El Cartón De La Otra Vida
capítulo 1
Cuanta la leyenda que el carreton de la otra vida, solía aparecer por las noches en busca de las almas descarriadas para poder llevarlas al infierno, se escuchas por las calles los pasos de los bueyes que jalan el carreton eso aparece pasada la media noche.
Esta leyenda es originaria de la ciudad de Santa Cruz - Boliva.
según los relatos de las personas que viven en la ciudad dicen averlo visto o escuchado los ruidos que produce el carreton el aparecía después de la media noche en tiempo de surazo. Dicen que el carreton es el mismo diablo por que estaba construido con huesos humanos en lugar de madera, siendo su cargamento cientos de cráneos amarillentos
El ruido espantoso del carreton se escuchaba a lo largo de toda la pampa y a las afueras del pueblo de Santa Cruz donde era un pequeño pueblo que solo tenía la plaza central y dos o tres cuadra en las cuatro direcciones ese era el tamaño del pueblo el resto eran finjas que rodeaban el pequeño pueblo.
Los buyes que tiraban del carreton, no tenían ojos como los demás buyes en su lugar ascuas que destellaban con un rojo intenso y que brillaban el a oscuridad haciendo que sea esa parte más notria en las noches oscuras o en las noches de tormentas.
En las noches de tormenta la gente no salía de sus casas por temor a encontrarse con el carreton de la otra vida y sus diabólicos acompañantes. Pero también dicen que este carreton era el que llevaba a los enfermos moribundos a las afueras del pueblo para que no contamine la zona y también por ese motivo se lo llamo el carreton de la otra vida.
Estos son los relatos que cuentan las gentes que dice aver escuchado al carreton de la otra vida pasados por sus calles pasada la media noche la gran mayoría de las personas antiguas cree en esta leyenda que es real pero las personas de la actualidad van perdiendo el interés en escuchar este tipo de relato
capítulo 2
En las noches cerradas de “sur y chilchi”, apenas se pone el sol en el llano, irrumpe el silencio; la luz de la luna alumbra muy poco presagiando la llegada de una tormenta en la campiña y los sentidos comienzan a jugar con la mente. De pronto se agudizan los sonidos y van provocando imágenes relacionadas al toque del viento cuando se posa a cualquier elemento de la naturaleza. Y zás! un carretón muy viejo se divisa a lo lejos.
Se acerca lentamente con la ayuda de un par de bueyes flacos que parecen dejar su alma en una estela mientras atraviesan el largo trayecto. Cada metro que transcurre aumenta el chirrido de sus ejes oxidados. Y de pronto un fuerte latigazo se suma al destello de los relámpagos, estremeciendo los nervios del poblado que ceden al espanto.
El panorama genera perturbación en cada habitante. Grandes, chicos... hombres y mujeres corren y se ponen a buen recaudo...nadie parece asomar la nariz a las ventana; muchos incluso se tapan el rostro con mantas e intentan contener la respiración para no generar ruido alguno.
Pero siempre hay uno que otro despistado que por alguna razón no llegó bajo techo y debió quedarse afuera sin evitar atisbar lo que sucede a campo raso.
El rechinar y el trallazo se escuchan con más fuerza, pero además se suma el susurro de una voz lúgubre que solloza y pronuncia sonidos sin emitir palabra o lenguaje conocido.
Es el alma del carretero que insta a las yuntas a seguir su paso con un tono que parece recorrer cada una de las fibras del cuerpo de los habitantes
Esto es lo que en realidad cuentan las personas antiguas.
espero que esta pequeña leyenda sea de su agrado que solo es una leyenda y no una novela
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