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Quiero Tenerte

1- Un mensaje.

Me encuentro terminando mi curso de fotógrafa, capas que no tanga mucha validez lo que les voy a decir cómo es que yo nací, mi padre es de China de Shanghái y mi madre de Canadá, mi madre viajo a Shanghái para su compromiso y quedo encantada por el paisaje y la vida que se llevaba ahí, salió a caminar encontrándose a un pobre diablo que tomaba fotos a todo lo que se moviera, mi madre que le pidió que la fotografiara si eso le serbia luego de pasar 3 días con ese total desconocido, volvieron a Canadá y pasaron nuevamente ella estaba más que decidida, destinada y preparada para casarse pero al final se arrepintió y volvió a China para encontrase con él y decirle que yo venía en camino, y aunque su padre no estaba de acuerdo que se casara con un Canadiense, este término aceptando luego de 8 meses y nací yo, y si soy una mezcla o por lo que los chinos nos nombraban “mestizos”.

A la edad de 12 años mis padres me regalaron mi primera cámara de fotos, no sabía cómo usarla a veces me enojaba porque no salían como yo quería y luego de casi un años de mirar videos y con ayuda de mi padre, comencé a fotografía el cielo ya que en ese momento lo único bonito e intocable para mi es el cielo, como en la serie japonesa Koizora... bueno ¿Quién no la vio? En Japón es muy famosa, en fin a cuando cumple 15 años llegue a revelar 22 secretos en mi escuela y cerca de mi casa, eso no me trajo problema bueno casi todos el directo teniendo un amorío con la maestra de historia o como mi vecina se robaba las verduras de la huerta a mi madre, es gracioso si lo piensas pero luego llega lo más trágico y aterrador, fui secuestrada a la edad de 17 años por mis abuelos en china y así poder quedarse conmigo, en fin mis padres se enteraron y los reportaron la policía algo que no salió muy bien , luego de un mes me saltaron triste historia. Ahora que tengo 21 años, ruego que nada de esas estupideces me pase, que pueda conseguir trabajo o más bien que alguien me contrate, pero teniendo a un padre empresario y a una madre que es reconocida por ser entrenadora de los atletas en los juegos olímpicos es algo sencillo, soy una empleada más para el resto pero para mis padres soy su hija preferida e única. Luego de todo eso, tengo a mis dos mejores amigos, Brandon y Christopher, a decir verdad ambos son buenos chicos pero en la mayoría de las veces en las que me encontraba en problemas ellos, estaba a mi lado, cubriendo me o impidiendo que mis padres se enteraran, esas son amistades.

2022 Presente – Shanghái – China.

07:00 am.

Me desperté luego de una noche corta y agitada, miro mi vestido extendido en la silla de mi escritorio y mis zapatos todos manchados con barro y pasto, ya que las secciones de fotos de ayer, fueron en medio de la nada porque la novia quería que sus fotos fueran única, pero el único problema fue que ella no dejaba de coquetear con su padrino de bodas, mientras que el esposo la pasaba lindo con los invitados lo que me daba pena es que el padre de la novia la cubría y ella feliz con lo que hacía. Me senté en la cama y tomo mi cámara para revisar las fotos y que ninguna haya salido mal, cada una de ella tiene una calidez hermosa pero al momento de fotografiar a los novios, es como si la imagen de opacara. Es una lástima porque ellos sí que hacen una linda pareja lo malo que ella no quiere dejar su vida de soltera en el pasado pero no soy nadie para juzgar.

Miro el despertador y apago la alarma me levanto y le saco una linda foto al cielo de invierno y me entro a bañar, desde la cocina se escucha a mi madre que me llama salgo del baño y comienzo a cambiarme, al terminar tomo mi mochila, mi cámara con el estuche, celular, auriculares y las llaves de mi auto y bajo.

En las escaleras me detengo al mirar por una ventana que justo da a la casa de mi vecina sexualmente activa, aunque no tengo mucho dialogo con ella se que nos llevaríamos muy bien, sus gritos de placer se escuchan a pesar que tengo las ventanas cerradas, me acerco para escucharla mejor pero me tope con la imagen de sus senos pegados en el vidrio ella toda y completamente despeinada, el sujeto la sostiene de su cintura moviéndola salvajemente con fuerza haciendo que grite con locura, no sé porque pero quiero ser ella quiero que me agarren así, quiero que me den como cajón que no cierra ~Esta bien, puede que este exagerando un poco~ deseo que hagan el amor con locura, no sé cómo explicar la necesidad que tengo es como si tuviera la necesidad de beber agua cuando estoy sedienta, es esa maldita sensación. Sus gritos provocan que mi corazón se acelere, aprieto mis piernas mis manos sudan ante mi imaginación, termino sentada en los escalones cierro los ojos muerdo mi labio inferior mientras que paso mis manos por encima de mis senos, imaginando que alguien más es, puedo sentir como besa mi cuello, aprieta mis muslos, no pude aguantar más el gemido y deje que saliera pero no duro mucho que lo tuve que cortar, llamaría la atención de mis padres me detengo y trato de escucharla, pero al parecer ya terminaron me levanto y me acomodó un poco la ropa.

Me acercó a la puerta del comedor y la veo con papá, preparando el desayuno no quiero negar que no parece real esta escena pero sí lo es, desde hace años que quiero dejarlos descansar pero ellos no me sueltan las manos, quiero empezar a vivir sola tener mi propio lugar, pero hasta que no tenga la “valentía” de hablarle a la cara no puedo hacer nada. Respiro profundo y me acerco.

Bonnie- ¡Buenos días! - Dejo la mochila aún lado y me siento.

Madre- No sé porque no me haces caso, siempre haces todo lo contrario a lo que te digo. – Pongo el plato de Bonnie enfrente de ella. – Bonnie, cariño dile a tu padre que ya no está para las salidas a los antros. –

Bonnie- ¿Por qué le diría eso? – Al sentarme mi padre me tira un beso. – Deberías estar contenta que al menos quiera salir los hombres de su edad no salen mucho. –

Padre- Sabes un cosa Bonnie debería castigarte por tu comentario indebido. – Reímos entre los tres. – Vamos apresúrate, tienes que trabajar. –

Madre- Sabes una cosa Bonnie, tienes razón a su edad se mueve muy bien. –

Bonnie- Mamá, no comiences por favor… - Me levanto luego de tomar jugo. – Me voy adiós mamá. –

Padre- Y tú no te quedes atrás cariño – Le guiña el ojo.

Bonnie- Sera mejor que me valla, no vaya a ser que terminen de volver loca. – Siento que mi celular vibra.

Madre- Adiós bebe. Ten mucho cuidado. –

No pude responder a lo que me dijo, no lo encontré necesario pero una parte de mi me dice que les cuente sobre el trabajo en Corea del Sur y la otra me dice que no les cuente, que se lo diga cuando sea el día de viajar. Puede que no sea tan buena hija, hay muchas cosas que no les eh contado como aquella vez que casi termino perdida en un bosque solo porque estaba siguiendo a una ardilla para sacarles fotos y me había olvidado de marcar el camino, o como también que junto a Luka encontramos cocaína en el mismo bosque pero esta estaba cerca de una cabaña abandonada pero decidieron derrumbarla cuando se reporto a un niño perdido y encontraron su camiseta dentro de esa cabaña, no puedo negarme tuve una muy buena infancia lo malo fueron las circunstancias en la que pasaron.

Una de las cosas que jamás olvidare fue mi primer beso con Luka, un niño muy lindo y cariñoso pero su lado contrario posesivo y algo controlador y aunque nos hicimos la estúpida promesa de casarnos cuando seamos grandes, pero Luka decidió caminar por otro camino e ignorar que su padre odia a los homosexuales y aunque a veces cuando niña me preguntaba si me llegarían a gustar las niñas pero luego miro a Luka y lo doy por hecho, que con Luka no me voy a casar hemos tenido muchos problemas porque se mete con hombres casados o con un traficante, como Brandon pero él es pagina aparte.

Mi mente incomoda y mi cuerpo con la necesidad de ser deseada por el sexo opuesto pero tengo muchas cosas en la mente que solo puedo pensar en mi trabajo y que si no llego en menos de 30 minutos, estaré en serios problemas. Cuando salgo de la casa veo a mi vecina salir acompañada con uno de sus amantes, es lindo ver como una chica tiene la capacidad de controlar su vida y todo lo que la rodea, cuando ella era una niña recuerdo que siempre le preguntaba a mis padres para que yo pudiera salir a jugar a veces salía otras veces nos, ya que si su madre estaba en su casa era muy probable que hayan hombres y aun que era incomodo decirle que no a una niña inventaban excusas hasta el punto de no poder salir de casa o escondiéndome dentro del auto como si me estuvieran secuestrándome.

Salgo de la casa, acompañada de mi madre y me acerco a mi auto cuando me subí ciento el celular vibrar y lo saco para ver los mensajes.

Mjs- ¡¡Niña!! Rápido, yo estoy en la parada de autobús. -

Rts- Está bien, en un momento salgo para allá. –

Tenía la idea de no ir a trabajar hoy pero si no voy Chris terminaría por matarme, ya que le prometí que lo ayudaría con un problema de rechazo, en fin. Cuando llegue me quede unos segundo dentro del auto y recordé que me había llegado mensajes y saco el celular.

Mjs- Te veo, camina hasta la cafetería de siempre. -

Rts- Está bien, en un momento estoy ahí. -

Me quedo unos segundos en el auto pensando. Pero me percato que hay una mujer discutiendo con un joven, pero lo más gracioso es que este joven parece no interesarle en lo más mínimo lo que ella le diga salgo de mi auto y camino hasta el lugar para saber lo que está pasando y porque discuten, hasta percatarme que ella le reclama que la abandono. No tiene sentido que siga escuchando conflictos de pareja, pero aquel sujeto no tiene el más mínimo interés en ella y aun así ella sigue detrás de él. Sigo de largo para entrar a la cafetería cuando escucho un golpe, volteo y veo que él se soba la mejilla derecha y ella seba caminando, era más que obvio que recibiría un muy gran golpe. Dentro del lugar, pido dos expresos con y sin azúcar, pago y me siento en una de las sillas para poder espera mi pedido y veo a Morgan entrar para luego sentarse enfrente de mí.

Morgan- Bonnie... - Me siento enfrente. - ¿Supiste lo que paso mientras tú estabas en la boda de la mujer coqueta? -

Bonnie- Ammm, no... ¿Qué paso? - La camarera llega con el pedido, nos levantamos y salimos del lugar. - Vamos, o llegaremos tarde... ¿Sabes algo de Christopher o Hansol?-

Morgan- Además de gustarle las fotos ella mando un correo diciendo que no hagamos la foto gigante que al final se va a separar. ¿No porque? - Entramos al auto y ella se pisó en marcha. - ¿Que harás con la agencia de fotografía cuando te vayas? -

Bonnie- ¿En serio? Qué pena, hacían una muy linda pareja y en cuanto a la agencia, no lo sé aun no hablo con mi padre. - Me detengo en el semáforo y miro mi celular, lo pongo en un sujetador y me pongo el auricular para atender la llamada.- ¿Hola quien habla? –

Morgan- ¿Ya comienzan a acosarte? – Ella sonríe.

Christopher- ¿Bonnie? ¡Bonnie! Soy yo, Christopher.... ¿En dónde estás? -

Bonnie- En camino ¿Porque? ¿Qué sucede? - Acelere, no quiero que en la agencia ocurra algo mal por mi culpa. - ¡Hola! ¿Christopher?-

Christopher- Bo... Bonnie... hay...- Se corta la llamada.

Morgan- ¿Que sucede? - dije mientras saco mi celular y llamo a Hansol. - Creo que la loca volvió. -

Bonnie- Solo espero que ella no rompa nada o Hansol paga las consecuencias... - Luego de 15 minutos llegamos, al bajar puedo ver que el auto de esa señora está aquí. - Maldición... yo me encargo. - Al entrar escucho los gritos de aquella señora que siempre es la misma historia. - ¿Que sucede aquí? -

XX- ¿¡¡Como te atre vez a llegar tarde!!? ¡Esto es un desastre y tú llegas tarde! - Ella se sentó en mi silla como si el estudio fuera de ella. - Si, yo no hubiera llegado esto aun estaría hecho un desorden... ¿Entiendes la gravedad de tus errores? -

Christopher- Madre deténgase por favor... - Ella me miro, y lo único que sentí fue miedo. - Sabe que Luka trabaja aquí. –

Bonnie- Tranquilo Chris, yo me encargo. – Aparto a Chris y Hansol se acerca. – Después hablamos, Hans. –

Madre- Es por ella no quiero que trabaje aquí, desconfió de ella - Luka se acerca a Bonnie y se coloca enfrente. - Nos iremos a casa ahora mismo... -

Bonnie- Lo siento, madre de Luka pero no puedo permitir eso... él es uno de mis mejores trabajadores y debo agregar que es uno de los únicos que se desempeña más que el resto. - Me paro al lado de este y nos miramos. - Y debería discutir eso con su esposo, ya que fue él quien dejo que Luka trabajara conmigo... - Ella se puso más histérica.

Luka- Ya basta mamá, vete a casa... hablaremos después... - Ella se levanto y se marcho. - Lo siento mucho Bonnie, es mi culpa no de vi dejar que viniera. –

Madre- ¿Cómo te atreves a hablarme así? – Me levanto de silla y levanto mi mano para golpearla.

Creo que en ese momento no lo pensé, pero no fui capaz de reaccionar pero Luka se puso entre medio de las dos bloqueando el golpe que ella me iba a dar, no puedo negarlo Morgan es mi mejor amigo pero Luka es mi pequeño ángel guardian y si lo pierdo creo que me volvería loca. Ella solo se fue disgustada por el acto de su hijo, no la culpo pero puede hablar conmigo sin tener que hacer una escena de lo que está acostumbrada. Mientras que los demás trabajan trata de buscar la manera de calmar a Luka, es muy obvio que este avergonzado pero desapareció de golpe y no lo encuentro.

Bonnie- Tranquilo, no es tu culpa... - Miro a todos observando la escena y golpeo mis manos para llamar su atención... - Ok, ¡¡Todo el mundo a trabajar, no hay nada que ver aquí!! - Una de mis empleadas llega a mí.

Tania- Señorita Bonnie, un cliente la espera en su oficina. -

Bonnie- Dime Bonnie, solo Bonnie... está bien ahora voy. Pero Tania busca a Luka, ahora. - Ella sonrió y me marcho, camino hasta mi oficina y veo a un hombre y una mujer. - ¡Bueno días! –

Tania- Si, Bonnie. -

XX- Buenos días, señorita Stuart... me presento soy el señor Yi Fang, representante del Ídolo, ZTao... - Ella me interrumpió.

Bonnie- Así, mi padre me hablo de ustedes... si mi padre acepto entonces yo también... y por favor díganme Bonnie - Me levanto a la par de ellos y hago una reverencia. - Los veré en mi oficina, Tania por favor llévalos. -

Yi Fang- Esta bien, Bonnie - Veo que Tao se le quedo mirando. - Vamos. -

Morgan- Lo siento... Bonnie, te buscan es... tu padre... - Ella sin pensarlo dos veces, salió corriendo para hablar con su padre.

Bonnie- ¿Qué mi padre? – Asiente. – Necesito que hables con Luka, de lo que paso. –

Morgan- Esta bien yo me encargo. – Antes de que ella se marchara, la detengo. – No te olvides de avisarle. –

Me quedo mirándolo, sé que tengo que decirle a mis padres lo de Corea del Sur, pero capas que no estoy lista no quiero irme aun estoy poniendo demasiados “peros” y eso me está matando, temo que no estén de acuerdo con lo decisión que estoy por tomar y me obliguen a quedarme. Mientras camino muchas escenas pasan por mi cabeza, en donde discuto con ellos y termino por abandonarlos pero pienso que ellos jamás me dijeron que no, jamás me negaron nada siempre me dieron todo lo que quise y estuvieron de acuerdo con lo que hacía y decía, pero también esto es muy fuerte su única hija se muda de país y no sabemos hasta cuando no volveré a verlos.

Sé que anda algo mal, cuando mi padre no quiere entra y no hace falta ser adivina para saber de qué es lo que me viene a hablar, esto no es algo nuevo con la madre de Luka es de todos los días desde que se entero que la jefa de su hijo es 3 años menor que él, es extranjera y en el colegio tenía fama de ser una mujerzuela... pero que le voy a hacer, no tenía un príncipe azul para que me defendiera más bien tenía que hacerlo sola, tengo que valerme de mis palabra, mi valor incluso de mi propio orgullo para aguantar a esa mujer, que lo único que hace es molestar a su hijo, hacerlo pasar vergüenza y para el colmo tener que pasar por lo mismo todos los días, ella sola matar a su hijo, en fin tengo que aguantar los regaños de mi padre ahora pero esto no se quedara así esa mujer me escuchara. Pero no es lo que yo pensaba al final era que él y mamá se irían por unos días a Canadá para visitar a mis abuelos y como yo no puedo ir tengo que quedarme. Triste pero es por trabajo que tengo que quedarme luego de haber hablado este me entrego una bonita cajita que dice no abrir hasta el día 3/1 que es mi cumpleaños número 22 este se marcho y yo vuelva a dentro, veo a Morgan fotografiando al joven Tao.

Luka- Bonnie ¿Me buscabas? - Ella sacudió su cabeza y camina hasta nosotros. - ¿Está todo bien? –

Bonnie- Si, nada serio antes de seguir quiero que sepas que no tienes la culpa de que tu madre viniera a causar problemas… y no, no voy a echarte jamás are eso eres parte de mi familia. - Al llegar veo que Tao, está sentado sobre un banco. - Ok intentemos con una silla de oficina -

Christopher- Esta bien... - Hay una muy gran diferencia y a pesar que es menor que nosotros, no puedo negar que es muy atenta. - Dame, eso lo guardare en tu mochila. -

Bonnie- Gracias, ven ahora... Gira... - Este hace lo que le digo y sonrió. - OK, luego de 20 fotos que se cambie el atuendo. - Acomodo un poco las luces y lo vuelvo a mirar.

Morgan- ¿Que sucede? - No es normal que este tan concentrada y callada me pone nervioso. - Vamos confía en mí. -

Bonnie- Esta bien creo que a ti, no puedo engañarte... mis padres se irán unos días a Canadá... - Agacho la cabeza.

Morgan- ¿Aun no se lo dijiste verdad? - Ella negó con la cabeza y sonrío. - Ok, sabes que puedes confiar en nosotros te ayudaremos en todos

Luka- ¿Decirles que cosa? – Me quedo mirándolos a los dos. – Esta bien perdón por meterme. –

Bonnie- Espera Luka. – Le agarro la mano. – Es sobre el trabajo en Corea. –

Nos quedamos unos minutos, esperando a que todo pasara pero mi cabeza busca la mejor escena para decirles a mis padres y aunque no quiera aceptarlo no siempre fui muy buena diciendo la verdad, casi siempre parece mentira lo que estoy diciendo y lo toman como broma y eso me molesta, por parte de mi madre, mis tías cada vez que me veo lo primero que dicen – Hay niña tienes que comer menos. Si fueras flaca estarías más lindo. Cuando te enamoras, tienes que estar siempre linda y ser tierna. Los chicos siempre se fijan en el físico. – Todas esa palabras me llevaban directo al baño a vomitar lo que había comido, hasta el punto de solo tener agua en el estomago y estar casi 2 días sin comer, mis padres se enteraron de lo que me pasaba y me llevaron a una centro de rehabilitación, para que pudiera curarme pero creo que lo empeoraron, fui perdiendo peso cuando creí conocer a mi príncipe azul, cuando en realidad era un sapo disfrazado porque resulta que no le gustaba realmente solo quería saber si era buena en la cama y eso me empujo al fondo, tocando el fondo del pozo. Mirarme al espejo, pesarme, anotar el peso todos los días, probarme ropa delgada y mirarme para ver cómo me queda y estar totalmente molesta y fisgustada.

Podía ser que cuando era más pequeña me importaba mucho lo que ellas decían, pero cuando cumplí los 15 años, decidí por mí misma que era momento de cambia que dejaría de vomitar dejaría de intentar ser algo que no soy solo por complacer a los demás, me vestiría como me gustara que me haga sentir cómoda.

Volvemos a dentro y me quedo mirando al idol, se lo nota cansado y completamente agobiado como si realmente no quisiera aquí, a pesar que esta maquillado sus ojos se cierran las fotos salen más naturales y son las que más me gustan, es cansador tener que viajar y estar cambiándote de ropa constantemente, da mucho miedo que las demás personas vean tu verdadera manera de ser. Bueno es lo que yo veo en él.

Luego de esa charla que tuve con Morgan y Luka, fue más como una descarga ellos son los único con los que puedo hablar libremente y no tener que estar pensando demás. Vuelvo a mi oficina y me pongo a revisar mi correo para saber si me mandaron mensajes más cliente hasta que me aparece un mensaje algo extraño en donde me pedían tener una reunión en un antro, no es muy normal tener una reunión en un antro pero si es para contratarnos no puedo decir que no.

Correo-

...Buenas tardes señorita Stuart quería informarle que queremos contratarla a usted y a su equipo para los eventos de la empresa Choi, honraría con su presencia para hablar con uno de los hijos del empresario. Muchas gracias....

2- Maldito sueño.

Esa misma mañana.

Son las 19:56 de la tarde y mis empleados ya se fueron bueno la mayoría Luka, Christopher y Morgan aun están aquí ellos se quedaron para ayudarme con los papeles para el viaje a Japón de 1 día, mientras que reservo las habitaciones en el hotel, Luka y Morgan fueron a comprar para comer y beber, Christopher se quedo conmigo hablando o más bien observando, el no es de hablar mucho este chico es más de acción. No me había percatado de la apariencia de Christopher, alto aproximadamente 1.80, musculoso no tan marcado, ojitos medianos y de color marrón, manos lindas bien marcadas, dientas bien parejos, cabello castaño claro y labios algo carnosos, el típico chico de una historia romántica.

Tenerlos a mi lado era más que suficiente, pero había días en los cuales necesitaba estar sola aunque no era bueno suelo tener ideas muy locas vuelvo a agarrar mi primera y vieja cámara de fotos y saco las imágenes más deprimentes que mis ojos ven.

Como evitar no mirarlos mientras trabajan si ellos, no duermen porque yo no lo hago capas que a veces exagero un poco con el trabajo pero si no mejoro en mis técnicas, no me aceptaran en la empresa y necesito salir de aquí, aunque no quiera dejar a mis padres ya estoy por cumplir los 22 años no quiero tener que pasar mi cumpleaños lejos de casa.

Manteniendo mi mente en otro lado, miro a los chico la persona que esta hablándome del otro lado del teléfono, solo puede seguir hablándome y pensar que le estoy prestando atención. No sé cuando deje de escuchar la voz de la persona y me concentre en los labios de Christopher, para solo decir que sí, pero esos labios que muchas veces se acercan a los míos para jugar y nunca llegar a tocarse. Y es molesto.

Christopher- Oye Luka, ¿Que sucedió con ese correo que le enviaron a Bonnie? – Termine de ordenar.

Bonnie- Gracias, hasta luego... - Corto la llamada y dejo el teléfono a un lado para agarrar mi celular para ver las fotos que mi madre me mando. - ¿Chris iras al viaje con nosotros? - Noto que recién están haciendo escala en otro país.

Christopher- Si voy, es mi trabajo - Levanto la mirada y me quedo serio. - Si quieres no voy. -

Bonnie- No, está bien solo quiero estar segura de a ver pedido bien las habitaciones... nada más - Lo miro y escuchamos que los otros dos ya llegaron. - Listo las habitaciones están reservadas. -

Morgan- Gracias, espero que ahora tenga una para mí solo y no con estos dos, tiene costumbres raras. - Christopher y Luka me miraron y no pude negar que Bonnie y yo nos echamos a reír. - Esta bien, está bien... roncan poco. -

Luka- ¿Y tú no roncas acaso? A perdón me equivoque, tu no ronca tu ladra. - Le doy un golpe en la nuca para luego beber la cerveza que compramos. - Esta bien, yo ya empaque todo para el viaje... -

Christopher- ¿Enserio, ladras? - Lo miro, no me sorprendería que lo haya hecho.

Morgan- ¿Cómo voy a ladrar Chris? – Estallamos en risas. – Estoy dudando de que realmente termi... –

Bonnie/Luka- No lo termino...-

Christopher- En serio que no hace falta que se coordinen los dos… ya no quiero hablar con ustedes. – Volteo para no mirarlos. – Bueno será mejor que me valla, vamos Luka tengo que llevarte a casa. –

Morgan- Oh, vamos Chris no tienes que eno… ¿Eh? – Me levanto para abrazarlo. - ¿En serio? –

Luka- Ok, Chris vamos. – Mientras guardo mis cosas miro a Bonnie. – Bonnie, ¿Te molesta si mañana no vengo? -

Bonnie- No para nada, mañana tienen el día libre yo tengo que hacer algo - Termino de beber mi cerveza. - Nos vemos en el aeropuerto... –

Cuando nos despedimos de los chicos, solo quedamos Morgan y yo me estiro hacia atrás haciéndome sonar los huesos y me quedo recostada unos segundos sobre la silla, cerrando los ojos al abrirlos veo a Morgan en la computadora y no entiendo cuando fue que sucedió pero volvió a sentarse él no tenía puesta su campera de jean, trago saliva y miro nuevamente a la computadora tratando de no tener que imaginarlo, pero esta vez su mano me sacaron de mi concentración cada una de sus venas se marcan en su mano, cada vez que las mueve su remera marca su torso ancho ya puedo imaginarme lo que ay debajo de ella, siento como mis piernas tiemblan y como mi sudor cae por mi espalda vuelvo a mirar la pantalla de la computador, hasta que me percate que este se levanto y se acerco a mí para pedirme ayuda.

Su mano derecha apoyada sobre el escritorio y la otra sosteniendo los papeles, puede escuchar su respiración sentir su aliento con cada palabra que sale de su boca, los movimientos de sus labios la nuez de su garganta que sube y baja, mi corazón se acelero ante su cercanía. Me levante para estar frente a frente solo esperaba a que no me rechazara. En sus ojos puedo ver cómo está entendiendo mi comportamiento, me acerco y poso mis manos en su pecho para subirlas hasta su cuello sus manos se sujetan a mi cadera haciéndome jadear ante su tacto no recuerdo haberme sacado mi camiseta pero recuerdo soltarla para que callera al suelo, desabrocho el pantalón de Morgan vuelvo a mirar a los ojos y de apoco nuestros labios se fueron hundiendo en un beso necesario, sus manos se pasean por toda mi espalda hasta llegar a mi trasero el cual sujeta con deseo, sus labios bajan por mi cuello hasta llegar mis senos el cual los despoja de mi bracear, me levanto para luego sentarme sobre el escritorio tirando todo al suelo haciendo una gran lio los gemidos se comienzan a escuchar cuando este introdujo su mano dentro de mi pantalón hasta llegar mi intimidad, metiendo dos dedos haciendo que me retorciera del placer, se acerca a mi oído. – No hacía falta mojar mis dedos. – Cuanto más rápido mueve su mano más cierro los ojos evitando llegar a mi límite en su mano, no recuerdo en qué momento fue que me saque la remera pero ya no la tenía por su parte Morgan solo necesitaba quitarse el bóxer y ya estaba completamente listo solo para mí siento que vuelve a acercarse a mi odio, por mi parte tomo su pene entre mi mano y comienzo a darle un masaje erótico, cuando de apoco comienzo a escuchar sus jadeos como su respiración se agita cuando más rápido muevo mi mano, en segundos nos miramos a los ojos sintiendo que pronto llegaríamos a nuestro final.

Morgan- Bonnie bonita aras que me venga, s~si sigues moviéndola a~a~así. – La miro a los ojos.

Bonnie- Tu~tu también… - Me aferro un poco a su cuerpo cuando al final no resiste más. - Si, pero por favor se gentil. -

Morgan- Entonces… - Ella abrió los ojos. – Abre los ojos.

-¿Qué?- Me levanto de golpe y miro para todos lado, sintiendo que Morgan a esta al lado mío mirándome extraño cuando se levanto de sus silla hago lo mismo pero solo llegue a agarrar mi mochila, celular y salir corriendo para evitar ese accidente imaginario que tuve con mi mejor amigo de toda la vida, por unos segundos creí que me estaba siguiendo pero solo era mi imaginación me detuve por falta de aire, dejo caer mi mochila en el suelo cerca de mi auto y me golpeo las mejillas repitiéndome constantemente que todo fue una locura, que él solo es mi amigo y que nunca podría pasar eso, pero muy en el fondo eso es lo más estúpido e irracional que una chica dice cuando está enamorada o siente algo por la persona equivocada.

En este caso me paso a mí, Morgan es lindo es alto 1.80 para ser exacta cuerpo de atleta, cuida mucho su apariencia pero su reputación lo precede, es todo un Don Juan.

Cuando logre calmarme, vuelvo a tomar mi mochila del suelo y la meto a dentro de auto una vez que abrí la puerta me siento mi celular suena pude saber de quién se trataba por el sonido y suspire.

Mjs- Ya estoy aquí. –

Rts- Estoy yendo. -

Me subo y me pongo en marcha, se que está mal juntarse con la gente de la mafia pero no puedo negar que ellas son mejores que las personas que conozco y no me refiero a Luka, Christopher o Morgan ellos son buenos pero tiene sus defectos, este chico es mi mejor amigo o más bien es mi secuestrador no perdimos el contacto desde lo sucedido, a decir verdad el no es chino es como yo es mestizo, de todas las veces que mis abuelos lo mandaron para que me secuestrara había llegado a la conclusión de que no perdía nada si cambia un poco la decisión de llevarme con ellos, más bien me mantuvo secuestrada unos meses y luego me libero. Brando es un chico atento, atractivo, es inteligente y muy pero muy atlético, tiene su atractivo pero en sus ojos son realmente atrapantes y una cosa que realmente hace que dudes si realmente quieres dar el paso en conocerlo o no, él proviene de una familia mayormente su abuelo proviene de la mafia ¿Qué como mis abuelos llegaron a conocerlos? Bien, ese es al punto que no quería llegar pero bueno, y al final tendré que contárselo. Mi abuela en su adolescencia, tuvo un corto pero muy fogoso romance con un peculiar muchacho que trabajaba en un restaurante que ella y su padres frecuentaban luego de varios meses después y de estar de novios ellos quisieron hacer oficial su relación pero como siempre y como historia repetida sus padres estaban en total desacuerdo, en fin mi abuela y el abuelo de Brando se alejaron pero jamás perdieron rastro y cuando necesitaron de ellos mi abuela le hablo. Gracias a ese pequeño trabajo ahora Brandon y yo somos mejores amigos.

Me detengo en un semáforo y lo veo en un parque hablando con unos niño, me estacionó y camino hasta él. Es gracioso tener que verlo retomando aquel papel de niñero, y nos llevamos 7 años de diferencia y aunque sea mayor que yo, tiene una mentalidad de niño supongo que fue por culpa de su padre es algo estricto con el tema del estudio y con el trabajo, aunque él no quiera admitirlo odia tener que salir con su padre para saber cómo está el negocio de trafico de cosas y repasar la lista de los empleados.

Bonnie- ¿Ahora te volviste, niñero? - Este me miro y se levanta del suelo.

XX- Oye, pensé que tardarías un poco más... - Me paro frente de ella y la abrazo. - Pero te extrañe... -

Bonnie- Yo también te extrañe, Brandon y mucho. - Correspondo a su abrazo y luego nos separamos. - ¿Ahora planeas secuestras niños? -

Brandon- ¿Qué? No, no quiero volverme loco. Solo te secuestre a ti, pero por que lo necesitaba... - Sonrisa tierna apareció. - Ven vamos por un café. -

Bonnie- Esta bien, vamos - Comenzamos a caminar, hasta que su celular suena. - ¿Mensaje de pareja? - Río y este escribe.

Brandon- No, de mi jefe/padre quiere que vuelva... hablaremos por vídeo llamada. - Le doy un beso en la mejilla y corro hasta mi moto.

Bonnie- Esta bien... – Me quedo sonriéndole. - En fin, mejor me voy a casa -

Esto pasa cuando te quedas al frente de la empresa de tu padre solo porque tu hermano mayor decidió ser el abogado de la familia, pero creo que si Brandon hubiera tomado más enserio mi consejo de hace algunos años atrás, esto no pasaría luego de esto tendré que esperar casi 1 mes para volverlo a ver. Al salir, camino tranquila viendo al sol como se esconde sonrío de una forma algo tonta pero conforme, al llegar al estacionamiento veo mi auto estacionado y bufo de cansancio y sigo caminando, me subo y comienzo a conducir la verdad que no soy de ir a antros o bares si no es con Chris, Luka o Morgan pero esta vez iría sola no creo que pase algo malo y tampoco ahora que es invierno no me negaría a poco de distracción, miro por mi espejo retrovisor y veo mi bolsa recordando que tengo mi vestido, un par de zapatos, y algo de maquillaje me detengo cerca de una antro, paso a la parte de atrás y comienzo a vestirme, para luego maquillarme y marcar al celular de Morgan, pero este no atiende no creo que atienda luego de haber despertado de mi sueño fogoso con él.

Salgo ya vestida, guardo mi celular, billetera y las llaves de mi auto en una bonita cartera para luego ponerme en marcha. Al entrar voy a un mesa me siento y en eso, una de las chicas que sueles tomar los pedidos viene a mí, toma mi orden y se va, el DJ pone música haciendo que muchos salieran a bailar a la pista, suspiro algo cansada la chica llega con mi bebida y bebo de ella. No entiendo la necesidad de emborracharte si después tienes que pedir ayuda a las demás personas para que te lleven a casa, no voy a negar que hay muchas persona que prácticamente caminan en cuatro patas y aunque es gracioso, me da un poco de vergüenza.

Mi celular esperando ver un mensaje de Morgan pero ninguno, ni mucho menos de los chicos esto me deja en claro que se olvidaron de mí y lo entiendo porque yo también lo haría. Todo está marchando bien, pero tengo la necesidad de salir corriendo porque algo malo esta por pasar.

Xx-¿Bailas? - La observo de arriba abajo. - Vamos...- Tomo su mano.

Bonnie- No, gracias... - Miro para otro lado encontrándome con la mirada del DJ. - ¿Y ahora qué? ¡Suéltame! - Forcejeo.

Xx- Vamos, te divertirás lo prometo... - Alguien más toma de mi mano y hace que la suelte, para cuando veo de quien se trata, me fui. - Siempre arruinas todo. -

Bonnie- ¡No quiero! - Miro a la persona que me da la espalda, cuando el otro sujeto se fue esta voltea para poder mirarme. - Gracias, pero no hacía falta. - Me suelto de su agarre.

Xx2- Claro... - La miro y vuelvo a tomar de su mano para revisar que no tenga hematoma.- ¿Segura que estas bien? -

Bonnie- Si, ya te dije que estoy bien... - Tomo mi bolso y sin decir nada más me meto al baño pero este me sigue. - ¿Qué haces? Es el baño de mujeres... ¡Pervertido!-

Xx2- ¿Qué? ¿Pervertido? ¿Yo? - En serio que esta chica no sabe nada, suspiro camino hasta ella acorralando la contra la pared. - ¿Estás seguro que soy un chico? -

Bonnie- ¿Que... que haces? - Dejo caer mis brazos, cuando siento la pared en mi espalda. - ¡Eres un pervertido! - Intento ver si es chica y la verdad que no tiene nada de mujer. - No intentes engañarme y sal de aquí ahora. -

Xx2- En serio que eres, lenta... - Me agacho un poco y hago que vuelva a mirar mis ojos. - No soy un chico, soy el demonio que vive debajo de tu cama. -

Bonnie- Ya quisieras ser el demonio que vive debajo de mi cama. - Lo empujo y salgo de ahí la música a todo volumen vuelvo a mi mesa. - ¿Pero qué demonio acaba de suceder? - Miro en dirección al baño y no lo veo salir.

Xx2- Se que nos volveremos a ver. - Ella sale corriendo, apoyo mis manos sobre mi cintura y sonrió de lado y salgo del baño, para comenzar a buscarla con la mirada pero ya no está.

Al salir de esa mesa, voy a la barra pago por mi trago y me voy del antro, al llegar a mi auto veo que el sujeto que me molesto primero está apoyado sobre este, al parecer esperándome ahora si estoy entrando en pánico es la primera vez que me pasa y estoy sola, las otras fueron con los chicos y no tengo tanto miedo como ahora, camino hasta mi auto le pedido permiso y este se corre pero por el simple hecho de tener miedo es por el cual que no me acerque, lo miro y en cuestión de segundos me toma de los brazos y bruscamente me apoya contra el auto y quiere besarme a la fuerza, le doy un rodillazo en su partes entro a mi auto agitada y comienzo a llorar, saco las llaves de mi bolso y me pongo en marcha quiero llamar a Morgan pero termino llamando a Brandon y este me atiende rápido.

Brandon- ¡Hola! ¿Qué sucede? -

Bonnie- ¿Brandon? - No puedo dejar de llorar y de temblar. - Ayúdame, qui~quisieron... - Freno de golpe, dejando caer el celular.

Brandon- ¿Qué? ¡Bonnie! ¿En donde estas? ¡Bonnie, háblame! - Me levanto de la cama, me cambio y salgo corriendo. - Enseguida vuelvo. - Mi novio que me estaba mirando, me entrega mi rastreador. - Gracias.-

Vuelvo a tomar el teléfono en mis manos y la llamada se corto, me calmo un poco y vuelvo a mirar mis manos estas están blancas y temblorosas, mi voz se quiebra con cada palabra que pronuncio. Ni siquiera se en donde estoy solo recuerda conducir a todo velocidad de ese lugar, solo pero nunca volver y luego de encontrarme con esos dos sujetos mucho peor. Luego de 15 minutos, más o menos. Veo un auto acercarse y reconozco la matricula, por un lado me siento sumamente aliviada pero por otra parte no, ya que es el auto de Brandon y él de seguro estaba en su casa descansando con su pareja y yo molestándolo con ataques de pánico tras ir a un antro sola. Solo espero que no este molesto.

3- A mi lado.

En cuestión de minutos Brandon ya había llegado en su moto, lo veo que baja y camina hacia mi salgo del auto, lo primero que hago es abrazarlo ese me lo corresponde pero veo salir aquel sujeto del antro sigo pensando si realmente es mujer o no. Me alejo un poco de él y lo miro mientras seco mis lagrimas sonrió y vuelvo a mirar mi auto, me acerco a este y vuelvo a abrir la puerta para apagar el auto.

Brandon- ¿Que te paso? - Me acerco a ella. - ¿Te paso algo ahí a dentro? -

Bonnie- Un sujeto se propaso, nada de otro mundo, pero me incomodo mucho... - Tomo el celular esperando a que mi madre me mande mensaje. - Perdón si te ice venir hasta aquí por nada -

Brandon- No, eso jamás... si me pides que venga yo lo haré, recuerda que eres mi mejor amiga - Este levanta mi rostros con su mano en mi mentón. - ¿Entendido? -

Bonnie- Si... vamos a casa, te llevo - Me quiero meter al auto, pero este me detiene. - ¿Qué haces? -

Brandon- Vamos... tengo hambre - Agarro su mano la saco de al lado de su auto y me meto para sacar su chaqueta, bolsa, celular y llevarla a mi auto. - Suba por favor... - Abro la puerta para que ella suba.

Bonnie- Gracias, mañana vendré por él... - Me subo al auto y él también se pone en marcha. - ¿A dónde me llevaras? -

Al llegar, nos bajamos al entrar todo está tranquilo y no parece lugar que suelo evitar tomo asiento y espero que Brandon regresara, este vuelve trae las bebida y se sienta, mientras que hablamos las horas iban pasando el simple hecho en que mi madre, me mando mensaje justo con mis amigos y no con amigas. Al terminar nos vamos, algo que admiro de Brandon es su confianza conmigo podíamos hablar de todo con él y aun así no tiene vergüenza, mientras caminamos hacia el auto me adelanto a preguntarle si quería venir con nosotros pero no me anime así que solo le dije que pasado mañana me iría a Japón.

Odio las despedidas, pero siento que encontrara a Brandon en Japón y también se que estará su novio y no le agrado mucho, capas que si me dejara hablar tan solo una vez cuando ellos pelean capas que las cosas serian de otra manera y Brandon no le rogaría para que quedaran juntos, siempre vi que él es el único que quiere que esa relación funcione, por la parte de Víctor no noto mucho interés por mantener la relación estable. Cuando recién se conocían, recuerdo que Víctor siempre me pedía que lo acompañara pero yo no quería, era muy incomodo aun así me llevaba a rastras porque nunca acepto un No como respuesta, pero luego me di cuenta del porque lo hacía, quería darme celos, sabía que Brandon jamás me amaría como yo llegue a amarlo en silencio sin que nadie se diera cuenta pero Víctor lo noto y es como un nene chico de 6 años que te quieta tu juguete favorito y te hace burla, como demostrándote que él es mejor que uno. Es por eso que siempre me quede callada, apartando sus amenazas cuando estábamos solos, pidiéndome que cortara toda relación con Brandon porque según él yo era el estorbo que Brandon siempre hablaba de mí. Eso me puso mal.

Bonnie- Gracias por traerme a casa... -Veo que ya estoy en mi casa y bajo. - No vemos cuando vuelva.

Brandon- De nada... ok, nos vemos cuando vuelvas... - Al bajar me despido y me voy. - Cuídate, preciosa. –

Quiero abrazarlo pero no levante los brazos, este solo acaricia mis cabeza vuelve a subirse a su moto y se marcha, me senté sobre el cordón de la calle y miro la noche que está presente, las estrellas brillan como siempre haciendo que la noche sean aun más hermosa, veo pasar a dos personas pasar por enfrente de mi departamento y miro a la chica, y ella voltea para mirar y me saluda, le devuelvo la sonrisa al ver que se trata de mi vecina despidiendo a mi vecina muy contenta, sus piernas muy finas, brazos largos, cabello largo y ondulado tiene la apariencia de la típica chica del libro de romance en donde casi medio mundo la considera fea, pero la mujer solo tiene que cambiar su apariencia para ser la más hermosa diosa, irónico que la gente te ponga apodos así de tontos solo para llamar la atención.

Me levanto para entrar a mi casa, dejo las cosas en el sillón y me voy directo a bañar me saco mi pijama y entro al baño dejo que la bañera se llene para tirar un poco de jabón de baño y refrescarme, mientras me lavo recuerdo aquel encuentro cercano con aquel sujeto.

Dejando mis pechos con solo espuma con mi mano derecha sujeto uno de mis senos y con la izquierda comienzo a jugar con mi intimidad, eh visto vídeos en donde lo hacen y quiero intentarlo, pero me lleve con la sorpresa que es sensacional y solo con imaginarme a ese sujeto, tocándome con sus manos respirando me sobre mi cuello agitado luego de haberme embestidos una infinidad de veces, para que gritar su nombre con locura y placer pero mi mente es tan tonta que cierro los ojos e introduzco dos dedos haciéndome gemir, mis piernas tiemblan cuando los meto más profundo aprieto mi seno hasta llegar a mi pezón el cual también eh apretado, haciendo que me retuerza por el placer que mi tonta eh inocente imaginación me lleva a hacer, muevo mi mano haciendo que los gemidos sean más fluidos y en compás de mis movimientos, cuando siento que estoy a punto de a cavar quito mi mano que sostiene mi seno y tapo mi boca, sintiendo un liquido caliente salir de mi, recorriendo mi mano.

Al final pude relajarme así que salgo de la ducha me seco y me cambio para luego acostarme y tratar de dormir, miro mi celular no veo ningún mensaje de mi madre por lo que lo dejo y me acuesto a dormir.

****(A la mañana siguiente)****

Mi celular suena a las 08:30 am me ciento en la cama y no escucho la voz de mi madre suspiro y me levanto, es más que obvio que hoy tendré que hacer todo yo sola salgo de mi habitación y voy a la cocina para prepararme algo para desayunar pongo algo de música y comienzo a cortar las frutas, y desde la cocina escucho como mi celular suena, voy a la sala y veo el nombre de mi madre la cual me llamaba.

Bonnie- ¡Hola mamá! - Vuelvo a la cocina, pongo la llamada en alta voz y continúo cocinando. - ¿Llegaron bien? -

Madre- Hola Bonnie si, si llegamos bien... ¿Y cómo te fue ayer? -

Bonnie- Ah bien, si la mamá de Luka no se hubiera metido como siempre estaría mejor. - Dejo el celular al lado de los condimento y continuo. - ¿Y papá? ¿Puedo hablar con la abuela? -

Madre- Lamento mucho eso Bonnie, tratare de hablar con ella. Bien, papá ahora se fue con tu abuelo. Y tu abuela no quiere hablar, sigue enojada. -

Bonnie- Esta bien. Mamá, tengo que decirte. - al terminar de cortar las frutas, tomo un vaso y lo lleno de leche. - Hoy a la noche me voy a Japón tengo un evento importante y necesitan de mi trabajo. - Lo pongo en una bandeja y me voy a la sala.

Madre- Porque siempre que estamos lejos, me avisas... -

Bonnie- Lo siento, no sabía que se irían tan rápido... - Me siento en el sillón, prendo la tele y comienzo a comer. - Sera una semana lo prometo. -

Madre- Bonnie cariño, se que jamás te hemos negado nada pero por favor no vuelvo a hacerlo, y entiendo que sea una mujer pero… Esta bien, pero por favor ten cuidado ¿Si? -

Bonnie- Si, lo tendré un saludo. - La llamada se corta y miro la tele. - Creo que hoy solo será para limpiar un poco. -

Apago la tele y pongo algo de música, y comienzo a limpiar la cocina, la sala, mi habitación y el baño ya estaban casi limpios mi madre tiene la costumbre que antes de irse, limpia un poco. Luego de que mi intento de limpieza tardara 5 hora, me tiro sobre el sillón y suspiro agarro mi celular y busco una canción en YouTube, la pongo cierro los ojos y mi mente vuelve al momento en el que ese pervertido, me puso en esa situación tan incómoda recuerdo sus ojos, el formato de sus labios la forma en que me sonreía, voy a ser directa y sincera no es una mujer, no puede ser. Me levanto y sacudo la cabeza tratando de borrar eso de mi mente. Me ato el pelo haciéndome una coleta alta, y voy a mi habitación para cambiarme para hacer ejercicio.

Bonnie- Creo que hoy, no podre dormir... - Entro a mi habitación y saco mi valija. - ¿Que llevare? - Mientras selecciono mi ropa, escucho el timbre de la puerta. - ¡¡Ya voy!! - Al llegar abro la puerta y veo a Luka con Christopher. - ¡Hola! -

Luka- Vinimos a ayudar... - Levanto la mano en donde tengo la bolsa, con las cervezas y lo aperitivos. - Morgan, nos pidió que viniéramos. -

Christopher- Y de paso te escoltaremos al aeropuerto... - Ella nos invita a pasar. - ¿Cómo vas con tu equipaje? -

Bonnie- Gracias, chicos... - Dejo que pasen y tomo la bolsa que tiene Luka para llevarla a mi habitación. – La verdad nada complicado solo llevare una sola...-

Luka- ¿Entonces nosotros iremos después? - Tomo una de las cervezas, la abro y antes de tomar la miro. - ¿Bonnie estas bien? -

Bonnie- No, en realidad no... - Me siento en la cama y abrazo la campera que una vez mi abuela me regalo. - Mi abuela me odia. -

Luka- ¿Sigue con lo mismo? - Me acerco a ella, y acaricio su hombro. - Tranquila, nosotros te apoyamos, en todas tus decisiones. -

Bonnie- Gracias, pero ya está decidido... - Christopher, se levanto de la cama para mirarme atentamente. - Luego de que vuelva de Japón, renunciaré y comenzare con los papeles de la mudanza. -

Christopher- ¿Qué? ¿Por qué tienes que mudarte? - Ella tan solo agacho la cabeza y siguió guardando su ropa. - Bonnie, no te dejare irte así, como así... -

Bonnie- Ah, está bien... Aunque ya es tarde, mañana trabajaremos para ellos, en el evento de caridad.- Se miraron entre sí. – Ya no pueden hacer nada.

Al terminar miro el reloj y son las 17:40 pm de la tarde busco la ropa que me voy a poner, para tomar el vuelo y me voy al baño a cambiarme. Al salir suspiro me suelto el pelo y me maquilló suave, tomo mi morral, las llaves de mi departamento, mi celular y lo audífonos, Luka toma mi maleta y salimos nos subimos al auto y la maleta en el baúl, mientras conducen miro mi celular y veo el mensaje de Morgan y Brandon, cuidándome como siempre. Al llegar al aeropuerto, bajamos me dan mi maleta y nos saludamos y me dispongo a abordar el avión, tomo está saliendo normal hasta que tengo un compañero de asiento no me dio importancia hasta que me hablo.

XX- ¡Nos volvemos a encontrar! - La miro, y al escuchar mi voz ella me miro automáticamente. - ¿Me extrañaste? -

Bonnie- Eres una maldita pesadilla... - Lo miro molesta y su sonrisa de lado me izo sonrojar.

De todos los malditos aviones que hay en el aeropuerto justamente en este se fue a subir, mi día no podía terminar aun peor. Lo ignoro, cuando se sentó a mi lado, quería preguntarle a la azafata si podían cambiarme de asiento pero ella me dijo que están todos ocupados, en cuestión ella no quiso y yo no puedo hacer nada. Hasta que recuerdo lo que paso en el baño.

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