Mi nombre es Amber Sáez Uzcátegui, tengo 26 años, soy una chica muy alegre, extrovertida, me encanta mi trabajo disfrutar.

Pienso que el amor es importante, también pienso que cuando el amor toque a mi puerta sabré discernir si es o no, soy alta, delgada, cabello castaño, ojos claros, piel clara, trabajo en la constructora Lombardi, donde soy arquitecto, desde hace un año.

 Mi mejor amiga y compañera de trabajo se llama Angélica Pineda, también arquitecto, nos conocimos en la Universidad dónde forjamos una bonita amistad.

Las dos tuvimos suerte de conseguir trabajo en esta constructora, al poco tiempo de llegar a esta ciudad contamos con esa suerte.

 Mi novio Lucas Lombardi, dueño de la constructora, para la cual trabajo, tenemos 6 Meses de estar saliendo formalmente, él me ha dicho en varias oportunidades que quiere casarse, pero aún no creo estar lista para esa responsabilidad, mi carrera apenas va en ascenso y no quisiera tener que pararla por un embarazo, considero que aún es pronto para pensar esas cosas, y eso se lo he hecho saber a Lucas.

Mi amiga Angélica me apoya, en mis decisiones, siempre que yo esté feliz y me sienta feliz, ella estará de acuerdo conmigo, así que me apoya en mi decisión de no querer casarme aún y menos en tener un hijo.

En este momento estamos trabajando en un proyecto para conseguir la licitación de una posada turística en una zona montañosa de los Estados Unidos, estamos elaborando los planos, ya que debemos competir con otra constructora, la constructora Montreal, la presentación será en un mes por esta razón estamos corriendo por todos lados plasmando lo que el cliente desea.

Tanto Lucas, Angélica y yo todos estos días hemos terminado de trabajar muy tarde, luego llegara el momento de los diseñadores de interiores para que todo quede perfectamente organizados y así poder entregarle al cliente un trabajo limpio y totalmente de su agrado.

Lo que se quiere es conseguir la licitación, al ser aprobado viajar hasta el lugar para comenzar con la construcción, Lucas, mi novio y otro de los arquitectos tendría que viajar con él.

Angélica ha estado enamorada de un chico desde hace mucho tiempo, aunque somos amigas, ella no me ha querido decir quién es, excusándose en que es un amor prohibido, que él nunca se fijaría en ella, de igual manera me gustaría que contará conmigo para poder ayudarla si ese fuera el caso, pero no puedo obligarla a qué me diga algo que no quiere, por esa parte no le digo nada más.

Angélica es una mujer muy hermosa 1.70 de altura delgada, pero con sus atributos cabello y ojos oscuros, piel bronceada, es realmente muy hermosa, no tiene nada que envidiarle a ninguna otra mujer, aunque los hombres le llueven por todos lados.

Las dos compartimos apartamento, ya que no somos de este lado del país, tuvimos mucha suerte que al graduarnos decidimos marcharnos a donde pudiéramos tener más oportunidad de avanzar en nuestra carrera, al poco tiempo de llegar a este estado conseguimos este grandioso trabajo donde no solo nos abrimos camino para nuestra carrera, sino que también conocí a mi novio, Lucas.

Es un hombre grandioso, 1.80 de estatura, ojos azules como el cielo, piel clara, cabello rubio como el sol y un cuerpo de infarto, es atento, caballero, educado, y respetuoso, en todo este tiempo que llevo de conocerlo no he escuchado que sea un mujeriego es muy dedicado a su trabajo, anteriormente tenía una novia que lo engaño, ya que ella estaba interesada era en su dinero en su posición social y aun con eso él sigue siendo un hombre muy correcto.

Él quiere tener una familia, un hogar, tener hijos y ser felices como perdices, aunque a veces no sé si yo sea la persona correcta porque en estos momentos dentro de mis planes no está por lo menos no en un corto plazo, más adelante podremos pensar en esa posibilidad, además solo estamos comenzando en nuestra relación debemos conocernos un poco más, conocer a nuestras familias para así poder formar un bonito hogar donde todos nos llevemos bien.

En la constructora el ambiente es muy agradable, todos trabajamos para llegar a ser reconocidos, ya que la constructora es relativamente nueva y mi amiga y yo que somos los únicos arquitectos por ahora.

—Buen día, amor, ¿cómo estás?, ¿pudiste descansar?—Amber besa los labios de su novio tiernamente.

—Si, amor logré descansar, ¿y tú descansaste?

—Si amor, llegue a casa rendida, pero no importa, lo importante es terminar el proyecto y quedar seleccionados—Amber se sienta en las piernas de su novio, pasa sus brazos por el cuello y besa los labios de Lucas con pasión—Me tienes abandonada, estos días no hemos tenido tiempo para nosotros—Le dice esto haciendo pucheros.

—Mi vida, sabes lo que me encanta estar contigo, pero este proyecto nos roba el tiempo y lo poco que nos queda es para descansar.

—Bueno amor, pero vamos a aprovechar que estamos aquí solitos y que los demás no han llegado y me das un poquito de atención. Lucas busca la boca de su novia con desesperación introduciendo su lengua, haciéndole saber que él también desea ese momento más que nada.

Se besan, él introduce su mano por debajo del vestido, ella al sentir el roce de sus dedos en su intimidad suspira y suelta un gemido ahogado en la boca del hombre, este introduce sus dedos en la intimidad y comienza a moverlos con mucha desesperación, Amber deja de besarlo porque su respiración y sus ganas de gritar por el placer no la dejan, solo jadea se cubre la boca con la mano, ya que afuera de la oficina la pueden escuchar.

Lucas saca los dedos, se levanta con ella en sus brazos, parece un lobo hambriento, la sube en el escritorio y le quita las bragas, procede a introducir la lengua en su interior, ella está desesperada, en la oficina solo se escuchan gemidos, Amber agarra la cabeza de Lucas para que haga más presión en su zona de placer.

Ella solo se deja llevar hacia atrás en un delicioso orgasmo, cuando Lucas se levanta y baja sus pantalones para introducir su dureza en Amber, tocan a la puerta, ambos instintivamente miran hacia el lugar de donde Provino el sonido.

—¿Quién?

—Lucas disculpa, es Angélica, estoy buscando a Amber—Angélica tiene un rato afuera de la oficina escuchando a su amiga disfrutar de su novio, pero eso a Angélica le molesta mucho, es que ella está enamorada de Lucas.

Pero sabe que ese hombre jamás va a voltear a verla, así como sabe que ella es su amiga y estaría muy mal que esté con su novio, bueno es lo que ella se mentaliza, pero oírla allí dentro como disfruta, lo único que ha hecho es avivar las ganas de tenerlo.

—Angélica nena, espérame en la oficina, ya te alcanzo—Angélica, que está del otro lado, voltea y se va, aunque ella trata por todos los medios de no sentir celos de su amiga y su novio cada día que pasa es más difícil.

Lucas y Amber se besan, Lucas se acomoda la ropa y se sienta otra vez en su lugar, Amber, aun con la respiración a millón.

—¿No vamos a terminar?

—Ya Angélica llegó amor, ve a trabajar, después seguimos con esto, en la tarde cuando salgamos te vas conmigo a mi apartamento y allí podremos terminar esto y todo lo que quieras ¿te parece?

—Está bien amor, espero entonces que pase el día rápido—se arregla la ropa, se limpia su intimidad y coloca su braga, le da un beso y sale de la oficina antes de salir, le lanza un beso y sale a su oficina donde está su amiga esperando por ella.

—Disculpa si interrumpí algo—Le dice Angélica con un poco de vergüenza y celos, celos porque muy dentro ella quisiera ser quien estuviera con él.

—Tranquila nena, no es nada, esta noche no me iré contigo al apartamento, Lucas me invitó a quedarme con él—Angélica le da una sonrisa triste 😔 y comienzan a trabajar.

Realizar los planos es un trabajo sumamente delicado, dónde hay que dedicarse, un error en el plano conlleva qué la construcción sea un desastre, por tal motivo hay que revisar el trabajo hecho, cada línea a la medida exacta, así que las dos amigas deben trabajar juntas cada una hace una parte de la posada y luego las ideas se plasman en la computadora donde se va a proyectar el diseño.

El día paso lento Amber estaba estresada, Angélica no estaba siendo de gran ayuda este día, parecía distraída y había dañado el boceto varias veces, cuando por fin lograron terminar ya eran pasada la media noche.

Angélica había saboteado el trabajo varias veces con el propósito de volver a revisar todo el trabajo para poder descubrir de dónde venía la falla, todo con el propósito de que Amber y Lucas no pudieran salir, a decir verdad ni ella sabe porque lo hace, pero actúa como una ex toxica.

—¡Que tarde es! Lucas ya se iría y no pasó a buscarme—Lo que la chica no sabe es que unas horas atrás mientras ella fue al baño Lucas habia ido por ella, pero Angélica le dijo que ella no iría con él, porque queria terminar el boceto, pero esto era algo que Angélica no le diría a su amiga.

—Bueno nena vámonos a la casa solo tenemos un par de horas para descansar— llegaron a su casa y cada una se fue a su habitación.

Descansaron, al sonar la alarma Amber no quería levantarse, tenía mucho sueño y estaba muy cansada, dió varias vueltas en la cama antes de decidir levantarse.

—Menos mal no me fui con Lucas si no estuviera peor de cansada—Dice la chica limpiando los ojos, se ducho se puso un vestido pegado a su cuerpo color verde esmeralda que hacían juego con sus ojos.

Angélica toco a su puerta para decirle que ya debían irse, Amber salió apresurada de la habitación.

Al llegar a la constructora, se dirigieron a la oficina de una vez no le dió tiempo de pasar a saludar a Lucas, en la oficina debían terminar el boceto, para poder avanzar a la próxima parte que es el diseño de interiores y ellas ya no tendrían tanto trabajo que hacer, pero igual ellas son las encargadas del proyecto y deben velar porqué todo esté en armonía y que este plasmado el punto de vista del cliente.

A la hora del almuerzo, Lucas invito a las chicas a comer, ya que todos estos días han estado trabajando mucho y no han tenido tiempo para comer como se debe, salieron al restaurant que está cerca de la constructora, un restaurante muy lindo muy concurrido, en la mesa contigua estaban unos chicos que hacian otra cosa que mirar a Angélica pero ella ni cuenta se da, solo tiene ojos en este momento para Lucas.

—Angelica disimula pero mira el chico de la mesa de allá no deja de mirarte.

—Sabes que no ando pendiente de eso Amber— dice la chica mirando a Lucas este solo le sonríe.

—Nena tienes que divertirte, no te estoy diciendo que te cases ni nada pero que salgas y conozcas otras personas no se eres joven bella, profesional no debes estar sola.

—Es cierto —Dice Lucas—no todo es trabajo también hay que divertirse.

Angelica mira a Lucas con los ojos brillosos, Amber confía tanto en su amiga que no le presta atension a la manera en que se comporta su amiga cuando está con Lucas.

—Amor, antes que se me olvide cuando terminemos el proyecto tenemos que viajar, mi papá te quiere conocer, le dice agarrando la mano de Amber y dandole un beso en los nudillos.

—¿Para dónde tu papá? ¿amor y si no le caigo bien?

—No digas eso, mi papá te va amar tanto como te amo yo, tú no te preocupes el no es un ogro.

Angelica al escuchar y ver al par de tortolitos se levanta y se va sin que ellos puedan darse cuenta, por este motivo es que a ella no le gusta salir con su amiga cuando sale con Lucas.

—Está bien amor esto nos sirve también para tomarnos unos días, de descanso, que bien merecido nos lo tenemos.

—Perfecto amor así quedamos entonces, sabes que anoche me dejaste plantado me tuve que ir a dormir con muchas ganas de ti— le dice al oído haciendo que Amber suelte un pequeño jadeo. ¡¡ah!!

—Espero que está noche no me dejes con las ganas muerde el lobulo de la oreja, erizando la piel de la chica quien ya está mojada, deseando estar en un lugar más solo para brincarle encima a su novio y comérselo todito, lo que Amber y Lucas sienten es pasión, deseo porque ella no se ve casada con el formando una familia.