-Aaahs pero que dolor de cabeza.

Me duele hasta el último hueso, no recordaba lo malucas que son las resacas.

-Espera... pero que mierd@.

Que carajos hiciste Isabela? 'pues que más? te revolcaste con ese tipo durante toda la noche' dice la vocesita en mi cabeza.

Esperen y les explico, soy Isabela Bustamante y pues... aaaash saben que, no tengo cabeza en estos momentos para explicarles mi fascinante historia de desgracias, les prometo que después de que duerma por tres días seguidos, me tomé un frasco de calmantes y tres ollas de sopa de pollo les cuento mi historia de Cenicienta, aunque esta no tiene un final feliz. Lo que si les puedo decir es que me encuentro en una habitación de un hotel y pues por lo que puedo ver debe ser una muy cara porque esto parece ser del tamaño de mi casa.

A mí lado está dormido el hombre con el trasero más sexi de la ciudad, te preguntarás cómo se eso bueno es simple hasta en las revistas de moda lo dicen y pues viéndolo bien, creo que tienen razón, no, no creo, estoy segura de que tienen razón, es que este hombre tiene mejor trasero que yo.

-Muy rica la noche y todo pero lo mejor será que me valla en silencio- eso lo dije muy bajito para que no me escuchara, lo mejor será buscar mi ropa y retirarme. Después de que se me quite este malestar pensaré como salir de este problemita en el que me metí por hacerle caso a la vocesita.

'A pero cuando lo tenías entre las piernas no te estabas quejando' dijo la voz. -Shhh- le respondo para que no fastidie y en eso -Mmmm- lo escucho quejarse y después se mueve. Hay Dios que no se despierte. Espero unos segundos y parece que se queda tranquilo 'sigue dormido' me dice la voz. Me levanto poco a poco y empiezo a buscar mi ropa. Enserio este lugar es inmenso, no consigo nada!!

Ajá, serca de la puerta está mi vestido, ahora solo falta los zapatos mi bolso y mi ropa interior. Veo mi cartera en una mesita al lado de la puerta y cerca están mis zapatos, perfecto! Ahora solo faltan dos prendas y estoy lista, pero donde estarán, recorro toda la habitación con mucho cuidado de no hacer ruido y consigo mi panti al lado de una cómoda, me la pongo y bueno ya no estoy como Dios me trajo al mundo.

Pero aún me falta mi sujetador, donde estará lo estoy buscando por todos lados y no lo encuentro, me estoy desesperando, mejor me voy así y ya, de todos modos está de moda tenerlas al aire libre además las tengo bonitas. Esperen... Allí está debajo de esa mesita que está al frente de la cama. ¿Pero como llego esa cosa allí? 'y es que ahora no te acuerdas? la pregunta debería ser como es que puedes caminar después de como te puso se hombre anoche' shhh que no me dejas concentrar, ahora me toca agacharme para poder alcanzarlo. Me agachó y estiró mi brazo para agarrar el sujetador y de repente empieza a sonar mi teléfono.

-Mierd@- porque cuando necesitas el teléfono este se queda sin batería? aaa pero cuando no quieres que suene empieza a hacer un escándalo como para despertar a la ciudad entera.

-En esa posición y con esas palabras sucias me provoca hacerle muchas cosas, señorita Bustamante.

-Caraj* voy a matar al que me este llamando- esto lo digo muy bajo solo para mí para que el sexy hombre parado detrás de mi no me oiga. Ahora no se que hacer, mi plan de huida fue frustrado. ¿Qué hago? 'pues que más? volverlo a comer cariño' otra vez esa vocesita entrometida.

-Si se queda así por más tiempo no voy a poder controlarme, mire que ya hago mucho con no poseerla asi como se encuentra en esa pose tan seductora- que más pues si ya me comí el tigre ahora no puedo tenerle miedo al cuero.

-Te. ten. tengo que contestar el teléfono- digo esto levantándome y corriendo hacia el teléfono. Él solo me mira con esos ojos negros con una mirada así como de perro en carnicería.

Agarro el teléfono y... adivinen quien es... pues la traidora de mi mejor amiga, será mejor que conteste porque se que no va a dejar de insistir.

📱 Hola?

📱ISAAA!!!- dice eso gritando.

📱 No grites que me dejas sorda.

📱 Cuéntame todo, cómo te fue, qué te hizo, cómo te lo hizo, cuánto dura, lo tiene chiquito???

📱PAOLA!!!

📱 Ay ya no grites entendí... pero me cuentas más tarde. Dónde estás?

📱 En el hotel

📱 TODAVÍA!!! Ya veo que no te deja descansar.

📱 No digas estupideces, te llamo más tarde para vernos que ahora no puedo hablar.

📱 Está bien chau... a y recuerda la regla, si le haces oral el también te tiene que hacer uno.

📱LOCA!

Mejor le cuelgo, por qué las conversaciones con ella siempre son así? Mejor me terminó de vestir.

-Era tu amiga la que estaba contigo anoche?- Rayos se me había olvidado que el estaba allí...

'responde idiota' cállate y déjame pensar.

-Sí, ella es mi mejor amiga.

-Entonces podemos seguir con lo de anoche señorita Bustamante.- Caraj* ahora cada ves que me diga así se me va a venir este momento a la mente, aunque pensándolo bien quién no va a querer recordar está vista? Un hombre de un metro ochenta, piel morena, cabello castaño, despeinado pero de una forma muy seductora, ojos negros que te incitan a caer en un abismo del que no desearías salir nunca, una sonrisa... aaaa esa sonrisa baja bragas que derrite a cualquiera, esos hombros anchos y musculosos...

-Ya sabes que si quieres puedes tocar- 'te descubrió' si tienes razón, mejor me terminó de vestir y él también debería porque sino no podré salir de aquí.

-Señor Contreras será mejor que se vista, ya son las 9 de la mañana y tiene una reunión muy importante con los proveedores de materiales dentro de dos horas- una excusa perfecta para escapar.

-Tiene razón- cambio su seductora sonrisa por su indescifrable cara de póker y se dirigió al baño, esta es mi oportunidad, me termino de vestir y salgo rumbo a mi departamento.

Lo logré!!! llegué viva a mi hogar, siento que me voy a morir, no entiendo cómo un fresco pero soleado día puede ser tan horrendo, les prometo que no vuelvo a beber 'jajaja enserio? jajaja'

-shhh déjame tranquila que no estoy para tus bromas- me voy a tomar un baño y dormir un poco, menos mal que es sábado y no tengo que trabajar hoy.

-Brrrrrr brrrrr brrrrr- suena mi teléfono, otra vez.

-Que fastidio, ahora una no puede dormir tranquilamente.

📱 Hola?

📱 Ahora sí, cuéntame todo.

📱 Por Dios, Paola, qué hora es?

📱 Las 4 de la tarde, Isa.

📱 Enserio? si dormí tanto, porque aún me siento tan fatal?

📱 Me cuentas por teléfono o nos vemos?

📱 No tengo ganas de salir, ven para acá y hablamos.

📱 Esta bien llego en una hora.

📱 Por cierto, Pao, eres una traidora, te aseguro que esta me la cobro.

📱 jajaja si si si lo que tú digas jajaja.

Bueno es hora de levantarme...

-No puede ser, esa es mi cara?- siempre me he considerado bonita pues ya que tengo un buen cuerpo aunque soy bajita, ya que mido un metro cincuenta y cinco, de piel blanca, cabello rubio y unos lindos ojos verdes pero el día de hoy parezco un mapache con unas ojeras inmensas. Definitivamente no vuelvo a beber 'ajá si, claaaaro' Perdón ignoren a mi vocesita que no sabe lo que dice, mejor me arreglo un poco antes de que llegue Pao porque sino, cuando me vea va a intentar hacer experimentos conmigo para, según ella, que me vea mejor.

Casi una hora después -Tum tum tum- parece que ya llegó.

-Voy- me dirijo hacia la puerta y justo cuando termino de abrir...

-Dime cómo fue, qué te dijo, qué te hizo?

-Hola amiga, yo bien gracias y tu?

-Hay sí si déjate de formalidades y cuéntame T O D O.

Es increíble como es Pao, les cuento que esta mujer es la mejor del mundo, pero que nadie le diga porque sino quien la aguanta. Su profesión combina perfecto con su personalidad, ella es modelo y no solo cualquier modelo, es una de las mejores del país. Paola Ortega es mi amiga desde que estábamos en el cole y nunca nos hemos separado desde que nos conocimos, aún recuerdo cuando usaba coletas, ahora es todo un mujerón, de piel morena, con una estatura de un metro setenta, una melena espectacular lacia que le llega a la cintura de color castaño, unos ojos color ámbar y un cuerpazo perfecto es toda una destruye corazones y es que a sus 27 años sigue soltera.

-Bueno empieza a contar- dijo eso tomando asiento en el sofá.

-Por donde empiezo?

-Pues por el comienzo?

-Bueno...

-Bueno...

Un día antes:

-Tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac...

-Otro día- eran las 6 de la mañana, y mi despertador me lo confirmaba, que triste es la vida del pobre, tener que trabajar día tras día solo para poder subsistir, que triste y lamentable -deja de quejarte y ya párate- Como me hubiese encantado quedarme durmiendo pero, como ya les dije, esa es la vida del pobre, así que sin dudarlo mucho me levanté, cual era mi motivación?

Pues es muy simple, era viernes, viernes!!! El último día de la semana de trabajo así que mientras más rápido termine mejor. luego de una hora ya estaba perfectamente arreglada con mi uniforme, una linda falda tubo color vino que me quedaba por encima de la rodilla, una camisa de seda color crema y sobre ella una linda chaqueta que hacía juego con la tela y no pueden faltar los tacones negros y altos, muy altos, demasiado para mí gusto pero era parte del uniforme y pues ni modo porque ya recibí varios regaños por no tenerlos y para completar el look una coleta alta con un maquillaje simple.

Me prepare un desayuno simple y salí rumbo al trabajo. Mi hora de entrada es a las 8 de la mañana pero como soy la asistente personal del CEO y este tiene una manía peculiar con el café, tengo que llegar 10 minutos antes. Qué manía? preguntarás, bueno sucede y acontece que mi jefe Héctor Contreras, el CEO y único hijo del accionista mayoritario de las empresas mixtas de contrucción y hotelería C&B y el hombre más sexy de la ciudad, acostumbra a tomar café recién echo a las 8 en punto y no permite que sea recalentado o que esté llegue 5 minutos después. De esa manera me convertí en una experta en realizar café.

Eran las siete y cuarenta y cinco y yo estaba llegando al trabajo, el edificio principal de la empresas C&B es, en una palabra, impactante, consta de 25 pisos y todo recubierto con ventanales negros, simplemente hermoso e imponente. Entrando me recibió con una gran sonrisa Esmeralda, la recepcionista, es tan encantadora, siempre con su gran sonrisa.

-Hola, Esmeralda, Buenos días.

-Buenos días, Isabela, como estás?

-Muy bien, gracias a Dios.

-Veremos cuánto tiempo te dura ese estado de ánimo.

-Por qué dices eso?- ese fue el inicio de mi desesperación.

-Hace poco llegó el accionista mayoritario, el Sr. Contreras con los contadores y él iba muy molesto.

-Entonces será mejor que me apure.

-Sí, tienes razón, nos vemos más tarde.

-Hasta más tarde.

Me dirigí hacia el ascensor privado del CEO, ya que soy su asistente puedo usarlo. Esperé un poco hasta que por fin llegué al piso 25, se abre la puerta del ascensor, no termino de dar dos pasos fuera de este cuando escucho al final del pasillo.

-Isabela! Por fin llegas?

-Pero si aún es temprano Melissa.-Melissa es la secretaria de mi jefe, ella es la que tiene más tiempo trabajando en la empresa, ya son 15 años, antes trabajaba para el Señor Henry Contreras y, desde que se jubiló hace 4 años y le dejo el puesto a su hijo ella se mantiene en su cargo.

-Sí pero aquí la situación es delicada.-'Como que hoy tienes trabajo extra' shhh, calla que por lo menos es viernes.

-Que pasó?

-Pues te acuerdas que desde hace 15 días el señor Henry pido realizar una revición profunda de la contabilidad de la empresa.

-Sí.

-Parece que descubrieron que falta mucho dinero.

-Hay Dios! Y ya llegó el señor Contreras?

-Aún no, pero ya faltan 5 minutos para las 8.

-El café!!!!

-Mejor te apuras porque la vas a tener difícil hoy.

-Sí, tienes razón- salí corriendo a preparar el café, y 5 minutos después ya lo tenía servido, llevaba 5 tazas, una para cada una de las personas en la oficina. Cuando estaba por llegar sentí ese aroma tan exquisito y único del perfume de mi jefe, me giré y allí estaba.

-Buenos días señor Contreras.

-Buenos días señorita Bustamante, que tenemos para hoy- miro la bandeja con las tazas y después dijo- parece que me están esperando.

-Bueno señor para hoy está programada para las 9 la reunión con los publicistas para finiquitar todo sobre la apertura del nuevo hotel, pero en este momento se encuentra su padre con los contadores esperándolo en su oficina.

-Bien veamos que sucede- dijo eso caminando hacia su oficina para luego abrir la puerta mientras yo lo seguía con la bandeja en las manos.

-Buenos días señores, que los trae por aquí?

-Buenos días, hijo, necesitamos hablar sobre las perdidas de dinero que han habido últimamente.

-Está bien, ya puede retirarse señorita Bustamante.

-Aquí les dejo el café, con permiso- respondí y me retiré.