-Encontre uno...

Dijo lujuria mientras caminaba por las calles de una ciudad, esta todos los dias buscaba diferentes humanos en los cuales debia hacerles despertar sus deseos sexuales para que se dejaran llevar por ellos al pecado "Estoy cansada de esto" pensaba lujuria mientras sus demas compañeros la miraban, ella siempre habia estado trabajando y sabía bien que ya no era necesaria para los humanos ya que ellos eran de por si lujuriosos.

-Lujuria ¿que sucede contigo últimamente? Solo vienes una vez al dia eliges a tu humano lo impregnas y luego te vas.

-Pereza no se si me puedas entender pero estoy cansada de esto, llevamos miles de años haciendo lo mismo a los humanos cuando ellos son mas pecadores que sus antiguos antepasados, antes los humanos realmente creian en los pecados pero ahora ya no les importamos y ellos mismos se dejan llevar por la lujuria incluso si no intervengo.

Pereza miro a Lujuria y dio un suspiro, Lujuria tenia su cabello rojizo como el fuego y ojos azules como el mar, era extremadamente hermosa pero ella jamas habia podido experimentar por si misma su propio pecado.

-Lujuria eres mi hermana y entiendo lo que dices, todos nosotros experimentamos el mundo humano con nuestro pecado, incluso Avaricia esta viviendo activamente en el mundo humano desde hace ya seiscientos cuarenta años y te aseguro que el si experimenta a diario su propio pecado al ser uno de los Ceos mas importantes del pais.

-Pereza ¿tu haz visto a nuestro hermano? Yo no eh sabido de el desde hace mucho.

-Bueno ve hablar con el te aseguro que es el que mejor te puede aconsejar, no quiero verte triste hermana mira que aunque seamos inmortales seguimos haciendo el trabajo que se nos encomendó.

Dijo pereza mientras miraba el rostro de lujuria, pereza tenía la piel blanca y grandes ojeras bajo sus ojos negros los cuales lo hacían ver sombrio y depresivo, Lujuria haciendole caso a su hermano busco a su hermano mayor Avaricia el cual mostraba una figura imponente en su traje de negocios cabello negro, ojos negros y piel trigueña.

-Hermana Lujuria ¿Que haces aqui? Hace mucho no te veía.

-Seiscientos cuarenta años exactamente hermano, vine a ver como estabas y si me puedes ayudar.

Pregunto Lujuria mientras su hermano la miraba preocupado sentandose en la silla detras de su escritorio el cual se veía completamente ordenado.

-Pereza me dijo que te pregunte a ti asi que...

-¿De que se trata?

-Me siento vacia, siento que ya no tiene sentido seguir haciendo este trabajo, los humanos tienen libre albedrío y lo usan solo para hacer daño, ya no nos necesitan dijeron que nos necesitaban para que el humano definiera el bien del mal pero ellos cometen miles de pecados diariamente sin si quiera que intervengamos yo...yo ya no le encuentro objetivo a todo esto.

Dijo Lujuria mientras cruzaba sus largas piernas sobre su vestido rojo el cual se marcaba en sus caderas, esta era la mujer mas hermosa en el mundo la cual solo habia sido creada para ser despreciada por ser un pecado, Avaricia miro y luego dio un suspiro sentandose en su silla.

-Hermana tu eres una de los pecados capitales mas pronunciados por el humano pero ni siquiera haz conocido un hombre o mujer desde que fuimos creados, siempre quisiste servir al humano ya que fueron las ordenes dadas asi nos crearon pero creo que deberias conocer mas al humano para entenderlo mejor, ellos son seres complejos, te propongo algo hermana... ¿Te gustaria vivir con los humanos un tiempo? Yo te proporcionare todo lo que necesites aqui pero solo quiero que tu disfrutes y logres entender la mente compleja del humano.

Lujuria no sabia como tomar las palabras de su hermano, "¿Vivir con los humanos? Conocerlos, entenderlos" todo eso le era un misterio por lo que acepto la propuesta de su hermano mayor.

-Bien Hermana entonces ya que aceptaste desde hoy tu nombre sera... Leah Valentini mi querida hermana menor.

-¿Leah Valentini? ¿De donde sacaste ese nombre?

-Lo eh tenido reservado para ti desde hace mucho, casi todos mis hermanos vienen a mi cuando quieren algo del mundo humano por lo que tengo identidades para cada uno de ustedes, incluyendote a ti tambien Lujuria.

-Entiendo, segun Pereza tu eras la mejor opcion para ayudarme, ahora entiendo porque lo decia.

Lujuria tomo la carpeta que le estaba entregando su hermano y la observo detenidamente "Estos datos son mios Leah Valentini, hermana menor de Javier Valentini, yo tengo supuestamente veinticuatro años y vivo en un departamento del hotel de mi hermano y... Son bastantes cosas pero no es dificil" penso Lujuria mientras terminaba de leer.

-Toma hermana, te dare esta tarjeta puedes usar el dinero que desees de allí que no se agotara te lo aseguro.

-Pero dicen que el dinero es importante para los humanos, no puedo aceptarlo.

-Hermana llevo viviendo en el mundo humano por mas de seiscientos años asi que tengo mas dinero del que podria gastar, puedes usarlo como quieras deseo verte feliz siempre y si esto te puede ayudar es mucho mejor.

Dijo Avaricia mientras sonreia genuinamente, Lujuria se levanto de su asiento y se acerco a abrazar a su hermano rapidamente feliz de saber si lograria sentir algo mas al conocer a los humanos.

-Bien bien hermana ahora es tiempo que vayas a casa, y aprovecha de comprar algo de ropa para mañana que los humanos no suelen usar la misma vestimenta por mas de mil años jaja.

-...

Lujuria se quedo en silencio sin entender las palabras de su hermano pero aun así se le hizo caso y luego de irse al departamento que este le habia dado ella se fue de compras "Comprar ¿que debería comprar? No entiendo nada de esto, la ropa tiene números no entiendo esque no pueden hacer ropa deacuerdo a mi como este vestido que eh usado siempre" Lujuria camino a un centro comercial y vio a muchas chicas emocionadas comprando ropa por montones.

-Señorita ¿puedo ayudarle a encontrar lo que busca?

-Eh... Yo, yo no se es la primera vez que compro aqui, no entiendo como...

Dijo Lujuria fue entonces que la chica que estaba vestida de atendedora la miro con un sonrisa.

-¿No es de aqui?

-Eh... No, es mi primera vez.

-Entiendo, entonces venga conmigo yo buscare algunas prendas que piense que se le verian bien y usted despues las elige ¿le parece?

La atendedora parecia muy atenta y simpática yendo a buscar vestidos, jean, blusas y chaquetas para Lujuria pensando que esta se veria hermosa en esos atuendos, Lujuria una mujer esbelta y bastante exuberante en su parte delantera y trasera lo cual dejaba ver su sensualidad a flor de piel, cuando la atendedora volvio y entego los atuendos a Lujuria esta se los probo de inmediato haciendo que todos los presentes en el local voltearan a verla.

-Hermosa...

-Bellísima.

-Wow que cuerpo.

Fue lo que mas se escucho en el local haciendo que Lujuria se sintiera avergonzada por los comentarios que se escuchaban a su alrededor, fue entonces que Lujuria vio a un hombre entrar al lugar buscando ropa para hombre.

-Me llevo este señorita.

-¿No se lo quiere probar señor?

Preguntó la atendedora mientras guarda el traje que este había elegido en una caja.

-No es necesario solo quiero que me sirva para buscar trabajo.

Lujuria lo miro y se dio cuenta que la mirada de aquel hombre parecia cansada y aburrida, el no era muy atractivo aunque físicamente parecia estar en forma, el volteo y vio a lujuria frente el pero este no reaccionó e ignorandola se marcho del lugar terminando su compra, fue entonces que Lujuria paso a pagar la ropa que había comprado y las atendedoras se ofrecieron a hacerle un descuento a cambio de que esta se dejara fotografiar como modelo de la tienda, asi fue como Lujuria consiguio la ropa mas costosa a un bajo costo gracias a su apariencia.

-Ese hombre... El no parecia ser alguien normal, no vi lujuria en sus ojos ni siquiera parecia estar atento del mundo.

Lujuria no podia evitar sentir curiosidad por aquel joven por lo que salio rápidamente del centro comercial y busco a su alrededor "Si el fuera lujurioso podria encontrarlo fácilmente pero no logro verlo en los alrededores" asi fue como lujuria perdio la pista de este.

Al llegar a casa esta solo se predispuesto a mirar los alrededores y luego ir a su habitación "Se supone que debo cocinar algo, se que no morire pero si me dara hambre al estar en forma humana en este mundo" penso Lujuria mientras veia lo que habia en la nevera "Eh... Aqui esta lleno pero, pero no se cocinar nada de esto, tendre que llamar a mi hermano para ver qur hacer... No espera no puedo llamarlo por cada problema que tenga si no no lo dejare trabajar tranquilo entonces, tal vez deberia buscar otra manera" Lujuria vio frutas en la parte de abajo de la nevera y saco una manzana para poder saciar su hambre.

-Esto es suficiente por hoy.

Dijo lujuria yendose a la cama mientras analizaba lo poco que habia visto en el mundo humano.

-¿Quizás deba encontrar un trabajo? Tambien deberia hacer uno de estos cursos de cocina.

Se dijo esta mientras miraba la pantalla del computador donde ofrecian cursos "Si deberia hacer uno de estos cursos a fin de cuentas no puedo comer solo manzanas para siempre" lujuria estaba dispuesta a esforzarse mientras viviera en aquel mundo, fue entonces que un flash vino a su mente.

-El hombre de hoy, el no era atractivo pero no mostraba ni el mas minimo interés en mi, eso es extraño e incluso e tentado a quienes tienen otras preferencias sexuales entonces por que no tuve efecto en el...

Lujuria seguia intrigada en aquel hombre y queria encontrarlo nuevamente para ponerlo a prueba impregnandolo con lujuria para ver si esta luego buscaria a alguien para satisfacerse.

Al dia siguiente lujuria se preparo y se fue a buscar trabajo y un curso de cocina para poder aprender diferentes cosas, al llegar a su primera entrevista todos quedaron asombrados por lo hermosa que era, unas curvas perfectas, cabello largo rojo y andulado el cual ondeaba mientras esta caminaba, ojos azules pero intensos que mostraban una mirada seductora, mujeres y hombres la admiraron mientras ella se sentaba frente quienes tomarian su entrevista "Es incomodo usar sujetador pero pereza me dijo que debo usarlo si convivo con otros humanos" pensaba Lujuria mientras se sentaba y miraba a todos a su alrededor viendola con deseos.

-Eh... Usted es la señorita Leah Valentini ¿verdad?

-Si, si señor esa soy yo.

-¿Tienes veinticuatro años? Dinos ¿Porque piensas que debes estar en nuestra empresa y que esperas de trabajar aqui?

-Bu, bueno si tengo veinticuatro eh trabajado como traductora en la empresa de mi hermano, solo quiero volverme independiente y aprender de ustedes una de las empresas mas grandes en el mercado laboral, se que es un gran lujo poder conseguir un puesto aqui por lo que quiero esforzarme por ser parte de este gran equipo.

Dijo Lujuria mientras los miraba a todos, todos imaginaban diferentes escenas en sus mentes de como querian acercarse a ella entre algunos varones y mujeres que pensaban un poco mas que solo llevar una buena amistad laboral.

-Entendemos muy bien señorita puede retirarse aqui termina la entrevista la llamaremos hoy en la tarde para decirle como le fue.

Lujuria vio claramente como el hombre que me había hecho la entrevista comenzaba a desear poseerla por lo que su trabajo era seguro.

-Muy bien gracias entonces esperare su llamada.

Concluyó Lujuria marchandose de la empresa.