Abro los ojos lentamente y aunque la luz en la habitación es tenue (casi nula) puedo distinguir a tres figuras frente a mí las cuales al parecer traen consigo armas

trato de hablar, pero los nervios no me lo permiten, además, tengo sobre mi boca un poco de cinta la cual seguramente fue colocada por esos hombres

--Ya despertó -dijo uno de ellos -Llama al jefe

¿al jefe?, ¿quien carajos es el "jefe"?

trato de moverme, pero es inútil, estoy atada tanto de los pies como de las manos

--Tranquila chiquita -escucho sobre mi oído- Estás aquí por un bien común

¿un bien común?, dios, cada palabra que dicen estos hombres solo me confunden aún más

dos de ellos se alejan un poco de mi y comienzan a hablar, mientras que otro va en buscá del "jefe".

A pesar de la distancia puedo escuchar la conversación, la cual sin duda alguna gira entorno a mi

--Al jefe le encantará tenerla aquí -escucho

--Sin duda no se equivocó en pedir a una chica tan sexy como ella -me señala

ambos se quedan callados cuando las luces de la habitación se encienden, ahora puedo ver con más claridad, estoy en una especie de bodega algo espaciosa, además, ahora veo a la perfección a aquellos hombres que hablaban de mi, uno es calvo completamente, estoy segura de que podría ver mi reflejo sobre su calva, y el otro tiene el cabello largo y de color negro, si soy sincera el cabello de él se ve mejor cuidado que el mío

la puerta del lugar se abre detrás y es cuando empiezo a temblar de nuevo, mis manos vuelven a empaparse de sudor y mi puslo cardíaco aumenta aún más

--¿Es ella? -escucho detrás mío

la voz que escucho es gruesa y suena amenazante, tanto que me eriza la piel de una manera increíble

--Así es jefe, es ella -responden a la pregunta

--Es perfecta

cierro los ojos con fuerza mientras escucho que aquél sujeto se acerca lentamente

--Abre esos hermosos ojos azules nena -susurra

abro los ojos lentamente para revelar que yo no soy la chica de ojos azules que se menciona, mis ojos son marrones, el color más común

--Soy Elías Walton -dice al mismo tiempo que empieza a retirar la cinta de mis labios- Tú eres Emily Johnson, ¿cierto?

--No -dije con miedo- Soy Mia Parker

Elias me da la espalda al instante y golpea con fuerza una pequeña mesa haciendo que yo salte del susto

--Carajo -expresa antes de caminar hacia uno de sus hombres- Ella no es Emily Johnson

--Claro que lo es -aseguro con certeza- La estuvimos siguiendo y...

--¡Ella es Mia Parker, no Emily! -grita

--Igual es linda, incluso más que la chica que ordeno -responde el calvo tratando de controlar la ira de Elías, quien inmediatamente golpea su nariz haciendo que empiece a sangrar

él me vuelve a mirar, pero esta vez con furia, tanto que temo por mi vida pues no sé de qué sea capaz este tipo

--Da igual -se acerca a mi de nuevo después de soltar un gran suspiro

--¿Qué me harán? -pregunto con la voz débil

--Tranquila nena -pone uno de mis mechones de cabello detrás de mi oreja- Yo no te haré nada, y tampoco lo harán Abel y Adam, al contrario, ellos te cuidarán de ahora en adelante

--¿Entonces por qué me tienen aquí atada? -dije con el ceño fruncido

--Hubo una ligera confusión-responde- Pero aún asi me sirves

--¿Servirte? -levanto una de mis cejas

--Se que ahorita no entiendes nada -pone una de sus fuertes manos sobre uno de mis muslos- Pero yo te voy a explicar

Elias se aleja un poco de mi, toma una silla ubicada en la pared blanca de la bodega y se sienta a un lado mío y baja la mirada hacia sus zapatos

--Eres joven, debes tener 19 o 20 años

--Tengo 17 años -dije corrigiendolo

--Más joven de lo que pensé -susurra

--¡Dime de una maldita vez por qué me tienes aquí! -grite con desesperación

--Shhh -pone su dedo índice sobre mis labios finos- Guarda silencio o realmente me conocerás enojado

empieza a retirar su dedo sobre mis labios, sonríe antes de recargar su espalda por completo en la silla y me mirá fijamente con esos ojos verdes esmeralda tan llamativos

--Llevaras a mi futuro hijo en tu vientre...

Sus palabras retumban en mi mente por varios minutos, no puedo creer que el único objetivo de mi secuestro sea convertirme en madre, nunca creí que hubiera personas tan dementes en este mundo

además, yo no tendría porque pasar por esto, la chica que sería secuestrada y embarazada originalmente era una tal Emily Johnson

--Si lo que necesitan es dinero puedo hablarle a mis hermanos y...

--Por favor niñata -dice riendo- Yo prácticamente nado entre dinero, no necesito que me den un rescate por ti, lo único que yo necesito es un hijo, y tú me lo darás

--Por favor, se lo suplico -suplique al borde del llanto- Déjeme ir, juro que no le haré saber nada a las autoridades de esto

--Las autoridades no me importan en este momento -se levanta de la silla con decisión- Lo que me importa realmente es empezar con el proceso necesario para embarazarte

--¿Vas a abusar de mi?, ¿me vas a violar? -dije asustada

perder la virginidad de esta manera no era como lo imaginaba, siempre pensé que follaria por primera vez en un hotel, dónde los pétalos de rosa estuvieran tanto en la cama como en el suelo y alrededor de todo estuvieran unas velas aromáticas alumbrando el lugar, pero supongo que no siempre sucede lo que deseamos

--No -afirma- No tengo la mente tan retorcida para hacer algo así

--¿Entonces como...

--Quedarás embarazada por inseminación artificial -habla interrumpiendome

Elias empieza a buscar algo de su bolso trasero del pantalón y cuando al fin lo encuentra me lo muestra haciendo que abra los ojos como platos

¡tiene una maldita navaja en su mano!

¡seguramente me cortará en pedacitos!

--¿Quieres dejar de ser tan miedosa? --dice después de ver mi rostro lleno de terror, él se acerca a mi y corta las cuerdas ubicadas en mis pies pero dejá mis manos aún atadas- Ya te lo dije, no te haré nada

me levanto de la silla y mantengo la vista en el suelo pues no me atrevo a ver a este hombre

--Ven conmigo -ordena mientras camina hacia la puerta de la bodega

obedezco al instante pues tanto Abel (el calvo), como Adam (el hombre del cabello mejor cuidado que el mío) ponen sus armas contra mi espalda, seguramente esperando a que de un movimiento en falso para disparar

¡Y SE SUPONE QUE ELLOS CUIDARAN DE MI!

camino a un lado de mi secuestrador hasta que ambos salimos de aquella bodega

--Colocale la venda de nuevo -indico Elías

no me dan tiempo de reaccionar después de escuchar la petición de Elías hacia sus hombres, pues el calvo me sujeta con fuerza mientras que su compañero me venda los ojos de nuevo

--¿Es necesario que cubran mis ojos? -pregunto entrando en pánico

tan solo la sensación de no poder ver qué hay a tu alrededor y que tan peligroso es el lugar me causa demasiado conflicto, es tan desesperante estar en esta horrible situación

--Es por seguridad -dice Elías susurrando a mi oído

--¿Seguridad?, ¿no entiendo?

--Solo camine señorita -indica la voz de Abel

empiezo a dar pasos débiles y lentos, no se ni por dónde camino y la idea de huir en estos momentos no es muy buena que digamos

--Sube al auto -dice con firmeza- Está frente a ti

doy el primer paso para subir al dichoso auto, pero como lo imaginé, termine resbalando y cayendo sobre los brazos de alguien

--No puedo creer que no puedas ni subir a un auto tu sola -resopla Elías mientras me sostiene con fuerza

él me levanta en brazos como si fuera un bebé y me coloca sobre el asiento trasero el cual es muy suave, por su textura debe ser un auto lujoso

--Duermela -ordena

--¿Dormirme?, ¿pero...

al instante uno de los hombres cubre mi nariz con un paño húmedo de alguna sustancia, seguramente cloroformo, es la más usada para dormir

luchó con todas mis fuerzas, pateó y golpeo a quien esté cerca mío tratando de que se alejen de mi, pero nada da resultados, ellos son más en número y en fuerza así que me doy por vencida y poco a poco mis ojos se cierran después de oler aquel paño húmedo

***

--Solo queda esperar -escucho mientras aún tengo los ojos cerrados

--¿Cree que si quedé embarazada?

--Seguramente -contesto aquella voz- Tienes que esperar dos semanas para realizar una prueba de embarazo y ver si la inseminación dió resultados

muevo la cabeza de un lado a otro lentamente mientras abro los ojos

--Tranquila -alguien pone su mano sobre mi hombro- Debes mantenerte relajada y en reposo unas horas, acabas de someterte a un procedimiento para embarazarte

¡carajo!, ¡esto no tiene que ser una maldita broma!

tenía le falsa ilusión de que cuando despertará me encontraría en mi habitación, que Daniela, mi hermana menor, entraría corriendo y se subiría a mi cama para brincar, mientras que Daniel, mi hermano mayor, corría detrás de ella, pero no es así, la realidad es que estoy secuestrada y acabo de ser Inseminada artificialmente sin siquiera saberlo

esto avanzó tan rápido, hace tan solo seis horas atrás yo salía de mi trabajo como cajera en una cafetería y mientras caminaba por un callejón solitario aquellos hombres me tomaron de la cintura, taparon mi boca y una camioneta color negro se acercó con prisa

y así de simple, sin dejar rastro de nada, Mía Parker desapareció de un momento a otro

ahora mi destino está decidido, voy a convertirme en madre a pesar de que me oponga.

Me recuesto sobre la suave almohada de la cama donde estaba recostada y dejo que una lágrima corra por mi mejilla

duele tanto, duele estar en un lugar que no conocés, duele estar rodeada de gente que solamente te está utilizando para su conveniencia, y duele tanto saber que te convertirás en madre de un completó desconocido

--¿Se encuentra bien señorita Parker? -cuestiona aquel doctor que aún seguía a mi lado

--Ella se encuentra mejor que nunca -responde Elías por mi- Está emocionada por ser madre

miro a Elías con furia en mi rostro, simplemente no puedo entender como puede decir algo así, yo NUNCA estaré emocionada por convertirme en madre y mucho menos si me fuerzan

--No lo sé, Parker no se ve bien -asegura el doctor

--Mire doctor, yo le pagué una gran suma de dinero por venir a realizar un tratamiento para que mi novia quedará embarazada, no para que cuestionara cualquier cosa rara que viera

después de escuchar a Elías llamarme "novia", entendí todo a la perfección.

Al parecer el doctor no sabe nada de lo que pasó antes de su llegada, no sabe que estoy secuestrada, él solamente fue llamado para realizar su trabajo

es mi momento, es momento de pedir ayuda a gritos y así poder salir de este horrible lugar

me enderezó un poco de la cama hasta estar sentada por completo, tomo de la bata blanca a aquel doctor con desesperación y le suplico por ayuda sin importar que mi secuestrador este presente aún

--Por favor ayúdame -hago una pausa para encontrar las palabras correctas- Estoy secuestrada y me están obligando a...

varias gotas de sangre caen sobre mi rostro antes de que pudiera terminar de hablar, involuntariamente cierro los ojos con fuerza para evitar ver la horrible escena que fue provocada por mi culpa

abro los ojos de nuevo y con terror miro hacia el suelo y logro ver a el doctor con un gran impacto de bala en la cabeza

¡Joder acaba de matar al doctor delante de mi!

sigo en shock por unos minutos hasta que Elías se acerca a mi, me empuja con ambas manos haciendo que caiga sobre la cama y se sube encima mío

--¡Eres una estúpida! -grita dandome una bofetada- ¡Cómo se te ocurre hacer algo así!

sus manos se cierran con fuerza y golpea con su puño uno de mis ojos haciendo que suelte un gran grito de dolor, pero a pesar de mis gritos y súplicas él continúa golpeándome hasta que Abel y Adam entran a la habitación y lo quitan de encima mío

--¡Señor la va a matar si la sigue golpeando! -grita Adam

--¡No te metas, este asunto no es contigo, es con esta basura! -me señala mientras limpio la sangre de mi boca

--Claro que me meto, usted nos contrato para cuidar de la señorita Parker, y eso haremos, la cuidaremos incluso de usted -declaro defendiéndome

mi agresor me mira por última vez, limpia un poco sus manos y sale de la habitación dando un fuerte portazo detrás de él

--Ya está segura, con nosotros nada le pasará -afirmaron- Espere aquí

ambos entran a el baño de la habitación y después de unos cortos minutos salen con un pequeño botiquín de primeros auxilios

--La ayudaremos a curar esas heridas -expreso Abel sentándose a un lado mío con un algodón cubierto de alcohol

--Puedo hacerlo sola -tomo el algodón y lo coloco en mi labio inferior

sabía que pedir ayuda traería consecuencias negativas, pero nunca pensé que terminaría con la cara llena de golpes y con un cuerpo sin vida sobre la alfombra de el lugar

--¿Por qué me hacen esto? -pregunto viéndolos

--El señor Walton nos obliga -habla Adam

--¿Por qué quiere con tanta desesperación a un hijo?

--No podemos decírselo -explico evitando mi mirada

--Cuando estuve en aquella bodega, dijeron que esto era por un bien común, ¿de que bien común hablaban?

--Eso se lo tendrá que explicar el señor, no yo -se levanta dejándome sola en la cama- Y si me disculpa, nos tenemos que ir

de inmediato dejo el algodón empapado de mi sangre sobre la cama y me levanto con prisa para ponerme delante de ellos evitando que salgan

--No me dejen sola -suplique- No quiero que él regrese a golpearme

--No se preocupe, nos mantendremos cerca de la zona -asegura

mis "guardaespaldas" salen de la habitación y pocos segundos después se escucha que cierran la puerta con llave

él pánico por estar encerrada es bajo, la verdad me relaja saber que por un buen tiempo Elías no entrara a hacerme daño

me acerco a la ventana y abro las persianas lentamente para que la poca luz del día entre

la vista que tengo desde la habitación es hermosa, puedo ver un precioso jardín rodeado de rosas rojas y blancas, además de que hay una gigantesca piscina enmedio de todo el lugar

la puerta de el lugar se abre nuevamente y con miedo recorriendo mi cuerpo miro detrás mío

imaginaba que Elías era quien cruzaría aquella puerta, pero en realidad quien estaba ahí era una chica de algunos 20 años quien lleva un uniforme color negro con blanco y en sus manos trae una bandeja con comida

--Señorita, aquí tiene su comida -pone la bandeja plateada sobre la cama

--Si Elias mando esa comida llevesela -declare regresando a ver ese hermoso jardín desde la ventana

--Es importante que coma algo, no puede estar sin probar bocado el tiempo que esté aquí

--Yo solo me quiero morir de una forma u otra -confese con tristeza- Y espero que sea pronto

--Al señor Walton no le gustaría escuchar eso

--Me da igual, creo que es válido querer morirme después de lo que me hizo

me giro lentamente dejando ver mi cara morada e hinchada por los golpes

--¿Usted era quién suplicaba por ayuda? -pregunta sorprendida

asiento con la cabeza mientras dejo que las lágrimas corran sin control por mis mejillas

--Debe de entender que el señor Walton no la está pasando nada bien, él está muy presionado por tener un heredero

me acerco a aquella dulce joven y la tomo de los hombros

--¿Tú podrías explicarme porque desea tanto un hijo?

--Pablo Walton, su padre, lo obliga y lo presiona a tener hijos -confiesa aclarando mis dudas- Su padre solamente le podrá dejar el negocio familiar si él tiene un hijo, sino el negocio pasará a las manos de Ana, su hermana menor

--¿Pero por qué secuestrar a una chica en lugar de buscar a una mujer que se convierta en su novia y luego en su esposa?

--No lo sé -se encoge de hombros al mismo tiempo que cierra la puerta de la habitación con discreción- En los últimos tres meses ha secuestrado a más de diez chicas, pero ninguna de ellas logro darle un hijo, a las mujeres que no lograban quedar embarazadas él las asesinaba y después desaparecía sus cuerpos, y quiénes si resultaban embarazadas las trataba como reinas, pero por alguna extraña razón esas chicas siempre perdían al bebé

--¿Cómo sabes eso? -pregunto anonadada

--Esta mansión tiene tantos secretos, todos los empleados de aquí los sabemos, pero tenemos prohibido hablar de ello

no me queda duda alguna, es un completo demente, tan solo imaginar cómo asesinaba a aquellas chicas que no pudieron embarazarse me revuelve el estómago, ahora me doy cuenta que Elías Walton es alguien quien solo utiliza a las mujeres para su conveniencia y cuando ya no son "útiles" se deshace de ellas de una forma tan bizarra

aquellas palabras que me dijo en la bodega son una mentira

" no te haré nada" decía , pero adivinen quien terminó golpeada y próximamente, en algún futuro no muy lejano, muerta .