Capítulo 1. Nuevo mundo y el reino del Rey demonio, parte 3

Por las callas de nayvi, una figura caminaba con su espalda ergia y su pecho así afuera.

Su vista se desplazó de, derecha a izquierda, las calles piedragosas y las viviendas desgastadas y viejas, de este pueblocho.

(y pensar que yo, tengo que andar por acá)

Nir zaet — cobrador de impuestos del reino del rey demonio.

Caminaba altimo y orgulloso.

Aunque Nir, pensaba en este pueblo como, poca monta para alguien como el.

La verdad, le gustaba, aqui podía hacer todo lo que le viniera en gana.

Este era su propio territorio, su espacio personal.

Quién se lo podía negar ?.

Nadie podría negarse lo.

El era un "ser superior" .

A los ojos de Nir, todo está gente no era más que basura, que deberían arrodillarse ante el.

Dejarse pisar la cabeza por alguien como el.

Si.

Por el "ser superior" conocido como nir zaet.

Mientras que caminaba.

Nir vio un puesto de manzanas, al lado de la calle, aunque el puesto era sencillo y la madera donde estában las manzanas, parecía muy desgastada y agrietada, las manzanas le fueron muy apetecibles.

Se acercó al puesto, miró al vendedor y bajó su mirada, estaba buscando que manzana elegir.

tomó una manzana.

Sobra decir, que, Nir no pensaba pagar por ella.

Aún que esto era prácticamente robar, a nir no le importa.

El vendedor sólo podía agachar la cabeza, ya sabía quién era el, que mas podía hacer?.

— simplemente no podía hacer nada.

Nir volvió a mirar al vendedor, no se atrevía a decirle, algo como : "señor usted tiene que pagar por esa manza"

No podía, no es que nada lo detuviera realmente, solo sabía su posición ante alguien como nir.

Nir sonrio.

Nir hacia esto cada mes que venía a este pueblo, lo hacía simplemente. Pará recordarles su posición y así evitar algún levantamiento así el.

No era muy raro que aquellos que gobernaban atraves del miedo, Fueron desterrados una vez que los que eran sometidos, perdieran ese miedo y tomarán armas contra su opresor.

Era por eso que nir, tenía que hacer esto, tenía que recordarles su miedo así el, cada vez que podía y esas veces, solo era cuando podía venir a cobrar los impuestos del reino.

Aún si, si ellos se revelarán sería su palabra contra la de ellos y el ganaría, pero a consecuencia ya no sería mando para acá, sino a otros lugares y eso no lo podía permitir.

Aún así —

Se alejo del puesto de manzanas, con una sonrisa en su cara.

Hoy tenía un rombo en específico, normalmente, los impuestos del reino eran cada tres meses, pero, gracias a la 'gran guerra', eso cambió.

Dado a que el reino, estuvo a punto de quedar en banca rota, no le quedo de otra que :

—cobrar cada mes.

Claro está, los impuestos no bajaron ni subieron.

Si subirán el pueblo sería afectado y dado que tuvieron que sufiri una guerra, sería muy injusto subirlos, ya que para empezar, gran parte de la poblacion del reino había muerto, aunque en 10 años se habían podido repoblar, aun tenía deficiencias en cunto a personas se trataba.

Dado a que en vez de escasez de trabajo, había escazes de gente disponible para trabajar, claro está, este escho sólo ocurrían en las partes más afectadas de la guerra.

Lados como la aldea neyvi, no, tenía esos problemas, para ellos si era falta de empleo, y si los bajaran los afectado sería el reino, dado que, como estuvo cerca de la banca rato, la reconstrucción del reino, no podía llevarse a todo dar

Por esto, el monto de paga que fud estipulado para pagar en tres meses, ahora era dividido en los tres meses.

En pocas palabras, ahora los cuidados podían pagar el mismo monto anual, pero, por partes cada mes.

Pero.

Esto a su veces.

trajo consecuencias, no para el reino, si no para el pueblo, dado a que, les era muy diferente poder recolectar esa cantidad cada tres meses, que, pagar la suma por partes cada mes.

Y el peor problemas que tenían era —Nir zaet — el cobrador de impuestos.

Nir tenía la manzana en su mano, no la había probado, estaba lleno, solo la agarro para poder atormentar al vendedor y sentirse superior otra vez.

Ver como agachaba su cabeza, sin poder hacer nada, llenaba a nir de grandeza y felicidad

Y también, por que el era :

— el rey.

Quién podía refutar le algo a su rey? Acaso él estába robando?.

No.

Esto era una ofrenda, si, eso, todo lo que el agarra, aun si, no era suyo, ya era de él. Era lo menos que esa basuras podían hacer por alguien como él.Que les estába permitiendo tener el honor de ser gobernados por alguien "superior".

—por el

Con ese pensamiento, casi antes de llegar a su destino.

Sus ojos se posaron en un niño.

Estába al borde de la calle, acurrucado y con ropas andragosas y rasgadas.

Todo su cuerpo estába sucio y se podían notar sus huesos.

En sus ojos demacrados, no había rastro del resplandor de la juventud que debería mostrar un niño de su edad.

Sinedo sinceros daba mucha simpatía , cualquier persona normal, tendría simpatía por este niño, excepto una.

Pero —

Nir se acercó a él.

El niño, no se fijo en Nir, seguía mirando al piso, no, algo más allá que eso.

A nir le molesto que un mocoso como este, no tuviera en cuenta la precencia de su rey

Así que —

[tienes hambre?]

...***...

El niño levantó su mirada, por primera vez desde que nir había llegado y asistió levemente con su cabeza.

[quieres esta manzana? ]

El niño volvió su mirada a la manzana que este señor tenía en, la palma de su mano derecha.

El hambre que estába dormido, gracias a que su mente, se encontraba en el abismo de la desesperación, volvió.

Al fin podía comer, aunque fuera esta manza.

Por fin, tendria algo que comer.

Desde que sus papas lo adandonaron, no tenía forma de trabajar o sustentarse, además, solo tenía 8 años.

Habia vivido, no, sobrevivido todo un año después de que sus padres lo abandonaran.

Solo había sobrevivido de las bondades que algunas personas le habían mostrado, pero, ya nadie le había vuelto a dar nada, ya no podía, a duras penas y tenían para ellos mismos.

Desde hace una semana, no había probado bocado y ahora

Por fin.

Podía comer una deliciosa manza, su boca se hizo agua

[de acuerdo]

Nir se agachó para quedar a la altura del niño.

Luego con la manzana en la mano, la aplasto contra su zapato, parte de la manzana quedado en el zapato.

Nir se levantó y estendio su pie al niño.

El niño no podía entender esto.

Por qué este señor amable, que le hiba a dar de comer una manzana, la había aplastado contra su zapato.

[come]

Aunque era un niño, con esa palabra entendió todo, no era un señor amable, nadie amable tendría esa sonrisa en su cara.

El niño vio la manza, en el zapato del señor despreciable, está indecisión.

Pero.

Su estómago gruñó, le quemaba, un ardor que subía dese su estómago hasta su tráquea lo atacó.

Ante tanta crueldad, su mente se volvió a undirse en la desesperación.

— Por qué? Por qué mis papas me abandonaron? Por qué me dejaron a mi suerte? Por qué esto a mi? Que hice mal? Era por que salía a jugar con mis amigos? Era por que era un niño malo?.

Su boca se acercó al zapato del señor despreciable

(~kujajaja~así debe ser, bien echo niño ~kujaja), se deleitó Nir.

Cuando terminó.

El señor despreciable lo patio, tirándole a un lado.

Se acercó a él y alzó su pie, el niño pudo ver la sombra del zapato arriba de su cara y está bajando a su cara.

Dolor.

—Duele.

—¡Duele!.

—¡¡Duele!!

Lágrimas caían de sus ojos, sentía que su cabeza estába siendo aplastada, pensó que, en cualquier momento, sus ojos se iban a salir.

En su angustia y dolor, sólo puedo preguntar una cosa.

[por qué...?]

No pensó que, su pregunta iba a ser respondía, es mas, se la había echo para el mismo

Entonces —

[ah?, que por que?, mira niño, te daré una lección para tu vida, sabes?, yo puedo hacer esto por que soy mas fuerte que tu ~kujaja, en pocas palabras, ¡este es tu destino!, el destino de los ¡débiles! ~jajajaj~]

Ahora lo entiendo.

Es por que...

soy débil.

Ese era el destino de los débiles, ser pisoteado y humillado por el fuerte, aquel que tenía el poder podía cambiar esto.

Si hubiera sido fuerte, mis padres no me hubieran abandonado?.

Si fuera fuerte, mi destino sería diferente?.

Con esas preguntas, su conciencia cayó.

...***...

Satisfecho de atormentar al niño, que se había desmayado.

Nir volvió a dirijir su mirada a su destino, aún les faltaba una calles, pero, nir la podía ver como si estuviera frente al él.

La otra razón por la que le gustaba venir aquí.

Está vez...