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Jugando A Lo Prohibido☆ Saga: Amores Prohibidos☆

CAPÍTULO UNO: PRÓLOGO.

Prólogo.

Queridos lectores, antes de comenzar con la lectura, quiero dejar los temas de esta novela de ficción.

⚠️ Escena de + 18 años (sexo)

⚠️ Mafia, eso implica escenas de asesinato, muerte, obviamente violencia y también tortura.

Prefiero dejar en claro los temas para que las personas sensibles con el tema, se abstengan de leerla.

Atentamente: Alendra Rivero

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Prólogo.

Gea es una chica tranquila y tímida, pero después de conocer a Zack Miller, el novio de su hermana mayor, comenzará a cambiar de actitud, no por su propia voluntad, será a causa de Zack, quien intentara seducirla descaradamente.

Zack conoció a Astrid en una discoteca y después de dos años de noviazgo con ella, se presentará en su casa para pedir su mano en matrimonio. Pero todo cambiará cuando conozca a Gea.

Él quedará completamente encaprichado con ella y no sé detendrá hasta tenerla.

Pero Gea es completamente diferente a su hermana, ella es tranquila, tímida e inocente, todo lo contrario a Astrid, quien es muy extrovertida, sociable, alocada e interesada.

Estas circunstancias llevarán a ambas hermanas a un enfrentamiento.

PRESENTACIÓN DE PERSONAJES:

Soy Astrid, tengo 29 años y vengo de Noruega, vinimos a los Estados Unidos para obtener una mejor vida, aquí soy muy feliz, una noche salí con mis amigas a una discoteca y fue allí donde conocí al hombre de mi vida.

Él es Zack Miller y es un verdadero dios griego bajado de los cielos, aunque en realidad lo que más me atrae de él, es el dinero que posee, ello es lo más atractivo ante mis ojos, y eso también lo convierte en el hombre que siempre soñé para salir de la maldita pobreza.

En cuanto a mí, soy una mujer de cabello rojizo, ojos claros, piel blanca, labios seductores, una figura de infarto y obviamente hermosa.

Pero más adelante Irán conociéndome un poco más.

Me presento, soy Gea, tengo 26 años, cabello rojizo, ojos marrones oscuros, los cuales heredé de mi padre, mis labios son finos, mi piel es blanca y mido 1 mt 65, siempre quise ser como mi hermana, ella es hermosa y sobresalta entre todas las mujeres por su belleza, sus ojos son claros y hermosos, ella heredó los ojos de nuestra madre, y no solo eso, sino que también su figura, yo sería como el patito feo de la familia, pero no me importa, me gusta ser invisible delante de todas las personas, soy tímida y me da mucha vergüenza hablar en público, y por ese motivo no hablo con nadie.

...

Soy Zack Miller, tengo 32 años y soy el mafioso más poderoso de los Estados Unidos.

Hasta no hace mucho tiempo atrás era el soltero más codiciado, pero por la orden de mi padre tuve que conseguirme una novia, ya que él insiste que tengo que casarme y darle nietos, él piensa que estoy algo mayor y debo darme prisa. La verdad no me gusta mucho la idea, pero conocí a Astrid, una mujer hermosa, por ello decidí formalizar la relación con ella.

Ya llevamos dos años de noviazgo y en unos días iré a pedir formalmente su mano en matrimonio. Lo único que mis suegros no saben, es a lo que me dedico, pero de igual manera no tienen por qué saberlo.

Astrid llevará una vida de princesa, eso es lo único que importa, aunque pienso seguir teniendo mis escapadas clandestinas, ninguna mujer logrará atarme a ella y Astrid no será la excepción.

CAPÍTULO DOS: TRISTEZA.

TÍTULO: TRISTEZA.

GEA.

Acabo de llegar al aeropuerto de los Estados Unidos, estuve estudiando en el extranjero y hoy después de mucho tiempo regreso a casa.

Les avisé a mis padres para que vinieran a recogerme, pero al parecer aún no llegaron.

Me siento en una banca fuera del lugar, no creo que tarden mucho en llegar, les avisé más de 20 veces que llegaba hoy y también la hora aproximada en la que estaría en el aeropuerto.

Mientras estoy en la banca observó toda gente ir y venir, las horas pasaban y nada, miró mi reloj y son las 19: PM, yo llegué aquí al mediodía y llevó esperando 7 horas.

Ya no creó que vengan por mí, buscó en mi billetera y por suerte tengo unos cuántos dólares, no es mucho, pero va a alcanzarme para un taxi.

Tomó mi equipaje y me pongo de pie, camino hasta la acera y busco un taxi, todos pasaban con pasajeros, tuve que aguardar unos cuántos segundos hasta qué por fin logré conseguir uno, y ahora estoy camino a casa.

ASTRID.

Hoy es un día muy especial, mi guapo novio vendrá con sus padres a casa, Zack va a pedir mi mano en matrimonio, aunque la verdad me da un poco de pena, mi casa es muy pequeña y sencilla, todo lo contrario a la suya, pero hoy muy temprano levante a mis padres para qué arreglarán el lugar y así dejarla más presentable, solo había un problema, Gea, mi hermana menor llega hoy del extranjero y mis padres tienen qué ir a recibirla, pero hice todo lo posible para qué ellos lo olvidaran.

Y tengo una muy buena razón, Zack nos va a sacar de la pobreza, además ruego qué la tonta de Gea llegue una vez qué terminé la cena, me avergonzaría que la conocieran, ella se viste horrible, no tiene sentido de la moda y su ropa parece de campesina, esas horribles camisas y jeans viejos qué usa los odio con toda mi alma, por qué solo reflejan lo pobre y mal vestida qué es.

Yo soy todo lo contrario, siempre le exijo a mis padres qué trabajen más duro para que me compren ropa de marca, no me gusta utilizar trapos baratos.

Mi padre se llama Enar Bakker y mi madre Yulene iversen, son cien por ciento noruegos al igual qué Gea y yo.

Mi madre trabaja en limpieza de oficinas y mi padre es supervisor de maquinaria en una fábrica textil.

Ellos siempre trabajaron mucho para poder pagar el estudio de Gea, está obtuvo la mitad de una beca para estudiar en Inglaterra, pero mis padres tuvieron que pagar la otra mitad del dinero faltante, por ese motivo yo les exijo qué sé encarguen de mantener mi estilo caro de ropa, no terminé mis estudios, los dejé a la mitad, creo qué con mi belleza puedo lograr mucho más qué estudiando.

---Mi bella Astrid, ya está todo listo.--- Dice mi padre y yo sonrío feliz al ver qué la casa quedó un poquito mejor de lo que estaba, la pintura mejoró las paredes manchadas por el tiempo y el descuido.

Mientras tanto mi madre adornó la mesa y puso la comida, la cual no es muy refinada, pero para mi desgracia no había mucho dinero.

Yo fui a mi habitación y me duché, me puse aceite perfumado por toda mi delicada piel y luego me puse un vestido color beige y me pinté los labios con un color rojo, para que resalte mi blanca piel, luego me puse unos tacones color blanco y adorne mi cabello con una fina peineta qué me obsequió la madre de Zack, dándole un aire sofisticado a mi look.

Cuando salí de mi habitación mi novio y sus padres ya estaban acomodados en la mesa.

---Te ves hermosa -- Dijo Zack levantándose y corriendo la silla para qué yo tomará asiento junto a él.

Saludé a mis suegros y luego me senté, mis padres también tomaron asiento y comenzamos a cenar, ya eran las 20: PM y lo único que pedía por dentro era qué Gea no llegará para arruinarlo todo.

Pero no, la muy tonta tuvo que llegar reflejando su mal gusto, está vestía con una sudadera horrenda y sus jeans viejos y rotos, y para dar peor imagen traía su cabello despeinado.

Gea.

Llegó a casa al rededor de la 20: PM, cruzó el portón de la casa y al estar frente a la puerta lo único que pido es qué mis padres sé encuentren bien, por qué ellos no sé hubiesen olvidado de mi llegada sí no fuera por qué sucedió algo grave.

Cuento hasta tres, doy un profundo suspiro y giro el picaporte de la puerta, la cual da directamente al comedor de la casa, mi rostro sé pone pálido y sé llena de tristeza, mi familia está cenando tranquilamente y sonriendo entre charlas con tres personas qué no sé quiénes son.

---Mi bella Gea, perdón, nos olvidamos que llegabas hoy. --- Dice mi padre muy apenado, le regaló una sonrisa y corro a sus brazos.

--- Los extrañé muchísimo, estaba preocupada, pensé que algo malo había sucedido.--- Le dije soltándome de él, y fui hacia mi madre, le di un gran abrazo y beso en la frente.

CAPÍTULO TRES: DESLIZ ANTES DEL COMPROMISO.

TÍTULO: DESLIZ ANTES DEL COMPROMISO.

Zack.

Hoy es el gran día, me voy a comprometer con Astrid.

Me preparó tranquilo, tengo mucho tiempo, así que le pido a una de las empleadas que me preparé un baño de tina.

La chica lo hace y mientras esperó esta menea sus nalgas de un lado al otro, logrando despertar una erección muy notoria en mis pantalones.

Mierda, ya me entraron las ganas de tener sexo.

Me paró y me colocó detrás de la chica frotando mi mi***ro en su trasero, esta da un gemido y se acerca más, volándome los deseos por los aires.

Bajó mi pantalón y subo su falda, corro a un costado sus bragas y con mi mi***ro duro y listo la em***to de una vez, está apoya las dos manos a la pared y comienza a mover las caderas con un vaivén que me da una bomba de placer.

La em***to con más fuerza, la llenó de mí, nuestros cuerpos chocan y sudan, las emb****das que les doy son cada vez más violentas, tiró la cabeza hacia atrás y doy un gemido más qué excitado, ella hace lo mismo, sigo con los movimientos rápidos hasta qué siento qué estoy a punto de explotar, salgo de ella sin avisar, está me ve confundida, sé le nota qué aún tiene ganas de más, pero no me importa.

---Chú**me.-- Le digo con apuro, está me da una sonrisa y sé inclina a la altura de mi mi***ro, lo toma en su mano y sé lo traga, solo puede meter la mitad, tengo buenos genes y estoy muy bien equipado.

Comienzo a mover las caderas y la agarró de la cabeza haciendo qué mi mi***ro se adentre hasta el fondo su garganta. Ella intenta chu***me mientras me muevo, pero sé le dificulta un poco, la em***to un par de veces, y luego lo quito, ella ch**a de la p**ta hasta el final, lo lame y juega con él hasta qué me ve*gó en su b**a, el líquido espeso cae por las comisuras de sus labios y quedó totalmente satisfecho.

Me desnudo por completo y me meto a la tina, fue un momento espectacular, esa  mujer sí que sabe chu***lo.

Ella no salió del baño, se quedó y mientras yo lavaba mi cuerpo, ella se quitó toda la ropa, quedó totalmente desnuda y comenzó a tocarse, acaricio sus pe**os, su abdomen, hasta qué llegó a su va***a y metió sus dedos moviéndolos rápidamente, sé movía sin parar, sé retorcía de placer dándome una visión de su cuerpo y su fiesta se**al.

Sus piernas estaban bien ab***tas, sus dedos entraban y salían, tiró su cuerpo hacia atrás y siguió moviéndose hasta que dio un fuerte grito, salí de la tina, me pare delante de ella y lamí sus pe**nes, luego metí uno de sus pe***s en mi boca, lo succione con fuerza, lo mordí, y baje mi mano, quité la de ella y la pe***ré con tres dedos, su va**na estaba muy hú**da, moví los dedos dentro de ella, primero suave y luego fuerte, hasta qué oí sus gemidos, eran agitados y débiles, luego sentí su lí***do caer entre sus pi**nas. Le sonreí y me volví a meter a la tina.

-- Ya cumpliste tu trabajo, lo hiciste bien, ahora vete, más tarde te recompensaré -- Dije sonriendo, quedé completamente bien atendido.

-- No necesito recompensa, fue un placer, siempre que quiera puede llamarme, estoy a su servicio señor. -- Dijo la chica y salió después de terminar de vestirse.

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