¿Qué hago aquí?

Vivian

Me miró en el espejo y suspiró, el vestido que Jeimy me hizo comprar la semana pasada debo decir que me queda bien, aunque no es muy mi estilo, prefiero usar algo más discreto, pero mi amiga insistió en que lo comprará para hoy, y como es su fiesta de cumpleaños, no puedo evitar negarme a usarlo, en fin. doy media vuelta y veo mi trasero, tengo que tener cuidado, si me agachó mucho se me verá todo, aunque llevo shorts por debajo, así que supongo no será un problema, aún así no me siento tan cómoda llevando este pedazo de tela.

- Cariño el Taxi ya está aquí. - anuncia mi madre entrando en la habitación, como siempre sin tocar. - Wou, te vez muy.... distinta. - dice sorprendida de verme tan atrevida.

Me miró en el espejo por enésima vez y aliso una arruga inexistente del vestido negro, ajustado al cuerpo, con tirantes de cadenas plateadas, y transparencias a cada lado por mis costillas, al cual lo decidí combinar con unos tacones altos también negros, un bolso pequeño negro con solapa también de cadenas igual plateada, no me puse collar, solo unos pendientes, anillos y brazaletes de plata y maquillaje acorde.

- Jeimy me obligó a comparar este vestido y a usarlo hoy. - le explico a mamá mientras guardo algo de dinero en el bolso, mi celular y tomo el regalo de Jeimy.

- Ya decía yo, ese vestido no es para nada tu estilo. - comenta y la miro enojada. - Ay hija no me mires así, no estoy diciendo que te quede mal.

- Olvídalo mamá, ya me voy. - digo pasándole por el lado.

- Bueno, que te valla bien cuídate.

- Sí, ya.

........

Media hora después por fin llegó a la casa de los Jhonson, debo decir que el lugar es bastante grande, digno de una familia adinerada, hay varios autos afuera todos de lujos, suspiro algo nerviosa y le pago al del taxi para luego bajarme y caminar hacia el portón donde están unos guardias.

- Buenas noches. - saludo, ellos me responden con un jesto y se hacen aun lado mientras la puerta se abre automáticamente, ya me conocen, así que por eso no me piden nombre o identificación. Me adentro en el lugar y camino por la acera hasta que me detengo en la puerta, tocó el timbre y a los pacos minutos la puerta es abierta por el ama de llaves quien me recibe con un serio, buenas noches, le devuelvo el saludo y me adentro a la casa, voy directo al salón donde se que estan los invitados.

Tomo aire y me lleno de valor antes de cruzar el umbral de la puerta, preparándome para ver a todas esas personas y sobre todo él. Doy un paso y luego otro, cómo me lo imaginaba, el lugar está bastante concurrido, busco con la mirada a mi amiga, cumpleañera y la diviso rápidamente, ella también me ve y sonríe, le dice algo a sus invitados y camina hacia mí.

- Sabía que ese vestido te iba a quedar de muerte. - comenta.

- Sí, cómo digas. - digo colocando los ojos en blanco. - Ten. - digo ofreciéndole mi regalo. - ¡Feliz cumpleaños! - ella sonríe, acepta mi presente y me da un abrazo y beso en la mejilla.

- Ven, mis padres, y la abuela Caroll están por allá. - me toma de la mano y me jala hacia su familia, pasamos por el lado de las personas pidiendo permiso hasta llegar donde los Jhonson.

- Buans noches señora Jeniffer, señor Tom y señora Caroll. - saludo a los padres de mi amiga y abuela paterna.

- Hola, cariño, ¿Cómo estás? - indaga la señora Caroll. - Te vez muy distinta hoy. - dice y hace que me sonroje.

-Estoy bien gracias por preguntar, ¿ Y usted? - respondo y miro a Jeimy.

- Yo hice que lo comprará, ¿ Acaso no se ve divina? - cuestiona, la abuela la mira de manera reprobatoria y ella sonríe nerviosa.

-Yo estoy bien cariño, gracias por preguntar y te vez bien linda, pero no dejes que la loca de mi nieta te diga que ponerte. - dice, sonrió amable y asiento.

- Cariño no deberías obligar a tu amiga a vestir lo que a ti te gusta. - hablo por fin la señora Jeniffer.

- No la obligue mamá, solo quería que probará algo distinto. - se escusa Jeimy.

- Además es su cumpleaños y quise complacerla. - intervengo para que no le dijeran más nada, su abuela y madre sonrieron y el tema quedó sanjado ahí.

- ¿ Cómo van tus estudios Vivian? - cuestina ahora el padre de Jeimy.

- Bien, ya estoy en último semestre, la semana que vine tengo una entrevista en Industrias Salvatierra. - respondo sonriendo, aquello es algo que me emociona muchísimo, Industrias Salvatierra es una de las empresas extranjeras más exitosas del país, el que me hayan aceptado para ser las prácticas cómo asistente del subgerente es maravilloso.

- ¿De qué tanto hablan? - pregunta alguien detrás de mi, al escuchar esa voz siento mi corazón dar un vuelco.

- De las próximas prácticas de Vivían en industria Salvatierra. - responde Jeimy por mi, sabiendo que por los próximos segundos mi capacidad de hablar se ha perdido.

- ¿Así? ¡felicitaciones Vivían! - dice Tomás con su maginifa sonrisa. - ¿Cuando empiezas? - indaga.

- Y.. todavía no es seguro, tengo una entrevista El lunes de la próxima semana - logro decir, el sigue sonriendo y siento mis piernas temblar.

Tomas Jhonson, mi crush y hermano de mi mejor amiga, he estado loca de amor por el desde que Jeimy me lo presento en el primer años de universidad, las dos estudiamos lo mismos, administración de empresas y esa vez vine a casa de los Jhonson a hacer un trabajo en grupo con el que Tomas nos iba a ayudar, fue amor a primera vista, su melena rubia ondulada y un poco rebelde, sus ojos grises y facciones de dios del Olimpo me conquistaron desde el primer momento, fue amor a primera vista, lastimosamente para mí, ese amor nunca fue o será correspondido, el corazón de Tomás tiene dueña, es de su novia Kendall Donovan, una despampanante y engreída rubia de ojos verde que cree que el mundo es de ella y los demás vivimos arrendados, bueno eso es lo que Jeimy y yo pensamos de ella, porque para Tomas es la mejor mujer del mundo. El amor es ciego dicen por ahí.

- Deseo que te valla muy bien. - comenta. - Por cierto hoy te ves diferente. - dice y me mira de arriba a bajo. - Te ves bien. - comentq y solo eso basta para sonrojarme.

- G.. Gracias. - logro responder.

- ¡Por supuesto que le va a ir bien! Vivian es una chica muy inteligente, trabajadora, capaz y encantadora, estoy segura que sus jefes quedarán maravillados con su capacidades. - aseguro mi amiga y no pude evitar sentir vergüenza, sé porque hacia éso. Jeimy odia a Kendall, ellas iban a la misma preparatoria y según me contó en ese entonces ella tenía un poco de sobrepeso, debido a esto sufrió de bullying y Kendall era quien fomentaba esos actos, cuando Kendall y Tomás se conocieron y comenzaron a salir, Jeimy le contó a Tomás todo eso, pero la chica le aseguro que había cambiado, que estaba arrepentida de lo que había hecho e incluso le pidió perdon a Jeimy pero ambas sabemos que eso solo fue una actuación y que Kendall en el fondo sigue siendo la misma mala persona, pero Tomas no ve esto, es que no hay peor ciego que el que no quiere ver, en fin, Jeimy cree que algún día él se dará cuenta de esto y que se fijará en mi, yo, la verdad ya estoy resignada a qué aquello nunca pase, después de todo ya han sido cinco años enamorada sola, dudo mucho que algo como eso pase.

- Ten cuidado hermana, la alagas mucho , no valla a ser y sea que estés enamorada de tu amiga. - dice este, Jeimy abre los ojos y luego le da un golpe en el hombro.

- ¡Idiota! - Exclama en voz baja.

- Chicos, por favor. - regaña el señor Tom. - Tomas, no digas tal barbaridad, eso puede prestarse para malos entendidos.

- Solo fue una broma, no exageres papá. - se queja el sonriendo y me mira, yo le devuelvo la sonrisa sintiendo mis mejillas arder.

- ¡Bueno, no pienso estar toda la noche aquí hablando con ustedes! Vamos Vivían, ya que no me dejaron celebrar mi cumpleaños en una discoteca, por lo menos que este dj ponga buena música. - Dice mientras me jala hacia donde estaba el Dj. Después de pidirle que pusiera una canción movida me volvió a jalar hacia la pista improvisada de baile.

...........

Un rato más tarde, ya entrada la media noche, me encuentro sentada en un puff mientras me sobó mis pies, los tacones me están matando, he bailado mucho hoy.

- ¿Ya te cansaste? - pregunta Jeimy a mi lado.

- Sí, hoy no hemos parado de bailar. - respondo.

- Es mi cumpleaños, tengo que disfrutarlo y hacer que tú lo disfrutes porque para el tuyo no hiciste nada. - respondió y asiento.

- Sabes que no soy mucho de fiesta. - comento, ella asiente y mira hacia el frente.

- Mira a ese tonto, aburrido porque la estúpida de Kendall no está. - musita mirando a su hermano.

- La estraña. - comento con un tono de tristeza.

- Es un tonto, estoy completamente segura que la muy z... se está revolcando con otro en estos momentos y el aquí como un idiota extrañandola. - asegura, frunzo el entrecejo.

- No puedes asegurar eso Jeimy, está bien que la tipa sea insoportable, y doble cara, pero no sabemos si es de esas. - comento.

- Yo estoy segura que sí es de esas.- ruedo lo ojos y solo sonrió, el desprecio que Jeimy siente por Kendall es enorme, Depronto se coloca de pie y sonríe. - Ya vengo, voy por unas bebidas. - comenta, asiento y vuelvo a ponerme mis tacones.

Minutos después ella vuelve con tres vasos de distintos colores, frunzo el entrecejo pero no digo nada.

- Ten. - dice ofreciéndome el vaso de color rojo. - Bebe todo. - exige y ruedo los ojos, pero hago lo que me pide, luego ella toma del vaso amarillo. - Cuídame esto aquí. - comenta mientras me da su vaso, luego va hacia donde Tomas y le da el vaso de color azul, el toma del contenido y entonces Jeimy sonríe, vuelve hacia mi y toma su vaso. - Hasta el fondo amiga. - dice, su actitud es extraña pero no le tomo importancia, y me tomo todo el contenido del vaso.

Varios minutos después comienzo a sentirme extraña, tengo mucho calor, y mi respiración es ajitada.

- ¿Te sientes bien Vivían? - indaga Jeimy.

- No, la verdad es que me estoy sintiendo extraña. - respondo.

- Debe de ser que ya estás ebria amiga, nunca has tenido mucha tolerancia. - comenta está.

- Sí, creo que es eso, hoy he tomado bastante. - concuerdo con ella.

- ¿Quieres que te lleva a la habitación de huéspedes para que puedas descansar un rato? - pregunta preocupada.

- Sí, creo que es lo mejor.

- Bien vamos.

Me levanto con ayuda de ella y pasamos por entre la multitud con algo de dificultad, salimos del salón, subimos las escaleras, y llegamos al segundo piso dónde caminamos yo con mucha dificultad hacia la habitación de huéspedes, al llegar Jeimy me abre la puerta y me ayuda a acostarme en la cama, me quita los zapatos y me deslizo hacia el centro de la cama.

- ¿ Quieres algo? - pregunta.

- Agua.

- Muy bien, voy por ella a la cocina, quédate hay acostada, no vallas a salir Vivían, en tu estado puede ser peligroso, ¿de acuerdo?

- Sí, no te preocupes.

Ella camina hacia la puerta y apaga la luz ¿ Por qué apago la luz? No le doy importancia a eso y escucho como cierra la puerta, me doy vuelta en la cama sintiéndome desesperada de verdad tengo mucho calor, jamás me había sentido así ¿Qué me está pasando? ¿ Será que si me doy un baño se me pasará? Yo creo que es lo mejor. Me levanto de la cama y comienzo a quitarme el vestido, justo cuando esté cae al suelo la puerta de la habitación se abre y veo una silueta de hombre en el umbral de la puerta, mi corazón da un vuelco y trato de cubrirme con las manos, pero recuerdo que la Luz está apagada y tal vez el no me ha visto, la puerta se cierra y el hombre camina hacia la cama, justo en mi dirección, quiero moverme pero mis pies no responden, el hombre da varios paso y entonces lo distingo gracias a la luz de la luna que se cuela por las cortinas.

¡ Es Tomás!

El Termina de acercarse a mi y antes de que pueda hacer o decir algo me toma por la cintura, me pega a su cuerpo y me besa, lo siguiente que siento es como ambos caemos en la cama y el comienza a acariciar todo mi cuerpo, por alguna razón aquel calor que sentía ya no es molesto, si no todo lo contrario, siento mi mente nublada y solo me dejó hacer y disfruto de aquel momento.

........

Abro mis ojos lentamente y parpadeo varias veces acostumbrandome a la luz del sol que se asoma por la ventana, siento un ligero dolor de cabeza y frunzo el entrecejo, me muevo un poco y Abro los los ojos asustada al sentir que alguien me abraza, miro hacia bajo y me percató de dos cosas, la primera un hombre me está abrazando y la segunda, estoy desnuda.

¡Oh Dios mío que hice!

Exclamó en mis adentros y salgo rápidamente en la cama, el hombre se remueve debido a mis movimientos se despierta, levanta la mirada y...

¡ Oh cielos es Tomás!

El me mira y frunce el entrecejo, luego se mira así mismo.

- ¡Mierda! - susurra.

- Sí, mierda, ¿ Qué hago aquí?

Vivian Smith 23 años

Tomas Jhonson 25 años.

Jeimy Jhonson 23 años

¿Qué me hiciste?

Vivían.

! Oh mierda que hago aquí!

¿Cómo llegue a este lugar? ¿Qué fue lo que pasó? Bueno no hay que ser un genio para imaginar lo que pasó en esta habitación, anoche tuve sexo con Tomás.

¡Oh cielos perdí mi virginidad con el hombre que he amado desde hace años y no recuerdo nada!

¿Cómo paso esto? ¿ Por qué no puedo recordar nada. ¿Acaso bebi tanto? de lo último que me acuerdo es que estaba bailando en la pista con Jeimy y ya me sentía cansada.

- ¿ Qué mierda significa esto? - cuestiona Tomas luciendo molesto.

- N.. no lo sé, yo no recuerdo nada, pero es evidente que tú y yo... que tú y yo..... - no puedo decir lo que quiero en voz alta, y siento mis mejillas arder.

- !Mierda! Yo tampoco recuerdo nada. - dice colocandose de pie, automáticamente giro mi rostro avergonzada, está totalmente desnudó, espera.. ¡Yo también! ¡ oh cielos que vergüenza! sin mirarlo jalo la sábana de la cama y me envuelvo en esta.

- Creo que bebimos demasiado. contento con la mirada baja por la vergüenza.

- Jamás me había pasado algo como eso, soy muy cuidadoso con el alcohol. - comenta con tono irritado, de pronto siento que me toma del brazo y me aprieta fuerte. - Mirarme. - me exige y hago lo que me pide, en sus ojos veo una ira que me causa escalofríos. - ¿ Qué me hiciste? - pregunta con los dientes apretados por la ira.

- N... No sé de qué me hablas. - respondo nerviosa por la actitud que ha tomado.

- No te hagas la estúpida, sé que estás enamorado de mí, no eres muy discreta con eso. - dice y abro mis ojos sorprendidas.

¿Él se había dado cuenta de mis sentimientos? ¿ Desde cuándo?

- Creí que eras razonable y que entendías que entre tú y yo jamás iba a pasar algo, ya que yo amo a Kendall, pero por lo que veo eres una arpía, ¿Qué me hiciste? ¿Me diste alguna droga? - pregunta y no puedo creer lo que estoy escuchando.

- ¿Cómo puedes acusarme de tal barbaridad? - digo con la voz entrecortada. - Jamás haría algo como eso. - Aseguro. - Yo no sé cómo paso esto, estoy igual de confundida que tú.

- No creas que vas a convencerme de tu inocencia colocando esa carita de yo no fui y llorando. - escupe con odio, mi corazón se encoge con cada palabra que sale de su boca. - Escúchame bien, no le dirás a nadie lo que pasó aquí, ¿Entiendes? Si lo haces te arrepentirás y me encargaré de......

- ¿Te encargaras de que Tomas?

Ambos miramos sorprendió a la mujer que nos interrumpió, la cual mira a Tomás con reproche.

- Abuela. - musita este.

- ¿Qué le haces a Vivían tomas? - cuestina esta vez Jeimy que también estaba con la abuela.

- ¡Mierda! - Exclama soltandome el brazo, tomando una sábana y cubriéndose con esta, luego se aleja de mi, Jeimy corre hacia mi y al ver mis ojos aguados me abraza.

- ¿Cómo puedes decirle tales barbaridades a vivían? ¿Acaso no eres hombre para hacerte responsable de tus actos?- pregunta Jeimy molesta.

- Tomas, ¿Qué paso aquí? ¿ Por qué le hablabas Vivían de esa manera? ¿Ese es la educación que te ha dado está famila? - pregunta la mujer mayor tranquila, pero es evidente que está molesta. - ¿No se supone que estas muy enamorado de esa novia tuya, ¿Qué haces en esta habitación con Vivian y así?

El me mira con enojo y yo bajo la mirada.

- No lo sé, no me acuerdo de lo que pasó, aunque es evidente. - responde irritado.

La señora Caroll me mira ahora a mi.

- Y.. Yo tampo recuerdo lo que pasó.

Ella asiente.

- Es evidente que ambos tomaron demaciado y cometieron un error. - Comenta.

- Sí, pero, ¿ Por qué estabas tratando a Vivían tan mal! - cuestiona ahora Jeimy, él la mira enojado.

-No recuerdo haber bebido demaciado. - responde. - Ella siempre ha estado detrás de mi, es obvio que me hizo algo para que esto pasara. -, dijo y yo siento que me hunde un puñal en el pecho. No puedo creer que la persona que amo piense eso de mi.

- ¡ Vivian jamás haría algo como eso! - exclama Jeimy molesta. - Ella es una buena mujer, no como la tonta esa que tienes de novia, además, ella tampoco recuerda nada, ¿ Crees qué una mujer quiere olvidar su primera vez?

!Oh Dios mío Jeimy por qué dijiste eso!

- Vivían, ¿Eras virgen? - cuestiona la abuela Caroll, yo no soy capaz de mirarla a los ojos y a Tomás tampoco, ellos no tenía porqué saber eso. - Vivían, respóndeme con sinceridad, por favor. - pide la señora con tono gentil.

- S... Sí. - respondo con voz tenue.

- ¡Maldición! - Exclama en voz baja tomas.

-Tomas, el honor de Vivían y el de esta famila está en juego. - habla la señora.- Deberas asumir la responsabilidad de esto.

¿A qué se refiere con eso?

- Tú y Vivían se tendrán que casar.

¿Qué?

- Abuela, eso es absurdo. - refuta tomas. - No estamos en el siglo pasado, yo tengo novia, y si he de casarme alguna vez es con ella.

- Eso no va a ser posible querido nieto, cómo te dije antes debes de hacerte responsable de tus actos, no esconderte como un cobarde y amedrentar a una joven que está igual de confundida que tú con respecto a lo que pasó aquí.- dice pasando su mirada de él a mí.

- No lo haré. - afirma Tomas molesto.

- Señora Caroll yo creo que eso no es necesario, es cierto que yo nunc habia... Bueno que era virgen, pero creo que lo que usted propone es algo muy serio y drástico. - comento. - Yo no lo veo necesario y....

- Vivían. - me interrumpe y la miro a los ojos. - Yo no estoy proponiendo esto, estoy dando una orden y mis nietos saben que lo que yo ordeno, se hace, si no habrá consecuencias graves, tu también ve aprendiendo eso, , ya que vas a formar parte de esta famila. - dice de manera tajante, se me había olvidado por un momwnto que está mujer es La matriarca de esta familia. - Tomas, te casas y punto, si no, vete olvidado de la presidencia de la empresa y de tu herencia. - termina para luego dar media vuelta. - Jeimy, organiza todo para dentro de dos semanas.

- Si abuela. - Responde está y miro a mi amiga sorprendida, la matriarca de los Jhonson abandona la habitación dejando todo en un profundo silencio, segundos después el próximo en salir es Tomás, quién no dice nada y azota la puerta.

- ¡Oh Dios miso Jeimy! ¿Dime qué la señora Caroll está bromeando? - pregunto aterrada.

- No, la abuela está hablando muy enserio.

- ¡Pero eso es absurdo! Él y yo no nos podemos casar, es.. es inaudito.

- ¿ Por qué?

- Porque sí, porqué el ama a Kendall, y... ahora creo que me detesta, me culpa de lo que pasó aquí, yo ni siquiera me acuerdo de como llegué a esta habitación. - susurro sentandome en la cama.

- Yo te traje, dijiste que te sentías mal, que habías tomado mucho. - dice esta.

- ¿Enserio? - cuestino.

- Sí. - vuelve a afirmar.

- Te quedaste dormida, y apague la luz, salí y seguí disfrutando de la fiesta, ví que Tomás se marchó cómo media hora después, pero creí que se había ido a su habitación, no que se te había metido a la habitación y ustedes dos....

Siento mis mejillas arder por la vergüenza y desvío la mirada.

- No me acuerdo de nada. - musito pensativa y cabizbaja.

- ¡Ay ya no le des tanta mente a eso amiga! Lo que pasó, paso, ni modo. - Exclama muy relajada, la miro inquisitiva y una idea se cruza por mi cabeza, sin embargo, no puedo creer que Jeimy haya hecho tal cosa, es cierto que ella odia a Kendall, que su deseo más grande es que ella y Tomás terminen, pero, no la creo capaz de hacernos algo tan vil a su hermano y su mejor amiga ¿Verdad?

- ¿Cómo quieres que no le de mente! Tu abuela quiere casarnos. - le recuerdo - Jeimy, habla con ella dile que yo no quiero esto,que no tengo ningún problema en dejar las cosas así.

- No, puedo hacer eso Vivían, la abuela Caroll es intransigente, las cosas siempre tienen que hacerse como ella quiere, cuando se le mete algo en la cabeza no hay poder humano que le haga cambiar de opinión. - dice y suspiro sintiendnome derrotada. - Además, no tienes porque sentirte tan agustiada, vele el lado bueno a todo esto. - comenta y la miro con el ceño fruncido. - Te vas a casar con Tomás, el hombre que amas, esto puede ser una oportunidad para ti. - dice emocionada.- Ustedes se casan, van a tener que vivir junto, ¿Que tal si esa convivencia hace que el se enamore de tí? - cuestiona y debo admitir que su teoría no me parece tan absurda.

- ¿Tu crees? - pregunto esperanzada.

- Sí. - responde tanajnte.

Guardo silencio y me quedo pensando ¿Será posible que tomas llegue a amarme si acepto casarme con él ?

Caroll Jhonson

Jamás te va a amar.

Vivian.

- Muy bien señorita Smith, hemos terminado la entrevista. - dice el señor Gómez colocandose de pie y extendiéndome su mano, le sonrió y hago lo mismo que él. - Muchas gracias por venir, nosotros la estaremos llamando en el trascurso de la semana para informarle si la aceptamos o no. - dice y asiento tomando su mano.

- Gracias a ustede por entrevistarme y espero poder trabajar con ustedes. - el hombre sonríe hacuendo que las arrugas de los ojos se asentuen más.

- A decir verdad está usted muy bien recomendada, yo la contrataria sin duda, pero el jefe es quien decide. - dice y asiento.

- Entiendo, muy bien, entonces hasta pronto al menos eso espero.- digo sonriendo nerviosa.

- Hasta pronto señorita Smith. - doy media vuelta y salgo de la oficina, respiro aliviada y comienzo a caminar rumbo al ascensor, me detengo frente a este y presiono el botón para llamarlo, en ese momento suena mi teléfono y lo busco en mi cartera, cómo tengo demasiadas cosas en esta no lo encuentro, escucho que las puertas del ascensor se abren y doy un paso para entrar mientras sigo buscando mi celular, de pronto me estampó contra alguien y levanto la mirada apenada.

- ¡Ay Dios lo sien..... - mis palabras se detienen al ver con quién he tropezado, es un hombre y debí decir que es muy guapo y por sus rasgos juraría que es extranjero. - Lo siento, no me di cuenta. - me disculpo.

Él me mira por varios segundos en silencio, no sé si analizandome o porqué está atento a la llamada que está atendiendo puesto que tiene el celular en su oreja.

- Deme un minuto. - dice y se escucha un asentó, ¿Español? Tapa la bocina del teléfono y me regala una amable sonrisa. - Descuide señorita. - comenta y se hace aún lado.

- Gracias y nuevamente lo siento. - digo metiéndome al ascensor, el sigue su camino y las puertas del ascensor comienzan a cerrarse, pero noto cuando gira su rostro hacia atrás para mirarme, le regaló una sonrisa amable y entonces las puertas terminan de cerrarse, justo en ese momento el teléfono vuelve a sonar y ya teniéndolo en mi mano veo que es Jeimy, suspiro y deslizo el dedo en la pantalla.

- ¿ Ya terminaste? - indaga rápidamente.

Si, voy saliendo de la empresa. - respondo.

- Bueno, apresúrate, ya estoy abajo. - dice y cuelga la llamada. - suspiro y guardo el teléfono nuevamente en el bolso. Al salir de la empresa noto el auto de Jeimy justo en frente, al verme suena el claxon, camino hacia ella y me meto al auto justo a su lado.

- Debemos darnos prisa, la modista tiene una cita en medio hora. - explica y asiento.

Hoy es la última prueba del vestido de novia, ya hace doce días del incidente, increíblemente Jeimy tiene casi todo listo, solo faltan los anillos y mi última prueba de vestuario, todo se ha mantenido en secreto, los Jhonson quieren evitar un escándalo, después de todo, la novia que todos le conocen a Tomás es Kendall, no yo. Después de varios minutos conduciendo Jeimy estaciona el auto justo enfrente de la boutique, salimos de este y nos adentramos al lugar donde a pocos metros de la entrada sentada en un sofá se encuentra la señora Caroll, ya me imaginaba que iba a estar aquí tal como la otra vez que vinimos, sonrío y recuerdo la conversación que tuvimos esa vez.

Flashback.

Bajé del taxi apresuradamente, iba llegando tarde para la cita con la modista, tenía que elegir el vestido que iba a usar para la boda. Entro rápidamente a La boutique y me sorprendo al ver no solo a mi amiga sino a su abuela.

- ¡ Por fin llegas! - exclama Jeimy levantándose del sofá.

- Lo siento se me hizo tarde, estaba ocupada con algunos asuntos de la universidad. - le explico.

- No te preocupes hija, Lo importante es que ya estás aquí. - dice la señora Caroll, le sonrió y ella igual. - Vivían te presento a Angélica Roger, es la mejor diseñadora de trajes de novia de la ciudad. - me presenta, la mujer es de mediana edad, muy delgada y esbelta, también alta, es de tez acanalada y cabello ondulado negro, viste de manera muy elegante.

- Es un gusto conocerla, Vivían Smith. - saludo y me presento.

- El gusto es mío querida, déjame decirte que tines una piel hermosa y también una figura fantásticas, espero que se mantenga así después de los bebés. - comenta y siento mis mejillas arder. - Dime, ¿ Cómo quieres tu vestido? - cuestina.

- B.. bueno, es una boda civil, asi que algo sencillo sería lo adecuado...

- ¿Cómo que algo sencillo? ¡No, es tu boda, debe de ser espectacular! - Exclama Jeimy la miro algo molesta con su idea y ella frunce el entrecejo.

- Jeimy, es su boda, no la tuya, ella elige que ponerse, cuando la novia seas tú puedes elegir el vestido más extravagante que quieras. - la regaña su abuela.

- Está bien. - dice a regañadientes.

— Muy bien, tengo unos acá exhibidos pero si no te gusta ninguno de estos también tengo estas revistas. — dice dándome cuatro revistas que estaban en la mesa. — Estás tienen varios diseños qué creó se pueden ajustar a lo que quieres. — Comenta y asiento.

— Veamos primero los que ya tienes listo. - propongo, ella somrio y asíntio.

Después de ver los vestidos listos y que ninguno me gustara,decido ver la revista, voy pasando páginas, sin que ninguno me convenza mientras pienso que tal vez el problema no son los vestidos, si no yo, o más bien este asunto del matrimonio.

Aunque amo a Tomás y esta puede ser una gran oportunidad para mí, no siento que esto sea una buena idea. ¿ Y si lo único que logró con esto es que el me odie? Pensar en eso me oprime el pecho, ¡Dios por qué tenía que pasar esto! Yo ya me había resignado, después de tantos años amándolo, había entendido que él no era para mí, pero ahora se presenta esta oportunidad y aunque estoy feliz y quiero aferrarme a ella, tengo miedo de lo que pueda pasar, de hecho aún me parece extraño que todo esté tan calmado, no he podido hablar con Tomás, ni siquiera sé si el sigue pensando que yo soy la culpable de lo que pasó, y lo más raro aún, Kendall no se ha manifestado en contra del asunto. ¡Todo es tan extraño y...

Soy sacada de mis pensamientos cuando siento que tocan mi hombro, miro al culpable y al ver a la señora Caroll le sonrió.

- Lo siento señora Caroll, estaba distraída, ¿Qué me decía?

Ella me sonríe dulcemente y toma mis manos. - Te noto preocupada, ¿Qué pasa? - cuestiona y decido ser sincera.

- Es que, aveces pienso que esto del matrimonio no es buena idea.

- Ya veo, estás asustada. - comenta.

- Más que eso, siento que no está bien.

- ¿ Por qué? ¿Acaso ya no más a mí nieto? - al escuchar su pregunta abro los ojos sorprendida. ¿Ella también lo sabe? Ella sonríe. - Sí, lo sé, me di cuenta de eso hace mucho, por la manera en que lo miras. - responde mi pregunta no hecha.

- Bueno, aunque yo lo amo, el ama a Kendall y eso es lo que me preocupa y me hace sentir que no está bien esto.

- Mi nieto es un hombre muy inteligente para algunas cosas. - dice, - Por ejemplo para los negocios, pero desfortunamdamente carece de sentido común cuando se trata de mujeres, su primera novia era una tipa toda extraña con perforaciones en la cara que le gustaba vestir de negro, después tuvo otra que le gustaba mostrar demaciado y era también demaciado coqueta, él no me lo dijo a mi porque yo se lo había advertido, pero la chica le puso los cuernos, tuvo otras dos, cada una peor que la otra, y ahora está con esta chica que aunque aparenta ser una buena mujer, yo sé lo que verdaderamente es, puede engañar a mi nieto, incluso al tonto de mi hijo y mi nuera, pero a mí no, sé que es una arpía enamorada de nuestro apellido y dinero, sé todo lo que le hizo a Jeimy y que sus disculpas no fueron nada más que vagas palabras. - la mujer habla con rencor y me mira. - No voy a permitir que mi nieto cometa el grave error de unir su vida a una mujer como esa. - Dice y ahora suaviza su semblante. - Encambio tu, si eres la mujer perfecta para él, sé que tú amor es sincero y que eres una buena mujer, decente, inteligente, noble y dulce, es por eso que quiero que seas tu la esposas de mi nieto, la madre de mis bisnietos, él ahora no te ama, pero yo estoy segura que lo hará, porque se dará de cuenta de lo maravillosa que eres. Así que cambia esa cara, recuerda, está eligiendo el vestido de tu boda.

Sus palabras me tranquilizaron un poco y al final, me ayudaron a decidirme por completo a sí hacer esto.

Fin flashback

Y ahora aquí estoy en la última prueba del vestido, porque, me caso en dos días.

- Buenas tardes, señora Caroll, señora Angélica, lamento llegar tarde, estaba en la entrevista de trabajo. - explico.

- No te preocupes hija, ya Jeimy no los había comentado. - - dice la señora Caroll.

- Bueno, ven por este lado el vestido ya está listo, pruebatelo y veremos si hay que retocarlo en algún lado o si ya quedó. - comenta guiándome hasta el vestidor.

Cuando entro a este y veo el atuendo colgado, sonrió, es hermoso y no puedo creer que valla a usarlo para casarme con Tomás. Me lo coloco y salgo del vestidor, mi amiga, la señora Caroll y la modista sonrien al verme.

- Te queda perfecto. - comenta Jeimy.

- Te ves muy hermosa hija. - dice la señora Caroll.

- ¡Magnífico, espectacular! - la modista exclama emocionada y se acerca. - Al parecer todo está perfecto.

- Sí, así parece. - comento y sonrió.

Seré la esposa de Tomás.

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Y el día de mi boda llegó, justo en este momento estoy en la habitación de huéspedes de La mansión Johnson, ya completamente lista esperando a que mi madre quién es quien me va a entregar en el altar venga por mí anunciándome que es la hora de empezar. Me miro en el espejo y sonrío un poco feliz y asustada al verme vestida completamente de novia.

Al final elegí un vestido ni tan sencillo ni tan llamativo, es de un color blanco cremoso, de escote en V de mangas cortas que se ajusta en la cintura y la falda es acampanada con distintas capas que lo hacen ver voluminoso decidí que fuera corto un poco más abajo de las rodillas, llevo unos tacones de color blanco, mi maquillaje es muy sencillo y natural pues no quise nada cargado, consiste en un poco de sombra color piel en los párpados, iluminador en la línea de agua, rímel, no apliqué delineador, y labios color rosa, el peinado sí me lo hizo una estilista, hizo una trenza a cada lado y en la parte baja de mi cabeza recogió el cabello y coloco unas pinzas en forma de pequeñas flores blancas y dejó varios mechones fuera para que acentuaran mi rostro.

- Me voy a casar. - musito aún sin poder creerlo, siento que esto es un sueño.

Mi teléfono recibe una llamada y lo tomo de la mesa, frunzo el entrecejo al ver un número desconocido pero pensando que tal vez es sobre mis prácticas decido contestarlo.

- Halo, buenos dias- saludo de manera amable.

- No creas que te has salido con la tuya estúpida. - se escucha la voz de una mujer y automáticamente sé quién es. - No pienses ni por un segundo que porque te vas a casar con Tomás me lo quitaste o que vas a lograr que él te ame — dice y se ríe. - ¡Ay niña ilusa! Él me ama con locura y ni tú, no las estúpidas de tu amiguita y la vieja engreída esa van a hacer que deje de hacerlo, si yo quisiera en este momento desarmaría tu estúpida boda, pero voy a dejar que te creas el cuento de hadas que te has estado montando en tu cabeza solo para que te des cuenta que no vales nada para Tomás. - sus palabras se clavan en mi pecho como una daga. - Espero que hayas disfrutado tenerlo entre tus piernas esa noche, porque va a ser la única y última vez que eso suceda, recuerda que aunque se case contigo, jamás vas a tener su amor, y que yo lo tendré cada vez que quiera en mis brazos y en mi cama. ¡ Felicitaciones por tu boda! - termina y cuelga la llamada.