Y así llego hasta este punto, necesito entender como pude equivocarme tanto, y de repente Ximena aparece sacándome de mis pensamientos, Elisa, ¿qué paso?, estás hecha un desastre y quien pasa se te queda viendo...

Vamos, necesito sacarte de aquí y que me expliques que paso con Damián.

Ximena estoy cansada, todo es un malentendido, pero simplemente Damián me dijo que nunca espero que lo traicionara, que su amor por mí era inmenso y que en estos momentos solo podía sentir odio por mí.

Elisa, ¿de qué malentendido hablas?.

Me cuestiono quien es Jaime, nuestro compañero de inglés, me dijo que nos vieron juntos y que él me besó, cosa que tú sabes que no fue así.

¿Entonces? - pregunta Ximena.

Pues Damián cree que él y yo tuvimos algo que ver, se creó una película en la cabeza y ahora no sé qué hacer, además de sentir como el corazón está hecho pedazos después de lo cruel que fue con sus palabras y además terminamos.

Hola Xime, Elisa, pensamos que ya no andarían aquí, son vacaciones...

A ver Javier, hoy es el último día de clases y teníamos algunos pendientes, ¿verdad, Elisa?.

Si, Javier, como dice Ximena, teníamos aún pendientes.

Hola Elisa, ¿estás bien?

Hola Santiago, sí, todo bien, y ¿tú?

Bien, ya con un paso de las vacaciones, y listo para ir a uno de los pueblitos de aquí cerca con mi familia.

Eli, ¿segura que estás bien?, te notó extraña, pensé que andaría tu novio por aquí.

Bueno, Elisa y yo nos tenemos que ir, nos dio gusto verlos, nos vemos después de vacaciones.

Claro, nos vemos después...

Vamos Elisa, te estás poniendo pálida y te ves agotada.

Ximena, ¿por qué le das tantas vueltas a Javier?, está loco por ti.

Y Santiago por ti y no te quieres dar cuenta, eres el sueño de ese hombre Elisa.

No, no, no, Santiago y yo solo somos muy buenos amigos, imagínate como es y como soy yo, juntos somos dinamita, explotamos en menos de 5 segundos.

Talvez, eso es lo que los hace perfectos juntos...

Pasaron los días y las cosas comenzaron a enfriarse entre Damián y yo, Ximena seguía muy al pendiente y yo me sentía en un abismo, Damián me comenzó a enviar mensajes y a llamar, los primeros días habían sido difíciles, ya que me insultó y me dijo que estaba haciendo lo mismo que yo...

Elisa, necesitamos hablar, sé qué fui un loco celoso, pero no puedo pensar que estés con alguien más, yo te amo.

Vaya clase de amor, Damián nunca te engañe te creaste una película y no me dejaste explicar, pero tú bien me insultaste y me dijiste hasta lo que no merecía, ¿qué se supone que haga con todo eso?

Perdón hermosa, necesitamos volver a estar juntos, a sentirnos, a entregarnos, tú eres mía y solo mía, no me dejes...

Damián no lo sé, así como tú dices estar herido, lo estoy yo, necesito tiempo.

¿Tiempo?, Elisita, mi amor, te amo y solo quiero que te portes bien y estemos bien juntos, nos vamos a casar y lo sabes, nos pertenecemos.

¿Qué me porté bien?, de que hablas, yo siempre he sido una novia que está al pendiente, que te ha dado todo y tú me dices eso...

Ya mi amor, volvamos, ¿sí?

A sí comenzó la historia, que estaba empezando a ponerme con los pies en el suelo, únicamente que en ese momento no lo sabía, no entendía como me estaba perdiendo tanto, pero al final sería para encontrarme y volver a sentir.

Elisa, te necesito, te he extrañado tanto, déjame estar contigo de nuevo...

Damián, no dudes de mí, yo te amo, y quiero estar contigo.

Solo te pido que te portes bien, que me seas totalmente fiel.

Damián, no me digas eso, yo de verdad te amo.

Vamos, te llevaré a un lugar especial amor.

Damián tengo que volver temprano a casa.

No te preocupes, llegaremos a tiempo, vamos hermosa.

Llegamos a un hotel, sabía lo que tenía en mente, y siendo honesta no quería, no deseaba que me tocará, si lo pensaba en todo esté año en el que había estado con Damián no sentía mucho al estar con él en la intimidad, sus caricias y besos no provocaban tanto y eso me hacía dudar de lo que sentía por él.

No Elisa, tú amas a Damián es el primero en tu vida y debería, ¿ser el último?

Elisa, amor, ¿en que tanto piensas?

En nada amor, en lo bien que me siento contigo.

Y así Damián comenzó el "arte de la seducción", el juego previo al acto de más entrega de dos seres que se aman, sentí como recorría cada parte de mí y como sus besos iban dejando un camino húmedo sobre mí, por cada parte de mí, y yo solo quería que esto acabará.

Una vez que terminamos, llegamos a mi casa a cenar y ahí estaba una vez más a los pies de este hombre, que me envolvía con sus palabras y sus promesas de amor.

Pasamos las vacaciones en un eterno romance que no queríamos que acabará y aun cuando en la intimidad no me sentía plena, me repetía a mi misma que debíamos estar juntos, que era el amor de mi vida.

Estábamos por regresar a clases, y ese último fin de semana Damián se encargó de recordarme que estaría muy al pendiente de mis movimientos y que me portara bien, odiaba esas dos palabras, realmente comencé a sentirme culpable y me tenía en sus manos.

Llegó el lunes y era momento de regresar, quedaban 2 semestres para comenzar prácticas profesionales y de ahí la graduación.

Me levanté, tome un baño, me arreglé, opte por ir cómoda unos jeans, una blusa de tirantes, ya que el calor se hacía presente y tenis, desayune y estaba lista para el nuevo semestre.

Al llegar, me encontré a Ximena, y con ella una bola de amigos, entre ellos Javier y Santiago, después de revisar que clases llevaríamos juntos, tomamos nuestro rumbo.

El día estaba transcurriendo de lo más normal, cuando comenzaron a llegar mensajes de Damián, como va el día, si estaba portándome bien, y diciendo cuánto me amaba...

En ese momento me crucé con Santiago y Eduardo, teníamos clase de calidad y este semestre nos tocaría llevarla juntos.

A Eduardo lo conocíamos desde primer semestre, así que era parte del grupo de amigos, por otro lado, también coincidió con nosotros Elena, una buena amiga mucho más reservada y por lo que podía ver a Santiago no le era del todo indiferente, y por alguna razón eso me molestaba.

Cuando terminó el día, ya íbamos todos de salida a una cafetería que se encontraba cerca cuando Damián apareció, y se acopló a acompañarnos, lo cual no podía rechazar, me gustaba la idea que me comenzará a involucrarse con mis amigos, pero, por otro lado, no terminaba de sentirme cómoda.

Amor, ¿cómo estuvo el día?, vi que no estabas tan cómoda con mi presencia en la cafetería.

¿Cómo?, para nada amor, fue un día relajado, y me encanta que te involucres en mi círculo, ya que yo me he involucrado más en el tuyo.

Te amo Elisa, y muero porque acabemos la universidad para casarnos.

Damián, te amo.

Y así transcurrió el tiempo, en un abrir y cerrar de ojos estábamos por terminar el semestre, Damián cada día estaba más insistente en que debíamos casarnos en cuánto acabáramos la universidad, él terminaría primero, ya que iba un año arriba, y al ir en universidades distintas tenía un plan de estudios distintos, yo por mi parte le insistía en que primero nos acomodáramos laboralmente y después diéramos el paso.

Durante este semestre, estuve mucho más cerca de Santiago y por alguna razón me sentía segura con él, se convirtió en mi paño de lágrimas, porque aunque con Damián todo "marchaba bien" seguía dudando de mí y cada vez que podía me decía que le debía todo porque seguía conmigo a pesar de haberlo engañado, a éste paso ya hasta comenzaba a creer que si lo había engañado cuando nunca paso nada.

En ese momento mi miedo por estar sola, mi miedo por no encontrar a alguien que me amará, por mis inseguridades no me daba cuenta de que Damián me manipulaba, sí lo hacía acomodando todo a su favor, a que yo me sintiera menos, demasiado vulnerable, y aun cuando mis amigos intentaban abrirme los ojos yo simplemente no veía más allá.

El semestre terminó y un período de vacaciones llegó.

Era momento de un descanso.

Acaba de terminar el semestre y por fin un descanso, solo dos más y estaré buscando lugar para mis residencias.

Este semestre logré estar más cerca del amor de mi vida, Elisa, me duele verla atrapada en una relación sin futuro.

Desde que vi a Elisa entrando al salón de clases el primer semestre sentí como mi corazón se aceleró, no podía dejar de ver cada facción de ella.

Cuando nos presentamos con ella y Ximena, Javier y yo, simplemente sentí que tenía enfrente a la mujer de mi vida.

Vengo de una familia basada en el amor, somos de un pueblito cercano a la ciudad, y mis papás siempre nos han inculcado el respeto, honestidad y amor, aun cuando no todo ha sido bonito somos una familia unida.

Sé que no hay mujer que me haga sentir lo que ella despierta en mí, no suelo expresar mis sentimientos, soy sumamente seco y el romanticismo no es lo mío, podría decir que soy frío, aun cuando crecí en una familia bonita, la expresión de sentimientos no es algo con lo que estemos familiarizados.

Entre menos digamos, menos será la burla entre hermanos. Además, mis papás con todo su amor no suelen hacerse demostraciones de amor, tal vez por eso ocultamos nuestras emociones.

Pero Elisa, con solo verla, quiero abrazarla, besarla y hacerla mía, sí aunque estoy seguro que ella ya ha estado con su novio, no se trata de ser el primero siempre, a veces ser el último es lo que cuenta y algo en mí dice que ese seré yo en la vida de ella.

Este semestre logré conocerla más, es bella por fuera pero por dentro lo es aún más, carga demasiado y eso es lo que no logra ver, por eso sigue con Damián, no puedo decirle que lo deje porque se que no funciona así, ella necesita comprender que el amor no es así y entonces se que me verá, estoy seguro y dispuesto a esperarla el tiempo que sea necesario.

Me ha insinuado que estoy interesado en Elena, y aunque debo decir que podría ser la mujer ideal, Elena no es Elisa, no me es indiferente e incluso hemos estado a punto de salir, pero aunque intento salir con ella simplemente no sale la invitación de mi boca, y sé que podría intentarlo porque Elisa está en una relación, pero no sé, simplemente no puedo.

Esperaré a ver qué trae de nuevo este semestre, y espero haya una vía de escape porque ver a Elisa con Damián me hace hervir la sangre.

Por lo pronto, me relajaré e iré al pueblito con mi familia, intentaré no pensar mucho y simplemente disfrutar.

Sé que todo tomará su rumbo, tiene que pasar. Y solo espero Elisa se dé cuenta de la manipulación de Damián y pueda liberarse de esa relación que la está llenando de dudas.

Mientras pasa este tiempo de vacaciones comenzaré a pensar en mi futuro, el área de ingeniería en el que me especializare, no me he puesto a pensar en que sigue después de terminar, sé que trabajar pero en que área quiero estar.

Bueno, todo tiene que pintar bien.