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DE UNA MENTIRA A UNA HERMOSA REALIDAD

Capítulo 1. Comienzo

Mi nombre es Elena Davalos tengo 24 años, mi familia es de clase media, mi madre y padre aún se ven tan enamorados, tengo mi hermana menor su nombre es Rosa, todo el tiempo se hace la burla de mí y hoy es uno de los días donde más intensa se pone.

Es las 06:00 a.m. no quiero levantarme hace mucho deje de soñar con esa persona que ni conozco,, pero su mirada está gravada en mi mente, son unos ojos hermosos de color café obscuro, unas pestañas largas y revueltas, pero lo que más me pone nerviosa es su miranda profunda, es como un abismo profundo que me hace dar miedo y me intriga al mismo tiempo.

- Elena ya despierta - es mi madre

- ya voy mamá - pero miento porque cada vez que sueño con esos ojos me quedo pensando a quien pertenecen y porque los sueño si nunca los vi antes .

- jajajajaja TE JALARE LAS FRAZADAS!!!- es mi hermanita Rosa que como siempre entra a mi cuarto y sin tocar, es alegre, es sociable, le gusta salir a divertirse, tiene amigas a montones y su gran don es molestarme porque soy tan distinta a ella y como ella me dice, distinta a todas, para ella soy la rara.

- basta Rosa que molestosa eres, no tienes que ir a tu colegio?- quiero que salga de mi cuarto.

ella gira los ojos y me dice - si debo ir, pero tu no tienes que ir al hospital?, te hago un favor en levantarte y tu te enojas , eres una mal agradecida - me saca la lengua y sale, jajajaja es tan infantil.

Hoy es lunes debería hacer la rutina que tuve todo un año, levantarme 5:30 bañarme, alistarme, desayunar y salir exagerando 7:30 de casa para estar 8:00 en el hospital para tener media hora y ordenar todos los equipos que utilicemos para realizar las fisioterapias, pero hoy no el viernes fue mi último día de prácticas y debo realizar los trámites en la Universidad para ya tener mi título de fisioterapeuta.

Bajo al comedor ya se encuentran todos

- Así iras a tus prácticas? - pregunta papa

- El sábado les comenté que el viernes era mi último día- como siempre creo que no me tomaron mucha importancia, ya que Rosita estaba molestándoles para salir con sus amigos.

- ha entonces tienes más tiempo para salir con tus amigos, o tu novio o alguien que tengas no?- es Rosa haciéndose la burla de mí porque sabe que no tengo a nadie.

- Hermanita ya pronto serás profesional y creo que ni tu primer beso te dieron, creo que te llevaré a una discoteca este fin de semana, te embriagaré un poco y te empujaré al primer tipo guapo que vea.

- Basta que estás diciendo Rosa, respeta a tu hermana y recuerda señorita que estás castigada - es mi madre que realmente no sabe si reír o enojarse con las cosas que Rosa habla, como dije es muy ocurrente y alegre a diferencia de mí que soy seria, no salgo a discotecas, no bebo y no tengo amigos soy una completa ermitaña.

- las dejo me voy al trabajo - dice mi padre y acto seguido se acerca a mi madre y le da uno de esos besos que vi que se dan en telenovelas.

- y si vuelven a su cuarto? - es mi hermana jajajaja eso es lo bueno me saca risas con sus ocurrencias.

- y si te castigamos una semana más- dice mi padre- vamos hija te dejo en tu colegio.

Salen ambos dándose leves empujones como si fueran niños, ambos son ta parecidos, alegres y espontáneos.

Mamá se acerca me da un beso y se va, ella es profesora y la escuela donde trabaja queda cerca a casa.

Me baño y alistó para ir a la universidad para empezar los trámites para obtener mi título, me pongo un short y una polera con tenis, me maquillo un tono natural, no soy delgada, pero tampoco soy gordita, soy un poco voluptuosa en los pechos y por eso no me gusta usar mucho escote.

Todo salió bien en mi carrera me dicen que por la dedicación que le puse a mis estudios el trámite será menos moroso porque fui una de las mejores de mi clase, estaba feliz pues quería ya empezar a trabajar, sin pensarlo una duda entro en mi cabeza ¿realmente quería ser fisioterapeuta? ¿Acaso no fue mi inmadurez que me hizo tomar la decisión de estudiar esa carrera?

Estaba ensimismada en mis pensamientos y tropecé con la persona que jamás creí que volvería a ver.

Capítulo 2. Chocando con el pasado

Choque con alguien, realmente no me podía ir peor, estaba pensando en el pasado y mi pasado apareció frente a mí.

- Hola mi querida Elenita de tiempo ¿cómo has estado?- me saluda con su habitual sonrisa, esa sonrisa que me desarmaba, los años le habían sentado muy bien; sin embargo, el enojo y decepción se hizo presente y me daba ganas de decirle los 3 primeros años después que me engañaste mal, sentía morir y estos últimos 2 más tranquila y creyendo que ya te había superado.

- Bien realmente muy bien- me oí respondiéndole .

_ que haces por este lado del campus? Creí que aún te encontrabas en el exterior.

- Nunca me fui, de hecho vine a ver mis trámites para obtener ya mi título de fisioterapeuta - me maldecía por dentro como olvide que para que dejaran de reírse de mí pedí a mi hermana que quien preguntara por mí dijera que me fui al extranjero, ya sé por qué dicen que las mentiras tienen pies cortos.

- Así, que bien felicidades, siempre fuiste muy aplicada, me sorprendió cuando me enteré de que dejaste la carrera tan precipitadamente, si hubieses continuado de seguro saldrías con excelencia.

- El pasado es lo último en lo que quiero pensar, en fin me voy llevo algo de prisa.

- Te puedo pedir un favor.

Él después de todo el daño que me hizo tiene la sinvergüenzura de pedirme un favor y yo ahí de idiota - claro si está a mi alcance claro que si - porque soy tan idiota.

- Mira mi hermanita quiere estudiar esta carrera y precisamente vine a averiguar como puede ingresar, sabes que es completamente obstinada y no es muy aplicada, será que tu la puedes ayudar .

Ja si claro a ella quien me veía como poca cosa y hacía de todo para separarnos ni loca, pero nuevamente me oí respondiéndole idiotamente - claro que si, que me busque cuando guste - por favor si alguien merece un premio a la estupidez esa soy yo.

- Tu siempre tan buena, ya sé por qué me enamoré de ti, gracias.

Enamorado tú de mí, nunca lo estuviste porque si lo hubieses estado no me hubieses engañado y cuando te vi y hui de ese lugar ubieses corrido tras mío para intentar explicar o disculparte,, pero no lo hiciste, aún dolía un poco la decepción.

- Adiós- me di la vuelta y camine lo más rápido que pude, si no terminaría gritándole todo lo que me calle en ese entonces y aún lo tengo trabado en la garganta, él dijo algo que no logre oír.

Necesitaba salir de ahí, correr, huir encerrarme y llorar

El pasado, mi pasado después de 5 años volvía y me di cuenta de que aún dolía, no tan intenso como antes, pero aún dolía, Dios ayúdame a olvidar y continuar abra alguien en alguna parte del mundo destinado para mí, o realmente era como mi canción favorita decía " yo no nací para amar, nadie nació para mí...".

Llegue casa y los recuerdos me inundaron:

Desde pequeña siempre fui muy aplicada en los estudios, nunca fui sociable o quizá nadie trató de ser mi amigo o amiga hasta qué él entró a mi curso en primero de secundaria, era el chico más lindo que había visto, alto de tez clara y ojos color miel, fue amor a primera vista, un día me hablo para que le ayude en matemáticas y desde ese entonces nos volvimos amigos, mi único amigo y mi amor platónico.

Hablábamos de todo y reíamos de todo, todo el colegio creía que éramos enamorados, pero solo éramos amigos, hasta ese día, ese 23 de Julio que era mi cumpleaños me pidió que sea su enamorada, estaba muy feliz el amor de mi vida me pedía que fuéramos pareja, claro que dije que si y el último año de colegio fuimos inseparables, la primera vez que me beso fue como estar en las nubes, el era muy comprensivo conmigo, no me gustaba salir a bailar y él lo entendía por eso nos dedicábamos a estudiar tomar helados o café, pero nada de ir a bailar, quizá por esa razón nadie en mi familia se dio cuenta de que tenía enamorado.

Ya iba a terminar el colegio y él deseaba ser abogado igual que sus padres y me preguntó

- tú que deseas estudiar? - mi temor a perderlo fue más fuerte y le respondí - que casualidad igual deseo estudiar la carrera de Derecho.

En realidad no sabía qué quería estudiar, todo el último año me dedique a ser feliz a su lado y me pareció una idea perfecta que ambos estudiaramos la misma carrera así nos apoyaríamos e incluso trabajaríamos juntos, me imagine una vida entera con el,yo realmente lo amaba.

Capítulo 3. Recuerdo Doloroso

Fue el primer día de clases, el paso por mi casa y nos fuimos a clases, el cómo siempre en menos de una hora ya era el más popular de la clase y yo bueno yo seguía siendo yo, nada sociable, pero era la novia del popular.

Hicimos un buen grupo de amigos, bueno él hizo un grupo grande de amigos, yo trataba de acoplarme a ellos, pero eso de ser sociable nunca fue lo mío, el tiempo fue pasando y las fiestas en casas o salir a discotecas se fueron haciendo presentes cada fin de semana.

Yo fui la primera vez, la primera fiesta, pero no me agrado, empezaron a beber descontroladamente y yo solo quería estar en mi casa, en mi cama con un libro o solo viendo una película, le pedí a Rolando si podíamos retirarnos, vi en su rostro molestia y me dijo que aún era temprano y si podíamos quedarnos un rato más, fueron las horas más largas él ya estaba ebrio y se portaba muy atrevidamente incluso me saco una marca en el cuello, me enoje y le dije que si él no me llevaba a casa podía irme sola, el muy molesto tomó su chamarra y salimos, no me hablo hasta que llegamos a casa, me dio un beso corto y se marchó.

Entre a casa y mis padres aún no habían llegado de la fiesta que tenían y mi hermana se encontraba en la sala viendo tele y me dijo - cuando tenga tu edad ni loca llego a esta hora son las 10:30 a esta hora las fiestas comienzan- me causó gracia su comentario ella apenas y tenía 13 años era una niña.

Entre a mi cuarto me bañé y vi la marca de mi cuello, no se iba a perder fácilmente, tendría que usar bufandas si no mis padres lo tomarían a mal ya el lunes hablaría con Rolando para decirle que algo así no debía volver a pasar.

Llego el lunes y acordamos que como yo no me sentía cómoda yendo a esos lugares él iría y que me quedaría en casa y nos veríamos de lunes a viernes en la carrera, ahora me doy cuenta de lo estúpida que fui, quizá yo fui quien le lanzó a los brazos de Ana mi supuesta amiga mi única amiga , la que lo cuidaba que no cometiera errores.

Llego el 23 de julio ya eran dos años que estaba con el amor de mi vida y era mi cumpleaños, les pedí a mis padres que me hicieran una pequeña fiesta en casa, era el momento de decirles que tenía novio y ellos lo conocieran y yo poder salir los fines de semana con el, cómo hacían creo los novios normales, ese día mi supuesta amiga me dijo que saliéramos a bailar a una disco le dije que era miércoles y al día siguiente teníamos clases temprano, pero ella y Rolando me convencieron, nunca use escote, pero decidí usar una blusa que resaltaba mis atributos y además decidí maquillarme en eso demore y llegué una hora después de lo previsto.

Entre a la discoteca y en la puerta del baño estaba Ana mi supuesta amiga con Rolando, el amor de mi vida besándose, me acerque le tome de la mano él se separó me vio y simplemente me dijo - creí que no vendrías - el dolor era tan intenso en mi pecho que no salía ni una palabra de mi boca.

Se acercó en eso Tatiana una compañera que sentía que me odiaba y dijo - al fin lo ves con tus ojos estos cada vez se pierden y vuelven felizmente realizados - esperaba una explicación de Rolando, pero no dijo nada y solo sonrió, no soporte más salí de ese lugar y las lágrimas no paraban de salir, el dolor en mi pecho no me permitía respirar, esto era un mal sueño como pudieron hacerse la burla de mí, reírse en mi cara, con todos presenciando su infidelidad y el lunes vernos a los dos como los grandes enamorados, los imaginaba a todos riéndose a mis espaldas y yo la idiota creyéndoles mis amigos, realizando los trabajos grupales sola, como fui tan estúpida.

Llegue a casa destrozada, más bien nadie me vio invente que me encontraba mal y cancele mi fiesta de cumpleaños y no asistí a la universidad, necesitaba asimilar todo esto.

En el fondo de mi corazón esperaba una llamada, un mensaje o que Rolando toque mi puerta y me dé una explicación de lo sucedido, hasta esperaba que me diga algo estúpido y nada creíble y yo para evitar este intenso dolor en mi pecho le creería y hasta lo disculparía, pero nunca vino ni me llego el tan deseado mensaje.

Mis padres se preocuparon porque esos días no comí y como siempre fui reservada, decidí no contarles nada y el lunes ir a clases, lo peor sería verlo a él y a Ana juntos, pero los ignoraría terminaría las clases y volvería a casa.

El lunes llegué entre al aula y todo cuchicheaban y se reían yo estaba sola nadie de ese grupo de amigos que creí que también era mío se acercó y finalmente llego lo que temía entraron ellos tomados de la mano y Rolando ni volteo a verme, ahí me di cuenta de que él nunca me amo, ya sé por qué dicen que la que primero ama es la que más sufre.

Así paso una semana donde nadie me hablaba y el dolor era intenso cada día que los veía pasar juntos, así que decidí ya no volver a la universidad.

Llegué a casa y les dije a mis padres que me equivoque de carrera que Derecho no era lo mío y si podía cambiar de carrera, mis padres como jamás les di motivos de enojo aceptaron, pero con la condición de que apenas salga convocatoria para alguna carrera que me guste postule y me prepare.

Para no perder el tiempo entre a clases de inglés para ser sincera para no undirme en el dolor que sentía, ese dolor intenso que oprimía mi pecho, que calaba hasta lo más profundo de mi ser y cada día moría un poco más.

Un día llego mi padre y me dijo que salio convocatoria para la carrera de Fiosioterapia, no quería defraudarlos más, ni tampoco seguir llorando todas las noches recordando los estúpida e ilusa que fui, decidí comenzar una nueva carrera lejos de los que creí sentían algo de simpatía por mi.

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