Eres Mío... |Historia Corta.
Prólogo
Eran las 2:36 a.m. o eso logró ver Esmeralda en su reloj.
Estaba un poco mareada y no podía ver bien.
Y ya se había torcido el tobillo varias veces.
Esmeralda
Malditos tacones...
Frustrada siguió caminando con su botella de vino en la mano, bebió un poco y exhalo con fuerza.
Por suerte su casa no estaba lejos de su bar favorito, así que caminar no era problema.
Sin duda se hubiera quedado hasta el amanecer pero unos tipos se propasaron y luego de pelear con ellos fue echada del bar justo cuando celebraba su cumpleaños número 22
Su estómago estaba revuelto y tenía ganas de vomitar.
Pasaba por el callejón que daba a la siguiente calle cuando casi al final de éste, entre la espesa noche vio un cuerpo tirado en el suelo.
La rubia se detiene de golpe intentando no caerse, parpadea varias veces como si fuera a ver mejor con hacer eso.
Parecía estar muerto. Y no, no quería problemas con la policía.
Miro hacía atrás pero no había nadie a esas horas.
Esmeralda
Supongo que si paso hip' de largo no pasa nada...
Acabando su botella de vino y tirandola en la calle, sigue caminando.
Ignoró a la persona en el suelo y evitó mirarle.
Literalmente estaba atravesado por la calle.
Esmeralda
*¿No pudieron dejarlo en un rincón?*
Saltó con cuidado sus piernas y siguió su camino, pero ni bien había avanzado un paso, escucho un quejido.
Seguía vivo.
Esmeralda sacudió la cabeza.
Esmeralda
*Sólo debo ignorarlo.*
Siguió su camino pero bajo sus pies escucho un crujir.
Se detiene y mira sus pies.
Esmeralda
¡Aj! No me jodas...
Esmeralda
Mis tacones eran nuevos, me tomó mucho tiempo juntar el dinero para comprarlos.
Frustrada miro a la persona, bueno, ahora sabía que no lo era.
Esmeralda
Maldito demonio.
Capítulo 1
Al día siguiente, Esmeralda estaba en el baño tratando de limpiar sus tacones de las manchas de sangre que había pisado en el callejón.
De pronto, escucho movimientos en su habitación.
Saliendo del baño, abrió la puerta de golpe, mirando al hombre que desorientado y confundido, se sentaba en la cama.
Sosteniendo sus tacones con la mano derecha se acerco a él
El hombre le mira molesto.
Ha de tener unos 30 años, es moreno y parece una tableta de chocolate con leche con esos cuadros bien definidos, con los ojos azules y el cabello negro.
La oji azul alza una ceja algo divertida
Esmeralda
Pues en tu casa no lo creo querido. Tienes que pagarme estos tacones...
Levanta la mano y le muestra sus hermosos tacones manchados de sangre
Esmeralda
Me lo debes, te salve de morir en ese callejón.
El hombre le mira con el ceño fruncido.
?
Yo no te pedí que me salvarás...
Cruzandose de brazos, la rubia se defiende.
Esmeralda
No pensaba hacerlo pero luego de que manchaste mis tacones obviamente no te dejaría ir sin una compensación.
Sisea molesto y se toca la cabeza
Esmeralda
Te golpeaste fuerte en la cabeza, en la mesa hay pastillas para el dolor, tenías un corte en la costilla derecha y muchos moretones.
El moreno se mofa y le mira con desprecio
?
¿Se supone que debo agradecerte?
Esmeralda
Con que me pagues es suficiente...
El hombre baja de la cama y mira su cuerpo vendado. Estaba con una en toalla en torno a su cintura, nada más.
El moreno mira molesto a la rubia
Esmeralda alza una ceja sin cambiar su semblante serio.
Esmeralda
¿Qué? Tu ropa estaba ensangrentada. No te iba acostar en mi cama con ella. ¿Sabes lo difícil que es quitar la sangre de demonio de las sábanas?
El moreno que miraba su toalla en la cintura le mira asombrado y en segundos molesto.
Esmeralda
Que me debes la vida... de-mo-nio.
La sonrisa del moreno se ensancha
En segundos los zapatos de la rubia salen volando cuando el moreno le toma del cuello y la aporrea contra la pared.
Esmeralda perdió el aire en segundos.
?
¿Cómo supiste de mi entonces?
No podía hablar bien por la falta de aire
Esmeralda
Tenías cuernos y alas cuando te encontré.
El moreno parpadea asombrado por la confesión y aprieta más su mano en su cuello
Molesta, la rubia levanta la rodilla y le pega la entre pierna con fuerza.
Él sisea y cae de rodillas al suelo.
Esmeralda
No sé de quien hablas pero tampoco me interesa.
Esmeralda
Sólo se que ahora me debes la vida demonio y harás todo lo que te pida.
El moreno le mira divertido.
?
¿Quién te crees para decir eso?
Ella se encoge de hombros.
Esmeralda
Digo la verdad, no conozco a un tal Amén no se que... simplemente pasaba por el callejón y pise una de tus alas, cuando te mire tenías cuernos en tu cabeza y por eso te traje aquí
?
¿Sabes con quién estás hablando?
Sosteniendose de la cama se levanta aún con la cara de dolor debido a la patada
?
¿No tienes miedo de que pueda llevarte al infierno?
Esmeralda
¿Debería? No puedes hacerme nada.
Era la primera vez que un humano no le tenía miedo.
Esmeralda se aleja de él y va por sus tacones.
Esmeralda
Los demonios... le cumplen los deseos a las personas a cambio de su alma. Algo así como "salvarles la vida" ¿Estoy en lo correcto?
Levanta sus tacones del suelo.
Esmeralda
Sin embargo, ahora fui yo quien te salvo la vida querido así que en teoría me perteneces.
Alza una ceja y le sonríe orgullosa.
El demonio le mira completamente boquiabierto antes de sacudir la cabeza y sisear.
Ella toma asiento en el sofá individual que está cerca de su cama.
Esmeralda
Quería sólo cobrarte los tacones, pero luego de lastimarme las cosas han cambiado.
Esmeralda
Me perteneces querido.
Usando magia la ropa vuelve a su cuerpo y tirando la toalla en cama abre la puerta y la mira por última vez.
Se mofa de ella e intenta salir pero no puede
Esmeralda pregunta sarcástica.
Esmeralda
¿Problemas ángel?
Siseando le mira con ganas de matarle.
?
No me digas así y qué diablos has hecho.
Con un puchero se encoje de hombros.
Esmeralda
Yo nada. Me perteneces querido, así que no puedes irte hasta que hagas exactamente lo que yo te diga.
?
Soy un demonio poderoso no obedezco las órdenes de simples humanas como tú.
Esmeralda
¿Estás seguro ángel?
El moreno, molesto, sisea y se acerca a ella de nuevo para tal vez matarle en serio está vez.
Pero antes que llegue si quiera a tocarla cae de rodillas de nuevo.
Dejando escapar un jadeo se contrae de dolor
Ella se agacha a su altura.
Esmeralda
No eres cualquier demonio ¿O si ángel?
Esmeralda
Ayer cuando te traje a mi departamento admito que me costó mucho, ¿Sabes cuánto pesas?
El demonio intento apoyarse de la cama.
Esmeralda
De pronto apareció Satanás para ayudarme.
Esmeralda
Oh no, él me dijo tu nombre y hasta donde se...
La rubia puso un dedo en sus labios y sonrió con malicia.La rubia puso un dedo en sus labios y sonrió con malicia.
Esmeralda
El nombre para un demonio lo es todo, ¿no?
Esmeralda
Demonio eres mío.
?
¿Có-cómo sabes de demonios?
Esmeralda
¿Quién no? Sólo con consultarle a san Google cualquiera puede saber
Esmeralda
No es una per... olvidalo. Dejémoslo en que soy o fui una rata de biblioteca. Me gustaba mucho los temas de Ángeles y Demonios. En fin... ahora tú me servirás a mi.
El demonio sonríe grandemente
?
Suerte con eso... humana
La rubia entre cierra los ojos
Esmeralda
Bien, veremos quien sale perdiendo al final, Abigor.
El moreno, asustado, traga saliva con fuerza.
Capítulo 2
Esmeralda bebía sin respirar para poder acabar con el tarro antes de tiempo.
Todos en el bar gritaron eufóricos ante la gran habilidad de la chica.
Esmeralda
¡Sho invitó la siguiente ronda!
Todos gritaron emocionados.
La gente reía y bromeaba sin parar. Parecía que la noche no tendría fin.
La emoción embargaba a todos menos a una persona.
Acercándose tratando de no ser aplastado por la gente, el hombre logró llegar hasta la chica.
?
Esmeralda, debemos regresar ahora.
Sonrió la mujer tan ebria, que no veía bien
Esmeralda
Mi buen amigoooo...
Tambaleándose le tocó la mejilla
Esmeralda
Ven be... Hip... be un pocooo jijiji
El hombre le quito las manos de su rostro y gruñó
Abi
Mañana tienes que ir a trabajar, así que vámonos de una vez.
Esmeralda sonrió con malicia
Esmeralda
Tú lo que quieres es cogerte a o...
El oji azul le cubrió la boca con la mano lo que ella aprovecho para lamerla.
Enojado, la tomó entre sus piernas y la cargo sobre su hombro.
La gente estaba tan ebria y absorta en beber que no notaron que ambos habían desparecido del bar.
Esmeralda jadeo cuando sintió las manos de Abi subir por debajo de su blusa, quemando su piel.
Esmeralda
Prometo no beber demasiado...
El moreno de ojos azules, sonrió con malicia.
Abi
Ya lo creó. No permitiré que lo vuelvas a hacer.
Gruñó y le beso con fuerza.
La rubia abrió los ojos como platos y sonrojandose le devolvió el beso.
Sus lenguas bailaban sin control deseando poseer al otro.
El peli negro sonrió y mordió su hombro, marcandola.
Abi
No he comido en todo el mes... Podrías por favor quedarte quieta...
Tragando saliva, Esmeralda cerró los ojos.
Esmeralda
E-eso no estaba en el contrato.
El oji azul sisea y se aleja de ella bajando de la cama.
Esmeralda
Bien... Puedes ir a cenar
El moreno apretó la mandíbula con fuerza
Abi
Sabes a lo que me refiero cuando digo "déjame ir"
La rubia le sonrió con malicia
Enojado el moreno se lanza encima de ella, le aprisiona con su cuerpo y le sostiene de las muñecas.
Abi
Sabes bien que te he servido todo un año, ¡maldita sea! y sólo te la pasas bebiendo y trabajando.
Esmeralda
Eres un maldito incubo y no haces más que acostarte con putas en sus sueños. Agradece que te di un trabajo decente.
Abi
¿A qué le llamas decente?
Abi
¿A evitar qué bebas de más, a qué no te despidan de tu trabajo o a pagar la renta de tu casa?
Abi
¿¡Por qué no pides dinero!? ¿Fama? ¡Poder! Y así me dejas en paz de una vez, así dejó de ser una maldita niñera.
Esmeralda
Porque no eres un demonio que pueda cumplir con esos deseos...
Esmeralda
Recuerda que Santanas te dejó a mi cargo.
El moreno le miró asombrado antes de cambiar su semblante a uno cansado y fastidiado.
Abi
Claro... El maldito... Me dejó a tú cargo...
Se levantó de la cama, pasó una mano por su rostro y suspiro
Abi
Vendré mañana temprano... Sólo... No te duermas tarde.
En un parpadeo el demonio desapareció.
Esmeralda suspiró y miró el techo un largo rato en lo que dejaba que su borrachera bajará.
Se sentó en la cama y observó la habitación vacía.
Hace un año salvo al demonio de morir y el mismísimo Satanás le permito ser su dueña y por medio de un contrato estipularon como debían vivir.
Bajando de su cama la rubia se dirigió a su despacho dónde tenía trabajo por terminar.
Regla #2
La vida del íncubo Abigor le pertenece en este momento y hasta el fin de los tiempos a Esmeralda Edonis.
La chica abrió la puerta de la habitación y al encender la luz miró la hora. Eran las 2:00 a.m.
Esmeralda
Debe estar recuperando su energía...
Puesto que los íncubos tomaban su poder y energía de las mujeres con quienes se acuestan en sueños ella estipuló la regla 3
Regla #3
El íncubo Abigor únicamente podrá recuperar energía una vez al mes y solo cuando su dueña lo quiera.
Sentándose en la silla giratoria abrió la laptop y siseo al ver la marca que Abi le había dejado en el hombro.
Regla #4
El íncubo Abigor solamente puede tocar a su dueña si es para defenderla y protegerla. Todo acto de agresión hacia ella se verá pagado con la muerte.
Esmeralda encendió su computadora. Hace un año que Abi vive con ella y aunque dice que desea matarla nunca la ha tocado.
Según él, no desea morir por una torpe como ella, además, tiene cosas por concluir antes.
Sin embargo, aprendió que si la quiere molestar los besos y caricias no están prohibidos.
Sonriendo la oji café empezó a trabajar y a escribir.
Cierto que ella era un desastre con las cuentas y con su vida en general.
Sus padres la consideran la oveja negra de la familia siendo así a la que peor tratan.
Juro vengarse de ellos pero cuando entendió a lo que se enfrentaba mejor decidío alejarse y mantener la distancia.
Después de todo tener un demonio sexy viviendo con ella tenía sus ventajas.
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