Maxine Williams, la hija menor de los Williams, desde niña fue educada para convertirse en la esposa del rey del país de Rain, pero su deber en realidad era concebir un hijo del rey y cuando este fuese nombrado sucesor, mataría al rey y su padre se volvería el tutor real, para moldear al sucesor a su antojo y tenerlo bajo su control, gobernaria el reino desde la sombras, pero todos su planes se van abajo cuando el rey se enamora de Margot Smith, la hija de un simple campesino, Margot entra al palacio como concubina, Maxine aprovecha esto para acosarla, buscando que ella deje el palacio o si es posible matarla, pero es descubierta y el rey manda a ejecutar a Maxine y a toda su familia, pues gracias a Margot, todo la conspiración es descubierta, el reino es limpiado de todos esos villanos y así al final, Margot y el rey, pueden vivir felices.

Pero antes de ser quien era, Maxine paso por un largo proceso de torturas, desde los cinco años su entrenamiento inicio, tenía clases intensivas sobre historia, política y toda clase de información que pudiese necesitar, pero para cuando ella se equivocaba en un exámen, era obligada a arrodillarse por horas en la sala de estudio, sosteniendo libros pesados sobre sus piernas, cuando le tocaba clases de música, si se equivocaba, su madre era quien la castigaba golpeando sus manos con una regla de madera, además de que debía soportar las constantes burlas de sus hermanos y hermanas, incluso soportar el acoso de su maestro de matemáticas, quien no desaprovechaba la oportunidad para tocarla, un día le contó eso a su madre y la respuesta fue:

"Es parte de tu entrenamiento, debes aprender a disfrutar el toque de un hombre, porque en el futuro seduciras a tus objetivos, para eso servirás"

Es asqueroso pensar que una madre le diga algo así a su hija, una niña de 10 años, muchas veces aquel hombre toco sus piernas bajo su vestido y Maxine tenía que soportarlo en silencio, nadie la ayudaría.

- tú madre dijo, que cuando cumplas quince, seré quien te enseñe tu primera lección de sexo. Serás mía Maxine.

El hombre sonreía de manera perversa, mientras pasaba sus manos por el rostro de Maxine, mientras que la niña se aguantaba las ganas de gritar y llorar, porque si lo hacía, su madre solo la iba a castigar y su padre, poco le importaba, porque le dijo que si no logra nada, no será útil para la familia. Los años pasaron, Maxine estaba ya cumpliendo 15 años, en la mansión se hizo una gran celebración, pues debían mostrarse como una familia amorosa y prestigiosa, durante la fiesta, Maxine noto como aquel profesor no dejaba de mirarla y relamer sus labios de manera asquerosa, de ninguna manera iba a dejar que ese hombre le hiciera algo así de horrible, si iba a tener su primera experiencia seria con un quien ella decidiera, así que al día siguiente le pidió a su madre conseguirle un chico, un esclavo joven y atractivo.

- quiero practicar, necesito probar mis habilidades de seducción con un hombre que aún no me desee. Si es con el profesor, ese hombre me desea desde niña, no sabre si mis habilidades sirven usando a alguien que ya esta loco por mí.

La madre de Maxine acepto, pues noto que su hija tenía razón, mando buscar entre los prisioneros un chico que fuese joven y atractivo, cuando los seleccionaron, su madre la llevo a elegir, entre todos Maxine eligió un chico de albino, que la miraba desafiante, sin saberlo aquel chico era Regis Chevalier, el heredero al trono del país de Blanc, el más grande del continente, siendo este un imperio y no un reino, pero ni Maxine ni su madre sabían eso. La joven se lo llevo a su residencia, donde le trato como un sirviente más, hasta que uso una droga para poder acostarse con él, pese a que termino arrepentida de ello, al menos se entrego por voluntad propia, para cuando el profesor se entero de que ella mantenía a ese chico como esclavo sexual, se enfureció y en su intento de matarlo, el chico logro huir; el profesor fue castigado con la muerte por el padre de Maxine, mientras que ella fue azotada 20 veces y su madre lo doble.

- eres una estúpida, ella debía mantener su pureza para el rey, ahora él sabrá en la noche de bodas que su esposa no es virgen.

Fue el propio Duque Williams quien se encargo de castigar a su esposa. Cuando Maxine cumplió 16 fue presentada ante el rey, un joven de 20 años que recién subía al trono, pero era lo suficientemente capaz para llevar la corona, el rey quedo encantado, pues Maxine era hermosa, así que cuando ella cumplió 18, se casaron, ella ascendió como reina, todo iba de acuerdo al plan, pero con la diferencia de que el rey se aseguraba de tomarse los medicamentos para evitar embarazar a Maxine, además de que rara vez la visitaba, al año, aún no había sucesor y era Maxine quien era señalada por todos, pero lo que nadie sabía es que rey había conocido a Margot, se había enamorado de ella y aunque fuese una plebeya él, la metió al palacio como su concubina, Maxine sabía que era cuestión de tiempo para que ella fuese bajada del trono y eso, no estaba permitido, porque podría ser castigada con la muerte por su padre, así que hizo de todo para deshacerse de Margot, hasta que se descubrió lo que hacía y fue castigada, además de que su familia de por si ya era sospechosa, por lo que su intento de matar a Margot, sirvió como excusa para matar a toda la familia Williams. Ese fue el final de Maxine.

Una pequeña rubia postrada en cama, abrió los ojos, unos enormes ojos rojos, al sentarse miraba por todos lados, ese lugar era bastante extraño, de pronto miles de recuerdos le vinieron a la mente tanto de esa vida como de la anterior, grito mientras sostenía su cabeza y se bajo de la cama buscando un espejo, al estar ante este, pudo verlo, esa apariencia de una niña de 10 años, con el esponjoso cabello rubio y ojos de un intenso rojo, lo sabía, ahora ella era Maxine Williams, la villana de la historia.

Empezamos con una nueva historia, como ven ocuparé de nuevo el físico de la rubia de ojos rojos y es que esa chica me fascina. Espero les guste esta nueva historia y veamos como le irá a Maxine en su venganza.

Fantasy es el mundo donde se desarrollaba aquella historia, el país era llamado Rain, un país próspero pero era muy común que hubiese una larga temporada de lluvias, así que nadie sufría de sequías, en ese mundo fantástico, existían personas capaces de usar magia, no era muy común, pero quienes más seguían con ese don, eran las familias influyentes incluyendo a la familia real, puesto que ellos solo se unían en matrimonio con familias que poseían el don de la magia, así era más seguro que sus descendientes continuaran con el linaje de magos, los Williams no eran la excepción, por siglos habían sido los Duques más poderosos del país, nadie podía oponerse a ellos, por eso, la familia real siempre procuraba estar en buenos términos con ellos y viceversa, en esa ocasión habían acordado un matrimonio entre el príncipe heredero que para este entonces tenía 14 años, Maxine fue presentada ante él por primera vez, pero era solo una niña que no le llamo la atención, era callada y solo respondía de manera cortes ante sus preguntas.

Así que, para el momento en el que Lisa reencarno en Maxine, ya habían pasado dos días que conoció al príncipe heredero y ella había estado en cama por una fuerte fiebre que fue ocasionado debido al veneno que ingirió, este le fue dado por su madre, ya que era necesario entrenar sus cuerpos para obtener esa resistencia al veneno. Maxine se miro al espejo por un largo rato y después volvió a la cama, por una semana no salió de su habitación diciendo que aún se sentía mal, el médico personal le dijo a la Duquesa que era probable que fuese por el veneno que era mejor dejarla descansar un poco más; Maxine aprovecho eso, para estabilizar su mente que era todo un remolino de recuerdos y emociones, una semana exactamente fue lo que necesito, para estar lista, lista para enfrentar ese nuevo mundo donde estaba y lista, para deshacerse de quienes la molestan. Al saber que ya estaba mejor, la Duquesa la envió a la sala de clases, pasaron profesor tras profesor, el último era aquel de matemáticas, al entrar enseguida pudo ver esa sonrisa perversa, tan pronto estuvo cerca de ella le acaricio el brazos rozando con sus dedos bajo la manga del vestido.

- mi pequeña dama ya esta mejor...no sabes cuanto te he extrañado.

- quita tu asquerosa mano de mí.

Maxine giro sutilmente su rostro, lo suficientemente para dirigir su mirada directamente a los ojos de aquel hombre, este frunció los labios.

- no te pongas así, total sabes perfectamente que eres mía...solo unos cuantos años más.

- ¿estás seguro que vivirás para ese entonces?

Maxine no despego los ojos de aquel hombre, quien mostró una expresión de confusión al verla tan desafiante y es entendible, la verdadera Maxine nunca protesto.

- vaya que estas altanera hoy, pero es una orden de tu madre, yo soy quien puede tomarte primero.

El hombre se relamio los labios.

- claro, mi madre estúpida, hará lo que sea para recibir un poco de cariño. Se dice inteligente pero fácilmente se deja manipular por su amante.

- ¿que has dicho?

Maxine sonríe, si, la razón por la que la Duquesa le permitía ser un descarado con su hija, era porque ese pervertido era su amante y amenazaba con decirle al Duque, si ella no le entregaba a Maxine.

- me pregunto como reaccionará mi padre si le cuento su pequeño secreto y lo llevo justo a la hora y lugar donde mi madre y tu se la pasan revolcándose como perros en celo.

El profesor estaba sorprendido por la manera de expresarse de Maxine, si bien era inteligente, sus palabras no eran las que usaría una niña de su edad.

- mi madre no sabe lo que es un verdadero hombre, por eso cree que tu lo haces de maravilla, pero no eres más que un insignificante gusano, esa cosa pequeña jamás podrá satisfacer a la mujer en la que me convertiré.

El profesor endureció ante las palabras que sujeto del cabello a Maxine.

- ahora mismo te voy a enseñar lo que es un hombre, perra maldita.

Tiro del cabello de Maxine y la lanzó al piso, se posiciono sobre ella, pero la niña solo estaba tumbada en el piso mirándolo fijamente con esos ojos rojos y cuando menos se lo espero, la niña comenzó a reírse como si se tratase de una loca, el profesor sintió que su mirada era penetrante como si viera su alma a travez de sus ojos rojos y su risa era como la de una persona que fue consumida por la locura, se aparto de ella, entonces la niña se puso de pié y salió corriendo, es bueno que se asustara, ese, solo era el principio de su ruina.

Maxine observa desde una ventana como la Duquesa y el profesor hablan o más bien parecen discutir, entonces el profesor levanta la vista notando que la niña los observa y le dice a la Duquesa, quien levanta la vista a su dirección, Maxine sonríe y saluda con la mano, pronto ve a la Duquesa correr dentro, seguramente esta yendo por ella, pero no se quedará en ese sitió, corre por el pasillo entrando a diferentes puertas, escucha a su madre llamarla pero no le hace caso.

Fue hasta la noche que Maxine estaba en su alcoba que la mujer entro y sin explicación alguna le dio una cachetada que le hizo voltear hacía un lado la cabeza y su labio se partió, pero contrario a lo que pensó la Duquesa, Maxine solo regreso su mirada hacía ella y sonrió, su expresión era tranquila pero esos ojos la miraban fijamente.

- e-espero que no vuelvas a decir puras calumnias ¿sabes los problemas que causarían?

- lo se y por eso mismo las digo, cuidado madre, padre un día podría ir a ese cobertizo.

- mocosa insignificante. Espero no digas nada o te costará la vida, jamás te creerán.

La Duquesa se va de su habitación, Maxine se soba la mejilla y le pide a su doncella que le ponga algo para evitar un moretón.

- sabes Annie...pronto todo se volverá divertido en esta casa.

- por supuesto señorita.

La joven chica solo continúa aplicando una crema en la mejilla de la pequeña rubia.

Al día siguiente cuando toco la clase de matemáticas, el profesor estuvo manteniendo distancia, dio su clase y se retiro, parece que por ahora lo puede mantener a raya, pero eso quiere decir que no esta planeando deshacerse por completo de él y de paso, de su madre, estaba guardando sus libros cuando la puerta se abre, eran dos de sus hermanas quienes habían entrado, estás eran ya mayores que ella, una de 15 y la otra de 13, ambas eran hijas de una de las amantes de su padre, algo muy común en familias de gran estatus, las dos chicas son las que solían hacerle la vida imposible a Maxine. La menor se acerco apoyando la mano sobre el libro que Maxine estaba por levantar.

- tan pronto ya te vas. ¿no pensaras dejarnos solas cuando venimos a jugar contigo?

- ¿acaso tienen cinco años para querer jugar?

Maxine levanto su vista, mirando fijamente a su hermana, esta parecía molesta, obviamente debe ser porque le ha respondido.

- que valiente estás hoy. Veamos si sigues así cuando te...

La chica no pudo decir nada más, pues sintió un dolor punzante en su mano, una pluma había atravesada su mano que estaba sobre el libro, esta se llenaba de sangre y la chica aparto la mano gritando por el dolor, la mayor se asombro por lo que hizo, jamás hubieran pensado que Maxine haría algo.

- me duele! Me duele! Mamá!

- tranquila Rina...AYUDA!!!!

La mayor gritaba por ayuda mientras su hermana estaba tirada en el piso retorcida de dolor y con la sangre salpicando por todos lados; para cuando las doncellas llegaron, se asustaron de ver tanta sangre, la Duquesa también entro.

- ¿que esta pasando aquí?

- mi señora...ella...fue Maxine...ella le hizo eso a Rina...

Maxine estaba de pié, tranquila observando todo, la doncellas rápidamente se llevaron a Rina y la mayor de nombre Rika, no dejaba de acusar a Maxine, ella sabía que su madre no la favorecía mucho, sería fácil hacer que la castiguen.

- solo la saludamos y de pronto ataco a a Rina...

- Maxine ¿puedes explicar que paso?

- madre, yo estaba por retirarme, ellas me empujaron y durante el forcejeo, la hermana Rina cayó y la pluma atravesó su mano.

- no es verdad, tu la atacaste. Duquesa mi madre exigirá un castigo.

La Duquesa miro con severidad a Rika y esta se mantuvo callada.

- todo fue un accidente, si tu madre quiere pelear adelante, pero que no olvide quien es la autoridad entre las mujeres del Duque.

Rika guardo silencio y se fue de la sala, la Duquesa hizo que Maxine también se fuera, mientras que observa el lugar, era evidente que no fue un accidente debido a la sangre del libro sobre la mesa, pero no piensa darle razón a las hijas de una simple concubina. Más tarde toda la mansión sabía sobre incidente, la madre de Rina había ido personalmente con el Duque para pedir un castigo severo hacía Maxine y por supuesto la Duquesa estaba presente, Rina estaba ahí también con la mano vendada, se veía pálida y decaída debido a la perdida de sangre.

- entiendo que Maxine sea su hija legítima mi señor, pero no es justo lo que le hizo a mi niña. Pido se le de un castigo, debe ser justo con todas sus hijas.

- recuerdo haber dicho que sus pleitos de mujeres se arreglan entre ustedes, no me interesa saber quien empezó qué. Si tu hija no pudo contra Maxine, es porque es una inútil, Maxine es mucho más pequeña, que vergüenza eres como madre que crías a una inútil.

La concubina solo se quedo callada y tuvo que retirarse, la Duquesa también así lo hizo. La concubina estaba totalmente molesta, creyó que con llevar el asunto con el Duque, Maxine sería castigada, pero solo ha recibido un insulto. En su habitación Maxine observa desde su ventana a la concubina salir del área de residencia del Duque, Maxine sabía que al Duque no le iba a importar ese asunto, así que de ahora en adelante se irá deshaciendo de todos aquellos que le hayan hecho daño o que le estorben, pues en esa mansión, sobrevive solo el más fuerte. Al día siguiente su madre había ido a su habitación, estaba enojada por lo sucedido.

- no me causes más problemas Maxine. Por el momento a tu padre no le importo, pero si haces algo más, llamarás su atención y no quiero problemas.

- he soportado a ese par durante mucho tiempo, ya era tiempo de mostrarles, quien la hija legítima de la familia.

- lo importante es que hagas lo que se dice, tu padre ya arregló tu matrimonio, solo debes centrarte en eso.

Maxine no responde nada más, solo le pide a su doncella Annie que le ayude a peinarse, ya que sus clases empezaron pronto.