¿Que tan malo es enamorarse de una persona que creció contigo, que es como tu hermana? ¿Lucharías por ese sentimiento o solo lo dejarías estar? ¿Que debo hacer? ¿hasta donde debo llegar?

Incesto, que es considerado "incesto" tener relacion con una persona de tu misma línea consanguinea, ella se podría considerar mi hermana por qué creció a mi lado, jugamos juntos, vivimos, estudiamos juntos, crecimos con la misma gracia, el mismo amor que mis padres me dieron a mi o a Saray también se lo dieron a ella, nunca hubo diferencia entre nosotros, y jamás llegué a tener celos de ella en cuanto a mis padres o abuelos.

Y no solo se considera mi hermana por eso es tambien el echo que es la hija del hermano de mi papá, Mi tío somos primos hermanos, pero ¿cómo hago? cómo le digo que no a esto que siento cuando la tengo cerca, cuando la veo con otro chico, como le digo a mi corazón que lo nuestro es un "amor prohibido".

Mi parte razonable entiende que entre ella y yo, es algo imposible, pero mi parte irracional, me pide a gritos que valla corriendo la busque y le diga que en estos 5 años que no la he visto la he extrañado como un loco, que la quiero ver, pero al mismo tiempo la quiero lejos de mi.

Esto que siento es más fuerte, recuerdo que..

—Amor ¿tienes algo? estás muy callado y pensativo, se debe a qué tienes que volver a Alemania—Camila se sienta en mis piernas, en este momento estoy en la terraza sentado mirando el atardecer.

Camila, si ella misma Camila Richards la hija de Eleonor la amiga de mi mamá, ella ya tiene 20 años se vino a londres a estudiar y bueno una cosa llevó a la otra y ahora estamos juntos, una relación, bueno se podría decir que si, ella lo piensa de esa manera y yo no soy quien para decirle lo contrario.

Ella es una chica muy dulce y complaciente, sus padres no están muy de acuerdo con nuestra relación, dicen que somos casi parientes y no se que otra clase de cosas a las cuáles prefiero no prestarle atención, mis padres también al principio quisieron oponerse pero les dejé muy claro que es mi vida y en ella mando yo. ahora yo me preguntó que pensaría Salomé al enterarse supongo dirá eso ya lo veía venir, a ella siempre le dieron celos que Camila se la pasará encima de mi cuando ellos iban a nuestra casa en las vacaciones, nunca la Vi con esa intención era una niña, claro era ahora es toda una mujer, y muy hermosa por cierto.

—Si supongo que es por eso—Le digo sin dejar de mirarla. Debo hacerme cargo de la empresa, mis padres dicen que ya no quieren saber nada de negocios, quieren viajar irse a un crucero, pero eso lo veo muy difícil por qué no creo que mi padre deje a Saray suelta por el mundo, con lo celoso que es.

—Bueno amor es tu deber ya sabes eso es tuyo desde antes de nacer y también sabes por todas las cosas que tus padres pasaron para no perderlo todo.

—Igual mi abuelo nos dejó otra herencia que me importa que pase con esa empresa—Le digo con fastidió, claro que me importa lo que no quiero es tener que tenerla tan cerca, trabajar juntos.

—Bueno sabes que siempre que tenga un espacio iré a verte y darte muchos besitos—Me dice frotando su nariz con la mía y luego me da un Suave beso.

Recuerdo que al principio cuando llegue aquí a londres, me sentía tan mal, a cada rato quería escucharla, verla pelear con ella por cualquier tontería, me encantaba hacerla molestar, solo para verla arrugar su nariz.

—Amor ya me tengo que ir mis padres llegarán en un rato y no quiero que sepan que estoy aquí contigo ellos todavía piensan que soy inocente—Rie con ternura, lo que me hace esbozar una sonrisa también.

—Camila tus padres no son estúpidos tu crees que ellos no se imaginan que ya tenemos sexo—Le digo rodando los ojos

—Por los momentos dejemos que sigan imaginando, no les comprobaré nada—Se echo a reír y me dió un beso en los labios y se fue.

Me volví a quedar solo con mis pensamientos, hace algunos meses que termine mi carrera pero siempre les inventó alguna excusa para no viajar, está vez si que no me voy a poder salvar, mi papá cumple años y quiere que este allá con ellos.

Sin ningún ánimo me levantó para arreglar mi maleta, mañana es el cumpleaños y si, espere hasta el último momento para irme no quería estar antes de tiempo alla.

me acosté y me puse a mirar al techo, siento como un vacío en el estómago de solo pensar en que la veré después de 5 años, debe estar hermosa, y si, no la he visto, no la sigo en Instagram, no es mi amiga en facebook y tampoco es mi contacto en WhatsApp, todo eso lo hice solo para no verla, me dolería mucho verla al lado de otro hombre, me duele y me da rabia, por qué otra persona si puede estar con ella y yo no.

Recuerdo la primera vez que la Vi de una manera diferente, ya teníamos casi los 14 años, teníamos un día de piscina con unos compañeros de clases, ya me había dado cuenta que me molestaba cuando hablaba con algun chico o cuando reia por alguna cosa que le dijeran, eso me hacía hervir la sangre, recuerdo habérselo dicho a mi papá, el solo me Dijo: , bueno ese día en la piscina ella tenía un traje de baño color púrpura nunca lo voy a olvidar, a ella ya le había llegado su primera menstruación o varias no se mucho de esas cosas, lo cierto es que el traje de baño se le veía muy bien, sus senos eran grandes nunca se los había visto así, y su trasero también había crecido, recuerdo que ese día, me da hasta vergüenza recordarlo, pero ese día tuve una erección, de tanto mirarla, hasta tuve que irme a mi habitación para que nadie se diera cuenta.

Recuerdo.

—Mati, Mati, ¿Estás bien?—Me decía ella tocando suavemente a la puerta—Si necesitas algo me lo dices por favor.

y lo menos que yo quería era verla, no podía verla me daba vergüenza aunque ella no se dió cuenta de nada, igual no la quería ver, sin pensar en tocarla y en besarla quizá.

—Salome, estoy bien solo vine por Algo, baja, yo iré en un momento—Le dije para que se fuera—Atiende a los muchachos Mientras bajo, gracias hermana—nunca le había dicho hermana pero sentía la necesidad de hacerlo. me estaba mentalizando eso ella era mi hermana y así debería verla.

Cuando baje, Francisco un compañero de clases me dijo: —Tu hermana se está poniendo muy bonita, mira como ha crecido—Dijo sin dejar de mirarla y yo también la mire la Vi reír con una de las chicas y en ese momento supe que los celos que sentía no eran de hermano mayor, me dió mucha rabia escuchar a Francisco decir eso de ella, y desde ese día le dejé de hablar.

Y también desde ese día me aleje de Salomé, no podía tenerla cerca, no como antes, (Suspiro) antes cuando nos acostamos en la cama a ver películas todo el día, reíamos y conversábamos de todo, Hasta ese día en la piscina cuando mis sentimientos me golpearon a la cara.

Ahora no sé cómo hacer para dejar de sentir esto, desde entonces comencé a salir con chicas todo con el propósito de dejar de pensar en ella, pero nada funciona, y he salido no se con cuántas chicas, incluso ahora que estoy con Camila no dejo de pensar en ella, en mi dulce Salomé.

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Hola, aquí yo otra vez, por aquí les dejo el primer capítulo de está historia espero les guste, y espero ayuden a Matías y Salomé con sus comentarios. ♥️

Hoy es el cumpleaños de mi papá, y por lo que tengo entendido vendrá Matías, ya es hora que tomemos posesión de nuestra empresa, le he dicho a mis padres que no quiero saber nada de eso, pero ellos dicen que lo tengo que hacer, además que hay muchos negocios de la familia de verdad no sé cómo mis padres se han hecho cargo de todo eso, ellos dos, yo los admiro mucho ellos son para mí la pareja perfecta he vivido con ellos desde que tengo uso de razón y jamás los he escuchado pelear o separarse por alguna cosa, me gustaría algún día conseguir a un hombre que me trate como mi tío Logan trata a mi mamá Sabrina.

cuándo se ponen todos melosos Saray y yo tenemos que salir corriendo por qué si no resultamos todas empalagadas también (risas).

En este momento me estoy dando la oportunidad de comenzar una relación con Oswaldo él siempre ha Sido muy bueno conmigo, además que desde que nos conocimos a estado detrás de mi buscando que le dé una oportunidad, el nunca me ha tocado el tema de Matías, sobre lo que pasó el día de los 15 de Saray pero se que el tiene presente lo que sucedió ese día.

Matías, Mati como yo le digo o le decía mejor dicho, el es para mí alguien muy especial, siempre fue un gran hermano. Me defendía, me ayudaba, me protegía. Después se convirtió en un sobre protector o eso pensé, bueno yo veía a mi papá hacer lo mismo conmigo con Sara incluso con el mismo Matías. y hasta pense que era normal que alguien se preocupara de esa manera, un día todo cambio, Matías ya no me trataba igual, a pesar que siempre se lo pregunté nunca me decía, rechazaba nuestras salidas, nuestros planes de ver peli los fines de semana, cuando hacía alguna reunión en la piscina con sus amigos, me decía que no me quería ver por haya, y si yo hacía las mías siempre lo descubría mirando desde el piso de arriba de la casa.

A veces lo descubría mirándome y me di cuenta que el no me miraba como un hermano, no me mira igual como a Saray, su mirada era diferente sentía que la piel se me erizaba por la intensidad que sus ojos me miraban, en el colegió cuando le decían algo, haciendo referencia a mi como su hermana, el de decía que yo no era su hermana, y eso me dolió mucho cuando los escuché de sus labios me encerré en el baño a llorar, yo pensé que nuestra relación era bonita, pero el no me veía de la mimas manera, para el no era nadie.

Un dia lo ví besando a una chica el ya había cumplido sus 15 años y a mí me faltaba un mes o un poco más para cumplirlos, ese día sentí algo en el estómago, sentí como rabia, que él fuera tan lindo con otra persona y a mí me ignorara, y de hay un sin fin de chicas lo buscan, lo persiguen, y no solo por qué era un niño muy bello, si no por que es hijo de una de las familias más prestigiosas del país.

También me enteré que cuando me gustaba un chico, o alguno me iba a decir algo Matías lo amenazaba, y es que le hacían caso, por qué matias era un chico que intimida con la mirada, ahora no lo sé tengo más de 5 años que no lo veo.

Se preguntarán ¿por qué?, bueno nunca quise ir con mis padres a londres, siempre com la excusa que el abuelo Alberto no se podía quedar solo, así es como logré escapar de el viaje todos estos años.

Hoy lo veré lo tendré de frente nuevamente y no se lo que voy a sentir cuando lo tenga cerca, por qué después que Matías se me declaro aquel día en mis 15, algo dentro de mi cambio, me di cuenta que yo también sentía por el cosas diferentes, además de todo lo que vivimos.

Recuerdo

—Salome ¿puedo entrar?—La voz tranquila y suave de Matías me hizo asustar, ¿Que hacia en mi habitación?

Me levanta y le quite el seguro a la puerta estaba nerviosa y no quería que nadie entrara, abri la puerta y nuestras miradas se encontraron, como si fuera automático agache mi mirada es que la suya me hacia intimidar.

Entro y se paró frente a mi, tomo mis manos que estaban enfundadas en unos guantes color lila, porque ese fue el color que escogí para mi vestido..

—Salome quiero hablar contigo, necesito hablar contigo,—Me miro de una manera extraña y no pude decirle que se fuera.

—Dime, antes que venga mi mamá a buscarme—Cuando dije eso rodó los ojos.

—No es tu mamá Salomé—Me dijo con ternura, como queriendo tapar lo que había dicho.

Intenté soltarme de sus manos pero no me dejó—No entiendo ¿por qué te da pena decir que soy tu hermana? o ¿por qué te empeñas en decir que ellos no son mis padres? no sabes lo mal que me has hecho sentir—Le dije con un nudo en la garganta, el cual trague para no llorar, el negó en un suspiro

—Lo siento salo, no lo digo con mala intención, tampoco lo digo para que te sientas mal, déjame explicarte y me vas a entender—Suspiro con miedo, con nervios.

—Dime entonces, quiero entender tu proceder—Le di una mirada acusatoria.

—Vamos, sientate aquí— me mostró un lado de la cama, el arrastro el banquito de la peinadora y se sentó frente a mi y volvió a tomar mis manos.

—Bueno lo diré de una vez sin tantos rodeos, es que no soporto más—inhalo y exhaló varias veces, como buscando el valor para decir lo que sea que iba a decir.

—Mati, habla, dime de una vez o morire de los nervios—Le digo mirándolo a los ojos para darle seguridad.

El asintió y suspiro nuevamente—¡Salome estoy enamorado de ti!—Me dijo eso y agachó la mirada, sus mejillas se tiñeron de rojo, y yo abri mis ojos en asombro.

—Matias te has vuelto loco, nosotros—Me levanté y me apoye en la peinadora inhale y exhale, repetidas veces buscando la calma que el interior de mi ser necesitaba.

—Salome te juro que no fue premeditado—Separo detras de mi—no busque nada de esto, tu tampoco lo hiciste no me provocaste, pero paso, un día me di cuenta que no te quiero como se quiere a un familiar te quiero como a una mujer—Su mirada desencajada me dijo que no estaba mintiendo, que era verdad lo que decía.

A él le dolía sentir por mi algo más de lo que deberia, debo admitir que me gusto saber que él me quiere, sentí algo dentro de mi, un frío en mi estómago—Matias y ¿con cuál intensión me estás diciendo esto?—Recapacite en todo esto, si mis padres se llegan a enterar moriran

—Solo quería que lo supieras Salomé te quiero mucho, y no dejaré que nada ni nadie te haga daño jamás—Se dió la vuelta para salir y sentí un vacío en mi interior, algo como cuando te montas a la montaña rusa, que te da miedo pero al mismo tiempo te gusta.

—¡Matias espera!—Di la vuelta hasta él, el dió dos pasos hasta quedar más cerca de mi—Matias también te quiero—Agarre un poco de Valor de ese que el tenía y lo use para decírselo, el sonrió y esa sonrisa tan hermosa que no me regalaba desde hacía mucho tiempo, me encanta verlo reír, verlo feliz.

Me tomo de las manos y se acercó para darme un beso, mis nervios me traicionaron y voltee mi cara y me dió un beso en la mejilla, después me dió un abrazo, y aspiró mi olor, yo hice lo mismo, mati mi Mati se ha convertido en un niño tan grande y tan maduro.—¡Te quiero!—Susurro en mi oído, al tiempo que mi mamá entraba.

—¡Que bellos! eso Merece una foto—Saco su teléfono y nos hizo varias—Hacia tiempo que nos los veía juntos, deben dejar las diferencias y quererse como hermanitos que son—Dijo mi mamá o la tía Sabrina, no se cómo decirle

Matías carraspeó al escuchar que éramos hermanitos y se fue dejándonos solas.

Después las cosas fueron cambiando entre nosotros, salíamos al cine hacíamos cosas como si fuéramos novios, Pero Matías nunca me forzó a nada, nunca me pidio un beso ni nada.

De vuelta en la realidad.

—Salome, Salomé mi hermano Matías ya viene llegando—Gritaba Saray desde el otro lado de mi puerta. Sara siempre a sabido sobre nuestros sentimientos ya que ella nos vio besarnos un día—Salome ven date prisa no te hagas a la dura sabes que mueres de ganas por verlo.

Que niña tan loquita como va a gritar eso sabiendo que alguien la puede escuchar. Estaba parada mirando por la ventana ya se había hecho de noche seguro Algunos de los amigos de mi papá habran llegado ya, ellos estarán recibiendo a sus invitados.

—Bajo en un momento Saray gracias por la información.

Llegué a Alemania, y los nervios me invadieron, cuando el auto más se acerca a la casa mi ansiedad crece, ustedes dirán que soy un poco dramático, pero ¿alguna vez se han enamorado de su hermana o hermano? bueno no lo creo, aunque de sangre no seamos hermanos lo somos, por qué crecimos juntos, aunque nuestros padres siempre hicieron énfasis en que éramos como hermanos no lo somos, y las cosas se salieron de control.

Fuera de la casa de mis padres, hay muchos autos eso es que ya comenzaron a llegar los invitados para el cumpleaños de mi padre, me bajo del auto y mi mamá está ahí esperando por mi con una enorme sonrisa.

—Matias hijo, bienvenido a tu casa—Me dió un abrazo y beso cada una de mis mejillas—Estas muy guapo, y estoy molesta pensé que ya no vendrías, tienes a tu papá triste, en todos estos años ni una sola visita—Dice todo eso arreglando cualquier cosa en mi ropa.

—Mamá no seas exagerada, como si ustedes no hubieran viajado casi todos los meses a vigilar—Le digo tomando el rumbo para entrar en la casa, tengo que ir a darme un baño y cambiarme está ropa.

En cuanto cruzo la puerta de la casa, veo un montón de personas y una ola de recuerdos llegan a mi mente, los 15 años de Salomé, el día que me atreví a decirle que me gustaba, y lo que me dió el valor de hacerlo es porque Francisco ese día se le iba a declarar e iba a pedirle permiso a mi papá para que los dejara ser novios, y eso sí que no lo iba a permitir.

(Suspiro) que recuerdos de mi adolescencia y y todos son con ella, como olvidarla, si en cada espacio de mi mente está ella.

Saray baja las escaleras a toda prisa—Matias hermano volviste, volviste—Da brincos de felicidad, luego me abraza y me llena la cara de besos—Hermano estoy molesta contigo, ya me enteré que andas con Camila, esa falsa yo creyendo que era nuestra amiga—La molestia de su rostro me hizo saber que estaba hablando enserio.

—Hermanita, aunque ya no eres una niña, pero eres la chiquita de mi papá—Le doy un beso en la frente—Deja que me dé un baño aunque sea y después me das todos los sermones que quieras—Doy dos pasos para alejarme de ella y escucho lo que dice antes de irme

—La vas a perder—Volteo y la veo mirarse las uñas como si no hubiera dicho nada, avanzo los pasos que había dado

—¿De que estás hablando? —La curiosidad que siento es más fuerte que las ganas de ir a darme un baño y cambiarme la ropa

—De nada, no me hagas caso, solo digo cosas sin sentido—Se encoge de hombros, y avanza hacia el salón—Ve a darte un baño que apestas—Se abanica con la mano la nariz y se va riendo, mi hermana ya está muy grande es toda una mujer.

Subo las escaleras para ir a mi habitación y cuando voy pasando, la puerta de la habitación de Salomé se abrió, y salió ella arreglándose un arete que traía suelto, me quede parado sin saber si volver a bajar, ignorarla y pasar a mi habitación no era una opción.

Ella levanto la vista y me vio, se paró en seco y se asombro, me miro de los pies a la cabeza y yo hice lo mismo, Dios mío pero que bella esta, es toda una mujer, es hermosa cada día más hermosa.

—Mati... Matías—Dice nerviosa lo sé por qué le tiembla el labio inferior y sus ojos se mueven muy rápido.

—¡Salome, estás hermosa!—Estoy como hipnotizado por su presencia, es que está demasiado hermosa.

—Que bueno que estás en casa— Sonrió con timidez, y quiso pasar de mi para bajar, pero la tomé del brazo, es que fue un impulso, maldije para mis adentros por ese acto.

—Disculpa puedes seguir—La solté pero es que mi corazón no deja de pedir que la tomé en brazos y la bese, pero mi cabeza me dice que la deje ir.

¡Maldición! como duele está situación, ella siguió su camino y yo me quede parado allí disfrutando del olor de su perfume, no ha cambiado la marca siempre usa el mismo, ese olor tan rico igual que ella, recuerdo el día que nos dimos nuestro primer beso(Suspiro)

Ese día habíamos ido al cine, como ya lo veníamos haciendo meses atrás, siempre salíamos juntos para cualquier lugar, reíamos compartíamos nuestros gustos, después del cine nos fuimos a caminar, nos escapamos de los guarda espaldas compramos unos helados, de fresas que era su favorito, íbamos caminando y riendo porque nos escapamos y era cuestión de tiempo para que mi papá nos llamará furioso por la osadía de habernos escapado.

Salomé se llenó la boca de helado y yo me acerque para limpiarle con mis dedos, le limpie y sentí una corriente correr por mis manos, ella se quedó fija en mis ojos, me acerque un poco más y ella no se aparto no hizo nada solo miraba mis ojos, cuando estaba a un centímetro de sus labios sentí su aliento frío, por el frío de la noche y el frío del helado estábamos en algún jardín,no lo sé ya no recuerdo

Sus labios estaban fríos y con un ligero sabor a fresas, el beso era cálido, Salomé cerro los ojos, cuando nuestros labios se tocaron sentí unas cosquillas por todo mi cuerpo, inicie el beso y me di cuenta que ella no sabía besar, ¿Acaso ella nunca había besado a alguien?

No me importó lo único que me importaba era ese beso, tan tierno y sin malicia.

Fuimos interrumpidos por el sonido de nuestros teléfonos.

Que lindos recuerdos, fue maravilloso mire escaleras a bajo y ella al llegar la final de estas se dió la vuelta me vio y volvió la mirada al frente.

Entre a la habitación y me desnude entre al baño, necesitaba con urgencia darme un baño, abrí el agua fría y entre en ella me estuve un buen rato refrescando mi cuerpo y mis pensamientos, después de salir de la ducha, busque en mi maleta un traje adecuado para la ocasión, aquí en las reuniones de mis padres nos codeamos con personas muy importantes y mis padres mueren si no estamos vestidos para la ocasión, si no fuera el cumpleaños de mi papá no asistiría.

Escuché unos toques en la puerta y abrí sin fijarme en quien sería—Sorpresa—Dijo Camila y se lanzó en mis brazos—Acabamos de llegar y una de las muchachas de servicio me dijo que estabas aquí, te quería ver—Me dió un beso en los labios, con intenciones de otra cosa pero la detuve—oye espera Camila, no estamos en mi depa, esta es la casa de mis padres y no me gustaría que nos descubran y tener problemas con tus padres, ¿entiendes?—Por una parte es por eso pero todas las demás razones es por qué no quiero que Salomé se de cuenta.

Termino de arreglarme y bajamos al salón donde se lleva a cabo la reunión, busco con la mirada a Salo—¿A quien buscas amor?—Pregunta por qué ando como un ventilador moviendo la cabeza para todos lados

—A mi papá —le sonrió para que no piense lo que no es

—Hermano, ya estás listo—Se acerca Saray ignorando a Camila totalmente, me niego a creer que se comporte de esa manera, ya que ellas dos eran tan unidas cuando eran más jóvenes.

—Si, dónde está mi..—Me quedo con la palabra a mitad de camino por qué veo frente a mi a Salomé riendo con el rubio aquel que conoció en la universidad, le sonreía de una manera tan linda que mi sangre comenzó a arder dentro de mis venas

Camila no se dió cuenta, pero mi hermana si—Te lo dije, la vas a perder—Susurra en mi oído fingiendo darme un beso.

Se que lo que hice fue muy infantil pero es que no soportaba verla reír a otro hombre, y si yo la iba a pasar mal en esta reunión pues ella también, tome de la mano a Camila y casi la arrastre hacia donde estaba Salomé, ella seguía riendo con le tonto ese.

—!Buenas noches! —Saludo, presionando con fuerza la mano de Camila

Ellos voltean hacia nosotros y Salomé bajo la mirada a nuestras manos, por un momento apretó los labios pero enseguida volvió a sonreír

—¡Hermano!—Dijo con ironía, sabiendo que eso me molesta de sobre manera—que bueno que pudiste venir—Miro al rubio y le sonrió, yo que pensé que ella se iba a molestar pero el que está ardiendo soy yo—Oswaldo conoces a mi hermano Matías. Matías el es Oswaldo mi novio—Dijo con una sonrisa triunfante.