¡¡BANG!!

Un último disparo fue dado al cráneo de un zombie, el último de su grupo de personas muertas.

Royer fumó su cigarro sentado sobre un bus de gran altura que se había estrellado hace muchos años en el lugar, hasta ya se había oxidado y la pintura ni se notaba y todas sus partes fueron saqueadas a más no poder.

Dio una mirada indiferente a los cadáveres putrefactos en el suelo apagando su cigarro y guardando lo poco que quedaba en un bolsillo.

«Que asquerosa mierda, estos malditos cadáveres no dejan de aparecer incluso en un bosque»

Hace años que había empezado el Apocalipsis zombie, tal vez hace más de 100 años, no estaba muy seguro, pero era un hecho que ya había zombies cuando él nació.

Desde muy pequeño había aprendido a sobrevivir y ahora era un hombre algo solitario de 27 años; 11 meses y 30 días.

En ese momento una voz robótica y femenina habló por detrás de Royer.

|Royer, mis cálculos dicen que si no nos vamos ahora no llegaremos a la ciudad refugio de Adoma y la noche será mala para ti que no has dormido en tres días por el viaje|

Royer cargó su arma con balas y la guardó en su cintura. Y mientras se colocaba una vez más la mochila que traía en la espalda respondió a su robot.

«Ya te oí, ¿Dónde hay menos mierdas putrefactas?»

|Al noreste|

«Ya veo. Por cierto, espero que la casa de flores esté abierta, hace mucho que no voy»

Royer saltó al suelo y a su lado apareció un robot que no tenía una forma llamativa o algo así, de hecho, solo era un robot esférico con un enorme ojo rojo ocupando toda una cara de su cuerpo metálico.

Pero el robot era algo peculiar y de hecho, Royer tuvo muchos problemas con la existencia de su acompañante. Era una época de Apocalipsis, todo era escaso, e intentaron robarle su robot en numerosas ocasiones.

Aunque al final los terminó matando a todos. Ahora era conocido como alguien temido debido a esos incidentes, se la pensaban hasta cinco veces para decidir si molestarlo o no.

Aunque su robot seguía siendo algo codiciado por muchos clanes y pandillas debido a que el robot tenía inteligencia artificial que había evolucionado por su cuenta a través de los años y además de que no se arrastraba por el suelo, podía incluso flotar, sin considerar que su recarga era solar.

Fue como si estuviera fabricada para soportar el Apocalipsis, con datos que muchos habían olvidado y muy pocos recordaban. Pero no era un robot que supiera todo o podría hacer cualquier cosa.

Mientras caminaban la robot llamada Pepper habló.

|Según mis datos, hoy es tu cumpleaños número 28|

«¿Así?, ¿Y que?»

|Sólo digo, hoy cumplo 28 años a tu lado, según mis cálculos de ese entonces la posibilidad de que murieras a los 6 años era alta|

Royer sólo atinó a reír.

«Jaja, me hubieran hecho un jodido favor, me pregunto si hubiera sido mejor morir, no sé como eran las cosas antes, sólo conocí este mundo ya hundido en un mar de muertos vivientes»

A pesar de haber pasado tantos años desde el brote inicial, los zombies no desaparecieron. Las grandes ciudades de las cuales ya se habían olvidado sus nombres seguían infestadas de muertos andantes, con uno que otro evolucionado asechando por ahí.

Una cura era sólo pedir un milagro, toda la evolución científica que habían conseguido los humanos había desaparecido, los maestros se redujeron y la mayoría sólo había aprendido a matar y sobrevivir, como si se hubieran vuelto primitivos ante el Apocalipsis.

Los que tenían conocimiento de mecánica, medicina, ingeniería, ganadería, agricultura y construcción de casas o armas eran respetados ahora.

Pero sobre ellos gobernaban los que se habían apropiado de alguna mina de hierro o cobre, oro y plata.

El dinero perdió su valor y ahora se intercambiaban recursos para sobrevivir, incluso la información era vital en muchas ocasiones.

Ésta era la vida del que lucha con todas sus fuerzas, el matar era el pan de cada día en este mundo Apocalíptico. No habían leyes como en el pasado, ante todo, la muerte era la mayor justicia ahí.

Pepper a su lado aún insistió.

|Se me dio la libertad de pensar y hacer muchas cosas de forma independiente, pero dos códigos fueron instalados permanentemente en mi programación|

«Ya se, ya se»

|Código número uno, no apartarme de tu lado y no planear tu asesinato|

«Ahgk, ya entendí, me lo repites cada año, no lo-»

|Código número dos, recordar el cumpleaños de Royer Alson Torres|

«¿Por qué tienes que decir mi nombre completo?, en este mundo ya no hay nombre completo, a la mierda la formalidad de tener un apellido»

|Tus padres me programaron de ese modo, no puedo modificar eso|

«Te dije que no me hablaras de ellos»

|Según mis registros te debo una disculpa por mencionar a tus padres aún cuando me lo prohibiste, pero estoy obligada a mencionarlo cuando impides que yo cumpla mis dos códigos obligatorios|

«Mierda, bien, voy a ver de dónde consigo un maldito pastel para soplar una estúpida vela»

|Si veo que soplas pidiendo un deseo no te molestaré más]

«Qué mierda de programación obligatoria, desearía cambiar esa programación»

|Es lamentable que no quieras aprender más de lo que ya sabes, yo podría enseñarte|

«Callate, me estoy poniendo de mal humor-¿Hum?» [¿Qué es eso?]

Royer se escondió detrás de un árbol, viendo a muchos zombies en un montón de basura, comían algo, lo sabía por la sangre fresca en sus bocas y manos.

[¿Desde cuándo hay un botadero aquí?, el año pasado no estaba aquí, ¿No hay muchos zombies cerca de Adoma?]

Tenía tantas preguntas, pero Pepper le dijo:

|Voy a analizar y recopilar datos, por favor, avanza en silencio, no desperdicie balas, es un recurso difícil de comprar|

«Bien, te esperaré por ahí»

Se separaron y Royer avanzó sigilosamente entre los árboles y los altos pastos mientras Pepper se acercó al basurero en dónde escaneó y ordenó la información de la sangre y los zombies.

Era su única habilidad además de crear distracciones con sonido. No era fuerte por eso necesitaba la protección de Royer.

En tanto organizaba todo, le pareció curioso el contenido de la sangre fresca, de hecho limpiar y analizar era su único entretenimiento.

Tantos años viva en el mundo Apocalíptico que había registrado a cada zombie y humano asesinado por Royer, teniendo un enorme registro de todos. Ella siempre anhelaba...

|Si pudiera conectarme a una gran computadora como la de mis creadores, podría ser más útil, tal vez..., podría construirme un nuevo cuerpo, aunque para eso necesitaría mucho material|

Dejó de pensarlo, en tanto caos hasta ella se había rendido con eso por la escasez de tecnología.

Terminado todo su análisis alcanzó a Royer que la esperaba.

«¿Terminaste?»

|Sí|

«Bien, vamonos. Directo a Adoma»

|Estoy de acuerdo, pronto será de noche y no será bueno, debe dormir-»

«Yo solo quiero ir a jugar un rato a la casa de las flores con alguna mujer hermosa, hace 9 meses que no lo hago»

Pepper pareció enojada, era una inteligencia artificial que había desarrollado autonomía a tal punto de generar en ella algunas emociones básicas.

Por ello terminó diciendo:

|No olvides tú deseo por favor|

Fastidiando más a Royer que respondió enojado:

«Como jodes»

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Yaguar-Misi: ¡BIENVENIDOS!, espero sinceramente que les agrade la trama.

Un hombre guapo con una figura marcada estaba en una tienda de intercambio en la ciudad refugio de Adoma, muy cerca de la entrada a la ciudad revisando una pequeña tienda de trueque.

En la vitrina del local sólo llamó su atención unas tuercas completamente pulidas.

«¿Cuánto están?, es difícil conseguir esos malditos clavos»

El hombre de color, dueño del establecimiento sonrió animado.

«si que es un recurso muy caro y más si se encuentran nuevos como este, los artesanos sólo saben hacer balas, en fin, ¿Qué cosa estaría dispuesto a intercambiar?»

El hombre puso placas de hierro de 6X6, material bastante valioso que el hombre de color empezó a analizar.

«vaya, si que es bueno. En todo caso, una placa por un par, ¿Está bien para usted?»

«me parece excelente, entonces deme todas»

«cómo guste»

El intercambio fue hecho y cuando el hombre guapo estuvo por irse, vio llegar a un hombre de cabello negro y ojos nogal, su apariencia no era muy distinta a la del resto, pero su presentimiento le decía que no era un hombre normal.

El hombre de color lo vio llegar y sonrió con los brazos abiertos.

«Royer, maldito cabrón, hace 9 meses que no te veo, pensé que ya te habían comido por tardar tanto»

Royer presionó su mano con el dueño, saludandose como hermanos.

«que cálida bienvenida Ronson, ¿Cómo has estado?»

«el negocio va bien, ¿Traes algo para mi?»

Royer sonrió y puso su mochila en el mostrador abriéndola un poco.

«ya vez, encontré cosas muy interesantes en una fábrica abandonada, aunque esos muertos vivientes eran todo un lío»

«si eres tú, yo pienso que los zombies deben tener cuidado contigo»

«maldito adulador, bien ¿Te presentó mi mercancía aquí o dentro?»

Ronson miró a todo lado con su pistola en mano y definitivamente dijo:

«parece que voy a cerrar temprano»

«no me sorprende»

En ese momento que la tienda era cerrada el hombre guapo se interpuso delante de Royer.

«disculpen mi interrupción, pero vi algo interesante dentro de la mochila, me gustaría entrar con ustedes para intercambiar»

Royer cruzó los brazos indiferente:

«¿Qué intercambiarias?, conozco el valor de lo que traigo así que no intente meter un regateo»

«¿Qué es lo que más le interesa?»

«por ahora, medicina y joyas»

«bien, entonces puedo ofrecer esto»

El hombre sacó un collar de diamantes, Royer trató de agarrarlo, pero el hombre no lo dejó.

«¿Tenemos un trato?»

Royer miró a Ronson.

«déjalo entrar, si intenta algo lo mataré»

«...si eres tú, puedo hacer una excepción, pero no entrara gratis, ¿Tienes algo?»

El hombre entregó 5 balas de su equipo.

«¿Con esto es suficiente para entrar?»

Ronson lo tomó.

«bien, entremos»

Mirando a todo lado una vez más cerró la puerta con seguridad y guío a una pequeña habitación en dónde Ronson vivía.

Royer estaba sorprendido como siempre de entrar a la pequeña habitación de su amigo.

«tan ordenado como siempre, es un lugar dónde cualquiera se quedaría a dormir»

«cierra la boca, es mi casa, no un hotel o burdel»

«carajo, ¿No quieres acompañarme al burdel?, ¿Llegó alguna nueva chica a la casa de las flores?, ¿Son bonitas?»

«yo no se de eso, no me preguntes, ve a averiguarlo por ti mismo, ya tengo suficiente con lidiar con Charlotte»

Con sólo escuchar ese nombre Royer puso una cara cansada, mientras sacaba las cosas de la mochila para ponerlas sobre una mesa contestó:

«de acuerdo, de acuerdo, no le digas a esa hija tuya que vine o no me dejará ir al burdel»

«cómo si me importara»

«¿Así tratas a tu mejor proveedor?, si es así, iré a buscar una tienda mejor»

«no digas estupideces, déjame ver que traes»

Cuando Royer sacó todo, el hombre guapo y Ronson quedaron maravillados con las cosas traídas. Ronson agarró cada una con cuidado:

«no puede ser, tres paquetes de sopa instantánea, esto vale millones, hace... 60 años que esto desapareció ¿Dónde lo encontraste?»

«en una oficina ensangrentada y con tres zombies dentro»

«¡Mierda!, esto es un abrigo muy grueso, incluso, definitivamente te protegeria del frío y mordeduras, la tela se siente nueva, vale bastante, ¿A quién se lo robaste?»

«lo encontré empaquetada en una caja, tenía una bolsita rara para aullentar a las polillas, así que la tela está bien»

«¡Woo!, ¡Copas de cristal!, los superiores siempre quieren estas cosas para mostrar su imagen, hasta ahora nadie sabe como moldear cristal correctamente, ¿Cómo hiciste para que llegarán en un estado casi nuevo?»

«tengo mis trucos, sólo tuve mucho cuidado» [Lo envolvi en el grueso abrigo]

«clavos, tornillos y estacas de primera como siempre»

«son fáciles de encontrar si vas lejos, con caminar las encuentro y se juntan»

«¡Mierda!, ¡Todos mataran por esto!, ¿Cómo conseguiste una linterna de recarga solar?, la cantidad que existe se puede contar con los dedos de las manos»

«jajaja, soy el puto amo en este negocio. Sólo tuve suerte»

«¿Tú no lo quieres?»

Royer negó.

«no necesito de eso, si te lo muestro es para intercambiar ¿No?, sabes que yo no presumo»

«bien, bien, yo tampoco me lo voy a quedar, dejando a un lado que no podré pagarlo, cuando se enteren que lo tengo empezarán a atacarme»

El hombre guapo dijo:

«yo lo quiero, tengo los medios para proteger esa linterna»

Ronson intervino.

«no hay problema, pero con el collar de diamantes no será suficiente y lo sabes»

«jajajaja, cierto»

En ese momento se presentó al fin, al ver las cosas interesantes que se atraían esos dos.

«mi nombre es Carson, todo esta interesante y en buen estado, siendo ese el caso no me sorprende que hayas cerrado tu tienda, estos objetos son codiciados en gran medida»

Royer se sentó en la cama de Ronson y preguntó:

«directo al grano, ¿Qué ofreces por la linterna?»

Carson asintió conforme, en este mundo Apocalíptico, sólo necesitaban hacer los tratos rápidamente.

«ofrezco el collar de diamantes y un par de perros entrenados para exploración zombie»

El lugar se quedó en silencio, los perros caza y sobretodo el entrenador era sumamente caros, no cualquiera podría tener perros y más, entregar dos a alguien.

Royer se dio cuenta que Carson no era una persona normal, pero no le gustaba la idea de tener un perro, mucho más cuidarlo. Así que negó mientras guardaba las cosas devuelta a la mochila.

«es una muy buena oferta, debo admitirlo, pero lo rechazó, tengo una propuesta mejor»

«¿Cuál sería esa?»

«le daré todo lo de la mesa, excepto los paquetes de sopa instantánea, a cambio, quiero el collar de diamantes y usted, con su influencia, protega a Ronson cuando traslade su negocio a la plaza de la ciudad»

Ronson se quedó un momento sin habla y antes de que pueda negarse a ese favor Carson le arrojó el collar de diamantes a Royer al mismo tiempo que tomaba la mochila.

«es un trato, ahora si me disculpan, tengo cosas que hacer»

Carson simplemente se fue y Ronson no podía arriesgarse a hacer un escándalo, en cambio desquitó su ira con Royer.

«¡¿Qué demonios se supone que haces?!»

«ayudarte como el buen amigo que soy, por cierto ¿Tienes cigarrillos?, los míos casi se le acaban»

«¡Hijo de-!»

Una linda niña de color caramelo con 12 años iba a trabajar como saqueadora. Terminaba de matar a un zombie con su bate de béisbol pinchando con varios clavos oxidados que ahora mismo estaban manchados con sangre.

El zombie que derribó tenía un medallón oxidado en su cuello y más mentas en uno de sus bolsillos. Los arrancó ambos, comiendo una menta y poniéndose el medallón para mirar lo que había dentro.

«vaya~, ¿No es la foto de un lindo bebé?»

Puso el bate en su hombro y piso con frialdad en cuerpo de la mujer zombie.

«seguro que hace mucho que ya murió, tal vez vayas a su lado ahora que ya no te mueves»

«¡Charlotte!»

Gritó un niño blanco de 14 años que traía un par de hachas pequeñas colgadas en su espalda y Charlotte le levantó la mano.

«ya voy»

«date prisa, se viene acercando un grupo de zombies, los dos solos no podremos con ellos, ya recolectamos lo que pudimos»

«si, ¿Qué encontraste Daniel?»

Daniel mostró semillas de algo.

«ni idea de que será, pero las semillas son buscadas por Luis, ese viejo agricultor de la ciudad»

«que suerte, yo sólo encontré un anillo en la mano de algún zombie»

«bueno, puedes pedir un pan grande con eso»

«mejor que nada- shh»

Charlotte tapó la boca de su amigo al ver no tan lejos una antorcha. Daniel se quedó en silencio viendo lo mismo que Charlotte.

Un grupo de 5 hombres con antorcha, caminando en este bosque directo a dónde estaba uno de los tantos basureros de la ciudad refugio de Adoma, dónde habían un enorme grupo de zombies.

Vieron instalar una metralleta y al poco rato disparar.

«¡¡Mueran!!»

Gritaba el hombre que empezó a disparar con la metralleta, en ese momento de locura, ambos niños vieron el tatuaje de ese tipo, cubriendo todo su brazo.

Los dos se asustaron pensando lo mismo:

[Secta de cripta de sangre]

Entre las leyes no escritas de los sobrevivientes había una para los niños y débiles, "no interactuar e interferir con las tres sectas de la muerte: secta cripta de sangre, secta amanecer de muerte y secta Atajamin"

Cada una de estas locas sectas tenían su propio ritual de iniciación y los tatuajes en su brazo los representaban. En este caso, cripta de sangre tenía el brazo rodeado de aves esqueléticas, cuervos y buitres en específico.

Daniel y Charlotte caminaron muy despacio en dirección opuesta para no ser encontrados, estaban solos y nadie los ayudaría.

Corrieron cuando la metralleta volvió a disparar, causando un gran sonido que atrajo más zombies a ese lado.

Para su suerte, lograron correr hasta llegar a la entrada de la ciudad Adoma, en dónde los muros eran altos, no esperabas menos de un antiguo monasterio o al menos eso decían los más viejos.

En la entrada les apuntaron con armas a la cabeza.

«¿Están infectados?»

Los dos negaron mientras un par de señoritas revisarán su cuerpo. Las dos dijeron:

«¡Están limpios!»

Los guardias se miraron y los dejaron pasar.

«adelante, no causen alboroto si no quieren morir»

Daniel dijo:

«¿Cómo si fuéramos desconocidos?, vivimos aquí»

El soldado le empujó la frente con su dedo.

«es por eso que sólo los revisamos, si fueran de otro lugar, tendrían que pagarnos con algo para entrar, hablan como si fuéramos flexibles, te recomiendo que no hables así o la próxima vez te cobraré»

«yo entiendo» [mierda]

En su discusión Charlotte habló al soldado que veían con regularidad al salir de Adoma.

«señor Darson, Daniel y yo vimos a hombres de cripta de sangre cerca al basurero al suroeste, tienen una metralleta»

El soldado Darson se disgustó, lo que más odiaba eran las sectas que se habían formado con el Apocalipsis.

«esos hijos de perra, entonces les debo una por informar, ya entren, ya será de noche y los zombies nocturnos aparecen, no quieren ser destrozados ¿Verdad?»

«si»

«si»

Contestaron ambos niños y entrando a la ciudad se fueron a intercambiar lo que habían conseguido a una tienda de comida.

Ahí el dueño, un gordo presumido, pero buena persona habló al ver lo que querían intercambiar.

«Te daré un trozo de carne, una lechuga y tres panes grandes por las semillas»

Daniel sonrió satisfecho.

«gracias señor Anderson»

Anderson miró a Charlotte.

«hoy no tuviste mucha suerte ¿No?»

«tch, es culpa de esos muertos vivientes, no tienen nada mejor, ya casi todos fueron rebuscados»

«bueno, seré amable con ambos, Charlotte te daré dos panes grandes y a Daniel un par de caramelos, ¿Están de acuerdo?»

Los dos asintieron y salieron con sus cosas intercambiadas en su mochila, se agarraron la mano para despedirse.

«nos vemos mañana Charlotte»

«si, te veo mañana en el mismo lugar»

Se separaron y la niña fue a casa, dónde para su sorpresa su padre ya había cerrado la tienda, para Charlotte esto solo significaba dos cosas: o su padre está en una misión o su tío Royer vino.

Cruzó los dedos diciendo.

«qué sea la misión, que sea la misión»

Pero al entrar a la única pequeña habitación que compartía con su padre vio a su tío mirando como hervia una calentadora llena de agua.

Royer se dio cuenta de la llegada de Charlotte y levantó la mano alegre.

«Hola Charlotte»

«mierda»

En ese momento escuchó la voz de su padre regañandola.

«¿Qué es esa basura saliendo de la boca de una señorita?»

«lo siento papá, hola... tío Royer»

Royer sonrió a su sobrina, por supuesto no tenían ninguna herencia sanguínea en particular, pero era simple formalidad ya que Royer y Ronson eran amigos desde muy pequeños. Habían sobrevivido los dos porque los padres de ambos eran amigos.

Pero ambos no recordaban mucho además de ese detalle, pues para ellos permaneció más las horribles horas que tuvieron que pasar luego de que simplemente, de la noche a la mañana se tuvieran que quedar solos.

Charlotte dejó su mochila y su arma ensangrentada dónde su padre le dijo que debía dejar, en todo el Apocalipsis, Ronson era una persona bastante ordenada.

La niña se lavó las manos y sacó sus dos panes enormes.

«hoy traje esto»

Ronson acarició la cabeza de su hija.

«bien hecho, pero no te metas en muchos problemas, sabes que no quiero perderte»

«si, me lo dices todos los días»

Royer abrió las bolsas de sopa instantánea diciendo:

«bien hecho Charlotte, creces más cada vez que vengo. Por cierto, ¿Sabias que hoy es el cumpleaños de tu tío?, traje algo super valioso que nunca has comido, una sopa instantánea, te aseguro que su sabor es de lo mejor que hay»

«Royer tiene razón, sabe bien»

Charlotte sabía que su tío era impresionante, sobre todo por los rumores que había de el cómo "el verdugo". También sabía que había leyendas de algo llamado "sopa instantánea", una comida que muchos rangos altos de cualquier ciudad refugio matarían por comer.

Ahora su tío venía a decir que comerian eso, algo que desapareció hace décadas. Aunque le hizo más caso a su olfato y ojos para creer en las palabras de su tío.

Casi babeando abrazó a si tío.

«¡Bienvenido tío!»

«hahaha, ¿Ahora si me das la bienvenida?, que niña más astuta»

«por supuesto que sí, yo quiero mucho a mi tío. ¿Alguna vez comieron esto?, pareciera como si supieran a que sabe»

Ronson y Royer se miraron sorprendidos por la repentina pregunta recordando algo fugas.

...Ellos dos, sentados en una mesa, uno frente al otro vestidos con una ropa blanca, habían varios niños de diferentes edades y razas a su alrededor. En su mesa un plato de sopa instantánea de la cuál emanaba el vapor de lo caliente que estaba los hizo agachar la mirada para ver sus reflejos....

...Aún cuando todo parecía acogedor para ese mundo nefasto, sólo había una cosa en la cabeza de esos dos niños, mejores amigos....

...[Quiero volver con mamá y papá]...