duda

Sofía

Todo parecía un sueño, yo vivir a su lado, no lo podía creer ese chico que veía cada jueves en el super era mi novio y había hecho el amor con el, porque esto para mí si era amor no solo fue una noche de sexo, con el me sentía tan segura, llena de paz, era todo muy diferente a las relaciones de pareja que conocí, el me respetaba jamás me lastimó, no era como mi padre.

Pasaron algunos días y Camilo era tan pasional, todos estos días no me dio tregua, trabajábamos un poco y volvía hacerme el amor, y mi cuerpo era un traisionero.

--- Camilo tienes que revisar estos informes--- dije estábamos en un pequeño despacho, cuando el comenzó a tocar mis nalgas.

--- Por favor Camilo estamos trabajando--- El seguía tocando mi cuerpo, incluso no se cómo llegué al escritorio cuando el estaba deslizando su boca entre mis piernas.

---- Camilo alguien puede venir---

--- Tienes razón, deja cierro la puerta con seguro--- y volvió a besarme, acariciarme, mi sexo pedía con desesperación el suyo, nos entregamos, mi boca decía detente pero mi cuerpo exigía más de él, era tan traisionero que siempre caía rendida a los encantos de Camilo, estos días habían sido maravillosos, cuando salimos del despacho después de nuestra sección de sexo, ya su familia nos estaba esperando en el comedor, estos días se me había olvidado algo pero no recordaba que era hasta cuándo estábamos comiendo el olor de la comida me desagrado, mi estómago estaba revuelto, sería lo que estaba imaginando, oh por Dios! olvide tomarme la pastilla que me dio Camilo, que torpe he sido, debo de ver cuándo será mi próxima menstruación, rápidamente cheque mi celular había pasado ya dos semanas desde que debió ser.

--- Te pasa algo Sofía te ves un poco pálida--- dijo Camilo.

--- Solo tengo un poco de sueño, sabes me a costado acostumbrarme al lugar--- dije.

--- uy, hermanito dejala dormir, se ve que si estabas muy necesitado--- dijo Mateo el hermano de Camilo.

--- Yo siento que se comieron la torta antes de tiempo--- dijo Ariana. Todos nos observaban, sentí como me sudaban las manos estaba muerta de nervios, con Camilo todo había sido tan de prisa que no sabía en qué clase de relación estábamos.

--- Ya Ariana, el no hacer nada te trae muy malos pensamientos, pequeña diablilla---

dijo Camilo.

--- Mira don perfecto que tus hijos te harán sacar canas verdes y serán más terribles que yo--- dijo la chica en tono de burla.

--- Pues creo que peor que tú no habrá y nosotros esperaremos un tiempo antes de tener un hijo--- dijo Camilo sentí como me cuerpo se enfrió sentí como una cubeta da de agua fría y si estaba embarazada y Camilo no quería ser padre que debo hacer, justo cuando iba hablar llegó una chica muy bonita, se veía que tenía mucha clase.