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Si Pudiera Volver A Ti

¿Que harías, si?

Mi nombre es Mauricio Montero tengo 29 años y soy uno de los Ceos más jóvenes en la industria mercantil, mi vida es algo peculiar sin duda.

 

¿Alguna vez te has preguntado en si pudieras cambiar algo de tu pasado, que sería?

 

¿Alguna vez te has preguntado en qué le dirías a tu yo de hace más de 10 años? Muchos responderán cosas como no tomes ese camino, estudia más, no te cases o cosas por el estilo.

 

Bueno yo tuve esa oportunidad pero para cambiar la vida de la única mujer que he amado y la mía en el proceso, si vieje en el tiempo. Pero para darme a entender mejor comenzaré por el día que todo comenzó.

 

 ¿Me enamore?, si cometí errores y estupideces por amor, me enamore de la niña mas linda, dulce y tierna, pero cometí varios errores que me separaron de ella nunca le di el valor que ella merecía, todo comenzó con un apuesta si debo decir a ciencia cierta.….

 

Yo solía ser el chico más popular en la universidad, tenía “Amigos” y una novia hermosa que era tan popular cómo yo, pero terminamos, años después de que nuestra relación comenzará ….

 

[•••]*pasado*.

 

Me encontraba viendo como mis amigos corrían para patear una pelota odiaba ese juego no le miraba algo lógico correr detrás de una bola llena de aire y pensaba en ella en Mirna mi novia, pero no eran pensamientos bueno, como, como sorprenderla por su cumpleaños 19 que estaba próximo en unos días, sino en como terminarla, si quería terminar con ella.

 

–¿En qué tanto piensas he?- me  preguntó Mirna sorprendiéndome es como si con el pensamiento la hubiera imbocado, me besó enfrente de todos los que estaban hay quizá no lo hizo de mal plan pero últimamente no me gustaban esas demostraciones de cariño y ya se lo había dicho, últimamente ya no sentía eso que solía sentir cuando ella me besaba, ya no sentía esas enormes ganas de besarla y que todo el mundo supiera las ganas que traía de comerme a mi novia, nuestra relación ya era monótona y aburrida ya no había magia ni chispas electrificantés, o por lo menos yo ya no las sentía, mi vida se volvió tan simple, hasta el punto que ya ni mis amigos me hacían sentirme motivado o feliz, me sentía solo, vacío o hueco tal ves, ya nada era suficiente para mí lo que me rodeaba, estaba en espera, necesitaba eso que me hiciera alucinar pero por más que lo buscaba no lo encontraba o quizá el tiempo de su llegada una no era

 

–En nada!- dije. Sonreí y ella se sentó aun lado de mi puso su mano en mi hombro y voltee a verla, siempre lo hace cuando quiere que le preste atención, conozco muy bien su forma de ser que ya nada me sorprende, nada absolutamente nada de ella es nuevo para mí.

 

¿Me preguntó a dónde fue el amor que jure tenerle?

 

–¿Qué tal tu viaje?- le pregunté y ella guardó silencio por un rato, parecía pensar en que responder, como si tuviera temor de emitir palabras

 

–Mau creo que lo nuestro no está funcionando, deberíamos de terminar!- dijo ella, quizá fue el destino pero ame que lo dijera, ame no ser yo quien la terminará, ame que ella fuera la que diera el primer paso, por qué por desgracia si un hombre termina con alguien es tomado como un poco hombre o que ya tiene otra, aún que en mi caso no fue así, a pesar de que ya no había amor, nunca la engañe, no soy de esos hombres que teniendo novia andan detrás de otras y más por qué era el foco de atención de toda la universidad no mancharía mi reputación con algo así, pero aún así no quitaba el hecho de que yo ya no amaba a Mirna.

 

–ok.- Dije y desvíe  mi miraba a la cancha de la universidad donde jugaban mis amigos, yo no jugaba por qué no podía dejar de pensar en como terminaría con ella sin que ella saliera lastimada, me robaban la pelota a cada rato por mi desconcentración.

 

–¿Solo dirás ok?, ¿Mau eres un idiota, ni siquiera me preguntarás el por qué?- dijo molesta poniéndose en pie, le tome la mano y la hice sentar aún lado de mi, quizá como novios no funcionó pero ella antes era mi amiga así que no podíamos terminar molestos.

 

–¿Por qué?- Pregunté con indiferencia ya que ni siquiera me importaba el por qué, si ella me engaño en su viaje no me importaba, si ella dejo de amarme tampoco me importaba, lo único que quería era terminar con esa relación de 3 años donde los dos cambiamos, ella cambio yo cambié, después de entrar a la universidad nuestra relación ya no fue la misma ambos nos volvimos populares y nos importaba más lo que la gente dijera de nosotros que nuestros propios sentimientos, creo que en el fondo solo seguíamos juntos por qué nos acostumbramos a qué la gente nos dijera lo bien que nos mirábamos juntos, si suena estúpido, pero es muy normal en la juventud de hoy en día y más si tú estado económico o tu popularidad es lo que sirve de impulso para seguir con una relación más falsa que una actuación, si eso fue para mí está relación solo una actuación como la de Romeo y Julieta, un amor que supuesta mente vencería todo pero te llevo a la misma muerta, no una muerte física sino en el corazón

 

–Ya no te amo!- Dijo ella.

 

–Que bien, bueno me iré a jugar, Mirna, te deseo lo mejor.!- le dije y me fui sin mirar a atrás, baje los escalones con tanta tranquilidad, al fin termino esa farsa, suspiré aliviado.

 

Cuando baje mis amigos me aventaron la pelota y comencé a jugar con ellos.

 

Días después me di cuenta que Mirna dejo la universidad, ella ya no estaba, sentí feo sentí como si algo me faltará como si el oxígeno poco a poco dejara de llegar a mi, quizá era por qué en el fondo la quería, mas trate de no darle importancia, me concentre en mis estudios y salir adelante, heredaría la empresa de mi padre, y tenía que sacarla adelante por mi cuenta, así que se acabaron las fiestas, mujeres y amigos, mi vida se volvió solo mi pluma y mis libretas de apuntes, mi calculadora se volvió mi mejor amigo y mi computadora mi novia, si me volví un nerd pero no me importo dejar de ser popular.

Un día por curiosidad decidí buscar a Mirna en las redes sociales pero ella ya no aparecía, ni su hermana y la compañía de sus padre cerro, ella había desaparecido.

 

Y así pasaron los años hasta que llegue a la cima, no soy de esos típicos jefes arrogantes y déspotas, que le hablan a mujeres para que les hagan compañía de vez en cuando.

 

Pero así es como me tienen catalogado, gracias a la prensa amarillista dónde me tienen como una persona inalcanzable, mujeriego y arrogante, aún que en realidad no sea de tal manera.

 

“Estoy cansado de que la gente me vea así o que me juzguen sin siquiera conocerme.”

 

Pensé después de ver las noticias empresariales en mi computadora.

 

Me levante de mi escritorio y me dirigí a la ventana, mi vista favorita dónde todos se ven tan diminutos desde el piso 52, dónde puedo soñar que estoy en otra galaxia y no en un mundo tan cruel donde lo que manda es quien tenga más poder.

Aun seguía en busca de eso que me hiciera alucinar, pero por más que lo buscaba no aparecía, ya comenzaba a creer que eso no llegaría hasta que … Recibí esa invitación.

¿Que está pasando?

Se abre la puerta de mi oficina sin previo aviso.

–Hermanito!-

 

–Como siempre mi eufórica y encantadora hermana haciendo acto de presencia!- Dije con una sonrisa mientras ella corría y se me colgaba de los hombros y me abrazaba con tanta fuerza.

 

Me preguntó ¿Cuándo es que mi pulga creció tanto? Ella es 14 años más chica que yo y ya es todo una señorita con un gran futuro por delante.

 

–Mau, ¿A qué no sabes a quien vi hoy? Resulta que fui a acompañar a mamá al hospital a sus chequeos de rutina y me encontré con alguien.–

 

–Haber pulga ya dime a quien viste y no le des muchas vueltas– Dije torciendo los ojos, ella siempre trata de hacerse la importante y que la gente adivine lo que solo ella sabe.

 

–¿Te suena el nombre de Mirna?- me preguntó ella, sentí que perdía el equilibrio y me sujete de la orilla de mi escritorio.

 

–¿Mirna!?- Dije sorprendido, debo de admitir que siempre me pregunté que había pasado con ella, pero que mi hermana la encontrará tan fácil realmente me sorprendió, no me lo esperaba.

 

–Si, tu ex, hermano deberías de ir a verla. Ella se emociono mucho cuando me vio.– dijo ella con una leve sonrisa y después su mirada reflejo dolor y tristeza.

 

Ella y Mirna se llevaban muy bien, en ocasiones creía que mi hermana la quería mas a ella que a mí que soy su hermano.

 

–No creo que está bien que vaya a verla.– Dije y rodee mi escritorio y me senté en la silla, no puedo olvidar ese día donde terminamos y como me fui sin mirar a atrás, ella me ha de odiar.

 

–Mau, en verdad deberías de ir a buscarla.– Dijo ella cabizbaja. –A ella le dará gusto verte, lo poco que hable con ella me di cuenta que ella te quiere, Mau por favor búscala. Antes de que…–Ella se quedó en silencio y pensó en cada palabra que diría.

 

–Pulga, antes de que?- pregunté intrigado más por la enorme pausa que hizo para terminar de hablar.

 

–Antes de que te la bajen!- Dijo y sonrió.

 

–Pulga, Mirna y yo no somos nada desde hace más de 10 años ya hasta se ha de haber casado.– alce unos de los papeles de mi escritorio y comencé a formar.

 

–Solo bromeaba, pero Mau, no pierdas tiempo para disculparte con ella, ella tiene cáncer..–

 

Voltee a verla creí que era otra broma más de mi pequeña pulga, pero no su cara demostraba una enorme melancolía.

 

–Cáncer?- pregunte.

 

Aun no puedo creer que ella tenga cáncer, siempre se cuido mucho, cada cosa que comía, contaba cada caloría de la comida y nunca descuido su salud, incluso cuando iniciamos con nuestra vida sexual ella fue la que tomo la iniciativa para buscar un ginecólogo para que nos asesorara y buscar métodos en los cuales protegernos de un embarazo no deseado.

 

Y ¿Ahora ella con cáncer?

 

–Si Mau es cáncer en etapa terminal, según lo que ella me contó solo le quedan días o semanas.- Mi pulguita comenzó a llorar mientras arrastraba una tras de otra las palabras que salían de su boca, me puse en pie y corrí a su lado la abrace y ella no paro de llorar

 

“¿Cáncer terminal?”

 

Mi mente estaba en blanco, trataba de consolar a mi hermana, pero no podía dejar de pensar en Mirna en esa sonría en su rostro que siempre mostraba a todos, ha de ser muy difícil para ella pasar por este proceso, a pesar de los años de separación, nunca desee saber de ella por esa causa

 

–¿En qué hospital está?- Pregunté en lo bajo sin soltar a mi pequeña hermanita.

 

–Donde va madre ha hacer sus estudios, no recuerdo el nombre!- Dijo ella sollozando.

 

–Muy bien.- Dije

 

Después de un rato Mi hermana se fue, volví a quedarme solo, saldría de viaje en un a hora y no volvería en una semana más.

 

Fui a mi departamento a empacar, pero antes de irme quería ir a ver a Mirna, quizá no quiera saber de su ex pero algo dentro de mi me orilla a querer saber de ella.

 

Tomé las llaves de mi auto, pero antes le hable a mi madre para saber en qué hospital estaría ella.

 

Me mandó la ubicación

 

Mientras conducía no dejaba de pensar, en qué le diría o como me disculpara con ella, si mi hermana y mi madre me dicen que soy un pensador sin remedio, ya que si voy a mover algo pienso las mil maneras en qué quedaría mejor.

 

Pero esta vez por más que pensaba, me dolía más el pecho.

 

Cuando llegue a hospital me recibió la recepcionista.

 

–Buenas tardes joven, ¿Puedo ayudarle en algo?- pregunto amablemente.

 

–Disculpe ¿me podría decir en qué habitación se encuentra Mirna Ruiz?-.

 

–Déjeme revisar!- la recepcionista comenzó a teclear sin parar en su computadora.

 

Después de algos minutos ella alfin hablo.

 

–Joven, la paciente Mirna Ruiz acaba de fallecer, ella falleció hace una hora.- Dijo ella muy seria.

 

Una lágrima rodó por mis ojos, ni siquiera me despedí de ella, en el pasado ni en el presente.

 

–Podría decirme si sus familiares están aquí!?- Dije con desánimo.

 

–Esa es información confidencial, lo que si puedo decirle que ella está en la habitación 405.- Dijo y me apunto al elevador, por primera vez no me detuve a pensar en qué hacer, salí corriendo y subí a ese elevador poniendo el piso 4.

 

Cuando salí del elevador, camine por ese enorme pasillo, miraba los número, 401, 402, 403… hasta que mis pasos me llevaron al 405.

 

Toque a la puerta, y una señora me abrió, sus ojos están hinchados de tanto llorar, estaba muy despeinada y ojerosa.

 

–¿Si!?- Pregunto ella decaída.

 

–Señora Mary!- Dije, aún reconocía a mi ex suegra, una mujer con el corazón del cielo.

 

–Mau!- Dijo ella y me abrazo, comenzó a llorar sin parar y la abrace con fuerza.

 

–Mauricio, ella dijo que vendrías!- Dijo su hermana, que secaba sus lágrimas. –Ella te esperaba, pero su cuerpo no resistió más.-

 

No sabía que decir, ¿Ella esperaba por mi?, ¿La hice esperar?

 

–No digas nada.- Dijo mi ex suegra.

 

–Perdón!- Dije.

 

Aun que no era con ellas que quería disculparme era con Mirna por alguna extraña razón sentía que mi disculpa tenía que ser para ella

 

–Ella dejo esto para ti.- Me entrego una libreta morada que conozco muy bien, ella solía escribir hay, lo recuerda era su diario.

 

La hermana de Mirna me lo dio y yo lo sujete con fuerza en mis manos, no me quedé mucho ya que mi vuelo no tardaría En despegar.

 

Fui a mi departamento, tome mis maletas y el diario en mis manos, aborde el avión, guarde mi equipaje en el compartimento, y me senté, Abrochen mi cinturón, y el avión despegó.

 

Después de un rato dieron el anuncio de desabrochar los cinturones.

 

Lo hice, saque el diario me puse a leer.  El diario estaba inconcluso solo tenía unas cuantas páginas escritas.

 

*Querido diario.

 

Estoy muy feliz, en unos días son mis vacaciones familiares, pero también estoy triste, Mauricio está actuando muy extraño en estos días, me dijo que no le gustaba que lo besara en público, no lo hago por mal, pero no lo puedo evitar, lo AMO MUCHO.

 

*Querido diario, hoy comienzan mis vacaciones, dice mi padre que nos iremos a una isla a vacacionar, pero no lo sé lo noté extraño, bueno también se que debo decirle a Mauricio de mi leucemia, pero tengo miedo de que el me deje..

 

*Querido Diario se que no registro la fecha de que día es pero, este día no lo olvidaré, papá llegó muy asustado y nos dijo que empacáramos todo, llegó muy golpeado.

Tráete de marcarle a Mau para contarle que tenía miedo pero el no me contestó, me siento muy mal, no he parado de vomitar.

 

*Querido diario, ya pasaron dos días de que volvimos de la vacaciones pero se supone que aún estamos de vacaciones es ilógico, estamos en una casa de seguridad escondidos, mi hermanita tiene mucho miedo, recibimos amenazas, según papá debe mucho dinero.

 

*Querido diario hoy escuché como papá y mamá discutían el le decía que todo lo que estaba pasando era por mi, que si el pidió el préstamo a esos mafiosos fue por mi leucemia, ellos no tenían dinero para mís chequeos ,  para mis tratamientos y dietas.

Le marque a Mau quería hablar con mi novio pero el no me respondió, seguro ha de estar muy ocupado.

 

*Querido diario, ya nos dijeron que podíamos salir del resguardo, pero papá y mamá no están bien, ellos pelean mucho, hoy me encontré con la pulga en el prescolar donde ayudo a la maestra a dar clases le pregunté por Mauricio y ella me contó que ha estado muy ocupado, esa niña habla mucho.

 

*Querido Diario.

Hoy escuché a Mau hablar con uno de sus amigos, el le decía que ya no me quería, pero que no quería lastimarme.

Me fui sin que ellos me vieran, cuando llegue a casa vi los cuadros familiares tirados en el suelo, ropa y el televisor en el suelo, papá gritaba y decía que nos habían encontrado de nuevo. Salí corriendo y me encerré en mi cuarto, llore, ya no quería molestar a Mauricio y a quien engaño mi leucemia podría empeorar, solo lo estaré atando a alguien que tarde o temprano va a morir.

 

*Querido diario.

Hoy vi a Mauricio se que odia el fútbol pero, me acerque a el y lo bese, el no se dio cuenta que con ese beso le decía adiós al gran amor que le tengo

El acepto con facilidad el rompimiento y mientras yo lo miraba irse mi corazón explotaba en dolor..

Llore sin parar día y noche.

 

*Querido diario, no soporto ver a Mau ni siquiera se da cuenta que aún existo no me habla, y como si fuera poco hoy me dijeron que tengo que iniciar con químios, son muy dolorosas.

Papá dijo que tenemos que irnos, pensé despedirme de Mau pero prefiero no hacerlo.

 

Empaque mis cosas y mañana nos iremos.

 

*Me siento falta, odiado diario.

 

*Diario, hoy estoy muy triste, yo siempre me cuide ¿Pero por qué demonios me pasa esto a mi? Sabes que mis dolores de estómago era por un embarazo, si estaba embarazada, de Mau, las químicos me hicieron perder a mi bebé. Los odio a todos.

 

*Diario se que hace años no escribo pero hoy papá murió al parecer esos hombres se cobraron su deuda, y el cáncer volvió, ya la había vencido, hasta me tocaron la campanita, pero volvió,. No quiero decirle a mamá, así que trabajaré y me pagaré mis tratamientos sin que ellos sepan.

 

*Y otra vez me tomé años sin escribir en ti no es que te odie sabes.

Hoy vi a la pulga, le pregunté sobre Mau me dijo que era un Ceo muy bueno, me da mucho gusto por el, aún que quisiera verlo pero ya estoy muriendo, esta vez perdí la batalla en contra de la leucemia, el doctor me dijo que me quedaban días, meses o quizá horas.

 

Mau, esto es para ti, quiero que sepas la verdad del por qué decidí terminar, no te culpes por favor, no sufras por mi, yo te ame si, nunca te odie, y si no llegas a venir a tiempo quiero que sepas que los años que fui tu novia fueron increíbles, y me da mucho gusto que tengas una buena vida. Con amor incondicional Mirna, Te invito a mi velorio..

 

No podía evitarlo mientras más leía más lloraba.

 

Cuando el avión aterrizó tomé otro, dijo el capitán que no podía volar por qué se pronosticaban lluvias en las próximas horas, pero no me importo busque en avión privado y regrese a la cuidad o por lo menos trate de volver.

 

El avión se perdió en la tormenta, la turbulencia era mucha, hasta que el avión perdió el control y nos estrellamos en una montaña.

 

–Hasta que despertaste Mau.-

 

–Mirna?- Me impulse  y la abrace, era ella.–Estoy muerto?- Pregunté.

 

–Jaja comer como cerdos y que te dé el mal del cochi es estar muerto creo que si, Mau vámonos tenemos examen, y a mamá no le va a gustar verte en mi cama.-

 

–En verdad eres tú? Mirna!- Volví a abrazarla.

 

–Mi novio anda muy cariñoso hoy, ya se que quedamos en que hoy me tronarias el frijolito pero aún no estoy lista!-

 

–¿Qué?- dije confundido, ella parece una niña, por eso creí que estaba muerto.

 

Voltee a su espejo y me vi mi cuerpo era de un joven.

 

–Que edad tengo?- Pregunté asustado.

 

–16 años!-

 

–¿Mirna, tu y yo, somos novios?-

 

–Si, por Dios que tienes Mau.?- Ella puso su cálida mano en mi frente y sonrió.

será acaso que no se puede cambiar

Me quedé embobado viéndola sonreír, ¿cómo es que pude olvidar lo bien que se sentía verla? Su sonrisa iluminaba incluso más que el mismo sol.

 

–Si me miras de esa manera me voy a desgastar, Mau.!- Dije ella y me abrazo, me quedé inmóvil, ¿Esto es real?, ¿No es un sueño? La abrace tan fuerte que ella se quejó.

 

–¿Mau seguro que estás bien?- me dijo ella volteando su cabeza hacia mi.

 

–Mirna, te extrañe tanto!- dije y lágrimas brotaron de mis ojos.

 

Ella paso su pulgar por mis ojos y seco mis lágrimas.

 

–Mau, pero si solo dormiste como media hora.–

 

–Para mi fueron más de 10 años!- puse mi mano en su mejilla.

 

Ella cerró los ojos.

 

“No dejaré que mueras, no voy a perderte de nuevo.”

 

La atraigo a mí como un imán y la abrazo, aun que algo dentro de mi no me deja soltarla.

 

Yo ya no la amaba, yo que una vez di por terminada nuestra relación, ¿Por qué justo ahora que la tengo entre mis brazos, no puedo soltarla? Mi corazón late muy aprisa con su cercanía, aún que mi mente sabe que yo ya no siento nada por ella, solo tenía la culpa de no haberme despedido de ella, o haber terminado sabiendo que ella me necesitaba.

 

¿Será acaso que mis sentimientos de cuando tenía 16 años aún siguen en este cuerpo? Yo la amaba a los 16.

 

–Oye, me encanta que me abraces, pero si repruebo los exámenes tendrás que ayudarme en los extraordinarios, ya sabes que al maestro no le gusta dar segunda oportunidades.- Dijo ella sonriendo y alejándose de mi.

 

–Cuanto tiempo llevamos de novio?- le pregunté.

 

–¿Te golpeaste la cabeza?– … –Comienzo a creer que si!-

 

–Solo respóndeme, Mirna!- dije serio.

 

–4 meses!-

 

¿Cuatro meses?

 

–Que día es hoy?-

 

–Comienzo a preocuparme!- … –10 de julio nuestro aniversario mes número 4 –

 

–10 DE JULIO!- me levanté al instante de la cama.

 

–¿oye?-ella no dejaba de verme confundida.

 

–Vamos llegaremos tarde!- Le dije agarrando mis zapatos que estaban debajo de la cama.

 

En mi pasado no encontré los zapatos, y Mirna me prestó unos de su papá que estaban enormes, después me dijo que los había encontrado en el fondo de la cama.

 

–Ya vámonos!- La tome de la mano y salimos prácticamente corriendo.

 

En mi pasado, llegábamos tarde al examen, por qué nos quedamos haciendo cosas de adultos, después perdimos el tren en la estación, y el maestro nos reprobó, aún que quisimos pasar los extraordinarios, reprobamos de nuevo por qué no fuimos a los exámenes extraordinarios, creo que después de la primera vez que estuvimos juntos ya no podíamos parará.

 

–Hola niños!- Dice la señora Mary

 

–¿Mamá cuando llegaste?- Preguntó Mirna nerviosa.

 

–Acabó de llegar.- No sabía que en el pasado ella ya estaba en casa, que vergüenza.

 

–Ustedes que hacían?- Preguntó la señora Mary viéndome con desdén.

 

–Nada señora, solo vamos corriendo hay exámenes hoy.- Dije.

 

–Si mami.–

 

–Ummm!- La señora me vio feo, había olvidado que cuando la conocí me daba miedo.

 

–Muchachito, estoy muy molesta contigo!- Dijo y yo me lleve la mano a la cabeza.

 

–¿Por qué?- dije y le agarre la mano a Mirna, no sabía cómo reaccionar esto no lo había vivido antes.

 

–¿Por que me llamas Señora?, ya habíamos quedado que me dirías suegra!- Literal me relaje a más no poder.

 

–Perdone suegra!- Dije.

 

–Vamos corran no quiero que no pasen año, tienen que tener buenas calificaciones para la universidad.- los dos asentimos y salimos disparados de hay.

 

Cuando ya estábamos en la calle me quedé viendo hacia todos lados buscando mi auto.

 

–Que buscas?- Me pregunta Mirna.

 

–Mi auto!- dije.

 

–Jajajaja, ahora sí me hiciste reír, tu no tienes auto, vamos hay que tomar el metro o no llegaremos.- Ella me tomo de la mano y salimos corriendo.

 

–Espera!- La detuve y le quite su mochila.

 

–No soy una debilucha puedo cargarla!- Protesto.

 

–Se supone que los novios le cargan las mochilas a las novias!- …–Además tu cuerpo es frágil!- Aún no puedo olvidar que moriste por cáncer.

 

–Oye, si que actúas raro.!- dijo sin parar de reír.

 

–Ya vamos.-

 

Seguimos corriendo hasta llegar a la estación.

 

Subimos al tren y un hombre se paró a darle el lugar.

 

–Gracias muy amable.- Dijo ella y me pidió la mochila de ambos.

 

Me quedé viendo a la ventana, después de entrar al túnel podía ver mi reflejo.

 

–Que bien me veo en uniforme!- Dije.

 

–Si, muy guapo.- Dijo ella.

 

–Y tu hermosa.-

 

–Creí que no te gustaban las demostraciones en público.–

 

–Solo digo la verdad!-

 

Ella se sonrojo.

 

El tren se paró en la siguiente estación, nosotros bajaríamos en la 3ra estación, subió una viejita y Mirna se puso en pie dándole el asiento.

 

–Muy amable señorita!- le dijo la viejita con una sonrisa a la cual ella le correspondió

 

–No es nada, linda señora!- La señora sonrió y se ofreció a llevar las mochilas, le dije que no y me coloque a ambas mochilas en los hombros.

 

–Mau!-

 

–Si?-

 

–Sabias que soy un duende y no alcanzó en tubo!- dijo .

 

–Agárrate de mi, nunca te dejare caer –

 

–Ok!- Ella agarró mi brazo con fuerza y sonrió, ¿Por qué no para de sonreír?

 

Recargo su cabeza en mi hombro.

 

–Mau?-

 

–Si?- Siempre me ha gustado viajar en silencio, y ella no para de hablar, inclusive me pregunta por qué el color azul se llama azul y no con otro nombre y por qué el cielo es Azul incluso me dijo que le fascina el azul por qué mis ojos son azules.

 

–Lo se!- Dijo ella.

 

–Que sabes?- Dije y sonreí, seguro me va a salir con algo más del color Azul.

 

–Se que yo soy una apuesta, que hiciste con tus amigos!-

 

¿Qué ella lo sabía? Ella nunca lo menciono.

 

–Tu?- voltee a verla.

 

–Siempre lo he sabido, creí que un día me lo dirías, pero no lo mencionaste, el plazo se vence hoy, se los términos de la apuesta, era que en 4 meses tu y yo, bueno ya sabes, creo que perdiste!- dijo ella.

 

–Si, perdí!- … –Mirna perdóname, no fue mi intención jugar contigo!- dije

 

–Me amas?- Ella me vio a los ojos.

 

–Que?+

 

–Responde por favor, eso explicaría el por qué, no pasó nada en mi casa.-

 

No pasó nada por qué soy un niño de 16 años con la mente de uno de 29 eso es enfermizo

 

¿Quizá si le digo lo que sentía por ella en este tiempo.?

 

–Si te amo!- …– Estoy enamorado de ti!-

 

–Lo sabia!- Dijo ella muy feliz y me abrazo que casi me tiraba.

 

Entonces si ella lo sabía antes y en  aquel pasado si paso ella debió creer que yo no la amaba, con razón termino conmigo la primera vez.

 

Voltee a verla y le acaricie la cabeza, que idiota fui

 

Mirna es un año más grande que la edad que tiene mi pulga en el futuro, no me gustaría que alguien jugará con ella y yo lo hice con Mirna.

 

–Señor pensador, hemos llegado.- dijo ella soltando mi brazo.

 

–Muy bien vamos.-

 

Salimos de la estación y caminamos unas cuantas cuadras a la preparatoria.

 

Mis amigos esperaban en la puerta y las amigas de ella.

 

–        ¿Cómo estás campeón?- me dijo Alan con una evidente sonrisa.

 

 

–Bien!-

 

–Adiós amor!- Mirna se acercó a mi y me dio un beso fugaz en los labios y se fue con sus amigas.

 

–Dinos. ¿Ganaste la apuesta?- preguntó Luis.

 

En el otro pasado les dije que si, les conté todo, y me gane la apuesta, Mirna se enteró y termino conmigo, después fui de rogón y ella me perdono.

 

–Chicos, ella es increíble, y jamás la lastimaría, no me interesa esa apuesta.- Dije y entre al que recordaba era el salón de clases.

 

Ya casi todos estaba adentro, Mirna estaba en el mesa banco doble con su mejor amiga, llegué y me pare aún lado .

 

–Podrías irte a otro asiento?- le pregunté a su amiga y se levantó a buscar otro lugar.

 

–Estas bien?-

 

–Si y tú?-

 

–Si.- Volvió a sonreír.

 

–Sabes que acabo de renunciar a 1000 dólares de la apuesta?-

 

–Jaja yo te los daré de mi mesada.- Dijo sin parar de reír, recargo su cabeza en mi hombro y suspiro.

 

–Mirna, no me dejes!-

 

–Mau no te dejare nunca.– dijo

 

–Niña tonta, me refiero a que no mueras nunca!+

 

–¿Qué es la muerte Mau?-

 

–He, dónde un cuerpo pierde la vida y ya no vive más?–

 

–Haaa, yo creí que era otra cosa.-

 

–Como que?-

 

–Una dimensión abstracta, dónde vez quién fuiste, lo que viviste y los errores que cometiste, dónde eres juzgado según tus actos.-

 

–Que hay de las segundas oportunidades, que piensas de eso, crees que sea posible?+

 

–Bueno, el dios del destino debe de quererte mucho para darte una segunda oportunidad, pero si la dio no deberías desaprovecharla.–

 

–¿Cómo?-

 

 

–Mau, se supone que el inteligente eres tú y yo tu novia que te copia en los exámenes!- Dijo sin parar de reír.

 

–¿Por qué contigo todo es risas?-

 

–A veces la felicidad es lo único que nos queda a pesar de las luchas y pruebas, un corazón gozoso hermosa el rostro.–

 

–Con razón eres muy hermosa.-

 

–Eso es por qué te amo!+

 

–Mir ¿Cómo puedes amarme? Solo llevamos 4 meses.–

 

–Es que yo veo en ti algo que ni tú vez.–

 

–¿Qué? dímelo por favor –

 

Ella iba a hablar cuando entró el profesor.

 

–Guarden silencio, sus artículos personales y solo saque lápiz, pluma y una hoja. – dijo el maestro, yo me le quede viendo Mirna, aún no me creo que esto sea real.

 

–Mau, has lo que dijo el maestro o no te dejará hacer el examen.-

 

Asentí y saque lo que pidió.

 

Comenzaron a repartir los exámenes.

 

Me puse a contestar las preguntas, era tan fácil responder era aritmética, algo que uso mucho en el futuro.

 

–ups!- Mirna me hablaba.

 

–¿Qué?- dije en lo bajo.

 

–No entiendo nada!- dijo sin voltear a verme.

 

–Entonces cópiame.- Le dije y ladee un poco la hoja.

 

Nunca la había dejado copiar mis exámenes, por qué me encantaba ser más inteligente que ella, que egoísta de mi parte.

 

Ella sin que el maestro se diera cuenta comenzó a pasar mis respuestas a su examen.

 

–Ustedes dos!- El maestro se acercó a nosotros y nos quitó los exámenes.

 

–Profesor!?- Dijo Mirna.

 

–Están reprobados en mi clase por copiar.-

 

¿Qué? De todos modos nos iremos a extraordinarios.

 

Nos mandó a la dirección.

 

La secretaria escuchaba sus programas raros en su radio.

 

Pero me llamo la atención lo que escuchaba, hablaba de viajes en el tiempo.

 

·        ¿Qué pasaría si alguien pudiera viajar en el tiempo? … Preguntaba el presentador a un científico.

 

·        La teoría de Albert Einstein ofrece una explicación más sencilla: la energía siempre se convertirá en otra cosa, nunca desaparecerá. Si un individuo viaja en el tiempo y evita su propio nacimiento, no tiene por qué desaparecer o "desvanecerse"; seguirá existiendo, pero quizás con alguna diferencia.

 

·        ¿Si yo viajará en el tiempo para evitar la muerte de un familiar quiere decir que de todos modos morirá?

 

·        Si lo hará, quizá en diferentes circunstancias pero la muerte siempre cobra lo que es de ella.

 

Voltee a ver a Mirna.

 

–Oye, deja de escuchar eso.- Dijo ella.

 

–Mirna, vengo del futuro.-

 

Dije y ella comenzó a reír sin parar.

 

–Si vienes del futuro entonces dime qué me espera en el, ¿Me casare? ¿Cuántos hijos voy a tener? Y lo más importante ¿Cual es el número ganador de la lotería?-

 

–No me crees verdad?-

 

–Bueno.

 

–Esta bien pero si esto no es un sueño no dejaré que pase nada de lo que pasó, te doy mi palabra. –

 

–Esta bien.- Ella recargo su cabeza en mi hombro y el director nos hizo entrar, nos dio el mismo discurso que en mi pasado, algo sobre la responsabilidad y cosas así, luego se le cayo la pluma y Mirna la recogió, paso exactamente igual a antes ¿Será que no podré cambiar el futuro?

 

–Demonio!- Dije.

 

–¿Joven si no se controla lo suspender y están en periodos de exámenes, ustedes dos ya van para tercero y tienen que mejorar sus calificaciones para la universidad.–

 

–Si!- Dijimos los dos al mismo tiempo.

 

Salimos de la oficina del director y la tome de la mano.

 

Ella se quedó viendo nuestras manos enlazadas.

 

–Mau, si que estás muy extraño hoy.-

 

–Vamos a comer algo saliendo de clases?-

 

–Si!- Dijo ella emocionada y luego se fue con sus amigas.

 

Me fui a dónde estaban los míos que como siempre corrían tras de un balón.

 

–Saliendo de clases vamos a ir a casa de José ¿Vendrás Mauricio?-

 

–No.- En el pasado les dije que si y dejé a Mirna plantada. Tengo que cambiar el futuro.

 

–Pero se pondrá bueno, es la única casa donde nos dejan tomar a pesar de ser menores de edad!- dijo Luis.

 

–No iré chicos, vayan ustedes.-

 

Me fui a seguir con mis clases y cuando finalizaron espere a Mirna en la explanada.

 

–¿Lista?- Le pregunté y le quite su mochila.

 

–Si.- ella me tomo de la mano y caminamos con rumbo a la salida.

 

–A donde iremos?- le pregunté.

 

–Yo escojo el lugar.- Dijo ella.

 

–ok!- paramos un taxi y ella le dio la dirección.

 

–¿Mirna, ya tenías planeado está salida?- le pregunté.

 

–Si, amor es nuestro aniversario y tengo una semana preparando una sorpresa para ti.-

 

Ahora me siento peor, ella siempre fue muy cariñosa conmigo y siempre trataba de sorprenderme pero yo nunca valore su esfuerzo.

 

–Hemos llegado jóvenes.- Dijo el chófer.

 

Nos dejó a la orilla de la playa.

 

–Mirna!-

 

–No digas nada y ven conmigo!- Pague el taxi y bajamos a la playa.

 

Sus amigas estaban vestidas de meseras y en la arena había un enorme corazón, con algunas velas apagadas en el suelo.

 

–Dios.-

 

–¿Te gusta Mau?-

 

Comencé a llorar, la deje plantada por irme a beber con mis amigos y al día siguiente los idiotas de ellos hicieron pública la apuesta, soy un idiota.

 

–Mau al parecer te sorprendí!- … - Tengo hambre vamos.-

 

Camine como corderito aún lado de ella.

 

Si amigas nos sirvieron de comer.

 

Todo estaba delicioso.

 

–Yo no tengo un regalo para ti!- le dije.

 

–ya me lo diste!- Dijo ella.

 

–¿Qué cuando?-

 

–Cuando dijiste que me amabas–

 

Sonreí.

 

Pasamos la tarde juntos, sus amigas se fueron, jugamos en la arena he incluso nos metimos al agua, la noche cayo y ella encendió el corazón.

 

Me puse a bailar con ella sin música.

 

Después la lleve a casa.

 

–Te veo mañana?- ella pasó su brazos a sus espalda y se movió de un lado a otro con esa sonrisa que tanto la caracteriza.

 

–Si, nos vemos mañana.- le dije.

 

–Ok!- ¿ella esperaba algo?

 

–Buenas noches!- Le dije.

 

–No me darás mi beso de despedida? _Ella agachó la cabeza.

 

–Ha, si!- me acerque a ella y le di un beso en la frente, ella sonrió y abrió la puerta de su casa.

 

–Hasta mañana Mau!-

 

–Hasta mañana Mirna!-

 

Ella entro a su casa y cerro la puerta.

 

Yo me fui a mi casa de esa época.

 

En cuanto llegue ví a una mini pulguita de escasos dos años correr por todos lados.

 

–Emano!- ella me extendió los brazos y la cargue.

 

–No quiero que te vayas a ese viaje!!!- gritaba mi madre.

 

–Sabes que no lo puedo cancelar, es trabajo.–

 

¿El viaje? En ese viaje mi padre falleció.

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