó la fiesta, toda la aldea estaba feliz, Asmotiel flotaba de felicidad junto a su ahora esposa.
*Querida esposa, vamos a despedirnos de tus padres para ir a nuestra luna de miel* Dijo seductoramente.
Se acercaron a sus padres para despedirse, se irían por dos meses, Painon se quedó en la granja, mientras que Agares se fue con ellos por seguridad, ya que Asmotiel tenía un mal presentimiento.
El viaje no fue largo, ya que se fueron al pueblo vecino, había agua termales donde quería llevar a su esposa, pasaron los días, semanas donde ellos eran más que felices, hasta que un día vino Agares corriendo.
*Mi señor, el ejército del rey se está acercando, tenemos que irnos de aquí* Dijo Agares, más que asustado, qué preocupado. Asmotiel, agudizó su oído y escucho que estaban cerca, así que tomó una decisión.
*Agares quiero que vayas por Eva y la saques de aquí, por nada del mundo permitas que le pase nada, por mi no te preocupes, a lo mucho me caerán unos azotes del rey* Dijo muy serio.
Agares se fue donde estaba su señora y sin explicación alguna la durmió, sabía si le decía que deberían irse dejando a Asmotiel haría un escándalo.
Mientras ellos huían, los soldados del rey habían capturado a Asmotiel y llevado frente a el.
*¿Dónde está esa humana?, ¿creíste que no lo sabría?, como te atreviste a contaminar el linaje real* Grito Asmodeus enojado.
*Esa mujer es mi esposa, y es el alma más pura que esté mundo pueda tener* Contestó también gritando.
*Ni pienses que esto se quedara así Asmotiel, desde hoy estás castigado por cien años, llevarselo al cuarto mágico* Ordenó.
*¿Tenías que hacer esto?, ¿acaso no puedes ver feliz a tu hijo?, porque tienes que arrebatarle todo lo que le gusta y le hace feliz* Pregunto Nahama molesta.
*No te metas en esto reina, él es así porque nunca le enseñaste como debe ser un verdadero demonio* Increpó.
*Eres un maldito que ni siquiera puede ver feliz a su propio hijo, solo espero que no le hagas nada a su familia* Dijo levantándose para ir a sus aposentos.
Mientras en el reino de lioth se preparaban para una revuelta, en Eslovosquia, Eva estaba siendo perseguida por los demonios, sus padres y hermanos fueron asesinados, solo Painon pudo escapar muy malherido, si no fuera un demonio ya estaría muerto, mientras Eva corría sin descanso hasta que vio caer a Agares.
*Corre mi señora, tienes que salvar al joven amo* Grito Agares, Nahama logró escuchar lo que dijo aquel muchacho, pero no pudo llegar a tiempo, Asmodeus que se teletransporto ya le había traspasado con una espada en el vientre.
*Ninguna humana es digna de levar a un nieto mío* Dijo partiendo su vientre dejando caer sus órganos al piso, Nahama al ver esto no lo dudo y atacó al rey, no pude creer que matara a su propia sangre.
*Eres un desgraciado, como pudiste matar a nuestro nieto que es uno de los nuestros* Grito Nahama.
*Él no era mi nieto, era una abominación, y tú te irás a hacerle compañía a tu hijo* Dijo atacando con todas sus fuerzas, pero ella logró escapar .
*Búscala y traiganla frente a mí, maten a todos los que están conspirando en mí contra* Ordenó.
Así comenzó una guerra en lioth entre la reina Nahama y el rey Asmodeus, Asmotiel estaba encerrado en un cuarto mágico ajeno a todo lo que pasaba en el reino.
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En esta historia los años y tiempos son diferentes, por ejemplo.
1 año en el mundo demoníaco / equivale a 5 años en la tierra.
Ya que el tiempo pasa muy lento en lioth muy diferente que en la tierra.
Los demonios viven 5000 años, y cuando llegan a la mayoría de edad su envejecimiento se trunca y cada 50 años envejecen 1 año físicamente.
Espero me haya explicado bien 🤭🤭🤭 Espero de todo corazón ♥ que les guste esta historia y me acompañan en esta demoníaca aventura 👿.
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Después de salir huyendo a Lioth, Nahama se fue a una cueva donde le esperaba la gente que le apoya, no podía dejar que las cosas siguieran así, su esposo era un hombre sin corazón, tenía que hacer algo para ayudar a su hijo, ya que no pudo hacer nada por su familia.
*Majestad estamos listos para pelear a su lado* Dijo Balbam, comandante y padre de Agares.
*Quiero que se preparen para la guerra, no será fácil, pero tenemos que derrocar al rey si queremos vivir y ayudar a los nuestros* Dijo la reina.
Así comenzó la guerra entre la reina y el rey, matándose unos a otros hasta que un día el rey capturó a la reina gracias a su poder el hielo infernal, y el hechizo de uno de sus comandantes.
*Maten a todos, no quiero a nadie con vida* Grito el rey.
Nahama al escuchar esto con su última fuerza creo un remolino de fuego, para así lanzar lejos a su gente y grito.
*¡¡Huyan de este lugar!!! Vayan por sus familias, no se dejen atrapar* Antes que termine de hablar sintió un fuerte golpe en su estómago.
*Maldita, ni creas que podrás salvar a esos traidores, los mataré a todos por su osadía* Dijo Asmodeus con odio.
*Por qué tanto odio Asmodeus, acaso todo esto es por aquella humana que te rechazo por ser un demonio* Pregunto Nahama con burla.
*Cállate maldita, tú no sabes nada, ella no era nadie para rechazarme, por eso la mate, y jamás dejaría que mi hijo se uniera a una humana porque son escorias de la creación* Rugió con odio en sus palabras.
*Entiendo, ahora lo entiendo, tú nunca la olvidaste, siempre la amaste, casarte conmigo solo fue por conveniencia, ¿verdad?, porque era la última que quedaba de mi familia con este poder ¿cierto?, ja,ja,ja qué tonta fui al pensar que me amabas y ahora darme cuenta de que solo me utilizaste para subir al trono realmente duele* Dijo Nahama mirándolo con dolor y odio.
*Eres tan estúpida como tu hijo, pensando en el amor como si fuera algo bueno, ¿sabes?, por eso tu gente es débil, no entienden que para obtener lo que uno quiere deber ser egoísta y arrebatarle las cosas a los demás si es necesario para lograr sus objetivos* Dijo mirándola serio.
Nahama no era débil, pero le dolía escuchar esas palabras, ella nunca pensó que ser amable era una debilidad, a pesar de ser una demonio muy poderosa, jamás uso su poder para hacer el mal.
*Asmodeus por favor libera a nuestro hijo, él ya sufrió mucho, le quitaste lo que más amaba, que más sufrimiento que eso* pidio con tristeza .
*ja, crees que voy a liberar a ese hijo tuyo para que venga contra mí, por encerrar a su querida madre y matar a su abominación de esposa e hijo* Contestó burlonamente.
Nahama no dijo nada más, se sentía débil porque tenía cadenas en sus muñeca y tobillos que le iban debilitando poco a poco.
Mientras el rey la llevaba a un calabozo subterráneo, sus comandantes y otros tres demonios de alto rango huían del lugar llevando con ellos a los pocos que sobrevivieron en estos cinco años de guerra (25 años en el mundo humano), no sabían a dónde ir hasta que Balbam comandante y mano derecha de la reina Hablo.
*Amón tú iras a Eslovosquia, Balio tú a Zaknar, sidraso tu iras junto a Bapomet a Errtu, tenemos tierras en esos pueblos gracias a la reina, allá nos iremos a establecer hasta que encontremos la manera de liberar a nuestro príncipe y averiguar qué paso con la reina* Ordenó Balbam con seriedad.
Todos gritaron al unísono.
*Si mi comandante*
Así se marcharon sin mirar atrás, llenos de odio, rencor y ganas venganza, mientras ellos se iban Balbam busco la manera que hacerle llegar una carta a Asmotiel, contándole todo lo que pasó sin omitir nada, le explico lo que pasó con su familia y como la reina no pudo salvar a su esposa y declaró la guerra al rey y perdieron, ahora no sabe qué pasó con la reina, no saben si está aún con vida, así que están escapando de la furia del rey y le pede que sea fuerte que él buscará la manera de sacarlo de ahí.
Asmotiel al terminar de leer aquella carta, grito de dolor e impotencia por no ser capaz de cuidar a su familia, ahora su madre está capturada y no sabe si está con vida, aunque conociendo lo desquiciado qué es el rey, la tendrá en uno de los calabozos subterráneos, dónde tienen a los demonios más peligrosos el reino.
*Juro, qué cuando salga de aquí me las pagarás, nunca te perdonaré el haberme arrebatado lo que más he querido en este mundo* Dijo Asmotiel con un grito desgarrador.
así fue pasando los años, Asmotiel comenzó a entrenar su cuerpo, mente y su poder, para cuando salga poder enfrentar a su padre, le quitará el reino, por lo que tanto orgullo siente, buscara a su madre porque está seguro que aún está viva, la reina Nahama es alguien poderosa no sería fácil vencerla aunque esté encerrada, está seguro que ella no se daría por vencida y luchará hasta su último aliento para no darle el gusto al rey sin corazón.
Así pasaron 50 años en el mundo demoníaco, mientras que en el mundo humano pasaron 250 años, todo había cambiado, los pueblos se volvieron ciudades, dónde vivía su amada Eva ahora era Eslovaquia una ciudad donde vivía humanos y otras razas en paz, mientras que en las otras ciudades como la ciudad sangrienta de Zaknar era dónde vivían los vampiros, había uno que otros humanos parejas de algunos vampiros y otros Cómo comida, mientras que en la ciudad druida de Errtu era zona de los hombres lobos y brujos ambos tenían su territorio donde vivían en paz y no prohibían el ingreso de otras razas siempre y cuando respeten a su gente.
*Pasaron 50 largos años, aún estoy en estas cuatro paredes, siento tanto odio en mi corazón, intenté muchas veces escaparme, pero este cuarto está llena de magia, qué no me permite salir, ni bien tocó la barrera me debilitó, estoy más que desesperado no sé qué hacer, aunque salga de este lugar, mi Eva, mi amada Eva no la encontraré, quizás a nadie de su descendencia, todo gracias a la arrogancia de este maldito rey*
Mientras él hablaba frustrado, sentado en un mueble en aquel cuarto, vio un portal abrirse Inmediatamente se emocionó, vio que por fin podrá salir de este encierro.
En el mundo de los humanos pasaron 250 años, desde lo sucedido con Asmotiel, las aldeas se volvieron en ciudades, las chozas en grandes casas, todo cambio, era otra era donde había carros, electricidad, edificios y tecnología, las razas vivían cada quien en su territorio, los lobos tenían un tratado de paz con los vampiros y brujos, todos vivían en paz, en Eslovosquia vivían los que escondían sus poderes y naturaleza por miedo, y eso era lo que le pasaba a la familia Norwood, ellos eran una familia de dos razas diferentes.
Edward Norwood príncipe de los vampiros, y Sofía Frenty una bruja muy poderosa, hay una leyenda que dice que un día nacerá la persona que tendrá el poder de unir o destruir todas las razas, y que será capas de entrar y salir del mundo demoniaco, eso es temido por todos, ya que para ellos los demonios son muy peligrosos y temen que salgan a invadir la paz en la que viven, aunque hay muchos demonios malos también hay buenos como en Cualquier raza; hace 18 años vieron una luz resplandeciente que alerto a todos. En una casa en las montañas una pareja veían nacer a su hermosa hija, pero al ver salir una luz resplandeciente de su pequeño cuerpo se asustaron, tenían miedo que alguien pudiera codiciar este poder; sin embargo, después de unos minutos se calmó, su mamá junto a su papá se acercaron a revisarla cayendo en cuenta que se quedó siendo una simple humana, preocupándose de sobremanera.
De eso pasó ya muchos años, la bebe de aquel entonces, está por cumplir 18 años, es una hermosa jovencita de cabello plateado, ojos celestes de 1.65.mt que está en la universidad, ella siempre supo lo que eran sus padres, muchas veces pensó que ella era adoptada, pero eso podría ser algo difícil de creer porque era una copia exacta de su padre con el color de cabello de su madre.
*¿Papá, puedo salir con Stefany a una fiesta?* Pregunto feliz, desde que conoció a su amiga Katrina cambio un poco, ahora sale de paseo y compras, aunque están feliz por ella, tienen miedo de que salga sola, por eso pusieron a Stefany en su vida que es una bruja al igual que su madre, cosa que katrina no sabe.
*Mi pequeña tengo que hablar primero con tu mamá, sabes como es ella, pero te prometo que haré todo lo posible para convencerla* contestó con una sonrisa, aunque es un vampiro muy poderoso, tiene miedo al carácter de su esposa, no porque le haga algo malo, sino porque le castiga sacándolo de la habitación por apañar en todo a su hija.
Katrina quedo feliz con la respuesta de su padre, aunque aún faltaba que su mamá acepte está segura que su adorado padre lograra conseguir su permiso.
*Se puede saber que te secreteas con tu hija* Pregunto Sofía alzando una cejas.
*Nada mi amor, es solo que la pequeña desea salir a un club con Stefany, y pensé que talvez sea bueno dejarla ir un rato, sabes que ella nunca ha salido a estos lugares y creo que es momento que salga a conocer y divertirse* Edward hablo tan rápido que pensó que no lo escucharía.
*No creo que sea buena idea, sabes por qué tenemos que cuidarla mucho y me estás pidiendo dejarla ir como si no corriera ningún peligro* Contesto enojada.
*Mi amor, pero ella no tiene poderes, ante los ojos de los demás ella es una chica defectuosa, aun así es más rápida y fuerte que muchos vampiros y que cualquier brujo, no te preocupes tanto, además Stefany estará ahí para cuidarla* Dijo con cara de perrito regañado.
Sofía lo miro, no aguanto ver esa carita de su esposo, así que dio un suspiro de derrota, talvez él tenga razón y debería dejarla salir a divertirse, además hace días se dio cuenta de que su hija está más feliz de lo normal.
*Mi amor entonces le puedo decir que se puede ir* Pregunto dándole besos.
*Quien te viera no creería que el frío y gruñón Edward es así de meloso; si dile que puede ir y dile también si otra vez te manda a ti a hablar por ella no saldrá aunque me suplique, para que aprenda a pedir ella misma sus permisos* Dijo sería.
*Como tú digas mi amor, por eso te amo tanto mi brujita hermosa* Dijo meloso, ellos son unos esposo muy amorosos aunque para los demás son fríos y serios, llevan muchos años juntos, él y su amada son inmortales y esperan que su adorada hija pronto despierte sus poderes aún no pierden la esperanza que eso suceda.
*Papi que te dijo mi mamá, puedo ir ¿verdad?* Pregunto Katrina emocionada.
*Sí, pero tienes que tener mucho cuidado, tú sabes muy bien lo que debes hacer y tienes que estar en casa más tardara la 1 de la mañana, ah se me olvidaba, dice tu mamá que a partir de hoy tu misma, tienes que pedir permiso cuando quieras salir* Dijo con aparente seriedad.
Pero Katrina ya se había ido corriendo a su habitación a cambiarse, Edward al darse cuenta movió la Cabeza divertido, le gustaba ver a su hija feliz.
Pasó una hora desde que se fue a su habitación, escucharon el timbre, Katrina bajo corriendo a abrir la puerta, pero su padre le gano.
*Buenas noches, señores Norwood, vengo a recoger a Katrina vamos a ir al cumpleaños de una amiga que será en un club, espero no le moleste que vayamos a ese lugar* Pregunto la chica respetuosamente.
*Buenas noches, Stefany espero cuides bien a mi hija, no quiero novedades y la quiero máximo a la 1 en casa* Hablo Sofía.
*No se preocupe, señora, a las 12.30 estará en casa* Dijo asiendo un saludo militar.
Después de un rato se fueron a dicho club, Katrina estaba muy feliz, bailaba sin parar hasta que fue hora de regresar.
*Pequeña es hora de ir a casa, tus padres deben estar esperando por ti* Dijo Stefany agarrándole del brazo alejándola de un chico que la miraba muy raro.
Salieron del club y la llevo de regreso a su casa, y como había imaginado, sus padres estaban en la puerta esperándola.
*Estoy de vuelta mamá, papá no saben como me he divertido* Dijo una feliz Katrina.
*Que bien mi niña, me da gusto saber que te hayas divertido, y gracias a ti también Stefany por traerla a salvo a casa* Dijo con una leve sonrisa.
Entraron a casa, Katrina se fue a su habitación para descansar, pero algo la tenía inquieta, se levantó y se fue a la biblioteca, tenía la sensación que algo le llamaba de ese lugar, al llegar vio brillar a un libro antiguo, sin poder detenerse lo agarro y leyó las primeras palabras que estaban en la primera hoja del libro.
*Release the light that is in your heart and find the path to happiness*
(* Libera la luz que hay en tu corazón y encuentra el camino a la felicidad*)
Después de aquellas palabras se sorprendió cuando vio que se habría un portal, quedo muy asustada al ver a una persona con cuernos dentro de aquella habitación, que la miraba muy serio.
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