Me llamo Catalina Da silva, tengo 20 años, nací en España, pero fui criada en Brasil, mido 1.65, mi piel es trigueña, mi pelo es lacio y según mi padre tengo los espectaculares ojos azules de mi madre.

Soy delgada, pero con curvas, mis senos son medianos y tengo un trasero que cuido a punta de ejercicios.

Mi madre es española y en unas vacaciones conoció a mi padre, un seductor Moreno que la volvió loca y con quien disfruto el tiempo que duró su visita, al regresar se dio cuenta de que estaba embarazada y sus padres pusieron el grito en el cielo.

Quisieron hacerla abortar, pero ella se negó, para evitar la "vergüenza" decidieron obligarla a casarse con ruso de muy buena posición económica, pero debía deshacer del bebe apenas naciera.

En cuanto nací ella me llevo con mi padre, aunque hemos compartido poco, siempre está pendiente de mi y me hace saber que me adora.

Mi padre falleció en un accidente y mi abuela a estado pendiente de mí.

Estudio medicina, soy la mejor de mi clase y solo sueño con poder estar con mi madre el día de mi graduación.

Tengo una hermana de 18 años, se llama Leticia, un rubia espectacular, con un cuerpo de ataque, es modelo y desde hace unos años sale en las portadas de revista, nos hemos visto pocas veces, aunque hablamos mucho por teléfono, solo me reúno con ellas en fiestas especiales.

Mi padrastro se llama vladimir, él es otro cuento, es arrogante y malvado, la única con poder sobre él es mi hermana, cumple todos sus caprichos y deseos.

Es un jugador empedernido, mi madre es la CEO de la firma de mis abuelos.

Mi padrastro se pasa la vida metido en deudas la que tiene ahora es enorme, en otras ocasiones mi madre le ha ayudado, pero esta vez él apostó algo más valioso, a mi hermana.

El hombre con el que jugaba tiene mucho dinero y quería apostar algo realmente importante y que significara más que lo económico, si él perdía le entregaría todas sus empresas a Vladímir, pero si él ganaba tendría que entregarle a su hija como esposa.

Vladímir es muy ambicioso y pensó que la tendría fácil, había dejado a muchos en la bancarrota, así que uno más no sería un problema, pero esta vez la suerte no estuvo de su lado, sintió morir cuando vio las cartas sobre la mesa, estaba derrotado.

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Bueno Vladímir, ya está hecho, tu hija será mi esposa, según me han dicho es una mujer muy bonita, espero sepa comportarse o tendré que educarla.

Pará que veas que soy buen yerno te daré una semana para que me pagues. En siete días estaré en tu casa por lo que me pertenece.

🗨️ Angustiado llegó a casa, se sirvo un trago, debe pensar como le dirá a su hija lo que ha hecho, esperando que lo entienda lo acepte y lo perdone.

Está sumido en sus pensamientos cuando la ve entrar a la casa, viene llegando de la universidad.

— Hola papito.

—Hola hija. Leticia necesitó hablar contigo.

—¿Debe ser ahora? Me tengo que vestir tendré una fiesta en el club.

—Sí, debe ser ahora.

—Está bien papá, pero que sea rápido

🗨️ Sin rodeos para no dudarlo, Vladímir decide que lo mejor es decirle de una sola vez.

—Tendrás que casarte

—¿Es una broma verdad?

— No, aunque sé que es difícil de asimilar, estoy hablando muy en serio.

—¿Pero por qué y con quién?

— Por qué perdí una apuesta y si no te casas, quedaríamos en la ruina o quizá hasta me maten.

—Pero papá, mamá podría ayudarte.

—No hija esta vez será imposible.

— Papá yo no me pienso casar tengo otros planes.

—Ya está decidido, tu futuro esposo vendrá en siete días por ti.

— No papá yo no me quiero casar, entiéndelo, tengo otros planes en mi vida.

—No me importan tus planes.

—Te odio, como puedes hacerle esto a tu única hija.

🗨️ Leticia sale corriendo, se dirige a donde su madre, es ella quien se encarga siempre de solucionar los problemas, está vez la busca para que la ayude con su padre, pero eso de nada servirá.

—Mamá, mi padre quiere que me case con un desconocido.

—¿Qué? ¿Tu padre se ha vuelto loco?

🗨️ Leticia sabe que su madre siempre ha sido muy comprensiva, y espera que logre convencer a su padre del error que está cometiendo.

— Vladímir ¿qué pasa contigo? Cómo es eso que quieres casar a nuestra hija con un desconocido.

—Emma por favor, ahora no.

— ¿Entonces cuando? ¿Qué hiciste ahora?

—Aposté a mi hija.

🗨️ Por primera vez y sin pensar en las posibles consecuencias, Emma descargo su odio y su dolor en una certera bofetada.

—¿Cómo te atreviste a hacer eso?

—Lo sé fue mi error, pero me confié a mi buena racha.

—Tú y tu maldito vicio del juego, maldigo la hora en que padres me obligaron a casarme contigo.

—Deberías agradecerme que te convertí en una señora, de lo contrario hubieras sido una la madre soltera de una bastarda y ni tendrías la posición que tienes, ya que tus padres te quitarían todo.

—Tal vez no tendría nada, pero sería feliz, lo único bueno que tengo de este matrimonio es mi hija.

— No digas eso mi amor, te hice feliz muchas veces.

—¿Cuándo me drogabas o cuando llegabas ebrio y me violabas? Mis padres no pudieron buscar un hombre normal y me casaron con la peor escoria.

🗨️ Emma sintió el ardor en su mejilla y el sabor de la sangre llegó a su boca, pero eso no la hizo callar.

— ¿Te molesta que te diga la verdad? Eso eres una escoria un cobarde que se atrevió a apostar a su hija, mi hija no debe sufrir igual que yo, con un salvaje que la use y la maltrate como tú hiciste conmigo.

🗨️ Aunque le doliera aceptarlo Emma tenía razón, no había pensado en que pasaría con su hija al entregarla, en ese momento Vladímir se sintió como lo que en verdad era un completo miserable.

Y es que la historia se repetía, él le había la vida imposible a una mujer que fue víctima de sus padres, ella nunca supo que la verdadera razón por la que sus padres la obligaron a casarse con él.

Al igual que su hija, ella había sido el pago a una deuda de juego que tenía su padre con él, era su hija o sus empresas y su suegro nunca dejaría su posición social y su madre no limitaría sus gastos, lo del embarazo fue la excusa perfecta para obligarla a casarse.

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🗨️ Mi hermana me llama echa un mar de llantos, no entiendo muy bien lo que me dice, solo entiendo que la quieren obligar a casarse con un desconocido, que se escapara y viajará a Brasil para quedarse conmigo.

Le pido que se calme, que respire y que me explique que pasó.

Ella habla con más calma, cada palabra me sorprende más, como un padre puede hacer eso con su hija, luego me cuenta lo que escucho en la discusión que tuvo mi madre con mi padrastro y no puedo evitar llorar, mi madre ha sufrido tanto y ahora se repetira la historia con mi hermana.

Solo tenemos seis días para que ella escape y yo poder organizar su llegada y donde esconderla.

Han pasado algunos días me quedan tres para ser entregada al hombre que sera mi marido, ya tengo los tiquetes listos, solo me falta hablar con mi madre, quiero que ella venga conmigo, no la dejaré en manos de mi padre, es un ser despreciable.

🗨️ Pero Leticia sin saberlo está siendo vigilada, la deuda de su padre es muy grande como dejar cabos sueltos.

—Señor Rossi, tenía usted razón la señorita Leticia está planeando irse del país, compró tiquetes para Brasil, no solo para ella, también para su madre.

Aunque la señora no lo sabe, su hija aún no le ha dicho, piensan viajar mañana en la noche.

—Bueno por fin hace algo interesante, a pesar de ser muy bella es insulsa, déjala a ver hasta donde se arriesga a lo mejor me sorprende, averigua si tienen familia en ese país o únicamente será una nueva aventura.

—Sabía que le agradaría saber que ya lo averigüe señor, allá vive una hija de la señora Emma, es mayor que la señorita Leticia, vive con su abuela.

su padre murió hace unos años en un accidente provocado por el señor Vladímir, aunque esto último no lo saben ellas.

—Y qué hace la otra hija, será alguna garota que se vende por unos pesos.

—No señor, estudia medicina, es la mejor de su clase, trabaja en sus tiempos libres en un puesto de salud de un barrio marginal, es muy querida por los niños de las favelas, del dinero que su madre le envía cada mes, ella les compra ropa, comida y regalos.

Vladímir la odia e intenta hacerle la vida imposible, la señora Emma hace todo lo posible por brindarle seguridad a su hija.

—Mucho más interesante que su hermana, espero algún día tener el honor de conocerla.

—Señor aquí le dejo las fotos, se llama Catalina Da silva.

— Excelente trabajo como siempre, te has ganado una comisión extra por ser tan eficiente.

—muchas gracias señor Rossi.

🗨️ Miró las fotos y si es impactante, su piel canela es delicada y esos ojos azules la hacen salvaje, llamativa, muchisimo más bella que su hermana, pero me interesa la hija de Vladímir, ella es engreída y fastidiosa y es el tesoro de su padre, es hora de que pague todo lo que ha hecho.

Soy Leonardo Rossi, heredero del imperio Rossi, dueño de varias empresas alrededor del mundo, soy un soltero codiciado, las mujeres se rinden a mis pies para que juegue con ellas, debo casarme en menos de dos años o todo pasará a manos de mi hermano y eso no lo permitiré, él es un bueno para nada dedicado a las drogas y al alcohol, en poco tiempo nos dejaría en la ruina.

Soy muy bueno en el juego, habilidad que heredé de mi padre, es mi única distracción, bueno y las mujeres, pero el juego me da menos dolores de cabeza.

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— Mamá podemos hablar.

—Si claro, hija ¿Cómo te sientes?

—Mamá me iré a Brasil y quiero que vengas conmigo, no puedes quedarte con él.

— Pero hija, si nos vamos juntas tu padre nos encontraría y sería peor, lo mejor es que te vayas sola, yo podría hacer que piense que te fuiste a Rusia con alguno de tus tíos y te daría tiempo de estar segura.

—Tienes razón, pero no quiero que corras peligro, nunca creí que papá te pegara, siempre creía que eras torpe y te caías y esa era la razón de tus constantes morados en la cara.

—Tranquila hija, ahora únicamente debemos organizar lo de tu viaje, alista todo y yo me encargaré de que tu padre no se entere de que saliste.

—Ya tengo todo listo, mi equipaje está en mi carro, fui sacando de a pocas cosas y ya tengo una maleta con lo necesario.

—¿A dónde vas hija?

—Papá iré a la inauguración de una nueva discoteca.

—Lo siento hija, pero no iras a ningún lado, mañana vendrá tu futuro esposo por ti y debes estar disponible, cuando vas a tus fiestas duermes hasta dos días.

—Te odio papá, eres un desgraciado, cómo puedes hacerle esto a tu única hija, nunca te perdonaré, eres una escoria.

🗨️ Fue lo último que pudo decir antes de caer al suelo, por primera vez su padre la había golpeado, su madre que salió al escuchar la discusión corrió en su auxilio.

—Déjala. Siempre le di gusto en todo, siempre pensando en darle lo mejor y ahora que necesito que me ayude no lo hace. Es una desagradecida.

—Señor Vladímir no sea iluso, usted nunca ha pensado en nadie más que en usted mismo, por qué no apostó una de sus empresas, para eso tiene varias.

Pero sabe que hasta hoy es usted mi padre, no quiero volver a verlo nunca más prefiero estar muerta que casarme con un desconocido para ayudar a alguien que droga, golpea y viola mujeres.

🗨️ Leticia salió corriendo hacia su cuarto, no la seguí, creí que lo mejor era dejarla sola, Vladímir me miró con odio, pero sus miradas no me afectaban, solo podía sentir desprecio por alguien como él.

Subí a mi cuarto y traté de buscar opciones para salvar a mi hija, quizá si hacía una contrapropuesta, lograría que me diera tiempo o aceptaría algo más como pago.

Escuche mi celular sonar, pero no lo llevaba conmigo, lo deje en la sala; me dispuse a bajar cuando vi mi celular estrellándose contra la pared, no quise discutir solo recogí el chip y me devolví a mi cuarto.

Un rato después sonó el celular se Vladímir y él contestó de forma vulgar y también azotó su celular.

La noche transcurrió en total normalidad, al día siguiente decidí salir temprano de casa, debía reunirme con mis abogados, alguna solución debía encontrar.

Debía comprar un nuevo teléfono así que le encargue a mi asistente la labor de buscar uno, con buena tecnología.

Hacia las tres de la tarde volví a casa, toque en la puerta de Leticia.

—¿Hija puedo pasar?

— Déjala, la impertinente me tiro la comida en la cara, yo preocupado porque se alimente bien y ella no agradece.

Ya debió quedarse dormida, se ha bebido medio bar, la encerré para que no saliera por más botellas.

—Dame la llave, quiero verla.

Traté de quitarle la llave, pero un puño me devolvió callendo contra la pared. Sentí sangre en mi frente, con dificultad fui a mi cuarto y la empleada me ayuda a hacerme una curación.

Preferí no salir de mi cuarto en todo el resto de la tarde. Me quedé dormida y desperté por los toques en mi puerta.

—Adelante.

—Señora acaban de llegar unos señores y el señor pide que usted baje.

—Está bien dile que me den unos minutos.

🗨️ En otras ocasiones me hubiera maquillado para evitar que los golpes se notarán, esta vez no lo haré.

—Buenas noches.

—Buenas noches, no tardaré mucho así que espero que tengas todo listo.

—espero aceptes aunque sea un trago.

🗨️ Acabo de llegar a cobrar mi apuesta, Vladímir me recibe muy cordial y manda a llamar a su esposa.

Estamos tomando un trago y veo bajar por las escaleras a una bonita figura, la miro de abajo hacia arriba y cuando llego a su rostro veo que tiene una fuerte hinchazón en su rostro y una curación en su frente.

Ella saluda y se dispone a llegar al primer piso.

Me acerco y le extiendo mi mano.

—¿Está usted bien señora?

—Tranquilo caballero, ya mi cuerpo se acostumbró a las caricias de mi tierno esposo.

—Mucho gusto mi nombre es Leonardo Risso.

—¿Así que usted es quien se quiere llevar a mi hija?

—Señora, yo no obligue a su esposo, el tomo su decisión porque quizo.

—Entiendo, solo te voy a pedir que la cuides y no la maltrate.

🗨️ Lo dijo y se señaló así misma.

Sentí un dolor en el pecho, me pareció ver a mi madre, cuando mi padre llegaba borracho y sin razón la tomaba y no la soltaba hasta que la sangre brotaba de su piel.

—Tranquila señora, yo no soy tan ruin.

🗨️ Vladímir estaba al teléfono, cuando se dio la vuelta y me vio sin maquillaje, su mirada ardió con furia, se dirigió a mí, pero el señor Risso lo detuvo.

— Ni se le ocurra tocarla.

—Es mi esposa, esta es mi casa y yo hago lo que se me da la gana, estás en mi territorio, aquí no eres nadie.

🗨️ Vladímir se sorprendió cuando sintió el arma en su cabeza, el acompañante del señor Leonardo no soporto que intentará golpearme de nuevo.

Disfrute viendo el miedo que se reflejó en sus ojos y se sintió bien que por primera vez alguien me defendiera.

—Mejor cálmese y vaya por su hija.

🗨️ Vladímir subió y se dirigió al cuarto de su hija, sacó su llave del bolsillo y entró al cuarto, un grito se escuchó.

En ese momento tocaron la puerta, Vladímir salió con su hija en brazos, la subieron al auto y la llevaron a la clínica.

Yo me fui a mi casa, no tenía nada más que hacer allí, ya después cobraría la deuda.

Deje un par de hombres que estuvieran pendientes y me avisaran las novedades.

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Al llegar a la clínica Leticia fue atendida de inmediato, Vladímir maldecía, mientras su esposa se mantenía distante, sus lágrimas corrían por sus mejillas.

Una mano en su hombro le brindaba su apoyo, aunque Emma no había caído en cuenta quien era su acompañante.

Unos minutos después salió el médico.

Leticia había fallecido por intoxicación, mezcló una gran cantidad de alcohol con un número indeterminado de calmantes, cuando llegó a la clínica ya sus signos vitales eran muy débiles.

Vladímir cayó de rodillas al suelo, Emma, se refugió en la visita sorpresa, pero ella no se había dado cuenta quien estaba junto a ella.

— Lo siento mamá no alcance a llegar a tiempo.

🗨️ Vladímir levantó la vista se fue contra ella y la tomó del pelo.

—¿Qué haces aquí bastarda?

La chica se soltó y le dio un fuerte golpe en el abdomen que lo tiro al suelo.

— No te atrevas a tocarme que esto fue tu culpa, anoche llame mi madre para decirle lo que Leticia pensaba hacer y nunca contesto.

Te llamé a ti y sin dejarme hablar me insultaste para luego colgarme, así que ahora no quieras desquitarte conmigo, el que debería estar muerto eres tú no mi hermana, maldito enfermo.

Madre me haré cargo de las diligencias del sepelio.

—Hija estás aquí conmigo.

— Si mamá y no te volveré a dejar, te irás conmigo a Brasil.

—Y si mejor te vienes a vivir conmigo.

—Hablaremos de eso después mamá.

🗨️ Vladímir se seguía revolcándose en el suelo.

—Señorita el cuerpo de la joven será entregado hasta mañana, lo mejor será que se vayan a descansar y regresen temprano.

—Mama vamos, lo mejor es que nos quedamos en un hotel por esta noche.

— Ella es mi esposa y se va conmigo.

Catalina: intenta acercarte a mi madre y verás de lo que soy capaz.

🗨️ Catalina y Emma salieron de la clínica tomaron un taxi y se fueron a un hotel.

Los hombres de Leonardo Rossi, levantaron a Vladímir y lo llevaron ante su jefe.

—Señor la señora y su hija se fueron a un hotel.

—¿O sea que la condenada no estaba muerta y porque no trajeron a la chica? Yo para qué quiero a este inútil.

—Señor, la señorita Leticia murió, la señora se fue con su otra hija, la que llegó de Brasil.

—¿Y porque me habías contado que tienes otra hija?

—Esa bastarda no es hija mía, la zorr* de su madre la tuvo antes de casarnos.

Por favor, te lo suplico déjame ir al sepelio de mi hija, después podrás matarme si así lo deseas.

— Querido Vladímir, si vivo no sirves, muerto mucho menos.

Iras al sepelio de tu hija y ve pensando como me vas a pagar, la deuda aún está vigente.

🗨️ Muy temprano ambas mujeres llegaron a reclamar el cuerpo, Catalina se encarga de diligenciar la documentación, mientras su madre observa cada uno sus movimientos.

A pesar de la tragedia por la que está pasando, tener a su hija cerca es un bálsamo que calma un poco el dolor por la pérdida de su otra hija.

—Mamá ya todo está listo para la velación de mi hermana, disculpa, pero tendré que comprar algo de ropa no estaba preparada para todo esto.

—Te entiendo hija, todo ha pasado tan rápido, vamos debes comprar lo necesario, lo que necesites para parar una buena temporada a mi lado, en este momento no sabes cuanto te necesito.

—Tranquila mamá no me iré hasta dejar todo en orden, necesito que te alejes de ese tipo.

🗨️ Llegué con mi madre al sitio de la velación y ya en la sala estaban los padres de Vladímir y mis abuelos maternos, a los que solo saludo de lejos.

La mamá de Vladímir siempre fue muy linda conmigo se acerca y me da un tierno abrazo, su padre no es tan expresivo, pero brinda sus afectos.

Ya es hora del sepelio, mi madre está devastada, pero aun así siente que su hija fue valiente y escapó de su destino.

Mis "abuelos" que llevan un buen rato hablando con Vladímir tienen el descaro de culpar a mi madre por la muerte de Leticia, quise intervenir, pero vi a mi madre ponerse de pie.

—Si tienen toda la razón, es mi culpa, por no haber tenido la valentía para enfrentarme a ustedes después de ir y dejar a mi hija en Brasil.

Me hubiera ahorrado, las violaciones y los golpes que por años he tenido que soportar, me hubiera ahorrado ver sus caras de satisfacción, disfrutando del dinero que produce una empresa que yo salve y de la que no puedo disponer.

¿Sabían que Leticia fue concedida durante una violación y que por días enteros llore para que los golpes recibidos no me causarán un aborto?

Si es mi culpa, si yo hubiera tenido la valentía de hacer lo que ella hizo, ustedes ya hubieran muerto al no tener a quien sacrificar para su beneficio y el mundo hoy sería un lugar mejor.

Vámonos hija tenemos que empacar.

🗨️ Llegamos a la casa de mi madre empacamos lo necesario, nos disponíamos a salir, cuando dos hombres armados se la llevaron a la fuerza.

No sabía que hacer, aquí no conozco a nadie, decidí irme a un hotel y pasar la noche allá.

Sé que no podré dormir, sin saber que podía estar pasando mi madre, pero me sentía más segura allí, que quedarme en la casa de mi madre a esperar que llegara ese mal nacido.