*Advertencia: Para entender esta Novela, tienes que haber leído la Primera Parte.*

..."No es Otra Novela de Villana a Prota"...

SEGUNDA PARTE

Dos doritos después...

Isabella, luego de una semana completa de no haber podido salir de la habitación matrimonial, por la intensa acción triple X entre ella y Pietro; debido a que él con intensidad se desquitó, poniendo en práctica todas las posiciones aprendidas y enseñadas por la hábil maestra del Kamasutra, Isabella. Recuperándose por todos los meses inactivo que lo mantuvo a pan y agua (o mejor dicho entre manualidades haciendo magnolias con papel higiénico y agua). Isabella queda como chancho apaleado, caminando en zigzag.

Al final, el ex Emperador, hizo un llamado a Pietro para retomar sus obligaciones como Nuevo Emperador.  Isabella también empezó a ocuparse de las actividades propias de una Emperatriz. Pero, esas actividades finalmente, se delegaron en su madre la Archiduquesa Catalina. Ya que Isabella había decidido retomar su último año en el Instituto. Primero muerta que dejar su formación como "Maga Excepcional". No podía dejar de disfrutar de las mieles de la magia en este Mundo.

Llega el momento de la partida. Pietro se despide de Isabella con un tierno beso antes de subir a su carruaje Imperial:

- De ahora en adelante, mi habitación privilegiada en el Instituto de Nobles Magos, será solamente para ti, porque de vez en cuando te visitaré para discutir en profundidad y privacidad sobre los problemas del Imperio- Isabella asiente y sonríe, pensando que más bien sería para el Imperioso desahogo en su suave profundidad, sin las inoportunas interrupciones.

Isabella al llegar al Instituto, se reencuentra con Andrea ella también había retomado sus estudios. Ambas estaban emocionadas, ya que después del matrimonio con Arnold, eran como hermanas.

La Gina Lolasfrígidas también se reincorporó a sus estudios, pero más con la intención de molestar a Isabella, era su retorcido y recóndito deseo eliminarla para siempre.

Comienzan las clases en la materia Desapariciones con el profesor Ben Eno.

- Buenos días aprendices, saludemos a la Emperatriz del Imperio Ártico, cursando su último año, la nueva mandataria Isabella La Justa-

"Ya estoy creyendo que lo mejor será hacerme una transfiguración para que nadie se fije en mí. Pero, en fin, tendré que acostumbrarme a los sarcasmos exagerados de los profesores". Piensa Isabella.

-Realizadas todas las respectivas presentaciones; deben saber que en este año, aprenderán a elaborar portales a otros mundos, de una vez les advierto, que me refiero a otros países, incluso a ciudades lejanas y desconocidas, a otros lugares remotos; por lo tanto, se trata de magia muy avanzada, y sumamente peligrosa, que no todos pueden dominar, así que me sentiré contento si logran trasladarse a otras ciudades dentro del mismo Imperio-.

-Antes de que lo pregunte alguno de los más curiositos y osados, sí existen 2 textos prohibidos que hablan sobre multiversos paralelos, pero en vista de que quienes intentaron ir a esos universos alternos, nunca pudieron regresar, quedando atrapados en esas realidades alternas desconocidas, quedó terminantemente prohibido intentarlo. Así que, ni en sueños podrán tener acceso a este tipo de magia, a menos claro, que posean magia de oscuridad - todos se ríen, ninguno poseen ese tipo de magia. Isabella se queda en silencio, ella es la única del grupo que sí posee ese tipo de magia rara y peligrosa.

- Para las desapariciones convencionales, deben conocer bien la geografía de la nación y de las ciudades aledañas- continúa explicando el profesor Ben.

-Comenzarán por lo que les parecerá más tedioso, aprenderse la geografía de regiones, países y capitales-

- Una vez dominado a la perfección esos mapas, podrán hacer el hechizo y podrán con toda seguridad, encontrar el camino de regreso-

- Les distribuiré los textos de las regiones que deben dominar para su posterior traslado o salto en transportes lejanos, recuerden que de ese dominio depende el éxito este año en la materia- Les da a Gina para que distribuya los textos al azar.

Cada quien tiene el libro correspondiente, sin embargo, Isabella tiene un libro con una ciudad desconocida del Imperio Surópolis, obviamente las intenciones de Gina no son buenas. Tomó el libro y lo guardó, al finalizar la clase, se acerca al profesor.

- Profesor, creo que hay un error, me acaban de entregar un texto sobre la capital del Imperio Surópolis, usted mejor que nadie sabe que por mi condición de Emperatriz del Imperio Ártico, no puedo alejarme sin guardias, hacia ese Imperio-

- No, sí, disculpe alteza, fue un error, ese libro no es para usted- sin percatarse, saca otro texto, muy viejo y se lo entrega, ella lo toma y lo mete en su mochila sin verlo.

Luego de la clase de Magia Elemental, donde el Maestro Black le advirtió sobre el objeto que tiene como pensador y los efectos colaterales de seguir depositando pensamientos en él. Le enseñó los hechizos para evitar los dolores de cabeza cuando empiece a escuchar los pensamientos de los demás; sin embargo, eso todavía no sucede.

Fue larga y entretenida la clase. Se dirige a su habitación. Al fin, se dispone a leer el libro de Desapariciones.

Menos mal se encontraba acostada y sola, porque si no, se hubiese caído de nalgas. Se trataba del libro prohibido: "Viaje en el Tiempo".

Comenzó a leer muy interesada sobre los saltos cuánticos en el tiempo y los multiversos. "Este libro está de pelos, estoy segura de que debe ser uno de los textos prohibidos". Piensa Isabella.

La introducción advierte sobre lo peligroso de intentar los hechizos propuestos y lo casi imposible de regresar con vida. Y que por ningún motivo puede encontrarse con el otro yo del pasado o futuro, porque quedarían fusionados ambos cuerpos en el acto, con la imposibilidad de regresar al tiempo correspondiente al del viajero en el tiempo. También advierten que el tiempo pasa de forma diferente entre los diferentes universos. Es decir, cuando regrese (si es que logra regresar), pueden haber pasado años y hasta décadas desde su partida. Aunque para el viajero en el tiempo, no haya pasado si no pocas semanas o meses.

Lo primero que sugieren es ir a un sitio alejado de las contrucciones humanas, más bien hacia la naturaleza.

Isabella sabía que al día siguiente le quitarían ese libro, debido a que es uno de los dos textos prohibidos y nadie se lo iba a facilitar nunca más. Era su oportunidad de regresar a su tiempo moderno, (o eso era lo que ilúsamente se imaginaba). Era las 6 de la tarde, todos irían a cenar, así que se dirige con el libro hacia el Bosque, le pide permiso a Roblo para que permita su acceso, sin dificultad lo consiguió, una vez adentro se transforma en ligre, y corre hacia un lugar alejado de la entrada, lleva el libro en sus fauces.

Ya en una cueva, logra transformarse de nuevo y comienza la lectura del hechizo transportador en el tiempo.

"Hay dos opciones adelantar el tiempo al futuro o atrasarlo hacia el pasado. Yo no quería ir de nuevo al pasado, me interesaba y me inquietaba el futuro, mi mayor deseo era saber si podía volver a mi tiempo futuro, o saber qué había cambiado en mi vida. Mínimo terminar estas clases del Instituto y volver con Pietro". Piensa Isabella.

Comienza con el hechizo, sin reflexionar sobre las consecuencias:

..."Poderes del cielo y de la tierra transpórtame adelante en el tiempo...

...los cambios no sucedidos que por errar en mi mundo del futuro no he conocido"...

Una luz blanca azulosa la envuelve y en la nada flota con su magia de oscuridad es envuelta en una nube negra, no sabe cuánto tiempo ha transcurrido, vuelve a caer en la misma cueva.

Cuando sale al exterior de la cueva, no puede creer lo que sus ojos ven: ¡todo es destrucción! No hay Bosque, no hay árboles, solamente el tronco casi muerto de Roblo, rodeado de restos de árboles quemados humeantes, grama seca y un río que más bien parece un charco, el Instituto está destruido totalmente, derrumbado. Todo es naturaleza muerta alrededor, era difícil hasta respirar en ese sitio, el ambiente parece tóxico.

Se acerca entre los escombros al viejo roble parlante:

-¡Roblo!- lo toca, él abre los ojos y la mira con tristeza, para articular unas pocas palabras, moribundo:

- ¿Eres la viajera en el Tiempo? ¿Isabella la Maga Excepcional?-

-¡Sí, soy yo: Isabella!- responde agitada:

-Pero dime Roblo: ¿Qué demonios ha pasado aquí?-

Roblo, sí soy Isabella la Maga Excepcional, me conoces bien; pero, dime: ¿Qué pasó aquí? ¿Por qué todo está destruído ¿Donde están todos?- pregunto sorprendida de este futuro desolado.

- Tú Isabella te cegaste y traicionaste al Imperio Ártico- responde Roblo con tristeza.

-¡No, no, yo no pude haber hecho eso!, ¡no es verdad!, ¡Roblo no, no pude ser la causante de esta masacre y la destrucción del mundo!- No puedo evitar unas lágrimas de impotencia.

- Dime Roblo ¿Cómo puedo cambiar esto? ¿Puedo hacerlo? ¿Dónde está Pietro? ¿El Gran Mago?- Pregunto desolada.

- Todos murieron. Cuando desapareciste, Pietro enloqueció. Luego, influenciado por Ken, declaró la Guerra al Imperio Surópolis creyendo que ellos te habían raptado y asesinado, Ken le hizo creer eso-

- El Imperio Ártico perdió la Guerra, Pietro firmó el acuerdo de rendición casándose con una princesa del Imperio Ártico, Natalia. Ella luego lo envenenó y se quedó con su hijo gobernando al lado de Ken, él era el padre del niño. Le entregaron todas las riquezas al Emperador Armando Guerra-

- Después de la destrucción hecha por los Dragones de Surópolis en la Guerra perdida. Ese Emperador no tardó en destruir las tierras y el Bosque, porque nadie le obedecía, todo fue un caos, la gente empezó a emigrar a otros lugares. Las minas de diamantes pasaron a ser propiedad del Imperio Surópolis y el oro de los ríos del Bosque lo explotaron con mercurio contaminando las aguas; poco a poco mataron lo poco que quedaba del bosque a través de la contaminación del río, los animales murieron al no tener alimentos ni agua limpia que beber -

- Yo sabía que en algún momento tú regresarías, te esperaba para advertirte, debes regresar al pasado y evitar esta destrucción, pero sobre todo, evita caer en las garras y la lengua de Ken-

Reflexiono, acepto que es mi deber regresar a la cueva y cambiar esta abominación hecha a la naturaleza y a la humanidad. Relato el hechizo:

...Carrusel del tiempo,...

...llévame de vuelta...

...a esa época sin demora,...

...donde inició lo sucedido...

...reparando los daños que por mala leche,...

...por mí fueron infligidos....

Nuevamente, me envuelve una luz azulosa cegadora, cierro los ojos, comienzo a flotar en la nada, envuelta en una nube negra. De pronto, abro los ojos.

No veo ningún cambio, alrededor todo es igual, el Bosque sigue siendo hermoso; me da la impresión de que regresé al tiempo de dónde partí. Sigo en el Bosque de los árboles parlantes. Tengo el libro, lo escondo con magia dentro de una hendidura de la montaña. No puedo devolvérselo al profesor Ben Eno, otro día tengo que regresar e intentar ir hacia el futuro a mi tiempo de grandes tecnologías.

Escucho pasos, me escondo detrás de unos arbustos frondosos. Entra Gina y Ken. No hablan raro como antes:

-Gina, no te moleste, ya sabes que no amo a esa tonta de Isabella, ella es solo un instrumento para que obtengamos el trono para los dos; ella no me interesa en lo absoluto, es tan fría y repugnante, parece una muerta en vida, volvamos a ser como antes, yo te amo-

- Me molesta que la hayas besado, me juras que me amas, sin embargo, te acuestas con Isabella y también con Lucinda, eres un canalla-

- Debes tener paciencia amor, solamente son fichas en el juego del poder, a ninguna la amo como te amo a ti, Isabella no sirve para nada ni magia tiene y Lucinda es una plebeya con antecedente de prostitución, será útil para enloquecer a Pietro en la cama y luego asesinarlo; así obtendremos el trono, se trata de un juego de traición para obtener el poder, debemos hacer que Isabella asesine al Emperador Ruperto-

- Cuando me enteré que el Emperador Ruperto no era mi padre, juré quitarle el trono a Pietro, sin importar a quién me lleve por delante, mi madre será la primera en morir, ella mató a la Emperatriz Esther y le da a Lucinda el veneno para envenenar al Emperador Imbécil El Confiado, haremos que la descubran, ya no es útil- Todo va muy bien, amor.

- Ten un poco de paciencia amor, todo va a salir como lo hemos planificado- responde Ken besándola.

Ahora puedo darme cuenta de que estoy reviviendo los acontecimientos en pleno desarrollo, del libro que había leído en mi mundo moderno de donde provengo: "Traición y Poder".

Ken continúa besándola y buscando tener intimidad en esa grama, la acuesta desvistiéndola. La verdad no tuve que esperar mucho, este hombre era el ratón Speedy Gonzales en el sexo, de comienzos rápidos y finales precoces, literalmente muy adaptado a su realidad, ya que el animal interior de Ken era una rata asquerosa. Lo único que usaba hábilmente era su lengua viperina. Cuando terminan, ellos se alejan abrazados.

Yo me quedo pensando horrorizada. Estoy en el mundo paralelo donde Isabella no tiene magia y es una estúpida.

¡Por los santos sepulcros! ¡Ahora sí quiero que la tierra me trague y me escupa en el quinto infierno!, donde sería mejor estar que vivir en este mundo, con mi alter ego sin una pizca de magia y comportándose como una verdadera tonta, manipulable por el idiota de Ken Zanganón. ¿Qué se supone que debo hacer para cambiar todo este desastre?

-¡Mierda dónde vine a parar!- me repito una y otra vez.

Busco el libro para regresar, no me voy a involucrar en este ridículo drama. Pero ninguno de los hechizos para volver fueron efectivos. Leo con detenimiento las advertencias:

"Para regresar este mundo debes cambiar, y el carrusel del tiempo sus vueltas podrá continuar". Me doy cuenta de que este maldito libro está hechizado, se reescribe según el universo donde caiga.

-¡Recontra mierda! ¡Ahora si estoy jodida! ¿Por qué demonios no me quedé donde estaba? Por tonta quise regresar a mi futuro tecnológico, y vine a caer en el peor de los universos paralelos, donde soy una pusilánime, donde mis acciones destruyeron al Planeta-

-Debo cambiar estos retorcidos sucesos-

-¿Y si busco al Gran Mago? ¡Sí, eso es lo mejor!. Roblo debe decirme dónde lo puedo encontrar-

Sigo en mi forma de Ligre, llego donde está Roblo.

-Hola Roblo, soy la viajera en el tiempo: Isabella, ¿Por favor me puedes indicar dónde puedo encontrar al Gran Mago?-

-Hola viajera Isabella, volviste a caer en la trampa de Ben Eno ¿Verdad?-

-¿Qué quieres decir?- pregunto sorprendida.

-Te dieron el libro de los viajes en el tiempo, para que desaparecieras para siempre y de esta manera el Imperio Surópolis pudiera atacar al Imperio Ártico y ganara la guerra sin mayor oposición-

-Todo fue fríamente calculado y Ben Eno llevó a cabo eficientemente la tarea dada, ofreciéndote ese libro. No te resististe y usaste el texto prohibido. Es más fuerte que tú, siempre deseas regresar a tu tiempo. ¿No te das cuenta que ya no podrás volver?- explica Roblo molesto.

-Sin embargo, en este tiempo eres la que muere decapitada, dentro de poco sucederá, aquí eres Generala del Ejército Imperial, sin poderes mágicos y con poco cerebro, de todos los multiversos caíste en tu peor versión, esta es la que lo destruirá todo-

-Roblo dime ¿dónde está el Gran Mago? Necesito que me ayude con un plan de acción- él contesta:

-¡Es cierto! ¡No lo recuerdas!, tú misma lo asesinaste mientras él dormía, o mejor dicho tu versión malvada. En la guerra murió asesinado a traición por tu parte-

-¿Mi otro yo lo asesinó? ¿La guerra ya sucedió? ¡No!, ¿Por qué fui tan idiota y malvada?- pregunto sin creer mi grado de estupidez en este universo. Soy realmente una villana en este Mundillo de intrigas por el poder.

-Sí, la guerra de los 2 años ya sucedió, y tu versión sin cerebro es una heroína, o por lo menos eso es lo que todos piensan. Pero, pronto habrá una conspiración y otra guerra, dirigida por tu otra versión y tu ahora amante Ken; debes evitarlo a como de lugar, así tengas que venderle el alma al Diablo- aconseja Roblo.

- Pero, primero debes evitar que los dragones puedan aliarse con los invasores de Surópolis, es tu primera misión antes de hacer cualquier movimiento a tu favor- Roblo se vuelve árbol, no desea seguir hablando.

Me instalo en la cueva nuevamente; se hace de noche, me voy hacia el río necesito un baño para refrescarme, relajarme y aclarar mis ideas, nado desnuda, trato de pensar en lo que debo hacer. Luego salgo y me transformo de inmediato en Ligre, sin embargo, alguien me observaba desde lo lejos agazapado, era un león blanco con muchas ganas de comerme viva, en el más depravado de los sentidos de sus instintos animal

Pietro transmutado en León, está corriendo por el Bosque, donde siempre va a cazar sus presas, su instinto animal es muy fuerte.

De pronto se queda escondido entre los arbustos, observa a lo lejos a otro animal salvaje que nunca antes había visto, es una hermosa hembra Ligre albina, siente curiosidad y la observa de lejos para no espantarla.

No se esperaba que se transformara en humana ¡y vaya qué chica humana! Es una rubia de largos cabellos ondulados, suaves, que caen a la mitad de su espalda, una figura espectacular de grandes y firmes melones y un rabo de infarto, redondeado, acorazonado, con una pequeña cintura, es la primera vez que ve una mujer tan hermosa y apetecible. Su piel blanca se ve brillante en el agua, las gotas ruedan por sus voluptuosas formas, siente envidia de ese río que puede tocarla por todas partes...

Pero no puede divisar bien su rostro, ella está nadando está de espaldas. No puede evitar sentir una dureza, se transforma en Pietro y le da rienda suelta a sus manos con sus oscuras fantasías. Respira agitado y explota, viendo a esa monumental mujer. Es la primera vez que despiertan sus instintos tan solo con ver a una mujer.

Isabella no sabe qué la están espiando, y que es motivo de las fantasías de un joven y saludable hombre; sale chorriando agua desde sus largos cabellos, los exprime con sus manos, luego, con magia se transmuta a ligre con rapidez y sacude su pelaje, se dispone a marcharse, pero un gran león blanco se acerca a ella, camina a grandes zancadas. Lo reconoce es Pietro. Está feliz de verlo vivo. Quiere acercarse y decirle que lo necesita, pero...él no la reconoce.

-¿Quién eres?- pregunta con su forma de león Pietro. Ella no puede confesarle la verdad...

-¡No tengo por qué responderte! ¡Aléjate de mi- transformada en ligre piensa: "¿Cómo le digo todo lo que hay de conspiración en este Imperio? ¿Me va a creer siendo una recién llegada, una desconocida? Él conoce a la Isabella de ésta época y no soy precisamente yo. Pero, tal vez pueda ganarme su confianza..."

-¿Eres estudiante del Instituto? ¿Por qué no te había visto antes? ¿Quieres cazar conmigo?- pregunta Pietro el león.

De pronto me doy cuenta de que tengo mucha hambre, no he comido nada, salí del Instituto sin cenar para iniciar este viaje en el tiempo.

-Me llamo Isa, vengo de otro mundo y sí, estudio aquí- le contesto, pero él no capta las indirectas muy directas.

-Isa, eres muy hermosa, perdona pero te vi en tu forma humana desde lejos- responde más turbado el León Pietro.

- ¿Me viste desnuda? ¡Eres un pervertido!- finje estar molesta, en el fondo se está divirtiendo con su reacción.

- ¡No, no, no te vi bien!, lo único que pude ver. Bueno, lo que vi... Es que eres hermosa, no pude ver detalles- dice con lujuria, mintiendo.

Si mal no recuerdo todavía no se ha acostado con Lucinda (o eso es lo que ella cree). Así, que puedo modificar eso, debo quitárselo a la bicha de la Putinsky una vez más.

-¡Está bien! ¡Vamos a cazar! ¡Llévame en busca de una presa! Pero, te advierto que nunca he cazado ni comido animales sin cocción, no sé si me va a gustar- lo interrumpo, para evitar la vergüenza.

-¡No te preocupes yo puedo enseñarte! Y te aseguro que te gustará- contesta feliz el León Pietro.

Él corre con rapidez, yo lo sigo, luego nos ocultamos agazapados, pegados nuestros cuerpos detrás de unos arbustos, siento su calor, esperando a unas gacelas, sin que pueda quejarme, Pietro león atrapa a una desvalida gacela por el cuello, dejándola muerta en el acto, la trae y me la ofrece, yo comienzo a comer esa carne cruda, pero en mi forma animal, no era desagradable, hasta me gustó, comimos juntos hasta quedar satisfechos, luego volví al río a lavarme la cantidad de sangre que tenía en el hocico, Pietro se acerca también en el mismo plan.

-¿No me has dicho tu nombre?- pregunto para ver si es sincero conmigo, pero no es nada sincero.

-Me llamo Alberto- miente sin ningún pudor, sin pestañear.

-¿Alberto?- pregunto extrañada.

-¡Sí, así es Alberto! Soy el Duque Camesta del Imperio Ártico ¿y tú Isa? ¿quién eres tú?-

-Bien, Duque Alberto Camesta, también soy una duquesa viajera de otro Imperio - termino mintiendole, siguiendo el juego que él acaba de iniciar, pero en parte digo la verdad, aunque es evidente que no capta la verdad, no lo hace aunque me tenga literalmente frente a sus narices.

- No tienes nada de acento extranjero. Me gustaria que nos encontremos aquí bajo nuestra transmutación animal para cazar juntos ¿Quieres?- dice rápidamente Pietro.

Por alguna razón no quiere presentarse como Pietro el Príncipe Heredero. Pero, me conviene que sea así. Cree que soy del  Imperio vecino, está evitando caer en una trampa, o eso supongo.

-¡Trato hecho! No nos transformaremos en humanos y solamente nos encontraremos aquí en el Bosque a esta hora, con las formas de nuestros animales interiores para cazar juntos. Y para que sepas vivo en este Imperio desde niña- le digo aceptando por conveniencia su trato.

- Me tengo que ir Isa, nos vemos mañana ¿Verdad?- se acerca como león y me lame el cuello, eso fue excitante.

-Sí, claro, nos vemos mañana Alberto- también lamo su oreja. El sale corriendo en el acto, evidentemente también se excitó.

Lo mejor será hacerme de unas píldoras de transfiguración, de suerte que estoy en el Bosque donde están todos los ingredientes apropiados, según recuerdo en el jardín del Herbolario, solamente necesito a la víctima que copiaré... comencé a realizar la pildora de transfiguración.

Al día siguiente, para mi suerte, una chica muy bonita, alta, delgada, de cabellos castaños y ojos azules, se acerca con otro chico; escucho atentamente escondida, la conversación:

- Débora ya te dije que no te voy a dejar sola, nos casaremos, juntos tendremos a nuestro hijo, déjale la carta que escribiste a tu padre el Duque Miollo, para que no se preocupe, déjala dentro de un libro- dice el chico mientras la besa.

- Me asusta dejar el Instituto en el último año, pero pronto se notará mi embarazo ya tengo 4 meses. Prefiero irme contigo a Surópolis- deja la carta con su mochila.

- ¿Estás segura? Dejarás el Ducado Miollo para convertirte en la simple Condesa Menta ¿No te arrepentirás?- pregunta Aitor.

- No, no me arrepentiré, yo te amo mi Conde Aitor Menta, ya vámonos, no quiero que nos alcancen, quiero vivir contigo y con nuestro bebé y ser libre de una vez de esa familia de lobos- deja su mochila con la carta explicativa y sus libros. Desaparecen en un portal de transporte.

Cuando desaparecen, sin pensarlo dos veces, acudo rauda y veloz como quien busca unos caramelos, me acerco tomo la mochila, leo la carta, (si ya sé, soy un poco chismosa, pero en mi defensa, me interesa conocer a quién voy a copiar), ella explica claramente, que se irá para siempre al Imperio Surópolis y que dejará el Instituto, le va mal, es la peor estudiante, no le gusta estar allí. Aceptó estudiar por sus padres, tiene 18 años y está en el último año, pide que no la busquen. En su mochila están sus libros y su cepillo del cabello con un espejito de mano.

Tomo cabellos de ese cepillo y coloco uno en la mezcla de la poción para hacer las pildoras transfiguradoras de cuerpos. Me transfiguro en Débora Miollo Duquesa del Imperio Ártico, hija única del Duque Elvis Miollo y de la Duquesa Casimira Miollo. Es un poco más pequeña que yo, pero tiene buen porte y lindas facciones, su figura también es linda, aunque no tan voluptuosa como la mía, lo bueno es que sus ojos son azules pero ahora tienen el tono intenso hacia lo verdoso de los mío, pero supongo que nadie lo notará. Recuerdo haberla visto en la Fiesta de Té de Gina, donde yo echaba las cucarachas, es amiga de Gina o eso parecía cuando se burlaba de mí al comienzo de la fiesta...

-Vaya, ahora soy Débora Miollo, voy a tener que fingir amnesia, no sé dónde está su habitación. Me quedaré aquí. En la mañana apareceré, de seguro me buscarán, su pulcera es roja, tiene magia de fuego ¿su animal interior es un águila? ¡Estoy de suerte!-