...DANIEL...

Quién diría que de un hombre tranquilo podría pasar a ser un hombre...algo amargado.

-- ¡Son unos completos inútiles!

Sí, ese soy yo gritándole a mis empleados al ver que las ideas para la nueva campaña publicitaria no es de mi agrado.

Perdí la paciencia y la cabeza hace un año, cuando mi padre me nombró el CEO de una de las empresas más importantes y poderosas del mundo. Para ser sincero, ser un CEO es un cargo muy importante del cual aún no estaba, o mejor dicho, no estoy preparado.

-- Daniel necesitas tranquilizarte, con ese genio no llegarás a ningún lado-- susurraba Kendra, mi mejor amiga, en mi oído mientras me daba un masaje de hombros.

-- Salgan de aquí-- les ordené a mis empleados con el tono más delicado posible.

Me quedé a solas con Kendra en mi oficina y solté un suspiro.

-- ¿Por qué cada que vengo a verte me encuentro con tus gritos?-- ríe Kendra.

-- Lo siento, pero aveces pierdo la cabeza con ellos-- miré su barriga de 2 meses de embarazo-- Ya le contaste a Theo lo de los pequeños que llevas en tu barriga?

-- Si, ayer se lo dije, aproveché que era nuestro aniversario. No sabes cuán feliz estaba. Y más cuando supo que estaba esperando dos bebés...

Kendra fué una mujer de la cual estuve realmente enamorado, la amé demasiado, pero poco a poco dejé de verla como mujer, y ahora la veo como mi hermana.

-- No sabes la alegría que siento al verte tan feliz con Theo-- se levantó de la silla y se puso detrás de mí.

-- Sé que muy pronto tu también lo serás con una buena mujer-- me dió un beso en la mejilla.

-- ¿Será?-- le devolví la sonrisa.

...TESSA...

Mientras escucho la clase del maestro en mi curso, un compañero de otro curso se acerca al profe y empieza a decirle algo.

-- Miss Jones [Señorita Jones]-- Alzo la mirada cuando el profesor me nombra-- the director is waiting for you in his office [el director la está esperando en su oficina]

Me levanto algo confundida. El director nunca me ha mandado a llamar, ¿será que hice algo que no debía?. Salgo del curso sin decir nada. Juego con mis dedos de los nervios y dando un suspiro, abro la puerta de la oficina del director.

-- Good morning director, did you send for me? [Buenos días director, ¿me mandó a llamar?]

-- Sit down tessa [Siéntate Tessa]-- me señala la silla que queda delante de su escritorio, y me siento-- I sent you to call because I need to tell you something very delicate that I just found out a few minutes ago [Te mandé a llamar porque necesito decirte algo muy delicado que me acabo de enterar hace unos minutos]

-- Mmm that thing? [Mmm ¿Qué cosa?]-- bajo la mirada.

-- It's about your mother [Se trata de tu madre]-- nuestras miradas se cruzan.

-- My mother? [Mi madre?]-- la idea de que hice algo malo se va de mi cabeza y solo me concentro y la expresión preocupada del director-- What does my mother have to do with it? [¿Que tiene que ver mi madre?]-- espero una respuesta pero no llega. Hubo un silencio que se adueñó de la oficina. Por la cara del director sé que algo está mal. Saco mi celular para llamar a mi madre y el director sólo me dice algo que hace que el celular que cargaba en mi mano se caiga al suelo y que las lágrimas se asomen en mis ojos.

-- Your mother had an accident and because of that ... she passed away. [Tu madre sufrió un accidente y a causa de eso...falleció]

-- What? [¿Qué?]-- lágrimas empiezan a bajar de mis ojos e inundan mis mejillas.

-- I'm so sorry Tessa... [Lo siento mucho Tessa...]

Salgo de la oficina, y corriendo salgo de la institución. Me subo en el primer taxi que veo y le digo que me lleve al hospital. Llego al hospital y corriendo por el pasillo me cruzo con un doctor y le pregunto por mi madre. Y sí, es como el director me dijo.

-- Mother...[Mamá...]-- me acerco a mí madre la cual está acostada sobre una camilla y todo su cuerpo está cubierto por una sábana. Quito la sábana que cubre su cara y caigo de rodillas al ver su rostro casi pálido-- ¡Mother! [¡Mamá!]-- no puedo contener los gritos y las lágrimas. Abrazo a mi madre-- Mommy [Mamita]-- acaricio su rubia cabellera-- You said you would always be with me ... Mom! [Dijiste que siempre estarías conmigo...¡Mamá!]

Mi padre murió cuando tenía tan solo 10 años, no tengo hermanos, acabo de perder a mi madre ¿Ahora que voy a hacer?

...Una semana después......

Gracias a Dios lo único que me queda en esta vida es mi mejor amiga, Daysi; la cual desde que murió mi madre ha pasado la mayoría del tiempo conmigo, brindandome su apoyo incondicional, como una hermana.

-- Quiero irme del país-- hablo haciendo que Daysi deje de acariciar mi cabello y me mire sorprendida.

-- ¿Qué?

-- La verdad no quiero estar más tiempo aquí, este país me trae muchos recuerdos que prefiero olvidar.

-- Pero ¿cuando decidiste que te vas a ir de aquí? Ya lo pensaste...?

-- Desde el día que me enteré de lo ocurrido con mi madre lo decidí. Y creo que es lo mejor, la verdad. Tengo dinero reunido, y...me quiero ir.

-- ¿Dónde te vas a ir?

-- A tu país, a México-- me abrazó antes de dejar un beso en mi frente.

-- Cuanto conmigo para lo que necesites. En México tengo la casa que me dejaron mis padres antes de fallecer, puedes quedarte ahí el tiempo que quieras.

-- Muchas gracias Daysi, no sé que haría sin ti.

-- ¿Cuando te vas a ir?

-- Mañana.

...DANIEL...

Gracias a mi bendito genio que no puedo controlar, ayer perdí a mi secretaria.

-- Maldita sea, ¿por qué casi todos los empleados están renunciando?-- susurro.

-- Porque tienes un genio insoportable-- me alcanza a escuchar Kendra-- ¿no es así mi amorcito?-- Theo ríe y niega con la cabeza.

-- Tampoco es que tenga el peor genio del mundo-- digo.

-- Si claro, ¿cuántas secretarias va perdiendo al mes?

-- Cuatro-- le responde Theo.

-- Y no es porque él las despida, sino porque ellas se van, pobres, no soportan a su jefe-- vuelven a reír.

-- Rianse, burlense de mí.

-- Mírame a mí, soy secretaria y asistente de Theo, hace más de 7 años. Y aunque aveces se vuelve insoportable, no renuncio.

-- Al parecer tendré que contratar a otra secretaria.

-- Y si lo vas a hacer, por favor, no le grites, créeme que se va a hartar y no durará ni una semana-- sonrío negando con la cabeza.

...TESSA...

▪︎▪︎▪︎

Me levanto temprano cuando escucho la alarma. Me doy un baño y después de vestirme, salgo de mi casa con mi maleta para ir al aeropuerto. Me subí al auto de Daysi ya que ella se ofreció a llevarme.

-- No sabes cuanto te voy a extrañar, Tessa.

-- Y yo a ti.

-- Cuánto tiempo pienso quedarte allá?

-- La verdad no tengo ni idea. Solo espero que no ocurra nada malo.

Minutos después me despido de Daysi al llegar al aeropuerto, y entrando doy todo lo que necesito para poder subirme al avión.

-- Bien Tessa, te espera una nueva vida en México, espero y todo salga bien-- me doy yo misma la bendición-- a México se ha dicho-- subo al avión.

▪︎▪︎▪︎

Después de horas de vuelo, aterrizo en el aeropuerto de México.

-- Así que esto es México-- miro a mi alrededor.

Nunca había salido de Estados Unidos, es la primera vez que viajo a México. Sé hablar español gracias a Daysi ya que ella fué la que me enseñó hace 8 años.

Me subo en un taxi y le doy al conductor la dirección de la casa de Daysi, el lugar donde me quedaré a vivir...por un largo tiempo.

...DANIEL...

▪︎▪︎▪︎

-- ¡¿Como chingados es eso de que aún no puedo encontrar una mujer indicada para el trabajo como secretaria?!-- respiro profundo.

-- Han venido varias mujeres por el trabajo, solo que ninguna te agrada...-- habla cuidadosamente Kendra.

-- Porque todas son una inútiles que no saben hacer nada-- baja la mirada-- ¿Qué pasa?

-- Has cambiado Daniel.

-- Sigo siendo el mismo...-- niega con la cabeza.

-- Antes ni siquiera gritabas, ¿que pasa Dani? ¿tan estresado estás por la empresa que cambiaste tu forma dulce y chistosa de ser?

-- Lo siento Kendra, pero no puedo controlarme aveces. Todo esto de la empresa me tiene mal...aún no estaba preparado para este puesto la verdad.

Me dió un masaje y dejó un beso en mi mejilla.

-- ¿Sabes que siempre puedes confiar conmigo, no?-- me abrazó por detrás y asenti con la cabeza-- quisiera que saliéramos algún día, para ver si así te quitas un poco el estrés. ¿Qué dices?

-- Claro-- sonreí.

Aún no entiendo porque Theo y Kendra me siguen soportando sabiendo como soy, sin duda alguna ellos son mis mejores amigos.

...TESSA...

-- Trabajo, trabajo, ¿Por qué nadie me quiere contratar?-- me siento en una banca y dejo mi currículum a un lado.

Hace dos días llegué a México, hace dos días eh pasado buscando trabajo pero nadie me contrata ya que no terminé una carrera en la universidad.

-- ¿Qué voy a hacer?-- cubro mi rostro con mis manos y girando mi cabeza veo un periódico que está a mi lado-- Oh por Dios...-- agarro el periódico y veo una oferta de trabajo como...-- ¿secretaria en la empresa Ferrer? ¿Dónde queda eso?-- veo la dirección de la empresa y sonrío-- no me han querido contratar en ningún lugar que hasta ya he perdido la esperanza...pero nada pierdo con probar-- me subo a un taxi y le doy la dirección del periódico.

Al bajarme del auto quedó al frente de un inmenso edificio. Con la fé por el suelo, entro a la empresa sosteniendo fuertemente mi currículum.

¿Será que me van a contratar o estoy perdiendo mi tiempo?

Por tantas ideas estupidas pasando por mi cabeza, me tropecé con una mujer, haciendo que la taza de café que sostenía en su mano, cayera al piso.

-- ¡Oh por Dios! mil disculpas, perdóneme. No sé que estoy pensando, de verdad perdóneme-- la hermosa mujer ríe y niega con la cabeza.

-- No te preocupes, en parte fué mi culpa por estar distraída.

Miro a la cara a la mujer y abro los ojos de par en par al ver que no es nada más y nada menos que la modelo Kendra Lisboa.

-- Usted es...? La modelo...-- vuelve a reír.

-- No sabía que era tan reconocida. Mucho gusto.

-- ¿Usted es Kendra Lisboa?

-- Pues sí, soy yo.

-- Nunca pensé estar al frente de una famosa-- susurre y ella rió.

-- ¿Te puedo ayudar en algo? te noto perdida.

-- Vengo por una oferta de trabajo. La de secretaria...

-- Oh...-- sonríe-- vienes por el puesto de secretaria para trabajar con Daniel.

-- ¿Daniel?

-- Ven conmigo nena. Yo te indico donde está la oficina de él-- subimos un par de escaleras-- por cierto, ¿como te llamas?

-- Tessa. Tessa Jones.

-- Bueno tu ya sabes mi nombre. No eres mexicana, no?

-- Soy de Estados Unidos.

-- ¿Cuantos años tienes linda?

-- 22.

-- Mmm.

-- A usted ni le pregunto ya que parece de 20-- vuelve a reír.

-- Tengo 33 años. Y, no me digas usted, me siento vieja. Solo te gano por...santos cielos, son 11 años de diferencia. Me siento vieja.

Nos detenemos delante de una oficina.

-- Bien nena, lista para la entrevista de trabajo?

-- Espero y todo salga bien.

-- Y yo espero que Daniel de una vez por todas se decida a contratar a alguien-- niega con la cabeza y abre la puerta.

Miro a un hombre que está de espaldas viendo la ciudad desde las ventanas.

-- Dani, alguien viene por la entrevista de trabajo-- entro a la oficina junto con la Srta.

-- Sabes Kendra? Ya no quiero ninguna inepta para la entrevista...-- voltea el hombre y su mirada se fija en mí.

Bueno, al parecer perdí la última esperanza que me quedaba.

...DANIEL...

Hace mucho tiempo mis ojos no apreciaban una mujer tan hermosa, aparte de Kendra.

La chica que está al frente de mí es...sencillamente hermosa. De piel blanca, unos hermosos ojos azules como el mar, con un cuerpo hermoso, y una presencia de angel.

-- Siento mucho quitarle su tiempo señor, yo...

-- Siéntate-- le señalo a la chica la silla que está al frente de mí.

Kendra y la joven se miran. La chica algo confundida se sienta delante de mi.

-- Supongo que vienes por el puesto de secretaria, no?-- asiente con la cabeza y pone unos papeles sobre el escritorio.

-- Esos son mis documentos señor-- baja la mirada y tomo los papeles con una sonrisa.

-- Tessa Jones, con 22 años de edad, estadounidense...-- empiezo a leer sus documentos.

-- Yo no terminé una carrera en la universidad, por lo que puede que no sirva para trabajar aquí. Pero estudié un año gestión de tiempo. Discúlpeme si le estoy haciendo perder su valioso tiempo-- suspira.

Dejo los documentos sobre el escritorio.

-- Muchas gracias de todos modos señor...-- estaba por levantarse.

-- Contratada-- sonrío.

-- ¿Qué?

-- ¿Qué?-- le sigue Kendra.

-- Así es, bienvenida a la empresa señorita Jones.

-- ¿Así de...rápido?

-- No veo el motivo para que las cosas sean lentas. Yo necesito una secretaria y usted necesita un trabajo.

-- Muchas gracias señor...la verdad no pensé que me contrataría.

Ambos nos levantamos y extiendo mi mano hacia ella.

Estrecho mi mano con la suya que es tan cálida.

-- Bienvenida a la empresa señorita Jones-- sonríe sin aún salir de la impresión.

-- ¿Cuando empiezo a trabajar?

-- Mañana mismo, cuanto antes mejor.

-- Le prometo que no se arrepentirá de contratarme, daré lo mejor de mí.

-- Eso espero.

Abre la puerta de la oficina.

-- Hasta pronto señor-- asiento lentamente y con una sonrisa sale de la oficina.

-- Qué...fué...eso. La contrataste, osea, pensé que no lo harías.

-- Necesito una secretaria a urgencias.

-- Sabes que, esto lo tiene que saber Theo, porque una chica que te agrade, es de locos-- entre risas sale de la oficina con su celular en la mano.

Con una sonrisa veo la ciudad.

-- Así que Tessa Jones...-- sonrío de lado y saco mi celular. Marco un número y lo llevo a mi oído cuando contestan mi llamada-- 📲 Buenos días. Quisiera que investiguen sobre Tessa Jones, la chica que acabo de contratar como mi secretaria, quiero saber todo de ella, espero la información en menos de una hora-- corto la llamada y observo a la joven que acaba de subirse en un taxi-- que interesante mujer-- sonrío-- y hermosa.

...__________❣__________...

TESSA:

DANIEL:

MIS AMORES, ESPERO Y DISFRUTEN DE ESTE SEGUNDO LIBRO DE LA BILOGÍA "OBSESIÓN"

...DANIEL...

▪︎▪︎▪︎

-- Tessa Jones, una universitaria estadounidense que hace tres días acaba de mudarse en un departamento aquí en México. Sin padres, sin hermanos y lo mejor, sin pareja-- Leo con una sonrisa la información que ayer me enviaron de la joven que Kendra me presentó ayer.

-- Buenos días Dani-- entra Kendra a la oficina y se acerca a mí para darme un beso en la mejilla-- ¿Cómo estás?-- mira los papeles que están sobre mi escritorio antes de que le responda a su pregunta-- ¿que es esto?-- arrebató los papeles de mis manos y empezó a leerlos.

-- Eso es...

-- La información de Tessa-- puso los papeles sobre la mesa-- ¿por qué tienes esto? ¿Mandaste a investigar sobre ella?

-- Pues sí, es normal. Necesito saber todo de la mujer con la que trabajaré por un buen tiempo.

Tocan la puerta de la oficina evitando que salga cualquier palabra de la boca de Kendra.

-- Pase.

Cuidadosamente se presenta ante mí la belleza de mujer, Tessa.

-- Buenos días señor.

‐- Buenos días señorita Jones.

-- Te dejo Daniel-- me dió un beso Kendra-- me tienes que explicar lo de la información de la chica, porque no te creo nada-- susurra en mi oído y con una sonrisa se acerca a Tessa-- Buen día Tessa. Espero y nos podamos llevar muy bien ahora que trabajarás con mi hermano. Adiós Dani. Adiós linda-- despidiéndose con la mano me dejó a solas con Tessa.

-- No sabía que ella era su hermana.

-- No lo es, bueno, nos queremos como si lo fuéramos. Somos muy buenos amigos-- sonreí-- pero siéntese Srta. Jones-- le señalé la silla que quedaba al frente de mí-- ¿Alguna vez a trabajado?-- Niega con la cabeza.

-- Nunca. Hace un año empecé a estudiar en la universidad. Pero no, no he trabajado.

-- Entonces tendré que enseñarle muchas cosas al parecer-- por más que la miro pienso en como una mujer tan hermosa no tiene pareja, tiene 22 años. Saqué unos documentos del cajón de mi escritorio y se los enseñé a Tessa-- este es el contrato que tiene que firmar para formar parte de esta empresa. Puede leerlos con calma-- los tomó sin dejar de mirarme tímidamente.

Empezó a leerlos en silencio. Mi mirada solo se fija en su exuberante y muy bien desarrollado cuerpecito. Estudio su cuerpo detalladamente, sin pasar de vista sus curvas que están...de infarto. Eh estado con algunas mujeres, las cuales nunca me han llamado la atención, pero la rubia con cuerpo de diosa, está más que buena. Ella es mucha mujer, como será en la cama? De seguro que si pasara una noche con ella me quedaría más que satisfecho, porque con ese cuerpo...uno hasta queda encantado y hasta para repetir. Río de las estupideces que estoy pensando y la rubia deja los documentos en el escritorio, y alzando la mirada, la miro a los ojos.

-- ¿Ya leyó el contrato?-- asintió con la cabeza-- ¿que le parece? ¿Tiene alguna duda o queja?

-- Tendré que trabajar para usted por un año y medio?

-- Así es. Le aseguro Srta. Jones que en ningún lugar ganará el sueldo que yo le puedo ofrecer por ser mi secretaria. Dígame, ¿va a firmar el contrato o prefiere irse?

-- No le veo ningún problema a lo que acabo de leer. Así que sí, lo firmare-- sonreí y le entregué mi bolígrafo. Le indiqué donde tenía que firmar y eso hizo, firmar el contrato-- muchas gracias por darme trabajo señor.

-- Ahora que trabajarás conmigo deja de decirme señor, después de todo solo te gano por 13 años. Dime Daniel, solo Daniel-- sonreímos y tomé su mano para dejar un beso en ella.

-- Será un gusto trabajar para usted.

-- Y para mí será un gusto, tenerte a mi lado.

...TESSA...

Al parecer la suerte me está sonriendo después de todo, espero ser eficiente para el Sr. Ferrer, espero ser útil en esta vida de una vez por todas.

▪︎▪︎▪︎

Camino por un largo pasillo con la taza de café que me encargó el jefe. Al abrir la puerta de la oficina de él, por casi se me cae el café al toparme una vez más con sus gritos al regañar a sus empleados.

-- ¡Acaso nunca pueden hacer nada bien! ¡Todos son unos completos inútiles que no sirven para nada! ¡Larguense de aquí!

Los empleados salen de la oficina y me quedo a solas con el jefe.

-- Aquí está su café señor-- apenas alcanzo a hablar de los nervios. Dejo la taza sobre la mesa.

-- Muchas gracias Tessa-- toma la taza con una sonrisa que en vez de tranquilizarme me pone más nerviosa, ya que no entiendo porque tan de repente sonríe si hace un momento acaba de gritarle a los empleados.

-- De nada-- agacho mi cabeza.

El jefe se levanta y se sienta en el borde del escritorio.

-- ¿Te sientes agusta en la empresa, Tessa?

-- Sí.

-- Me encanta que seas muy eficiente. Hace dos semanas entraste a trabajar, y aprendes muy rápido-- sonreí levemente-- una mujer como tú necesitaba hace mucho tiempo. Inteligente, eficaz, con ganas de trabajar, y sobre todo, hermosa-- lo miré fijamente.

No puedo evitar sonreír, es el primer hombre que me dice que soy hermosa.

La puerta de la oficina se abre, y entra por ella una mujer muy elegante, hermosa.

-- ¿Madre? Qué haces aquí, no esperaba verte. No esperaba que vinieras a la empresa.

-- Hace un mes no ibas a visitarme, por lo que me tomé el tiempo de venir a verte como la buena madre que soy-- la mirada de la mujer se fija en mí-- ¿Y esta mujer tan linda quién es?

-- Mi secretaria-- le responde con la misma sonrisa.

-- Así que tu eres la secretaria que ha durado más de una semana, algo que las anteriores no hicieron. Encantada de conocerte linda, soy Maritza, la madre del amargado de tu jefe-- sonrío-- y tú eres...?

-- Tessa Jones.

-- ¿Como es que has podido soportar tanto tiempo a mi hijo?-- sonríe y se me escapa una risita.

-- El jefe me trata muy bien para ser sincera.

-- A parte de Kendra, eres la primera mujer que lo dice-- sonríe y ahora mira al jefe-- veo que estás en horario de trabajo. Espero y tengamos tiempo de hablar Daniel. Tu padre también te quiere ver.

-- Los visitaré cuando tenga tiempo, madre.

-- Hasta pronto linda, espero y nos volvamos a ver-- me guiño el ojo y con una sonrisa salió de la oficina.

-- Sabes Tessa?-- miro al jefe-- estás de suerte. La única mujer que le agradaba a mi madre era Kendra, y por lo que vi le agradaste también-- miró su reloj-- ven conmigo Tessa-- se levantó de la silla y saliendo de su oficina lo seguí por el corredor.

-- ¿Dónde vamos?

-- A almorzar. Supongo que tienes hambre, no?

-- Bueno...tenía pensado en no comer-- se detuvo y me miró fijamente.

-- ¿Por qué? ¿Estas haciendo dieta?-- me quedé en silencio-- Si me permites darte un consejo. Te ves muy bien...-- me miró de pies a cabeza-- así como eres. No cambies por nada del mundo-- me guiño el ojo y caminó delante de mí-- Vamos Tessa, nos espera un banquete-- sonreí y lo seguí.

...DANIEL ...

▪︎▪︎▪︎

Me encuentro solo en mi oficina, Tessa se acaba de ir hace unos minutos; me sentí muy bien almorzando con ese mujeron.

Me levanto de la silla y recojo mis cosas para regresar a mi mansión, hasta que Kendra entra a la oficina.

-- ¿Kendra? ¿Qué haces aquí?

-- Necesito hablar contigo. ¿Tienes tiempo o tienes prisa por regresar a casa?

-- Siempre tendré tiempo para ti.

Terminé de recoger mis cosas y junto con Kendra salí de la empresa.

-- ¿Que es eso que me tienes que decir?-- hablo sin dejar de manejar.

-- Se trata de tu secretaria.

-- ¿Qué pasa con Tessa?

-- Acaso no sabes lo que se rumorea en tu empresa-- la miré confundido-- Todos se preguntan por qué tu, Daniel Ferrer, el millonario amargado es otra persona con su secretaria.

Esos rumores no han llegado a mis oídos, será porque todos los días solo paso con la belleza de Tessa?

-- ¿A sí?-- reí.

-- ¿Te gusta no?-- me sonríe-- te gusta Tessa no?

-- Es una belleza de mujer, cualquiera se sentiría atraído ante semejantes curvas que se carga. Pues sí, me gusta mi secretaria-- empezó a reír.

-- ¿Es enserio wey? Pues me dá gusto saber que te gusta una mujer.

-- Pero yo no a ella-- se le borró la sonrisa-- necesito que me ayudes Kendra.

-- Cuenta con mi ayuda para todo. Pero, ¿en qué?

-- Ayúdame a conquistar a mi secretaria-- la miré fijamente-- ayúdame a enamorar a Tessa.

...DANIEL...

En el auto hubo una atmósfera incómoda y justo cuando estaba por romper el silencio Kendra estalla en risas.

-- ¿Cuál es la gracia?-- por más que trata de poner su cara seria, vuelve a reír.

-- Lo siento pero no tenía ni idea de que algún día me pidieras este tipo de ayuda. ¿Quieres que yo, te ayude a enamorar a Tessa? ¿Quieres que haga magia? Digo, ¿como yo te voy a ayudar en eso?

-- Eres mujer, y debes saber lo que a una mujer le gusta de un hombre.

-- Pues sí pero no, no sé. Nunca nadie me ha pedido este tipo de ayuda-- suspiró sin quitar la sonrisa-- pero está bien. Haré lo que me pides-- sonreí-- pero...! No te prometo que conseguiré que la tengas en tu mano-- miró su reloj-- Lo siento Dani pero debo regresar a casa, que tal si comenzamos mañana con tu conquista?-- dijo entre risas y solo asenti. Volví a encender el auto-- ¿Yo como cupido?-- nos miramos fijamente y reímos.

-- No cambias Kendra. No cambias.

▪︎▪︎▪︎

-- Ahora sí Kendra, dime, ¿que te llamó la atención de Theo cuando lo conociste? ¿que fué lo que te enamoró de él?-- empiezo con las primeras preguntas hacia Kendra para saber que puedo hacer para enamorar a mi secretaria.

-- Bueno...Las mujeres tenemos gustos diferentes la verdad, así que no sé. Lo que a mí me enamoro de Theo, fue...como me celaba, pero eso no quiere decir que debes ser un posesivo celoso, claro que no, la chica se puede hartar de ti. Otra cosa que me enamoró de Theo fué que...-- sonrió-- aunque lo rechazaba una y mil veces, el siempre me insistía para enamorarme.

-- Entonces quieres decir que tengo que ser un posesivo, celoso, insistente y no dejar que nadie se acerque y se meta con Tessa?

-- ¡No! Ay Daniel tu no entiendes-- suspiró-- lo que te quiero decir es que le demuestres con pequeñas cosas que le gustas. Ay es tan difícil darte consejos. Invítala al cine, a un restaurante, a almorzar. Pero si ella te dice que no, no insistas, o insiste un poco pero no tanto, se va a hartar de ti. Dile palabras hermosas, dale seguridad, hazle sentir cómoda cuando esté contigo. ¿Entiendes?

-- Claro, no es nada del otro mundo.

-- Otra cosa, no le grites a tus empleados así esté Tessa cerca o no. Tendrá un mal concepto de ti, pensará que eres un amargado, y aunque lo seas, hazle cambiar de opinión.

-- Eso es muy difícil, todos son unos ineptos que no saben hacer nada bien...-- arqueó una ceja-- pero trataré de controlarme.

-- Así se habla. Espero y se te haya quedado todo lo que te dije y no se te haya salido por una oreja...

-- Buenos días Sr. Daniel-- Abrió la puerta Tessa y dió pasos lentos hacia nosotros-- buenos días Srta.

-- Hola linda-- se levantó Kendra-- bueno yo ya iba de salida. Luego seguimos hablando Dani, por favor, no olvides lo que acabamos de conversar-- me dió un guiño y miro a Tessa-- Adiós linda, me encantaría que un día de estos tu y yo salgamos a pasear para conocernos mejor, ¿no crees?-- Tessa me miró de reojo y asenti con la cabeza.

-- Claro, me parece bien.

-- Bien yo los dejo-- me dejó a solas con Tessa.

-- Espero y no se moleste por haber llegado 10 minutos después de la hora en la que debía estar aquí. Pero el tráfico no me dejó...

-- No te preocupes. Pero lo que sí me va a molestar es que me sigas diciendo "señor" cuando ya acordamos en que me llamarias por mi nombre.

-- Lo siento pero se me hace de mala educación referirme de ese modo hacia usted-- sonreí.

-- Entonces solo dime jefe.

-- Claro...jefe-- sonreí.

El teléfono que está sobre mi escritorio empieza a sonar por lo que Tessa procede a contestar la llamada.

-- Jefe-- aleja un poco el teléfono de su oreja-- Lo quiere ver el Sr. Taylor-- me notifica.

-- ¿Taylor?-- arreglo mi corbata-- ¿Taylor está aquí?-- vuelvo a mirar a la belleza-- Que pase-- asiente con la cabeza y da mi respuesta. Deja el teléfono en su lugar y me vuelve a mirar.

-- Yo lo dejo para que pueda tener una charla tranquila...

-- Quédate, no hace falta que te vayas.

-- ¿Le puedo hacer una pregunta?

-- Ya me la estás haciendo-- río-- adelante, con confianza.

-- ¿Por qué está tan feliz por la visita de aquel señor?

Me levanto de mi silla.

-- Porque es mi primo. Y hace mucho tiempo no lo veía ya que estuvo en New York.

...TESSA...

Que coincidencia, Taylor también se llama el hombre del cual estoy enamorada a escondidas, y ese mismo hombre vive en New York.

Recojo los papeles que están esparcidos sobre el escritorio del jefe y mientras los dejo en su lugar, la puerta de la oficina se abre.

-- Cuanto tiempo sin verte, Daniel.

Esa voz...

Volteo inmediatamente y veo como el jefe lo abraza a él, al hombre que desde hace 4 años eh admirado, el hombre del cual estoy enamorada desde que estuve en el colegio y él en la universidad; Taylor, el millonario.

-- No sabes cuanto te extrañaba primo-- da el jefe una palmada en su hombro sin quitar la sonrisa de su rostro.

Quien iba a decir que mi crush es el primo del jefe.

-- Ya habrá momento para ponernos al tanto de todo, Daniel-- su mirada se fija en mí y mis nervios incrementan. Nunca tuve el valor para declararme a Taylor, así que el nunca supo de mi existencia.

-- Ella es mi secretaria, Tessa Jones-- me presenta el jefe y el solo me mira con indiferencia.

-- ¿Estás ocupado? ¿Llegué en un mal momento?

-- Ahora estaba por salir a una reunión.

-- Entonces que opinas si mañana nos encontramos para ponernos al tanto de todo lo que ha sucedido en estos cinco años que hemos estado separados?

-- Me parece perfecto. Entonces nos vemos mañana. Me dá gusto verte de nuevo Taylor. Vamos Tessa, tenemos que ir a la reunión.

-- Sí jefe-- agarré mi agenda y junto con el jefe salí de la oficina.

Aún no salgo de la impresión, vuelvo a ver a Taylor después de tres años, se ve más atractivo que la última vez, para tener 27 años está muy bien.

A causa de tantas cosas pasando por mi cabeza, me detengo al tropezar con la espalda del jefe que se detiene al sentirme.

-- Lo siento.

-- ¿Pasa algo Tessa?-- pregunta mirándome de reojo.

-- No jefe, ¿Qué podría pasarme?

-- Te noté extraña cuando viste a mi primo, ¿Acaso lo conoces?

-- No jefe, yo estoy muy bien. Solo que hace mucha calor y me siento algo asfixiada al cargar esta ropa.

-- Pues sí, hace bastante calor.

-- Si me permite, la reunión empezará en cinco minutos, tenemos que apresurarnos-- me señaló delante de él para que caminara al frente, y eso hice.

...DANIEL...

¿Tengo acaso la cara de tonto? Tessa está nerviosa desde que vió a mi primo, pero me pregunto ¿por qué? Espero que la llegada de Taylor no intervenga en mis planes de conquistar a Tessa, ya que de caso contrario tendré que usar medidas drásticas.

▪︎▪︎▪︎

-- Jefe, su café-- pone Tessa la taza de café que le pedí en mi escritorio. La tomo con una sonrisa sin dejar de verla, algo de lo cual nunca me cansaré. Le doy un sorbo al café y lo noto muy cargado de azúcar.

-- Acaso quieres que me dé diabetes Tessa?-- río dejando la taza a un lado y la belleza solo deja un mechón de cabello detrás de su oreja y se pone roja de la vergüenza.

-- Discúlpeme jefe, no sé que me pasó, déjeme traerle otro café.

-- No te preocupes. ¿Que pasa Tessa? Hace una semana estás nerviosa, algo distraída, ¿puedo saber por qué?

-- Por nada señor.

Hace una semana llegó mi primo, hace una semana comenzaron los nervios de Tessa, ¿Será coincidencia?

-- Por favor, permítame traerle otro café. Y discúlpeme, no volveré a ser distraída.

Ladeo con mi cabeza y ella toma la taza para después salir de la oficina.

-- ¿Qué es lo que te pasa Tessa?

...TESSA ...

-- Eres una estúpida Tessa, como le vas a poner 5 cucharadas al café, simplemente eres una estúpida-- me regaño en voz bajo mientras preparo otro café para el jefe.

-- ¿Acaso hablas sola?-- doy un brinco al escuchar la voz de la Sra. Kendra detrás de mí y ella solo ríe-- discúlpame si te asusté. Acabo de ver a Daniel, ¿como es eso de que últimamente estás distraída? ¿acaso es por un hombre?-- sonrío-- dime, ¿quién es el afortunado que te mueve el piso? ¿Cómo es?

-- Él es alto, guapo, con unos ojos hermosos. Pero nunca se va a fijar en mí.

-- Por qué dices eso? eres hermosa, una chica muy linda, inteligente, cualquiera quisiera ser como tú-- sonrío-- ¿Quién es aquel? Dímelo con confianza, yo soy una tumba-- me dió un guiño.

-- El primo del jefe-- su sonrisa se borra en cuestión de segundos y traga grueso.

-- No he tenido la oportunidad de conocerlo, pero sí, es un hombre muy atractivo. Mmm, linda, me podrías preparar un té, es que tengo ganas.

-- Claro.

-- Yo le llevaré el café a Daniel-- se alejó de mí con la taza de café.

...DANIEL ...

Kendra pone una taza de café sobre el escritorio y se sienta al frente de mí.

-- ¿Qué pasó, ya investigaste por qué Tessa ha estado extraña?

Juega con su cabello sin mirarme a la cara.

-- La verdad no me quiso decir nada. No la podía obligar.

-- ¿Ahora tú también estás nerviosa Kendra? Te conozco desde hace 9 años, ¿que ocurre? ¿Me estás ocultando algo? ¿Tessa te dijo algo, verdad? ¿Qué te dijo?

Me mira fijamente y asiente lentamente.

-- Pues sí...me dijo la razón de su comportamiento. Tessa está enamorada...-- sonreí--...de tu primo.

...KENDRA ...

La expresión de su cara cambia a una de coraje en cuestión de segundos. Se levanta de golpe dejando caer su silla y pone sus manos sobre la mesa.

-- ¿Mi primo?-- pregunta entre dientes. Vota todo lo que se encuentra en la mesa y dejando dos golpes en ella aprieta sus manos.

Nunca lo había visto tan molesto.

-- Así que todo es a causa de él. ¡Lo sabía! ¡Maldita sea, lo sabía!-- tira un florero al suelo y mi corazón empieza a latir anormalmente.

-- Daniel cálmate...

-- Nadie me la va a quitar...Tessa es mía y será mía para siempre.

Abro los ojos de par en par al escuchar lo que está diciendo. Nadie le puede quitar algo que no es suyo.

Ahora me doy cuenta de lo que está sucediendo con Daniel. Él no siente una simple atracción hacia su secretaria, él está obsesionado con ella, por eso es su comportamiento. Nunca pensé decir esto, pero Daniel no está bien. Su obsesión podría arrebazar los límites y eso podría traer graves consecuencias, para él y hasta para ella.