Soy Tatiana balders, estoy dando mis últimos respiros y viene a mi cabeza todo lo que atravesé en mi vida.

Cuando era pequeña, tendría unos 7 años, un invierno, lo recuerdo como si fuera ayer, hacía mucho frío, las facturas de luz y gas seguían acumulándose, lo único positivo era que no alquilábamos, ya que era la casa de mi abuela materna. Durante la noche escuché ruidos en la cocina, me levanté y ahí lo vi a mi padre, no sabría en ese momento, que sería la última vez que lo vería

– papi ¿qué haces con un bolso? ¿Acaso de iras?-

-Si mi princesa, voy a un viaje de negocios, cuando vuelva iremos al mejor restaurant de la ciudad y podrás pedir lo que quieras-

-Pero no quiero que te vayas, mamá dice que tus negocios no son buenos, se pone triste y llora muchos cada vez que te vas, pero llora más cuando vuelves-

En ese segundo cambió la mirada por una llena de odio, cosa que iba a darme cuenta con el tiempo, cuando recuerde ese momento

-No te preocupes, toma este chocolate y ve a dormir-

Agarré el chocolate, pues tenía 7 años¿quién diría o cuestionaría algo a esa edad si le daban un chocolate? Me fui a dormir y al día siguiente mi madre leyó la carta que le dejó mi padre. Nunca supe que decía, pero el rostro de mi madre primero se ensombreció por una milésima de segundo, luego me miró y me dijo

– cariño ahora solo somos nosotras dos contra el mundo, mami te ama y hará de todo para que estemos bien-

Así lo hizo hasta que unos años atrás, yo iba en secundaria por aquel momento, y mi madre volvía del trabajo, nos encontrábamos siempre en la parada del autobús e íbamos caminando hacia nuestra casa. Cuando estaba bajando feliz, ya que mis notas iban bien y tenía en vista que estudiaría dentro de tres años, cuando finalice el secundario, veo como mi mundo se desploma en cuestión de segundos, en ese instante, mi madre cae de la nada, nunca se quejó de un dolor, siempre hacia el mayor de los esfuerzos, trabaja todo el día, quedaba agotada, pero nunca se quejaba de nada, siempre me sonreía y me decía que me amaba. Pero en ese mismo momento sentí la verdadera desesperación cuando mi madre caía sin razón y cerraba sus ojos. Corrí como loca hacia donde estaba ella y comencé a gritar que alguien llame una ambulancia, no sé en qué momento, ni cómo, ni quién acudió a mis gritos, solo sé que pasé de un instante de emoción y felicidad, a estar sentada frente a un doctor teniendo una conversación que no quería escuchar.

- Niña ¿cómo te llamas?-

Lo miré totalmente aturdida, le dije mis datos, los de mi madre y siguió preguntando.

- ¿estás sola? Podemos llamar a alguien, algún familiar para que venga, tenemos que hablar del estado de salud de tu madre y como seguiremos de acá en más.-

Lo miré con duda, pero le dije

– solo somos nosotras dos contra el mundo, por favor hable conmigo que soy el único familiar-

Sentía como se me formaba un nudo en la garganta y como contenía mis lágrimas, sabía que no era nada bueno, pero así y todo quería escuchar que pasaba.

El doctor me miró con duda y prosiguió

– tu madre está enferma, tiene cáncer y bastante avanzado, no sabemos si es tratable todavía, tenemos que hacer muchos estudios, pero en el grado que pareciera, tiene que tener muchas ganas de luchar para sobrevivir-

Sentía como todo lo que mi madre construyó en estos 8 largos años se derrumbaba, como me hundía más y más en la desesperación. Sin embargo, no me di tiempo de seguir en ese agujero, recordé rápidamente  como mi madre siempre me daba esas sonrisas cálidas y llenas de amor. Fui al baño lloré durante 2 horas seguidas, me lavé la cara, me maquillé, para tapar mi horrible apariencia después de llorar tanto y fui a la habitación que se encontraba mi madre. Me miró con su hermosa sonrisa y me dijo

-todo va a estar bien ya no llores-

ella me conocía más que nadie en el mundo, la miré y le dije

– madre de ahora en más buscaré la forma de ayudar en lo que más pueda, así que solo recuéstate y deja que esta hija haga todo por ti, deja que te cuide y te mime, así como tú hiciste conmigo, pero por favor nunca dejes de querer luchar.-

Ella asintió y solo me miro con mucho amor.

A partir de ahí mi vida cambió radicalmente salía de clases, trabajaba y muchos vecinos que nos conocían nos ayudaban, otros solo criticaban y opinaban sin saber sobre toda nuestra realidad, muchos juzgaban a mamá cómo no lo había hecho mejor para que yo no tuviera que salir a trabajar, sin embargo, solo eran comentarios vacíos llenos de odio.

Poco a poco los gastos del hospital, las facturas de la casa y los gastos para mantenernos se acumulaban. Ya habían pasado 3 años, del peor día de mi vida, mi madre luchaba incluso sin tener buena perspectiva, sin embargo, pasó por muchas operaciones y muchos tratamientos. Veía como la vida de mi madre se iba apagando entre mis manos y no podía hacer más que abrazarla y amarla hasta que de su último respiro, así me lo propuse. Una tarde estaba totalmente estresada por toda la situación con 18 años y por terminar el secundario. Trataba de encontrar alguna forma de conseguir dinero y poder cumplir el deseo de mi madre que era que estudie una carrera que me gusté, me reciba y nunca pase malos ratos. En eso ya era de noche y no sé si porque estaba distraída o que, dos hombre de cuarenta y algo, totalmente fuera de sí, no sé si por drogas o por alcohol quisieron arrastrarme a un callejón por el cual pasábamos. Cuando trato de defenderme me golpean, pensé que iba morir hasta que apareció Jack

- Oigan ustedes bastardos no les da pena tratar así a una dama-

- Anciano no te metas si no quieres terminar muerto-

- Jajajajajaja y ¿quién provocará mi muerte? ¿Ustedes par de enfermos que tratan de atacar a una niña? No tiene lo que es necesario para enfrentar a un viejo como yo-

Los hombres totalmente enfurecidos quisieron golpearlo, sin embargo, el anciano que vino a mi rescate los dejó al borde de la muerte en unos segundo, no podía creer lo que veía, pareciera como que el anciano se iba a quebrar en cualquier momento, sin embargo, fue algo increíble.

Me llevó a un bar que estaba cerca. Cuando entre todavía no era hora que hubiera clientes estaban solo los trabajadores.

- no te preocupes es mi bar aquí estarás a salvo-

El anciano llamó a Jacki, una de las meseras y le pidió que traiga algo de ropa, y le dijo a Rosa quien estaba en la caja, que me lleve a los vestuarios. Cuando llegue vi mi ropa toda rasgada y se me cruzó por la cabeza todas las cosas malas que podrían haberme hecho. Las chicas me ayudaron y trajeron hielo para mis golpes. Después de tratarme fui a hablar con Jack

- Le agradezco mucho que me haya salvado señor-

- Solo llámame Jack querida, ¿qué hacías por acá a estas horas?

Le conté que estaba buscando trabajo y tras un extenso interrogatorio le mencione toda mi situación, sentí por primera vez en tres años que alguien me escuchaba y no juzgaba ni una sola palabra de lo que decía, me sentí tan aliviada. Así fue como Jack me tomo bajo su protección. Me enseño todo lo necesario para defenderme.

Así pasaron unos 4 años, salí de mi última clase, era estudiante universitaria, tan solo me faltaba 3 meses y me graduaría después de defender mi tesis, iba a recibirme en administración de empresas, no era una de las mejores de la clase pero podía seguir el ritmo, a pesas de la vida pesada que llevaba.

Siempre llegaba sobre la hora a mi trabajo nocturno, era mesera en el bar de jack, la paga era buena y con la propina, era más que suficiente para los gastos del hospital y la casa, podíamos llegar a fin de mes, por lo que estaba muy agradecida. Ya estaba agotada después de una larga jornada de estudio y ahora tener que lidiar con una parva de ebrios que siempre buscaban una razón para poder tocarme el trasero o tratar de invitarme a salir.

Jack era muy amable, todos los empleados me cuidaban, ya que era la más joven y todos sabían mi situación, además eran muy considerados conmigo, me decía que termine de estudiar y que salga de este mundo, que no era para mí estar entre ebrios y malvivientes, que tenía que brillar, jack era como el padre que nunca tuve, lo conocí cuando estaba en un mal momento y él siempre me extendió la mano, me enseño el valor del trabajo y formas de cómo defenderme si me atacaban, ya que era consciente de que estaba sola y andaba por la calle a altas horas, me ofreció vivir con él muchas veces, pero no puedo dejar sola a mi madre, éramos solo ella y yo.

Todo iba bastante bien hasta que esa noche a eso de las 2 de la mañana me llama una vecina, avisando que tuvieron que llamar una ambulancia, ya que mi madre se descompensó. Mire a Jack

–ve niña con cuidado, avísame cuando llegues-

Salí corriendo no me daba el cuerpo para llegar sentía como me quedaba sin aire me dolía todo, nunca corrí con tanta desesperación no sabía que había pasado, ni si mi madre estaría bien. Cuando llegue al hospital, me dijeron que me apure a verla porque no sabían si pasaría la noche, entre corriendo a la habitación y la vi con tan poca vida, podía ver como una vez esos ojos que me miraban con tanto anhelo se iban apagando poco a poco, me inundó la tristeza, pero me acerqué a su cama le tomé la mano y le besé la frente,

- madre descansa tranquila ya no te voy a pedir que sigas soportando tanto dolor, te amo, y quiero que vueles tan alto y deje de doler, sé que aguantaste tanto por mí, te admiro y no te preocupes, no estoy sola, sé que siempre vas a estar en mi corazón dándome fuerzas para poder seguir, gracias por hacerme la mujer que soy hoy en día, te amo-

Mi madre me sonrió a pesar de la poca fuerza que tenía y me dijo

– mi niña te amo, perdón porque esta madre no puede seguir a tu lado, siempre te amaré, estoy orgullosa de ti, nunca dejes de luchar, sé más fuerte que yo, te amo mi niña, vive, vive feliz...- 

Con esas últimas palabras después de casi 7 años de luchar contra todo pronóstico y sobrevivir sin que nadie tuviera expectativa, ella por fin se había rendido, dejó este mundo, dando su último respiro.

Salí del hospital tan frustrada, enojada con la vida como se había llevado a una mujer que lucho tanto por vivir, que injusta que era la vida, estaba tan ensimismada con mis pensamientos, que escuché que alguien gritaba mi nombre y algo así como que deje de caminar, cuando me di cuenta ya estaba en el suelo, tirada en medio de la calle, no podía entender que estaba pasando, vi como justo Jack llegaba corriendo donde estaba yo, - soporta un poco todo va a estar bien-

Fue lo que llegué a escuchar. Dolía todo ya no quería que duela más, fui sintiéndome más y más cansada hasta que me dormí en los brazos de Jack, me sentía tan cálida y mi último pensamiento fue ojalá que toda esta gente que fue tan gentil conmigo a lo largo de estos años sea feliz,

- perdón Jack, pero quiero dormir, perdón madre por no ser fuerte como lo fuiste tú- Jack con lágrimas en los ojos y con una voz totalmente quebrada

– duerme mi niña, yo te sostendré para que descanses en paz.-

Así el mismo día que mi madre se iba de este plano terrenal, yo daba mi último respiro como Tatiana Balders.

A medida que me sumergía en una oscuridad que me envolvía cada vez más y más, sentía como me iba relajando y me dejaba llevar, pensaba que así se sentía la muerte: paz, silencia, armonía….

Pero de repente comencé a escuchar sonidos de pájaros, grillos y sapos. Me recordó a cuando con mamá visitamos a mi tío en el campo, se sentía tan bien, pero algo no era correcto, empecé a sentir mi cuerpo, si bien se sentía algo entumecido, pero ¡¡cómo era posible sentir mi cuerpo!! Estaba segura de que había muerto. Podía escuchar gente a mi alrededor, poco a poco iban volviendo mis sentidos, pensando que tal vez Jack pudo llevarme al hospital, tal vez lograron reanimarme, era lo más lógico, sin embargo, recordaba como aquel camión chocó contra mi frágil cuerpo y dudaba que si había sobrevivido, que todavía tenga todas mis partes corporales en su lugar.

Por más miedo que me daba el verme postrada en una cama de hospital me decidí y abrí, poco a poco, los ojos. Empecé a analizar qué era lo que veía, en ese momento supuse, ¡ya me volví loca! Seguro el golpe de ese camión no dejo bien mi cabeza, como podía estar en una cama grande estilo princesa, con tul a mi alrededor, las paredes rústicas, los muebles parecían muy antiguos, era una habitación bastante grande, con un ventanal que pareciera tener un balcón, veo como una mujer joven de unos veinte años aproximadamente, abre el tul que rodeaba mi cama, vestía como un cosplay de mucama, era muy bonita, me miró sorprendida y comenzó a gritar

- ¡La señorita despertó! ¡La señorita despertó!-

En un santiamén apareció un hombre bien parecido, alto, con buen porte, su cabello era rubio y sus ojos eran tan raros eran un color rojos como la sangre, perecía que te envolvían cuando te miraba, era muy hermoso nunca vi una persona así, comenzó a abrazarme y decirme

-estás bien hija mía, dormiste mucho tiempo, nos tenías a todos preocupados-

Atrás de él vino corriendo una mujer esbelta, con cabello rojizo y unos ojos celestes que te hacían sentir en paz, era igual de bella que aquel hombre que no dejaba de llamarme hija. La mujer se acercó a mí y me abrazó con lágrimas en los ojos

– bebe tenía tanto miedo que no despiertes ya hace una semana que no veía como abrías esos hermosos ojitos tuyos-

Yo estaba totalmente en shock creía que era una broma de muy mal gusto, comencé a reír como loca con una voz rasposa debido a mi garganta que estaba totalmente seca

– ¿Qué clase de broma es esta?-

La mujer me miró extrañada

- hija ¿qué pasa?, nadie está haciendo una broma-

-deja de decirme hija, ¿quién eres? ¿Por qué me dices hija?-

El hombre sorprendido le dice a la chica que vi hace un rato, quien había descubierto que había abierto los ojos

–Sara ve a buscar inmediatamente al médico-

Nadie dijo una palabra más, por dentro pensé- por fin un ser razonable- apareció un hombre de edad avanzada y se acercó a mí, me extrañó en ese momento ver mis propias manos, en medio de toda la conmoción no había prestado atención a mi cuerpo, recién me percaté en el momento en el que el médico me pide mi mano para tomar mi pulso. Incrédula le doy mi mano, la cual sentía que no me pertenecía, empiezo a analizar mi cuerpo y me doy cuenta de que estaba en el cuerpo de una joven más pequeña, una adolescente diría, en ese momento se me vino lo más coherente que pude pensar

-¿Joder experimentaron con mi cuerpo, será que lograron pasar la consciencia de una persona a otro cuerpo moribundo pero entero? ¿Será como en las películas que pasan la mente con una máquina complicada a otro cuerpo? ¿Jack me postulo para este experimento o el gobierno solo me adujo?-

Iba tratando de encontrar la explicación más lógica que se me ocurría después de haber visto millones de películas y leído muchas novelas, pero no sabía qué pasaba.

En eso el médico me dice con total calma

- señorita Ludmila, ¿recuerda algo de lo que le paso?-

Lo quedé mirando fijo, ya que no podía creer como me había llamado, mi mente se llenó de preguntas, pero me mantuve callada. El hombre me miró con una sonrisa y me dijo

– tuvo un pequeño accidente en el patio de la familia Baldrom, cuando se acercó al estanque que tiene la familia en la casa, usted cayó al agua y no pudo salir, nadie sabe cómo cayó, pero tenía una herida muy grande en su cabeza, gracias al joven que la sacó en ese momento pudimos tratarla, creo que ese golpe en la cabeza pudo hacer que pierda algún recuerdo, poco a poco seguro los irá recuperando, no se presione y todo volverá a su tiempo-

El doctor dejó una medicina para que tome con unas vitaminas, e indicaciones para que todos me vayan hablando un poco de mi vida así recuperaba mis recuerdos.

Estuve una semana por lo que decían en cama y creo que mi cuerpo lo sabe ya que ni bien se retiró el doctor, mi estómago comenzó a gruñir.

El hombre quien decía ser mi padre ordenó que me dejen descansar por el momento y envió a Sara a traerme comida. La mujer hermosa que me llamaba hija se retiró afligida al borde del llanto.

Ya estando sola con Sara, quien en un abrir y cerrar de ojos estaba con mi comida frente a mí, se veía como una especie de sopa, supongo que tendré que comer algo liviano si hace una semana no despertaba. Le pedí amablemente

- Sara ¿verdad?-asintió y proseguí - ¿Me podrías por favor traer algún espejo para poder verme?-

Me miró sorprendida cosa que me extraño ¿por qué se sorprende? Y le pregunté

-¿Pasa algo?-

La mujer salió de su sorpresa y me alcanza un espejo que estaba arriba de una cómoda.

Empiezo a mirarme y me sorprendo de lo hermosa que me veo, tenía el cabello rojizo como aquella mujer con la diferencia que tenía reflejos negros, se veía todo muy natural, mis ojos eran de un rojo vibrante así tal cual aquel señor que me abrazaba, empecé a pensar que esto tal vez no es un sueño, ni un experimento, pero necesitaba saber más. Mire a Sara y le pregunte de forma amigable

- ¿puedes contarme un poco sobre ese accidente que menciono el doctor? –

La mujer dudosa comenzó a relatar lo que sabía

–usted mi señorita fue a una fiesta de té en la casa de la señorita Juliana Baldrom, según lo que dijo la señorita usted salió al patio a tomar aire y a darle miga de pan a los patos que se encuentran en el estanque de la familia, pero resbaló y cayó dentro, como usted no sabe nadar, las señoritas no dudaron en pedir ayuda, y justo el conde Baldrom estaba en una reunión de negocios y uno de sus invitados, la saco, no sé bien quien la saco, pero gracias a él está viva, ya que usted mi señorita no sabe nadar-

Mientras Sara hablaba primero se me cruzó por la mente ¿quién carajos tiene patos en un estanque en su casa? ¿Por qué iría como idiota cerca de donde hay agua si no sé nadar? No es que sea muy inteligente pero yo veo esto muy raro, y siento que esto lo leí en algún lado….unos segundos más tarde mi cara comenzó a transformarse tratando de reprimir todas las emociones que me llegaban y comencé a entender dónde estaba. Pero antes tenía que asegurarme así que seguí con mi interrogatorio

–Sara dime ¿Mis padres se llaman la Duquesa Luz Plater y el Duque Milán Plater, tengo un hermano Joaquín Plater y yo soy la señorita Ludmila Plater. Y este es el Ducado más influyente de este reino?-

Sara la miró sorprendida

–Si mi señorita-

En ese momento comprendí todo, estaba dentro de una novela romántica que me solía leer  con mi madre “creando el paraíso en medio de las tinieblas” trataba de como toda historia romántica un par de protas que se enamoran y viven feliz por siempre, en medio derrotan a los villanos que aparecen, una era yo la villana menor Ludmila Plater que al ser la prometida del príncipe, y que este la ignore llego a hacer cosas atroces cuando el príncipe se enamora de la protagonista, la hija de un barón, que recién se mudaban al reino de “Weterla” el reino más próspero donde pocos lo sabían, pero había algunas familias influyentes que tenían sangre de hada corriendo por sus venas, mi familia tenía sangre de una de las razas más poderosas, las hadas mayores, ya que mi madre, es una descendiente directa. Se supone que en la novela esta villana estaba cegada por los celos, no solo tenía el odio de toda la sociedad, su hermano tampoco la soportaba, la servidumbre le temía y obviamente el príncipe la aborrecía, ella era descrita como una mocosa insoportable que solo se la pasa ostentando la riqueza de sus padres, no hacía nada por sí misma, ya que decía que iba a ser la próxima emperatriz, tampoco trataba bien a los demás y menos a sus empleados, los veía como menos, por ello la sorpresa de Sara cuando la traté bien, al estar sola. En mi mundo sería vista como una caprichosa, insoportable, pero no únicamente tiene la culpa esta mocosa, sus padres dejaban que ella hiciera lo que quisiera, con razón era tan molesta, nadie le ponía un freno, hasta que fue muy tarde.

Sin embargo, creo que la condena que recibió fue injusta, ¿si el príncipe era su prometido y se enamoró por qué no rompió el compromiso, solamente por los caprichos de una villana seguía con ese compromiso? Esa era una pregunta que me rondaba cada vez que leía la historia porque el príncipe trataba de encontrar todas las cosas malas que hizo de la noche a la mañana para tratar de condenarla sabiendo que nunca fue un dulce corderito. Pero más que actuar como caprichosa esta villana no hizo, no considero que sea razón suficiente para su cruel destino. A pesar de todo, se supone que yo quise este compromiso, primer punto a resolver cómo mantenerme viva, ya que esta villana muere a sus cortos 18 años por ser decapitada, no quiero que eso pase, mi madre me dijo que luchara por sobrevivir, no dure mucho en mi otra vida, pero en esta oportunidad no voy a dejar que me arrastre una niña caprichosa a mi muerte.

Además, sería mejor que se centren en el otro villano así yo pasaría desapercibida, el reino se mantenía próspero hasta que llegó un Duque de alto grado no solo con poder militar, sino con poder comercial, era muy bueno en los negocios y reconocido en varios reinos.

Tras verse rechazado por la protagonista, se envuelve en desesperación y rabia lo que lleva a desatar toda su ira contra el reino, suponiendo lo que decía la novela, él poseía sangre de demonio por lo que no soporto que alguien le rompiera el corazón y quiso arrasar con todo un reino, lo siento Duque, pero vas a ser mi cebo así nadie se centra en esta villana, espero que sea realmente malo, así no me da pena, su final.

Muere en manos de los dos protagonistas en una escena icónica, donde entre los dos blanden una espada superpoderosa legendaria, de esas que solos los protagonistas tienen y entre los dos se la hunden en el pecho, el problema es que en su estado de demonio no lo mata la espada sagrada, sino la única que puede parar tu corazón es la mujer que él amaba. Cruel destino señor Duque demonio.

Ahora que lo pienso… qué pasaba por la cabeza de la autora, no le parece absurdo y tonto que por un corazón roto quiera destruir un reino completo, es decir, obvio duele pero ¿para tanto? Hay razones más convincentes.. como.. no se.. querer apoderarse del trono, los impuestos muy altos…no se me ocurre en este momento pero esta autora tiene problemas con los celos y el amor ya que todos los problemas comienzan con celos, rupturas, corazones rotos, amores no correspondidos, etc. Tendré que hacer todo lo posible para no verme envuelta en todo este asunto de amoríos y celos, ah y tratar de ser buena…. Tatiana se buena…. Digo Ludmila se buena niña de ahora más y  mantente lejos del romance por las dudas, en mi vida pasada nunca estuve en una relación con amor verdadero, no creo que sea algo que exista, solo fueron novios pasajeros, así que mi objetivo no va a estar muy difícil, tengo que averiguar si el compromiso se llevó a cabo o todavía estoy a tiempo...

En los siguientes días, todo fue muy extraño, tenía que adaptarme a lo que estaba pasando, así que con la excusa que me sentía todavía débil me quede encerrada en mi habitación. Todo iba bastante tranquilo y me iba adaptando hasta la quinta noche, allí me quise parar para ir al baño y me caí, se escuchó tan fuerte que todo llegaron corriendo, comencé a gritar, mis padres pidieron que llamen al médico inmediatamente.

Mi cabeza estaba jugando una mala pasada, de pronto empecé a ver como pasaba la vida de este cuerpo frente a mis ojos, como era una niña totalmente afortunada con una familia más que amorosa, porque arruino todo queriendo comprometerse con un príncipe que nunca la miro ni como amiga, es más parece que la mira con asco, todos los recuerdos inundaban mi mente el dolor era profundo, pero todo volvía hasta el día del accidente, vi como la señorita Baldrom se me acercó y me dijo

– zorra no mereces vivir, muérete de una vez-

Así como así me tiro al estanque. Había salido de esa fiesta de té porque no paraban de insultarme decían que era una abominación, ya que tenía el pelo rojo como mi madre, el pelo de este color solo lo tienen las hadas de la familia de mi madre, era una marca familiar, sin embargo, es un punto de envidia para más de una sabiendo lo que significa, pero para otros es tan atroz, porque decían que Ludmila se comportaba así de mala con todo el mundo por llevar ese color de cabello, que pensamiento tan anticuado, creer que por las características de alguien se vale su personalidad.

A mi madre nadie se atrevía decirle nada, en cambio, a mí como no era muy buena contestando, puesto que únicamente sabía armar berrinches e insultar, sin sentido, y nunca se me ocurrió entrenar este débil cuerpo ni con lo básico, ¡¡¡¡joder Ludmila que pensabas!!!! ¡¡Me enoja tanto con esta chica!! Podría haber entrenado su magia, el arte de la espada, algo por lo menos, pero estaba tan segada que no quiso hacer nada, por más que su madre le insistió que ella la entrenaba, solo aprendió modales, ¿como considera defenderse? Mostrando lo bien que saluda o lo magnífico de agarrar adecuadamente una taza de té….

Tarde un día en recuperarme pero ahora tengo los recuerdos de este cuerpo incluso una imagen difusa del extraño joven que me salvó, tendré que agradecerle. A partir de esto comienzo a planear mi vida tranquila y pacífica, pues soy hija de un Duque porque quisiera meterme en problemas, sin embargo,no soy ingenua, primero comenzaré con cosas básicas pero me entrenare, madre no te defraudaré, viviré mi vida al máximo, haciendo todo lo que quiera, el dinero ya no será un problema.

Al día siguiente me levante temprano me dirigí a desayunar con mis padres, todos se sorprendieron, puesto que solía desayunar sola en mi alcoba, también estaba mi hermano. Salude educadamente con una reverencia, gracias a los recuerdos de la anterior usuaria de este cuerpo, de algo sirvieron tus clases de modales.

- buenos días, padres y hermano-

-buenos días, hija-

me saludan al unísono mis padres con una sonrisa de oreja a oreja

Mi hermano por su parte me mira reacio y dice

– ja ¿ahora que te vas a inventar que alguien te quiso matar por eso perdiste la memoria?-

Se ve que mi anterior usuaria estaba además de caprichosa, loca. Para llamar la atención del príncipe solía hacer cosas de ese estilo, raras… locas… Inútiles. Pues él nunca la miraba. Así que con mi cara lo más neutra posible, ya que me da mucha bronca que este insensible hermano no le crea a su hermana, por más que él tenga algo de razón, le digo tratando de mostrar una sonrisa

– disculpe usted Joaquín Plater, pero mis recuerdos son todavía borrosos, no sabría decirle que me paso, por ellos no acusaré a nadie de nada, como acusar si todavía estoy en un dilema de quien soy realmente-

Mi hermano se sorprendió por dos cosas a simple vista una que no lo llame hermano, nunca lo tuve así que para mí es raro, y dos porque no estoy armando escándalos. Me miro confuso y me dijo

- veremos cuanto te dura la farsa-

Se levanta y se va.

Mis padres me dedican unas palabras amorosas insistiendo que no le haga caso y continuamos desayunando. Aprovecho la situación para comenzar mi plan de entrenamiento

- ¿padre y madre me podrían hacer un favor? ¿Cumplirían una pequeña petición que tengo?-

se miran confusos y mi padre dice

-si está dentro de mis posibilidades te cumpliré lo que me pidas-

Esboza una radiante sonrisa, ¿porque son seres tan hermosos, acaso es normal que sean así en este mundo?

- padre quisiera tener un maestro para aprender sobre negocios, otro para entrenar mi magia y otro para mejor mi manejo de espada, sería de mucha utilidad que aprendiera a ser fuerte como mi familia-

Mis padres eran considerados unos de los mejores; mi madre como maga y mi padre como el mejor manejando la espada. Mi hermano seguía los pasos de mi madre, así que cuando mi padre escuchó que nombre la espada casi llora de la alegría

- hija mía por fin quieres entrenar, y ¿quieres ser como papa no es cierto?-

Lo miro sorprendida, ya que pensé que por lo menos iban a poner excusas, por el hecho de que es raro que una mujer haga estas peticiones, pero considerando quien es mi madre, era un poco obvio que el Duque no se opondría

- si padre quiero ser tan buen espadachín como usted y también maga como madre-

Los dos empezaron a hacer un alboroto por toda la casas, pidiendo que busquen a los mejores maestros que mañana comenzaba mi entrenamiento.

Relata Joaquín

Me coloco detrás de la columna para escuchando la tonta petición de mi hermana, estaba por irme, pero escucho que quería algo, ya me lo veía venir, seguro insiste con el compromiso con el príncipe, pero a ella no le conviene, no conoce a ese bastardo, únicamente quiere poder, y más allá de todo ella es mi hermana no puede estar con alguien que la termine utilizando, porque no abre los ojos esta chica tonta. Cuando estaba sumergido en mis pensamientos escucho a mi hermana pedir por maestros, no podía creer, no solo no nombro al príncipe desde que despertó sino que ahora quería estudiar. Mi hermana se está comportando raro desde que tuvo ese accidente, recuerdo lo mucho que quería a mi hermana cuando éramos pequeños, era tan dulce y cariñosa, sin embargo, cuando noto al príncipe se vio enceguecida, y comenzó a hacer cosas erráticas y malvadas una tras otra, cuando escuché que quería estudiar, mis labios solos esbozaron una sonrisa y pensé

- que te traes entre manos hermanita, espero que no sea otra de tus viles mentiras y hagas ilusionar a nuestros padres, para luego concluir en uno de tus estúpidos berrinches-

Quería creerle tanto, que volvió a ser mi querida hermanita, pero tengo tantas dudas, ya veremos que pasará.