Cita para cuatro

Victoria Marsella 

Llego a recepción y un hombre muy amable entrega un juego de llaves, me confirma que Marlyn se encuentra en el apartamento y me dispongo a subir.

-Jefe, buenas noches. 

-Marlyn, te he dicho que fuera de los horarios laborales no me llames jefe. 

-Srta Victoria, lo siento. 

-Marlyn. Victoria se muestra molesta. 

-Victoria. Te presento a la Sra Cecilia de acuerdo a lo que me pidió. 

-Srta Victoria, buena noche. 

-Mucho gusto Cecilia. Bienvenida. 

-Gracias Srta Victoria,¿desea comer algo en este momento?

-Por favor, tengo mucha hambre. Marlyn, ¿Ya comiste?

-Oh si. 

-Tu madre ¿Cuando llega Marlyn?

-El viernes en la tarde. Ya agendè citas para su tratamiento. Marlyn se encontraba sumamente agradecida con Victoria por su benevolencia. 

-Marlyn, necesito que me agendes para mañana una cita a las 7 de la noche. 

-¿Què anotaciòn hago Victoria?

-Cena con el Sr Leandro Pardo.  Victoria suelta su móvil sobre el comedor  y su gesto no es de gusto. 

-Por supuesto, parece que no es de su agrado. ¿No es de Inversiones Pardo?

-Si, pero debo soportarlo.

Marlyn sintió curiosidad pero sabía muy bien que Victoria era una persona reservada aún en sus negocios. Así que decidiò no hacer preguntas, lo sabrìa si Victoria se lo manifestaba. 

Leandro Pardo

Luego de lograr una cita con Victori, Leandro se encontraba contento esta mañana en el trabajo, su amigo Alberto entró a su oficina y pronto su sonrisa lo hizo preguntarle còmo estuvo su dìa anterior. 

-¿Y?, ¿Cómo te fue ayer?, ¿Encontraste a Victoria?. Pero por què pregunto, si tu sonrisa lo dice todo. 

-La vi, estaba divina con su ropa casual pero lo mejor de todo aceptò una cita conmigo para esta noche. 

-Guau. Parece que esclarecieron lo de sus besitos. Alberto hizo una mueca con sus labios de manera graciosa 

-No, no quiso hablar de ello, la verdad es que la presionè a cambio de favores y no tuvo más remedio que aceptar. 

-¿La presionaste?. Alberto estaba confundido. -Pero, ¿qué hiciste?

Leandro explica detalladamente a Alberto todo lo que pasò y còmo había logrado la cita. Alberto no sale de su asombro ya que Leandro detestaba ser acechado y ahora era eso lo que hacía.. 

-Ya sé que me vas a decir.  Lo acepto, pero esa mujer es impredecible. Sè que le gusto, pero me aleja de ella. Eso no lo voy a permitir. 

De repente, el teléfono

 está sonando y Alberto decide contestar ya que Leandro se encuentra cerca de los ventanales. 

-Buen dìa. 

-Buen dìa, el Sr Leandro Pardo por favor. 

-¿Quien lo requiere? Contestó Alberto. 

-De parte de la Srta Victoria Marsella, soy su asistente Marlyn, llamo para confirmar la cita a las 7 de la noche.  ¿Podría confirmar?

Alberto había quedado cautivado con la voz de aquella mujer, al girar su cabeza a Leandro, éste le hacía señas afirmativas a la respuesta. Pero necesitaba algo más. 

-Me dijo que su nombre es Marlyn ¿Verdad?. 

-Por supuesto, ¿Por què?

Leandro le mira asombrado, Pero, ¿qué hace?, piensa por un instante. 

-Tiene Ud una bonita voz. Le parece bien una cita para 4. 

-¿Cómo? Preguntó Marlyn. 

Leandro esta vez hacía señas a Alberto dando una negativa,no quería chaperones. Sin embargo, no contaba que al otro lado de la linea Victoria tambièn le hacía señas a Marlyn para que su respuesta fuese positiva.Marlyn confundida  y en su mente un-WTF, simplemente contesta

-¿Sugiere una cita a ciegas?

-Nunca he tenido una, ¿Ud ha tenido una?

-Jamàs. Es algo loco. 

-Véalo como un punto a favor, Ud irà con su jefe y yo irè con mi amigo. ¿No le parece?

-Esta bien. Marlyn contesta luego de ver a su jefe haciendo muecas graciosas. -Allì estaremos. Entonces, ¿el Sr Leandro irá?.

-Por supuesto, él es el màs interesado. Una sonrisa sale de Alberto mientras Leandro hace un gesto de pocos amigos.

-Hasta màs tarde entonces. Contesta Marlyn. 

-Hasta màs tarde. Contesta Alberto.

-Siento mucho ponerte en esto Marlyn. Dice Victoria.

-No se preocupe, si Ud se siente tranquila lo haré por Ud. Además, Ud ha sido un excelente jefe. Esto no es nada. 

-Gracias de igual manera Marlyn. 

Entre tanto, Alberto y Leandro discutian com niños chiquitos por la acciòn de Alberto

-Eres un pasado Alberto, ¿Què?, ¿ de chaperon?

-No es tan malo. Además, espero que sea la chica que acompañó a  Victoria en la velada. Es muy hermosa. 

-Y qué tal si no es ella. Leandro lanza un dardo que causa efecto en Alberto. 

-No lo pensé. Dios santo, qué tal que sea otra. No lo pensé. 

-Sì. No lo pensaste. Leandro suelta una sonrisa ladina y burlona a Alberto. -Serà esperar a la noche. 

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