Sígueme en Instagram @31guepa conocerás más de mis escritos.

...****************...

Mi nombre es Nathalia Fonseca. Soy una chica de 23 años. Estudie y me gradué en licenciatura en Educación en la Universidad del pueblo.

Soy maestra para niños de primaria, he comenzado a trabajar de lo que me apasiona pero nunca pensé que mi vida daría un vuelco tan grande.

Les contaré mi historia...

Nací en una familia humilde en un pueblo llamado Sagrado corazón, mis padres han nacido, criados y vivido toda su vida en el pueblo.

Este pueblo es hermoso, por sus grandes y maravillosos paisajes, su gente y su cálido abrazo a las personas que nos vienen a visitar. Últimamente, este pueblo ha avanzado en su tecnología, y está más modernizados.

Existe delincuencia, pero la nueva alcaldía está trabajando en eso, se han visto avances pero hay mucho trabajo que hacer.

En este pueblo vivo con mis padres y mi hermano menor a la cual le llevo 3 años de diferencia llamado Juan. Él es un chico especial tiene autismo, en mi hogar hacemos lo posible para que él esté bien en todos los sentidos.

Mi hermano no comprende mucho, no es que no entienda sino que hay buscar formas que él entienda todo lo que sucede en nuestro alrededor, en su condición sigue siendo un niño pequeño a pesar de sus 20 años.

Mi madre Doña Rosa, es la mejor madre del mundo, con sus errores como todos pero sé que hace lo posible, hay momentos que no entiendo que no me valora lo suficiente pero la amo, ella me ayuda en todo.

Mi padre Don Ramón Fonseca, es un gruñón y problemático, no sé si de verdad me quiere, hay veces que no entiendo su actitud hacía mí persona.

Mi vida gira a entorno a mi trabajo como docente, me encanta mi profesión pero no gano lo suficiente como para costear los gastos médicos de mis padres y los medicamentos de mi hermano, más los alimentos y servicios a pagar, gracias a Dios siempre me ayuda a solventar pero hay veces que ni entiendo cómo hago para hacer y resolver todo, por eso doy clases particulares hago lo que me gusta y puedo solventar muchas cosas.

En mi caso, como soy yo la que trabaja, mi padre también pero no aporta mucho, yo tengo toda la carga familiar, si hay más ingreso puedo estar yo más tranquila pero como no es así, tengo que trabajar duro.

En mi vida, el trabajo es un poco complicado hay veces se presentan situaciones pero nada que no se pueda resolver, estoy aprendiendo soy nueva y cometo errores pero sé que de lo malo se aprende.

En un día cotidiano con los mil un problemas en mi casa y más el cansancio que me genera todo incluído el trabajo, he sentido que no puedo más, he llorado mucho siento que mi cuerpo se cansa, se ahoga y se enferma.

Siento que no aguanto más, odio mi vida porque nadie valora todo el esfuerzo y todo me quiere salir mal, no siento el aprecio de mi familia, me hacen sentir menos porque no gano lo suficiente para cubrir todo, nadie ve el esfuerzo que hago, no soy egoísta porque todo lo que hago es para mi familia, pero ellos no ven el esfuerzo.

Siento que mi familia solo ve lo material, mi padre me dijo que lo que yo ganaba es muy poquito y siempre desde pequeña me hace sentir menos y fea y no lo entiendo si un hijo es deseado porque lo tratan tan feo.

Pero será la vida así, cruel e injusta o vendrá algo maravilloso para mí.

Un día de estos mi padre Don Ramón me dice entrando a mi cuarto que quiere hablar conmigo:

"Hija ven, siéntate necesito decirte algo, vendrá dentro de poco unas personas a conocerte."

Le respondo:

"¿Por qué papá?"

Me dice él: "ya lo verás".

...****************...

Este es el hermoso pueblo dónde se desencadenará esta historia.

Apoya a esta novela, dale me gusta, comenta, y compártela. Tu voto es importante para seguir desarrollando esta historia de amor y superación.

Narra Nathalia:

Le pregunto a mi padre: "¿Papá que me quieres decir con eso? porque nunca tus intenciones son buenas".

Él me responde: "Hija que te crees, respeta a tu padre".

En ese momento entra mi madre (Doña Rosa) y me dice con mucha tristeza: "hija perdóname por lo que va hacer tu padre no estoy de acuerdo con eso".

Sigo con incertidumbre porque no entiendo nada de lo que me dicen, que va a suceder, que va a pasar. En ese mismo momento me retiro y salgo de mi casa en la noche, pensando con mucho miedo y me dirijo por la calle hasta la casa de mi mejor amiga, siento mucho sufrimiento porque no sé que hizo mi padre.

Toco la puerta de la casa de mi amiga y me recibe muy amablemente su mamá Doña Mayra. Entro, pregunto, señora Mayra se encuentra Yoselin.

Ella me responde: "si hija, está en su cuarto".

De pronto siento que baja por las escaleras Yoselin y me abraza. Nos dirigimos a su habitación, y nos acostamos en su cama a conversar.

Me dice mi amiga: "Nathalia ¿que pasó? ¿por qué ese rostro tan triste?".

Le digo: "Amiga mi padre hizo algo, creo que apostó pero no estoy segura porque de pronto me comenta que van a ir a la casa unas personas que me quieren conocer y no estoy de acuerdo, no sé de qué trata".

"Tu sabes que mi padre es un alcohólico y le gusta apostar, no sé que hizo porque lo que me dijo está muy extraño y desconfío de él, lo digo sollozando."

Me dice Yoselin: "Tranquila amiga quédate acá, reposa, duerme y pensaremos bien las cosas, es tu padre y no te puede hacer nada malo."

Le digo: "Yoselin me ha hecho daño toda la vida, a mi hermano y a mi. Me humilla y me compara, me hace sentir menos ya no aguanto más, sigo viviendo allí por mi hermano y mi mamá, no me he ido es por ellos, quiero tener el dinero suficiente para sacarlos de allí y darles una vida mejor".

Yose me dice: "Nathalia eres como una hermana para mí, me duele tanto que sufras, tu papá no se merece una hija tan buena y bondadosa".

"Tenemos que buscar ayuda, tienes que hacerte fuerte, no podemos escapar de esta situación sin saber que hizo tu padre".

Le digo: "Es cierto amiga, si me escapo ahora, mi padre hará sufrir a mi madre y no quiero que suceda. Tengo que esperar quiénes son esas personas que me quieren conocer".

"No permitiré que me hagan daño, no quiero que mi madre sufra, tengo que hacer bien todo, no quiero que nada malo suceda".

De pronto nos quedamos dormidas.

Al día siguiente, me despierto más tranquila como era sábado pude descansar porque de lunes a viernes trabajo en unos de los colegios del pueblo, en el turno de la mañana.

Mi amiga se prepara para ir a su trabajo, cuando en su trabajo hay mucho por hacer, van los sábados como otros findes semanas no va.

Ella es secretaria de un departamento de ejecutivos muy importantes del pueblo, esa empresa tiene una sucursal acá.

Ella me comenta que los ejecutivos de la empresa son muy adinerados e importantes en todo el país.

Le agradezco a mi amiga por recibirme acá, ya que se va a su trabajo.

Agradecida con mi amiga y su mamá ellas son solamente las dos, son de apellidos González, el papá de mi amiga murió hace unos años de cáncer y quedaron ella y su mamá solas, su mamá trabajó mucho para poder costear todos los gastos de la casa y ayudar a mi amiga en sus estudios, ella está apunto de graduarse en abogacía.

Bajamos a la cocina y Doña Mayra me prepara un rico café y unas arepas con jamón y queso bien ricas. Yoselin no toma café, ella no es normal, no hay nada mejor que un buen café en la mañana y en la tarde, y si es en la tarde acompañarlo con pan o con alguna galletas, mejor todavía.

Desayuno, agradezco y me despido de ellas, regreso por el camino a mi hogar con mucha incertidumbre.

Mi vida es un hilo de emociones, una montaña rusa. Vivo para mi familia, no para mi, muero por dentro, me siento agotada, necesito que cambie mi vida porque no quiero seguir sufriendo ¿dará mi vida un vuelco?

Te sentirás reflejado con esta historia. Está en proceso de desarrollo mi novela: Aprender a Amar.