¡No dejaré, qué mi querida “familia” interfiera en mis asuntos personales.
Esa tarde, Lucas Grain se encontraba furioso frente a su familia, estaba dispuesto a poner fin a todas las trabas que le han puesto, no permitirá que su padre y madrastra interfieran en su relación con Solange Conde, pues llevan cinco años juntos y todavía no lo aceptan.
Es un amor puro, por el cual Lucas piensa luchar contra cualquier obstáculo, lo único que quiere es permanecer al lado de su amada por el resto de su vida.
—Quiero escuchar por qué motivos, para ustedes si soy capaz de manejar una constructora, y los demás negocios de la familia, pero no soy capaz de manejar mi vida, no puedo decidir con quien quiero estar. ¡Es mi decisión, no la de ustedes.
—Les advierto, no interfieran en mi relación con Solange! ¡Ella es mi novia! le gusta a quién le guste, es lo último que les diré. Lucas ni siquiera les dio la oportunidad de decir nada, pues lleno de rabia se giro y les dio la espalda.
Por su parte, Lucrecia de Grain se quedó de pie observando a Lucas se marcharse del lugar y como de costumbre quiso envenenar el alma de su esposo.
—¡Mira lo qué has logrado consintiendo a tu hijo!.
¿No crees que es hora de ponerle mano dura? ¡Él hace su santa voluntad! Ni siquiera toma en cuenta nuestras opiniones. Lucrecia, es una mujer malvada y sin escrúpulos, que no se cansa de destilar veneno. Lo único que le importa es su bienestar, por tal motivo, ella ya tiene sus planes hechos.
—Denise Conde, será la gran heredera de su familia. Esa unión le conviene más a Lucas, no se porqué él no lo entiende.
A un lado de Lucrecia, su esposo dejo su bebida y contestó. —No te preocupes querida pronto se aburrirá de esa niña, te aseguro de que mi hija la dejara. Arnold Grain consoló a su esposa, él parece un títere en las manos de la mala mujer.
—Pero Arnold, ellos llevan cinco años juntos, deberíamos intervenir, tratar de separarlos, si no hacemos algo, ellos seguirán juntos, esa niña será la perdición de nuestro Lucas. Lucrecia no hacía más que quejarse y lo seguirá haciendo hasta que consiga lo que quiere.
Por otro lado, Marcos, observa el estado de Lucas, y supuso que había vuelto a discutir con sus padres.
—¡Amigo no te preocupes todo saldrá bien! Le aseguró el joven mientras lo miraba por el retrovisor del auto. Marcos siempre acompañaba a Lucas, era como su chofer, pero más que chofer es su mano derecha, uno de sus dos mejores amigos, el otro es Charlie Maldonado.
—¡Eso esperó! Lucas, le contestó mientras cerraba los ojos y tras reclinar el asiento, se perdió en los recuerdos. pues el pleito con su familia lo hizo recordar el pasado.
***Cinco años antes.
Lucas Grain asistió a una de los mejores colegios del país, el joven proviene de una buena familia, y era muy popular entre las chicas. Todas querían conquistar al joven adinerado, pero había una chica en especial que lo seguía a todas partes.
—Ella era de cabello largo y oscuro, y sus ojos verdes esmeralda, combinaban a la perfección con sus labios gruesos color durazno. sin embargo, ella era tres años menor que él, por lo que Lucas, no le prestaba atención.
Está chica era Solange Conde, y a pesar de que aun era una adolescente, no aparentaba los catorce años que tenía, ya que su cuerpo era muy desarrollado para su edad.
Lo cierto es que, el objetivo de ella, era conquistarlo antes de que él se graduara y para eso, le quedaba menos de un mes.
Lo que era innegable, es que esa chica sí llamaba la atención de Lucas, pero él nunca andaría con una niña de catorce años. Solange todavía era una niña frente a sus ojos.
Uno de tantos días, Solange, lo esperaba en la salida, y con esperanza, sostiene una invitación de la fiesta a sus quince años.
La chica lo esperó por unos minutos, al verlo aparecer, le colocó la invitación en las manos, luego le dijo. —¡Te esperó, por favor, no faltes!
En cuanto la chica marchó, Lucas miró la invitación, y descubrió que adentro del mismo sobre, venía una nota que decía. —Serás mi compañero del vals, si no asistes, yo tampoco me presentaré, y me causaras un trauma de por vida. Tras leerla, Lucas cerró la invitación, en su rostro apareció una sonrisa que solo Charlie pudo notar.
En ese instante, Lucas miró a sus amigos y les dijo. —¡El Domingo asistiremos a un quince años!
—¿Sí asistirás? Preguntó Marcos sorprendido, Lucas nunca le había dado importancia a Solange, pero ese día algo cambió.
—Por supuesto, será divertido.
***Ese Domingo llegó en un abrir y cerrar de ojos y en el salón todos los invitados estaban sorprendidos al ver lo hermosa que se veía la quinceañera. El vestido de Solange era color rosa con gran falda y un corset entallado, que llevaba pequeños diamantes. sin duda alguna, un estilo casi principesco.
El peinado no pasaba desapercibido, pues lleva todo el cabello recogido y formando una flor, y lo adornaba una corona de flores blancas, el maquillaje era ligero y la hacía lucir realmente hermosa.
Luego de que todos admiraron su belleza, Solange, se dirigió a tomar su asiento, aun así, las miradas de los invitados estaban puestas en ella.
Esa tarde, la chica buscó entre los presentes y su invitado no llegó. con la mirada deprimida, inclinó la cabeza.
Sin embargo, minutos después toda la atención fue dirigida hacía la entrada principal. ya que en ese instante, Lucas Grain, futuro heredero de la familia Grain hizo su gran entrada. no llegó solo, lo acompañan, Charly Maldonado, quien es el futuro heredero de la familia Maldonado y lo sigue, Marcos Montes, este último no es tan rico cómo los otros dos, pero aún así, su familia es muy prestigiosa. Esos tres chicos tienen una apariencia dominante, digna de familias poderosas.
No muy lejos de ellos, Magdalena de Conde, estaba al lado de Solange y le dijo. —"Hija"no sabía que tenías amigos de alto prestigio.
—No, madre, ellos no son mis amigos. ¡Es solo que uno de ellos me agrada mucho! Por esa razón los invité. Solange, tenía una sonrisa de oreja a oreja ya qué Lucas, sí se presentó.
Sin razón alguna, Magdalena, miró a Solange y en un tono sarcástico agregó. —"Apuntas alto igual que tu ma..." Justo cuando estaba por ofender, la mujer fue interrumpida por Lucas.
Las palabras de magdalena, fueron interrumpidas por Lucas que llegó a saludar a la quinceañera.
¡Feliz cumpleaños! Lucas, le entregó una pequeña caja y añadió. ¡No lo abras aún! Te diré cuándo lo puedes hacer.
Esto sorprendió mucho a Solange. Ella Pensaba que Lucas, no se presentaría, así que tomó el regalo y con un dulce tono contestó. —Te agradezco que vinieras, tu presencia significa mucho para mí.
Lo cierto es que Lucas, no le contesto nada, solamente se dio la vuelta, se dirigió a tomar asiento lejos de Solange, mientras que los amigos de Lucas también la felicitaron luego siguieron al joven Grain.
Al ver que se sentaron en una esquina, Solange se mostraba algo descontenta. Ella quería que Lucas, permaneciera aún más cerca.
—¡Amiga quita esa cara y agradece que vino! Por lo menos él está aquí. «Eso significa algo» Paula Maldonado, su mejor amiga y la animaba todo el tiempo.
Sin embrago, Paula, es la hermana de Charly, aunque pocas personas lo saben. —Charly, tiene la obligación de protegerla, más ahora que están de moda los secuestros. por esta razón su hermano le dice que muestre un perfil bajo, que no lle la atención.
Ese día, la fiesta continúo y cuando por fin llegó el momento del vals Dionisio Conde, el padre de Solange, se acercó para sacarla a bailar, como es la tradición.
"Hija ¿has disfrutado de tu fiesta, te sientes a gusto? el hombre pregunto mientras baila junto a su hija.
—¡Por supuesto padre, te agradezco esto que hiciste por mí! Solange le dio un gran abrazo y continuaron bailando un rato más, pero de la nada Dionisio preguntó. ¿Uno de los chicos ricos que vinieron está interesado en ti?
—Lo digo, porque ninguno de los otros muchachos te ha sacado a bailar eso significa que están siendo intimidados por esos chicos ricos.
¡Cómo crees! padre, ellos no... En ese momento, las palabras de Solange fueron interrumpidas, por la voz que vino detrás de ella.
—¡Señor Dionisio, me permite! Lucas fue quien interrumpió el baile, ya que quería bailar con la cumpleañera.
En cuanto Dionisio se hizo a un lado, el joven la sostuvo de la cintura y la atrajo hacia él.
Era un momento incómodo, pues Solange podía sentir el respirar de Lucas en su cuello. El vals continuó y la pareja estaba bailando en silencio, de repente Solange que tenía sus mejillas sonrojadas le dijo. ¡Lucas, en verdad te agradezco mucho que vinieras!
—¡No tenía otra opción! Dijiste que si no venía te causaría un trauma de por vida. Tú crees que yo pueda vivir con eso! te imagino siempre detrás de mí, y reclamando por ese trauma.
La mirada de Lucas, nunca se apartó de la de Solange, lo que produjo que la chica se sonrojara.
A Lucas le parecía divertido, pero a la misma vez se preguntaba ¿En dónde está la niña que nunca muestra vergüenza siguiéndome a todos lados?
¿A dónde se fue? ¿Por qué hoy se comporta más tímida?
Lucas puso su mirada seria, luego fue sincero con ella. —¡En realidad vine porque tengo que decirte algo importante. —Dos semanas después de mi graduación, voy a partir al extranjero, no tengo alternativa, mi obligación de hacerme cargo de los negocios de la familia, me tengo que ir a preparar, para poder ser un gran empresario.
Cada palabra Solange, la sintió como una punzada en el corazón, Lucas es mayor que ella, eso significaba que no lo vería más, o por lo menos, no en un par de años, ya que a ella aún le faltaban para graduarse.
Ella tenía los ojos rojos y húmedos en cualquier momento derramaba sus lágrimas. por su parte Lucas notó que el semblante de ella había cambiado y añadió. ¡Espera, no he terminado de hablar!
—¡Solange, tú eres una chica que nunca sé ha rendido conmigo, llevas años siguiéndome. Nunca te he dado motivos, ni esperanzas. Pero aún así continúas siguiéndome, es por eso que...
Lucas, trago grueso antes de continuar, tenía que elegir muy bien sus palabras.
—Siempre he pensado que mi novia tiene que ser una mujer preparada, decidida, fuerte, capaz de vencer pequeños y grandes obstáculos, ya que pronto seré un gran CEO.
¿Lucas, qué quieres decir con esto? Ella tartamudeo al pronunciar estas palabras. por alguna razón sintió que él se estaba despidiendo.
—¡Lo que quiero decir es que sigas adelanté, que no te rindas nunca! No te veré por un tiempo y no quiero que pongas tus bellos ojos en nadie más. Tampoco quiero que nadie se acerque a ti.
Solo sigue adelante con tus estudios, quiero que seas una mujer muy fuerte y preparada. Te prometo qué cuándo yo vuelva formalizaremos una relación.
Dicho ésto Lucas se inclinó y le dio un beso que la dejó sin aliento, y cuándo la soltó le dijo. "Ya puedes abrir tu regalo" Después de esa despedida, Lucas se marchó del lugar.
Mientras que Solange quedo inmóvil y se preguntaba. ¿Qué acaba de suceder? «Será un sueño» En ese instante, Paula corrió para sacarla de la pista de baile ¿Amiga, qué fue eso? ¡Te besó, amiga! ¡Lucas te besó! Las dos estaban emocionadas, por fin se le cumplió el sueño a Solange.
—¡Lo viste, Paula, no me lo puedo creer, Lucas Grain me dio esperanzas, ¿será que ya somos novios?!
De pronto, ella recordó su regalo y al abrirlo, encontró una pulsera de oro que tenía unas palabras grabadas ¡Nunca te dejaré!
Solange estaba sorprendida, aunque él se estaba despidiendo, le dejó una pequeña esperanza.
Con lágrimas en los ojos, Solange se prometió así misma, que nunca se rendiría, seguirá adelanté hasta lograr ser una mujer fuerte y digna del amor de Lucas.
Cinco años después
Un maybach negro estacionó en las afueras del aeropuerto. ¡Lucas, hemos llegado!
En ese momento, el joven Grain, abrió los ojos saliendo de los recuerdos, Luego dirigió unas palabras a Marcos, Cinco años pasan rápido. Hoy soy yo, el que tiene que esperar a su novia.
Todavía falta media hora para que llegue el vuelo de la señorita Solange. Marcos miraba su reloj y le recordó la hora de en qué Solange llegará.
—He esperado un año para verla nuevamente, media hora no es nada.
—Hace un año, Lucas fue a visitarla y después de eso siempre hablaban por videollamada. Lucas, ha tenido mucho trabajo en la constructora y se le dificultó ir a verla.
Media hora después, una mujer bajó del avión, ella vestía con una blusa de tirantes blanca, y un pantalón ejecutivo.
Solange miró su reloj y dijo. ¡Justo a tiempo, de seguro que ya llegaron mis padres por mí! ese pensamiento la ilusionó un poco, no obstante, recibió un mensaje, y al abrirlo descubrió que era de su padre.
[Lo siento mucho nena! No te podimos ir por ti, por favor, agarra un taxi, te esperamos para el almuerzo,
te extraña mucho, Papá]
La decepción se reflejó en la mirada de la chica.
—Siempre es lo mismo nunca tienen tiempo para mí.
Lo cierto es que al levantar la mirada se topó de frente con un hermoso hombre que la miraba con mucho amor.
Los ojos y el cabello del hombre eran negros, su nariz era fina y sus cejas bien definidas, Él tenía una barba corta, esto le daba al hombre un aspecto más varonil y dominante.
—¿Te vas a quedar mirándome todo él día?
Preguntó Lucas con una sonrisa en el rostro.
—"Lucas, te extrañé mucho" Solange se arrojó sobre los brazos de Lucas, y con sus manos le envolvió cuello, mientras que con sus piernas le envío la cintura, para luego darle un gran beso.
El beso de Solange selló los labios de Lucas, Pero una vez que lo soltó el joven sonrió al decir. ¡Tú Nunca cambiarás! Siempre tan impulsiva.
—¿Lucas, sabes hace cuánto no te veo? Me emociona mucho que estes aquí, ella decidió poner sus pies sobre la tierra.
—"Vamos salgamos de aquí" Lucas le tomó la mano para salir del aeropuerto.
Una vez que entraron al auto, Lucas le pellizcó la nariz y luego le dijo. Iremos a algún restaurante. ¡Así estaremos un poco más de tiempo juntos. Más tarde te dejaré en tu casa! feliz por el regreso de su novia, Lucas la envolvió en sus brazos.
—Mis padres me esperan, pero ya que no vinieron por mi ¿Porqué no ir? Claro qué sí te acompaño.
—Me da mucho gustó qué pudieras venir por mí, Lucas disculpa por avisarte hasta hoy en la mañana que venía, en realidad, quería darte una sorpresa.
Queria llegar directo a tu empresa para verte, pero no pude aguantarme.
_¡Qué bueno que me avisaste! " Mira" nadie vino por ti. Él la llenaba de besos, y le decía, te extrañé mucho mi Sol. Lucas le decía, Sol, de cariño, se acostumbró a llamarla tan cariñosamente.
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