Elizabeth es una mujer hermosa, tiene 2 hijos una niña de 8 años y un niño de 10, todo parecía estar bien ante los ojos de las demás personas ella parecía vivir bien y ser feliz como en un cuento de adas pues tenía por esposo al hombre más cotizado y guapo de la cuidad, pero la realidad era otra ella estaba pasando por una situación muy difícil.

Su esposo era de una familia adinerada y ella prácticamente fue vendida por su padre por dinero y poder, por eso su esposo hacia lo que se le daba la gana, la humillaba y la maltrataba no importaba quien estuviera en casa incluso lo hacia enfrente de sus hijos, la niña tenía miedo y tristeza por lo que le hacían a su mamá pero no decía nada pues a la vez aun no entendía por que pasaban esas cosas.

El muchacho se avia convertido en una persona fria que no le importa nada ni nadie a su corta edad ya avia visto demasiadas cosas pero gracias a eso maduro demasiado, y todo ese desinterés era superficial, solo quería tener a su padre de su lado para poder vengarse en nombre de su madre.

El la engañaba muchas veces, ella siempre se dio cuenta pero no se atrevia a decir nada por miedo, por que si ella reclamaba algo recibía gritos, insultos o hasta golpizas y la encerraba por días, ella nunca dijo nada a nadie por que el la amenazaba diciéndole que si ella decía algo el se iva a encargar de hacerla quedar como una zorra diciendo que ella lo engañaba con varios hombres y así quitarle a sus hijos y no darle ni un solo peso y ya nadie se iva a fijar en ella.

Y así fue transcurriendo su vida tan miserablemente hasta que un rayo de luz entro para darle un poquito de felicidad, pero sin saber que gracias a eso llegaria el dia en que casi pierde la vida.

En una mañana Elizabeth se levanto como todos los días y se aseguro que todo este listo para el desayuno. Ya en la mesa ella nunca hablaba pero esta vez sintió ganas de platicar con su hija:

Elizabeth: Buenos días Samanta,¿Como amaneciste hoy? (sonriendo)

Samanta: Buenos días mamá, muy bien gracias y tu mami dormiste bien anoche (con duda ya que la noche anterior se avían escuchado gritos)

Elizabeth: Claro que dormí bien hija (sonrisa forzada)

Samanta: Que bueno mamá (triste)

Elizabeth: Dime como te va en el colegio espero que muy bien (sonriendo)

Samanta: Si mamá me llevo muy bien con mis compañeros y tengo muy buenas calificaciones (llena de entusiasmo)

Elizabeth: Que bueno, me da mucho gusto y tu Carlitos que me dices ¿Tienes muchos amigos?

Carlos: Por favor mamá, cuantas veces te tengo que decir que ya no soy un niño no me llames "carlitos" (enojado)

Elizabeth: Lo siento hijo, yo no creo que sea malo que te llame así para mi todavía eres mi niño (con ternura)

Carlos: Acaso eres tonta, ya te dije no me llames así y punto (Golpea la mesa)

Samantha: (Brinca del susto)

Elizabeth: Per...perdon (asustada)  No volverá a suceder.

Carlos: Tsk... (sonido de chasqueo de lengua) Esto es insoportable, me voy. Adiós papá (indiferente)

Padre: Adiós hijo y recuerda ser siempre el mejor en todo (orgulloso) no me defraudes.

Carlos: Claro papá... (se va)

Padre: Bueno ya que has arruinado el desayuno ya estarás contenta.

Elizabeth: Yo... yo no quería...

Padre: Cállate!! Todo lo que sale de tu boca es basura (enojado)

Samanta: Papa, no le digas esas cosas a mamá (nerviosa)

Padre: Tu te callas, si no quieres ser tratada igual que ella.

Elizabeth: No te preocupes hija, anda vete ya a la escuela o llegaran tarde (apunto de llorar)

Samamta: Esta bien mama... (con tristeza se va)

Padre: Yo también me voy el solo verte me enoja (arto)

Elizabeth: (Solo agacha la cabeza)

Padre: A y no me esperes hoy, probablemente no venga a dormir.(Agarra sus cosas y se va)

Elizabeth: (sola en la mesa llorando, se pregunta por que tiene que vivir de esa manera)

Mientras termina su desayuno:

"Por que tengo que vivir así, si puedo escapar y ser libre, ir a un lugar lejos donde no conozca a nadie para que nadie me encuentre ni mi familia y mucho menos mi esposo" (mira por la ventana con ilusión) Pero no puedo. (agacha la cabeza) Tengo a mis hijos tengo que seguir adelante por ellos, se que si me voy no me los podre llevar conmigo.

Elizabeth: "Bueno ya basta, tengo que dejar de pensar esas cosas. Tengo que ser fuerte" (se levanta)

Sirvienta 1: Señora, con permiso.

Elizabeth: Adelante ya puedes recoger (sale al jardin)

En el jardín.

Elizabeth: Las flores son hermosas, tengo que seguir cuidandolas así (mientras las acaricia)

Sirvienta 2: Si señora son preciosas y a la señorita Samanta le encantan (sonriendo)

Elizabeth: Lo se, además esto me distrae.

Sirvienta 2: (solo agacha la cabeza sin saber que decir)

Elizabeth: No te preocupes (la voltea aver) yo se que estas enterada de todo igual que el resto de la casa.

Sirvienta 2: Lo siento mucho señora.

Elizabeth: No tienes por que disculparte, son cosas que pasan(voltea a ver a las flores con un poco de tristeza)

Elizabeth toma su almuerzo sola, después cuando ya entro la noche.

Elizabeth: Ya va siendo hora de cenar, llama a los niños (le dice ala sirvienta 2)

Sirvienta 2: Si señora (sube a buscarlos)

Ya en la mesa

Elizabeth: Samanta como fue tu dia hoy?(sonriendo)

Samanta: Muy bien mamá, gracias (sonriendo)

Carlos: Ya termine (se levanta)

Elizabeth: Tan pronto hijo pero casi no comiste (preocupada)

Carlos: No tengo mucho apetito y antes de que comiences con tus preguntas mejor me voy a mi habitación (con tono seco)

Samanta: Mama no entiendo por que el te trata de esa manera (con frustración)

Elizabeth: No te preocupes hija, sabes que solo es su apariencia para alejar a los demás pero detrás de todo eso el nos quiere y mucho (le acaricia la mejilla) anda termina de cenar.

Samanta: Bueno si tu lo dices mamá.

Elizabeth: Si, tu solo ten paciencia.

(después de un rato)

Samanta: Bueno mami ya termine me voy a mi habitación.

Elizabeth: Bueno, pero no te quedes hasta muy tarde despierta.

Samanta: No mami (le da un beso)

Después de un rato Elizabeth sube a su habitación, se arregla para ir a dormir ya que nunca espera que su esposo llegue a dormir

Ya pasadas las 3 de la madrugada llega su esposo tomado, Elizabeth escucha el ruido del carro y hace todo lo posible por permanecer quieta.

Mientras que el entra como puede y sube las escaleras casi gateando de lo borracho que estaba, llega a la habitación gritando.

Padre: Elizabeth!! ... ELIZABETH!!!

Elizabeth: (se gira en la cama y lo mira)

Padre: Ahí estas... ven aquí que quiero que me sirvas hoy.

Elizabeth: (con mucho miedo se sienta en la cama)

Padre: No estas oyendo!!... Bueno si no vienes tendré que hacerlo yo (se acerca a la cama y se para enfrente de Elizabeth.....)

Se acerca a la cama:

Padre: Vamos desvistete!!

Elizabeth: No...Por...por favor (con mucho miedo)

Padre: ¡¡Ahora!!

Elizabeth: Por que mejor no te calmas y descansas, debes de estar muy can...

Padre: (la cachetea) Crees que vine para que me digas lo que tengo que hacer.

Elizabeth: No...yo no me atrevería ( llorando y agarrándose la mejilla)

Padre: Crees que puedes ordenarme ¿a mi?

Elizabeth: (niega con la cabeza)

Padre: Yo Sebastian Montes de Oca, que tengo todo y a todos a mis pies, piensas que te voy a escuchar a ti (con desprecio) A alguien que se vendió a si misma para salvar a su padre de la miseria.

Elizabeth: (Se queda sorprendida y paralizada) "pero yo no tuve la culpa fue mi padre quien me vendió, yo no pude hacer nada ¿es por eso que me tratas de esta manera?" (se enoja y comienza a gritar)

Sebastian: Levántate que te estoy hablando.

Elizabeth: ¡¡Yo no tengo la culpa!!

Sebastian: (se sorprende) ¿Que dijiste?

Elizabeth: ¡¡Yo no me vendí!! fue mi padre quien me obligo (llorando)

Sebastian: Y eso que, pudiste a ver echo algo pero tampoco luchaste por que en el fondo te gustaba la idea de tenerlo todo tan fácil ¿no es así?

Elizabeth: ¿Por eso me tratas de esta manera? (dándose cuenta)

Sebastian: Eso no importa... (un poco nervioso) Ya eres mi esposa y tienes que cumplir con tu deber.

Elizabeth: (trata de escapar)

Sebastian: A donde vas, eres mia (la agarra de las piernas y la jala)

Elizabeth: No por favor, déjame ir (suplicando)

A el no le importan sus suplicas, la jala, le arranca la ropa interior y se coloca encima de ella besandola por todas partes, ella trata de zafarse o defenderse sin éxito, el es muchísimo más fuerte.

Después ella se da por vencida, ya lo único que quiere es que todo pase rápido, el se da cuenta que se rindió y aprovecha para hacer lo que desea y la toma como quiere... al terminar....

Elizabeth: "¿Por que? Por que me haces esto, yo de verdad llegue a sentir algo por ti (llorando) ¿desde cuando todo cambio?"

Sebastian: "No te haría todo esto si no fueras tan interesada" (se levanta y se va al baño)

Elizabeth: (se sienta agarrando sus rodillas)

En el baño:

Sebastian: Joder!! (golpea la pared) A pesar de todo el sexo con ella es bastante bueno.

Elizabeth: (Escucha el golpe) Que pensara ahora, no, tengo que vestirme rápido (se viste y se acuesta envolviéndose en las sabanas)

Sebastian: (sale y se queda mirando) "Si tan solo no fueras de esta manera y te dieras cuenta de la verdad" (se acuesta y se duerme)

A la mañana siguiente:

Elizabeth: (comienza a despertarse) "Ya es de mañana tengo que arreglarme y bajar a supervisar el desayuno antes de que Sebastian se levante"

Sebastian: (siente el movimiento) "Que estará haciendo"

Elizabeth: "Tengo que estar presentable así no notaran mis ojos hinchados de tanto llorar"(se coloca maquillaje y algunas joyas)

Sebastian: (medio abre los ojos y la mira) "No puede esperar para ponerse todo esa joyería verdad, como si no le importara lo que paso (se molesta)

Elizabeth: Bien todo listo, es hora de bajar.(sale de la habitacion)

Sebastian: ¡¡Maldita sea!! (se sienta) No te importa nada, solo seguir siendo la dueña de esta casa no (se levanta)

En ese caso, no te la dejara fácil (sonríe maliciosamente).....