Un castillo hecho de un material oscuro se encuentra en lo profundo del inframundo. Una sombra reside dentro del castillo y habla después de vagar por la sala del trono por un tiempo.
- Amrak, convoca a Víctor y Arthur - le dijo la sombra a un demonio con cuernos rojos.
- Sí, señor - respondió antes de girarse para irse y disiparse instantáneamente como una niebla roja.
Después de salir de la sala del trono, se dirigió a una de las torres traseras del castillo, donde subió a la parte superior y descubrió el dormitorio de Arthur.
Se formó una silueta líquida roja cuando la niebla cayó al suelo y pasó por debajo de la puerta, encontrándose con un joven que había estado entrenado con energía oscura el líquido formó la figura de Amrak y el hombre habló.
- El joven Víctor y tú están siendo llamados por tu padre a la sala del trono - dijo Amrak.
- Sr. Amrak, sabes que hay una puerta, ¿verdad? Y Víctor no está en el castillo - respondió Arthur, y Amrak inmediatamente preguntó.
- ¿Sabes dónde está? - A lo que Arthur respondió después de deliberar por un momento.
- Sr. Amrak, Víctor debe estar en la ciudad y si no estuviera allí, estaría en el campo de batalla - Sorprendido de escuchar esto, Amrak dijo.
- El abismo es el único campo de batalla que conozco - declaró Amrak.
- El abismo, un lugar donde los pecadores, guerreros y asesinos enfrentan las pesadillas del inframundo por un solo deseo - dijo Arthur en respuesta.
- Tal deseo es...
Amrak interrumpió, pero Arthur le interrumpió - Exactamente, guardia Amrak. Morir por un ser más fuerte bueno, me voy a la sala del trono - dijo mientras salía de la habitación. Esta fue la primera vez durante toda la conversación que Arthur se refirió a Amrak como un guardia en lugar de un señor.
Arthur se transformó en una sombra al salir y saltó de sombra en sombra hasta que llegó a la sala de trono al entrar en la habitación, se encontró con Amrak y el otro guardia de su padre, un demonio con armadura de hueso estaba consternado por la rapidez con la que se difundió la noticia; había querido ver a Amrak en un estado lamentable cuando le informé a su padre que no pudo localizar a Víctor.
- Te estaba esperando, hijo, y me alegro de que por fin hayas venido - dijo la sombra.
- Hoy es el día en que recibirán sus herencias. ¿Cómo sabrán que mi arma consume la vida, el aura, la experiencia de combate y el alma del enemigo? - dijo la sombra condensando un aura oscura en su mano.
- A lo largo de los años, esta arma fue alimentada hasta que alcanzó un nuevo nivel más poderoso que cuando la heredé, y hoy dividiré este poder en dos para cada uno la vida, el aura y la experiencia de combate del portador se fusionan con el arma, mientras que el alma es atormentada por la oscuridad del arma - siguió explicando.
Víctor interrumpió y preguntó - ¿Por qué obtendré la mitad del poder de tu arma oscura cuando puedo obtenerlo todo? - La sombra levantó la mano y señaló con tres dedos.
- Incluso si te doy todo el poder, no podrás controlarlo. Víctor, tienes buenas habilidades de combate por tu experiencia en el campo de batalla, pero te falta la capacidad de controlar el aura y Arthur, tienes mucho control del aura, pero te falta experiencia y habilidades de combate - La sombra asintió para que Arthur hablara mientras observaba su mano levantada.
Arthur dijo con seriedad - Sé que carezco de experiencia y habilidades de combate, al igual que sé que Víctor carece de control del aura, pero te escuché decir "arma oscura", pero no sabemos qué tipo de arma es, así que yo te pregunto, ¿qué arma es? - Víctor sonrió cuando escuchó a Arthur dirigirse a la sombra.
La sombra se levantó de su asiento, extendió la mano y gritó - ¡Lanza Oscura! - Desde el suelo y el techo de la sala del trono, surgieron dos remolinos oscuros inversos.
De esos remolinos, salió disparado un rayo oscuro, haciendo que los remolinos se juntaran y se transformaran en una lanza oscura la lanza tenía una cadena que giraba alrededor de la punta de la lanza la parte trasera medía unas cinco pulgadas, mientras que la punta delantera tenía quince pulgadas alrededor de la hoja teniendo aspas que parecían abanicos - LES PRESENTO LA LANZA OSCURA - gritó la sombra mientras la tomaba del mango del medio.
La sombra hizo girar la lanza oscura en sus manos y explicó que para usar todo el poder de la lanza, primero tendrían que ser capaces de invocarla la lanza se separó en dos pedazos, una de las partes voló hacia Víctor, mientras que la otra parte apuntó hacia Arthur.
Cuando una de las puntas tocó el pecho de Víctor, toda la energía oscura se fundió en su cuerpo Víctor empezó a temblar violentamente, y toda la energía que lo cubría desapareció finalmente, cayó al suelo agotado.
- Xumral, llévate a Víctor a la sala de recuperación - El demonio con la armadura de huesos se acercó a Víctor y lo llevó.
- Ahora es tu turno, Arthur - dijo la sombra.
La punta llegó hasta mi pecho y pude sentir cómo la energía fluía externamente e internamente por todo mi cuerpo la energía me empezó a quemar, pero después de unos instantes, el ardor desapareció y perdí mi conciencia.
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(CONTARÉ EL PUNTO DE VISTA DE CIERTOS PERSONAJES EN ESTA HISTORIA, LO QUE LES PASA, LO QUE PIENSAN, SUFREN, VEN, ETC.)
(AHORA SEGUIRÉ CONTANDO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE VÍCTOR)
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Me desperté en la sala de recuperación, me levanté y me preparé para irme, pero una voz me habló - ¿A dónde vas? Todavía no te has recuperado" - Me dijo Xumral.
No me importó, de todas formas me iba a ir, pero entonces entró Amrak con el cuerpo de Arthur y lo recostó en una camilla.
- Veo que mi hermano no aguantó mucho - Le dije a Amrak el levantó la cabeza y me dijo.
- Eso debe ser porque tu padre le dio más del cincuenta por ciento y a ti menos - Ese comentario me molestó y por instinto moví mi mano lanzando un ataque de aura sabía que no era bueno controlando el aura, pero lo hice igual en el aire, formé una aguja oscura de cinco pies de largo y la lancé hacia Amrak.
Amrak acumuló una energía roja en su palma y formó un escudo rojo extendió el escudo hacia la aguja y, una vez que la aguja tocó el escudo, se dispersó.
Sabía que se iba a dispersar de todas formas, pero Amrak cambió su escudo al antebrazo izquierdo y embistió hacia mí dándome cuenta de que no podía enfrentarlo de frente, intenté esquivarlo, pero fui empujado hacia un lado.
Vi que fue Xumral quien me empujó no me sorprendí, Xumral usó solo su hombro para chocar contra el escudo de Amrak, lo rompió y lo tiró hacia atrás.
- Detente, Amrak si peleamos aquí, lastimaremos a Arthur y a Víctor - Le dijo Xumral a Amrak, que estaba acumulando aura en el piso.
- Tienes razón. No voy a empezar una pelea aquí con el estado actual de Arthur - Le respondió Amrak a Xumral.
- Pídele perdón a Víctor - Xumral le ordenó a Amrak.
- No puedo - Dijo Amrak.
- ¿Por qué no puedes? - Preguntó Xumral.
- Porque se fue - Respondió Amrak mientras agarraba una silla y se sentaba al lado de la camilla de Arthur.
- Perdóname, pude meterte en mi pelea, señ... hijo - Xumral al escuchar lo que dijo Amrak miró por la habitación y le dijo.
- Ten cuidado con lo que dices el podrá escucharte - Amrak le respondió.
- No me importa si lo escucha, Arthur después de todo, es la verdad - Le dijo Amrak a Xumral.
Xumral, antes de salir de la sala médica, dijo - Yo hablaba de la sombra - Dijo Xumral al cerrar la puerta de la sala médica.
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Saliendo del castillo, Xumral encontró a Víctor corriendo más rápido, se acercó a él y se interpuso en su camino - Detente - Dijo Xumral.
- ¿Qué quieres ahora, Xumral? - Le dije a Xumral con un tono molesto.
- Tu padre me pidió que te entrenara y eso haré - Me dijo Xumral.
- No te necesito, puedo entrenar solo - Le dije.
- Tengo una idea: si me noqueas, entrenarás solo, pero si yo te noqueo, entrenarás bajo mi mando. ¿Entendido? - Me dijo Xumral, asintiendo con la cabeza dalgo corriendo hacia él, condensé una llama oscura de nuevo en mi puño y lo lancé con todas mis fuerzas.
Xumral agarró mi puño como si nada, tiró de él hacia él, y sentí un golpe en el estómago y luego dos en la cara, mientras perdía el conocimiento pude ver que Xumral sonreía.
- Y querías entrenar solo yo te transformaré en un demonio de la batalla - Me dijo Xumral, y ahí perdí completamente el conocimiento de mi cuerpo.
Logre recuperar la conciencia cuando note que mi torso superior estaba atado, mis piernas estaban desatadas, pero tenía mis tobillos atados con una cadena blanca a la cintura de Xumral, él me llevó arrastrando hacia los bosques endemoniados, mientras me arrastraba Xumral me empezó a contar qué en el bosque existe una energía maligna, la energía maligna alimenta a los espíritus malditos que rondan por el bosque, cuándo los espíritus absorben suficiente energía toman formas de bestias poderosas algunas mitológicas, malignas y humanoides.
Al llegar al bosque Xumral me desató, pero antes me puso una maldición para no poder escapar del bosque cada vez que saliera volvería a entrar, me dijo que volvería en unos días para enseñarme el control sobre el aura.
Antes de irse me dijo - Sobrevive hasta que vuelva - Mientras salía corriendo del bosque, salí corriendo a buscarlo cuando por arte de magia volví adentro del bosque no podía creer que me puso una maldición si estaba en problemas como escaparía.
Caminaba por el bosque mientras más me adentraba, más se oscurecían los tonos del suelo, árboles y hojas no pasó mucho hasta que me encontré con una serpiente humanoide, tenía el torso de un humano con escamas de cinco centímetros, tenía 6 brazos en sus puños sus nudillos eran filosos por las escamas y la cola media un metro de largo y cincuenta a treinta centímetros de ancho.
Me le acerqué al acecho y lo golpeé por la espalda con una llama condensada en mi puño la bestia rugió con furia agitando su cola trato de golpearme vi su cola venir hacia mí cuando salí corriendo hacía un árbol cercano usándolo de impulso salte hacia la bestia condensando una llama oscura en mi puño para causar más daño a la bestia al final no logré condensar la llama, pero gracias al impulso le rompí la mandíbula inferior, después de conectar unos golpes y esquivar logré arrancar la mandíbula inferior y romper escamas del pecho al final logré condensar la llama en mi puño antes de que mi golpe decisivo le atravesara el pecho recibí unos golpes de la bestia rápidamente levanté mi guardia para protegerme, pero luego un colazo me mandó contra un árbol mi espalda chocho con fuerza contra el árbol, al impactar contra el árbol logré quebrar una rama, levantándome use mi fuerza para romper la rama que se quebró agite la rama como una espada usando mi velocidad y fuerza lancé una estocada al pecho de la bestia atravesando el pecho y corazón de la bestia, la bestia siguió viva unos segundos mientras me golpeaba unas cuántas veces hasta que quedo muerta en el suelo.
Busque ramas y unas cuantas hojas secas para prender fuego, cocine un poco de la bestia, ya que se estaba pudriendo por la energía maligna, en sí no era muy comestible la carne, pero si no comía me moriría de hambre. Así pasé mi primer día en el bosque.
El segundo día estuve entrenando y descansando las heridas que recibí de la bestia por los golpes y por chocar contra el árbol, por suerte no me encontré con otra bestia ese día.
El tercer día fui a cazar a una bestia para comer, pero me encontré con un hada, el hada tenía un cabello violeta oscuro, alas rojas, sangre y la piel carbonizada, al verme me atacó o curó mejor dicho con un aura de fuego que rodeó todo mi cuerpo, el fuego se disipó y vi que el hada me hacía ceñas y se fue.
Decidí seguirla mientras corría por el bosque notando que los colores se iban aclarando de ser todo negro y rojo cambio a varios colores, seguí al hada hasta un claro del bosque.
Al llegar me encontré con unas bestias humanoides, la primera fue un hombre lagarto, al verlo se prendió en mí el instinto de querer golpearlo, lancé mi puño con una llama oscura hacia la bestia, pero una barrera dorada frenó mi ataque.
- ¿Qué crees que haces? - Me cuestiono una voz, mire por todo el claro y encontré el dueño de la voz.
- Perdón es que todas las bestias de estas zonas te atacan sin pensarlo, solo me defiendo antes de que me ataquen - Le respondí con una pequeña mentira, me puse en guardia al notar que las bestias me miraban con furia en sus ojos.
Al mirar a la silueta, note como hablaba con las bestias, las bestias se calmaron, pero aún me miraban cautelosamente, la silueta tenía una máscara y una capucha puesta, pero supuse que era una bestia humanoide de gran poder.
La bestia levantó su mano y realizó un dibujó en el aire, el dibujo era de una runa extraña que no reconocí, en las espaldas de las bestias se iluminó una runa menos en el hada, las bestias se transformaron en orbes de luz que fueron absorbidos por la bestia, - El hada me dijo que te encontró herido y te curó también que te atrajo hacía acá por qué es más seguro esta zona - Me dijo la bestia hasta que se bajó la capucha y se sacó la máscara.
- Soy una domadora de bestias...
- Una domadora de bestias ¿Eres una mujer? - le pregunté interrumpiéndola.
- A que viene esa pregunta si soy mujer - Me preguntó.
- Bueno, pensé que eras el rey de las bestias de este bosque, sabes que empecemos desde cero, mi nombre es Víctor - Le dije y ella solo me miro y luego hablo.
- Un placer Víctor mi nombre es ...
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