Me levanto desorientada, no sé qué pasa, lo último que recuerdo es caer desde un edificio por culpa de mi mejor amiga, ahora me encuentro en una habitación que parece antigua y se ve muy descuidada. No sé cuanto tiempo llevo despierta mirando el techo, todo es muy confuso en mi cabeza en este momento.

Me altero cuando veo que entra una señora con vestido negro y un delantal, parece preocupada y se pone a llorar cuando me ve despierta.

—Mi niña que alegría que despertó— ella me habla y yo no entiendo nada, no sé quién es ni donde estoy

—¿Quién eres tú y porque me hablas así?— Ella me ve con cara de preocupación antes de decirme lo que quiero saber.

En este momento me encuentro en el cuerpo de Sofia Vital de 17 años, soy la hija mayor de los Condes Fernando y Maria Helena vital, tengo una hermana que se llama Sandra y me encuentro viviendo en la casa olvidada que su familia tiene en el campo.

Cuando ella me dice todo eso, miles de recuerdos de la verdadera Sofia inundan mi mente, aparentemente es la hija olvidada de los condes que estaba comprometida con Mariano Gandul, el joven heredero del Duque Ernesto Gandul, de gran influencia en el reino, ella esperaba casarse para salir del infierno en el que vivía con sus padres y su hermana porque creía que esa era la única manera, pero para su mala suerte su hermana destruyo su reputación asegurando que era amante de hombres adinerados para ganar estatus y por eso se quería casar con el heredero del ducado.

Sandra decía todo esto para desprestigiarla y que cambiaran de prometida, pero no contaba con que el padre de Mariano anularía el compromiso y buscaría una prometida para su hijo que no fuera de esa familia, cuando esto ocurrió sus padres por proteger a Sandra la culparon de todo y la sacaron de su casa a vivir en el exilio porque ya nadie la quería desposar por su reputación.

Recordaba cada ofensa de su familia, la trataban peor que la basura, ni siquiera las sirvientas la respetaban en esa casa, aun así ella los amaba porque no conocía otro tipo de amor, solo quería que sus padres la reconocieran y le dieran cariño como con su hermana, pero nunca paso y ella sabía que nunca pasaría por eso su única esperanza era el matrimonio y hasta eso le arrebataron.

Su desesperación llegó hasta tal punto que decidió quitarse la vida envenenándose, así ya no sufrirá más, su familia le enseño que sin ellos ella no valía nada, la destruyeron emocional y físicamente, su cuerpo tenía cicatrices recientes y antiguas, llevaba poco viviendo allí, donde solo tenía la compañía de Ana su nana, la única persona que la respetaba y la quería con sinceridad, tanto que fue capaz de irse con ella a la casa en el campo para que no estuviera sola.

"Nunca creí que tendría otra oportunidad después de morir, pero hoy la tengo y es gracias a ti, por eso acabaré con todos los que te llevaron hasta ese punto" Pensaba Maribel mientras más recuerdos de la dueña de ese cuerpo se adueñaban de su mente.

Paso una semana desde que desperté en el cuerpo de Sofia, este tiempo estuve analizando la situación y pensando como podría salir de esto, cuando ya me sentí capaz de enfrentarme a este mundo salí de mi habitación con un único pensamiento.

“Hoy muere Maribel Casas y comienza el RENACER DE SOFIA”

Lo primero que debía hacer era buscar la manera de salir adelante, ya que cuando los condes abandonaron a Sofia la dejaron a su suerte y lo que le enviaban apenas y alcanzaba para comer una vez al día, teniendo en cuenta que son dos personas, ella y su nana Ana.

Al salir me encuentro con Ana que se pone feliz al verme

—Hola mi niña como te encuentras-

—Bien nana, ¿qué podemos comer hoy?-

—Mi niña solo tenemos pan y unos tomates-

Cuando mi nana me dijo eso se me ocurrió que como es una casa en el campo podríamos sembrar algunas verduras al menos para comer mientras veo que más podemos hacer para vivir

—Nana, te puedo hacer una pregunta-

—Claro mi niña, dime que quieres saber-

—Tengo pocos recuerdos de mi infancia y entre ellos solo están los maltratos de mi familia, ¿siempre fue así?-

—Si mi niña ellos desde que eras una niña te dejaban a mi cuidado y nunca preguntaban por ti, pero todo fue muy raro porque la condesa se fue un año de visita a otro reino con sus familiares, al los dos meses de irse el conde llego con la noticia de que estaba embarazada y que por eso se debía quedar con ellos mientras pasaba el embarazo, ya cuando llego te traía con ella, pero ni siquiera te miraba, ya que una sirvienta era la que se encargaba de ti, esa misma tarde el conde me llamo y me dijo que debía cuidarte.

No me di cuenta en que momento comenzaron a salir lágrimas de mis ojos, todo el sufrimiento que paso sofia y ni siquiera se sabe la razón del odio de su familia, pero en ese momento se activaron mis alarmas, algo raro pasa, algo en esa historia no cuadra y tendré que descubrirlo si quiero destruirlos.

El día paso mientras buscaba la forma de sembrar algunas verduras y la forma de teñir mi pelo, ya que mi cabello es negro con un particular mechón blanco poco común y no quiero que la familia de sofia se entere, voy a ir al pueblo, así será más fácil hacer todo.

Al día siguiente sofia hablo con Ana para utilizar el poco dinero que envía su familia para comprar semillas y poder sembrar, aunque eso significaba comer todavía menos, pero Ana estuvo de acuerdo, ese día compraron lo que pudieron y lo sembraron.

Al comienzo fue un poco difícil, pero cuando empezaba a dar frutos se pudieron alimentar un poco mejor y el resto lo vendían, lo que les proporcionaba un poco más de dinero.

Con el paso de los meses su huerta crecía y ya se podían alimentar tres veces al día, ya no necesitaban del dinero que enviaban sus padres y dentro de poco cumpliría la mayoría de edad, por lo que estaba buscando la manera de salir de esa casa y comenzar de nuevo en otro lado, además necesitaba más dinero y poder para vengarse, lo que tomaría más tiempo y el quedarse en esa casa hasta entonces implica peligro.

Faltando un día para su cumpleaños, Sofia se dispuso a preparar las cosas para partir del reino de Hestia al reino principal del imperio que es Ilumina, el lugar donde viven los emperadores, ya tenían algo de dinero ahorrado para comenzar allí y volver cuando esté lista para su venganza, además en ese reino fue donde se supone que ella nació y debe descubrir el secreto que esconde su familia con respecto a su nacimiento.

Narra sofia

Me encontraba en el escritorio que adaptamos en la casa para estar más cómoda cuando revisaba las cuentas y entro Ana

-Mi niña llegó una carta de su padre- me dice preocupada mientras yo solo pienso que quiere el conde conmigo.

-gracias Nana- le digo y después la veo salir del improvisado estudio.

Al leer la carta salgo enfurecida a buscar a Ana y terminar de empacar las cosas, debemos adelantar todo e irnos hoy, no me puedo quedar ni un minuto más en esta casa.

La carta decía que el duque investigo y culpaba a mi hermana de mi reputación, que quería volver a concretar un matrimonio, pero el conde no estaba dispuesto a hacer eso y que mientras se calman las cosas tendría que cuidar de la odiosa de Sandra, también decía que ellos llegarán mañana con ella, por eso debo salir antes de que lleguen, no quiero tener que verles la cara.

Recuerdo todo lo que me dijeron cuando el duque canceló el compromiso

*Flashback*

Conde: Eres una estúpida, ni siquiera eso puedes hacer bien, siempre supe que eras una inútil, pero sobrepasaste los límites de mi imaginación.

Condesa: Ese compromiso era importante para nosotros, tendríamos un estatus más alto y podríamos hacer negocios que nos dejarán más dinero, porque nunca puedes hacer nada por esta familia.

Sandra se acercó a mi oído para que solo yo escuchara y me dijo: Hermanita, eres una maldita perra callejera, no puedo permitir que te cases con el duque, la única que puede ser su esposa, soy yo.

En ese momento sentí un golpe en mi espalda.(¡Zas!) era la soga del duque con la que me golpea cada que se le da la gana, solo me utiliza como saco de boxeo mientras grito para que se detenga el dolor es insoportable y aún no sanan las heridas de la golpiza anterior.

Sofía: (llorando) ¿Por qué me tratan así? Que les hice para merecer tanto odio de su parte.

Condesa: (¡Paf!, siento arder mi mejilla y sangre salir de mi boca) Callate basura, no tienes derecho a preguntar nada, tú solo eras un medio para tener más dinero, pero como ya no sirves para eso, como mínimo deberías aguantarte y no hacernos enojar más.

*Fin flashback*

Solo recordar la manera tan inhumana en la que trataron a la verdadera Sofia me hace llorar, como pudieron ser tan crueles, "¿acaso no es ella también su hija?", esa era la pregunta que se repetía Sofia día con día y ahora yo voy a buscar la verdad, esa verdad que el alma de Sofia necesita para descansar en paz.