-Nathaly, esto es muy crítico, debes de tener más cuidado.-
- Liam, yo sé que es mucho pero, necesito ver primero por la salud de mi abuelo.-
- ¿Te das cuenta que estás poniendo su salud antes de la tuya?.-
- No tengo el suficiente dinero Liam para atender mi enfermedad y la de mi abuelo, me acaban de correr de mi viejo trabajo, por qué se enteraron de mi condición.-
Empiezo a alterarme yo sé que Liam, mi doctor se preocupa mucho por mi, nos conocimos desde secundaria, es un hombre increíble, incluso mis familiares decían que el sentía algo por mi, más no es así, solo somos amigos. “Amigos”
Sufro de la misma enfermedad de mi abuelo, el hombre más dulce, tierno y comprensivo, después de que mis padres murieran hace años en un accidente automovilístico, mi abuelo se hizo cargo de mí, el solo.
Solo tenía 8 años cuando ellos murieron así que no los recuerdo mucho, mi abuelo dice que tengo los ojos de mamá y el carisma de papá.
Ellos eran muy jóvenes cuando murieron mi mamá tenía 30 años y papá 33, en la plena edad de las locuras y emociones, se conocieron desde preparatoria, y mamá quedó embarazada a los 22 años apenas terminando la universidad, ella nunca puso en práctica lo estudiado por qué se caso muy joven, papá la amaba mucho y no quería que ella trabajará así que se dedico solo a cuidar de mi, hasta ese accidente, si no fuera por qué mi abuelo pidió que si me podía quedar unos días con el hubiera muerto también, el siempre ha dicho que soy su pequeño solecito, el no pasaba por un buen momento de su vida mi abuela había fallecido, ella no sufrió en lo absoluto, murió durmiendo, el día del accidente de mis padres el sufrió lo que sería el primer síntoma de su enfermedad, se desplomó cayendo al suelo.
Yo solo me quedé parada viendo como todos se acercaban a el, no duro mucho en llegar la ambulancia y yo lloraba creía que me quedaría totalmente sola sin el, sin mis padres sin nadie.
El me crio desde esa fecha, yo ya tengo 21 años, no termine mis estudios más tome un curso rápido de administración, inglés y contabilidad gracias a qué el maestro era amigo de mi abuelo.
Solo tengo a Liam y a mi amiga Amanda son mis únicos amigos a y ángel que es algo así como mi amiga amigo, el es bisexual, pero lo amo es muy lindo.
- No se si esto ayude pero, conozco a alguien que acaba de abrir una nueva compañía en la ciudad.- Me dice mi amigo muy emocionado. – Supe que busca asistente, Nathaly tú eres muy inteligente seguro te contratará!-
- Pero Liam yo no sé nada de ser una asistente!-
- Lo se pero vamos amiga, inténtalo, seguro y lo lograrás mira esta es su tarjeta!-
Dirijo mi vista y la tarjeta está a nombre de
HÉCTOR LININ INTERPRAICES.
- ¿Liam sabes sobre que es la empresa?-
- No se muy bien, hay viene un número de teléfono deberías marcar quizá y te contraten, así podrás ahorrar para tu tratamiento!-
- No, primero mi abuelo!- Niego su idea al instante, no quiero someterme a ningún tratamiento hasta que mi abuelo no esté bien.
Mi enfermedad no es contagiosa.
Sufro de una enfermedad muy rara en el corazón, la sangre no fluye con normalidad, mi colesterol y todos los estudios que me han hecho están muy bien, pero poco a poco mi corazón dejara de funcionar.
No puedo recibir emociones fuerte y preocupaciones, por eso siempre me entero al final cuando algo malo pasa, creo que mis amigos y familia se preocupan mucho por mi.
- Pero irás verdad?-
- Si Liam iré!-
- Muy bien te recetare tus medicinas para el dolor!-
- Gracias Liam pero podrías recetarme unas más baratas?-
- No puedo más bajas significa que el tratamiento no será tan eficaz-
- Tengo que comprar también las medicinas de mi abuelo y mi liquidación no alcanzará a solventar ambos medicamentos.-
- Ten-
El saca de su cartera algunos billetes.
- No Liam, no está bien solo comprare los de mi abuelo.-
- Vamos niña si no te cuidas tu quien lo hará? Tómalo como un préstamo- El me sonríe me da el dinero junto con la prescripción médica.
- Te lo pagaré!-
- Como quieras me da igual.-
- Liam-
El me abraza y me da un beso en la frente.
- Deja que cuiden de ti Nathaly, te lo mereces-
- Gracias Liam- Lo alejo de mi no quiero que esto se vuelva incómodo.
Me voy caminando por la calle con la tarjeta que me dio Liam, no se si la vi mucho pero me he memorizado el número de teléfono.
Voy tan distraída cuando chico con alguien en la calle.
- Lo siento- Mi cabeza literal está en su pecho.
Siento una sensación muy extraña, mi corazón se acelera pero no es por mi enfermedad y siento como pequeños toques eléctricos recorren todo mi cuerpo.
Levanto mi vista y es un hombre muy guapo. Su cabello es negro su ojos verdes y sus labios se ven entre rojos y rosas, es alto.
- Una disculpa no vasta!- Me dice el.
- Perdón?- El logra sacarme de mi trance y quitó mi mano de su pecho que no se por que extraña razón estaba hay.
- Que una disculpa no vasta para eso existe reglas y policías!- El sonríe.
Por dios su sonrisa es hermosa.
“Vamos Nathaly está en medio de la calle, sonrojándote con un completo extraño”
- Lo siento!-
- No hay problema!-
El comienza a caminar y sube aún buen auto se ve que es rico.
Me quedo embobada viendo como el auto se aleja.
“¿Y mi tarjeta?"
No la encuentro por ningún lado pero por suerte se me el teléfono de memoria, antes de que logré olvidarlo lo guardo en mi celular como nuevo contacto.
Necesito que me consigas un buen asistente, Edwin!-
- Si joven Héctor!-
- Deja las formalidades de lado, tengo que viajar Viviana Rin anda dando problemas de nuevo.-
- Es por las fotos que encontramos!?-
- Si, ya le informe al imbécil de mi hermano pero es tan inútil que dudo que pueda encontrarla!-
- ¿En verdad se dio por vencido con Itzel.?-
- Ella no es para mí, solo quiero que sea feliz.- …. – A veces pienso que el amor no se hizo para mí.-
- Ya le llegará, siempre llega!-
- Quizá la mía ya esté muerta jaja- …. – Soy un psicópata controlador no me tiembla la mano para matar a alguien, ¿tu crees que alguien me amaría?-
- Nunca es tarde para cambiar-
- ¿Cómo conociste a tu esposa Edwin?-
- En la universidad, ella era la mujer más hermosa que he visto, ojos cafés y cabello negro, con un cuerpo hermoso.-
- Lo físico se acaba algún día!-
- Si joven Héctor más no fue su físico lo que me enamoró, fue su increíble sentido del humor y que siempre miraba el lado bueno de las cosas, ella vio algo bueno en mi que nadie más vio y eso que ella sabe que soy un asesino!-
- ¿aún así te acepto?-
- Si aún así.-
- El amor es muy extraño, pero no creo poder amar a nadie mas-
Me dirijo a mis escritorio y veo la foto que está en mi celular, mi hermano y mi dulce cuñada.
Lanzo un suspiro al aire en lo que Edwin sale de mi oficina.
- No soy buena persona- Apagó la pantalla de mi celular y espero mi compañía de está tarde.
No soy buena persona pero no me cohíbo de mis deseos carnales.
Me gusta el sexo y mucho en especial si es loco y acelerado, soy muy violento creo que hay me descargo por completo.
- Joven el doctor a llegado!- Me dice Edwin.
- Hazlo pasar!- El mejor asesino está trabajando como mi secretario jaja, que ironía, pero si dejo que se valla seguro Carl lo matará por traidor.
- Hola buenas tardes mi nombre es Liam ¡-
- Hola Liam mi nombre es Héctor, puedes tomar asiento!-
- Me sorprendió su llamada!-
- Si mira el motivo por el que te llame es por qué necesito un buen doctor de cabecera, por lo general los hombres que están a mi disposición sufren algunos percances y en esta ciudad me hace falta un buen doctor.-
- Disculpe cuando se refiere a percances se refiere a algo ilegal-
- Nada en este mundo es legal, pero no, no es ilegal, por lo general son mis guardaespaldas, soy muy rico y siempre hay alguien que quiere hacerme daño, solo hacen su trabajo, que es cuidar de mi-
- Ya veo y por eso me busco!?-
- Así es, he escuchado muy buenas cosas sobre usted, a pesar de su temprana edad a logrado cosas que otros doctores no y es de admirar!-
- Muy bien, ¿y que hay del sueldo?-
- Por tu salario ni te preocupes yo le pago muy bien a mis hombres!-
“Claro sino luego me traicionan”.
- Muy bien!-
- Entonces joven Liam le interesaría trabajar para mí?-
- Muy bien lo aré-
-Esta es mi tarjeta. -…. – También busco a un asistente personal por si sabe de alguien!-
- Si llego a saber de alguien le informaré.-
- Bien pasa con Edwin el te tomara los datos y solo nos pondremos en contacto cuando necesitemos tus servicios.-
- Muy bien que tenga un agradable día.-
El sale de mi oficina mientras sigo viendo como hacer crecer más mi compañía.
Ya dan las 8 de la noche y llega mi compañera de esta noche.
Una asquerosa rubia oxigenada de ojos falsos azules con mucho maquillaje y piernas largas.
- Buenas tarde señor!-
- No me llames señor solo tengo 24 – Le digo mientras la toma de la cintura y la llevo a mi oficina.
- Disculpe joven!-
- Ya no hables y quítate la ropa!-
Cierro la puerta de mi oficina y le hago señas a Edwin de que salga.
Me quedo parado en la puerta viendo como esta mujer que ni su nombre se así se llama Lucy, lucinda algo así.
Comienza a dejar caer su ropa al suelo.
A pesar de ser hermosa todo en ella es falso como yo, fingí estar paralítico por casi 4 años y odio a mi hermano más que nada en esta vida y viví fingiendo que lo quería creo que soy mejor actor que mi compañía de está noche.
El maquillaje tapa su dolor, es estudiante en el ramo de química en la universidad central y tiene tres hermano, su hermana menor fue abusada por su padrastro ella lo mato, pero su mamá se inculpo, ella se hace cargo de sus hermanos sola y está por dejar la universidad por qué su familia quedó en la ruina después de que su tío le quitara su fortuna y así terminó aquí conmigo, desnuda en mi oficina, esperando que la penetre muy duro.
“No se por que mi debilidad son las mujeres que han sufrido o están dañadas como Viviana Rin, MALDITA VIVIANA TENGO QUE ENCONTRARTE!”
- Joven no le gusta lo que ve?!- Me dice la joven al ver, yo creo mi cara de decepción .
- Si me gusta o no, no es asunto tuyo. –
Me acerco a ella he intenta besarme en los labios, no se lo permito, desde la última vez que bese a Itzel no dejo que nadie me bese. “¿Maldición por qué la dejé ir, con el idiota de Edward.?”
Bueno es hora de la acción.
Agarró a esa mujer y la repagó contra la pared, beso si cuello, hasta el último rincón de el.
Aún que estoy asqueado de esto.
Me dejó de juegos y voy directo al grano mi miembro está muy crecido y no tengo la más mínima intención de darle placer a esta mujer.
Agarró su cabeza y la voy bajando algo brusco hasta mi amigo que ya se comienza a notar en mi pantalón.
Ella sabe muy bien lo que significa por qué no tarda en bajar mi pantalón y mi bóxer liberando a mi vestía.
Ella se sorprende al ver la dimensión.
No le doy tiempo de reaccionar cuando se lo meto por completo a lo más profundo de su boca.
Ella parece que se ahoga pero no me importa ella está aquí para darme placer.
Comienza a darse envestidas lentas contra el.
“Así no”
Comienzo a embestirla yo cada vez más y más rápido.
Casi se ahoga en dos ocasiones pero creo que con eso comprendió como me gusta.
Cuando estoy por correrme en su boca, la levantó del suelo y la pongo de espaldas contra mi escritorio.
Le doy varias nalgadas en su enorme trasero el cual se ha puesto colorado.
- Hooooo aaaah mmm!- La escucho gritar. No se si es de placer o de dolor pero vuelvo a nalguearla.
- Ooooh si más –
Hay está mi respuesta.
Abro más su trasero y la penetró por atrás.
Ella grita de dolor pero no me detengo.
La envisto una y otra vez, cada ves más rápido hasta que terminó por correrme en ella.
Subo mi pantalón y salgo de mi oficina.
- Joven.- Me dice Edwin.
- Edwin que la lleven a su casa y que le paguen bien!-
- Sí joven!-
Gracias por su lectura, espero y lees esté gustando los primeros capítulos de mi novela.
Saluditos.
Itha león
Llegó a mi departamento vacío y espacioso.
Tengo la sensación de que algo falta aquí más no se bien que es.
Me acuesto en mi enorme cama, estoy muy cansado.
Aún que odio mucho estar acostado.
Han pasado tres meses ya desde que llegué a esta ciudad y aun no consigo una asistente estable nomás duran una semana, la última duró dos días.
Edwin dice que es por que ando de muy mal humor últimamente.
Por la mañana siguiente voy a mi oficina, tengo bastantes pendientes.
Hasta que me informan que al fin han encontrado a Viviana Rin.
- Joven!- Edwin
- Creo que visitaré a mi hermano más pronto de lo que esperaba.-
- Quiere que lo acompañe!?- Me dice un poco temeroso.
- Ya no te da miedo de que te mate.?-
- …. -
- Eso supuse.- … - Te quedarás aquí, quiero que te encargues de mis negocios y necesito una asistente para cuando regrese.-
- Si joven.-
Edwin sale de mi oficina y yo llamo a mi hermano, le informo donde está Viviana y me entero que la muy estúpida secuestro a mi princesa Sofía. Se metió con mi niña no la dejaré escapar tan fácil voy a matar a esa mujer.
Edward me odia piensa que yo la mandé. Aún que me gusta verlo sufrir no me gusta que me culpen de algo que yo no hice.
Después de un rato salgo de mi oficina y me reúno con algunos inversionista.
Pasan algunas horas y salgo de la reunión.
Iba tan distraído hablando por teléfono, cuando no me di cuenta que una jovencita choco contra mi.
Su cabeza estaba muy pegada a mi pecho, podía sentir su delicado olor a rosas silvestres.
Es un aroma encantador y embriagador.
Sentí como mi corazón se acelero, y por un instante me vi besando sus carnosos labios rojos, por un instante me perdí en su mirada, sus ojos son grises y grandes, su cabello es castaño como el color del chocolate.
Ella se disculpa.
Pero hay va mi mal genio.
- Una disculpa no vasta!-
- Que?- Ella me ve confundida.
- Para eso existe reglas y policías!- Le dedico una sonrisa y veo como lentamente ella quita su mano de mi pecho, no puede ser sentí un enorme vacío cuando la quitó.
Escucho como se disculpa de nuevo y solo le digo que no hay problema y tomo sin que ella se de cuenta la tarjeta que guardaba secretamente en su mano.
Subo a mi auto y veo por el espejo retrovisor como ella comienza a buscar, la tarjeta supongo.
Veo y es una tarjeta de mi compañía.
- Edwin?-
- Si señor?-
- A quien le he dado tarjetas?-
- Solo al doctor!-
Me quedo viendo la tarjeta.
- Viste a la joven de hace un momento?-
- Si joven!-
- Si va a la empresa a buscar trabajo quiero que la contesten!- … - Muero de ansias por conocerla mejor.-
Y saber que maldita sea fue lo que sentí cuando me tocó.
Veo como Edwin ve me extrañado, mientras solo me dedico a ver la tarjeta entre mis manos.
“Quien es esa mujer?"
...Gracias por su lectora. ...
...Itha león ...
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