Un encuentro incómodo

La vida de Jess no había Sido nada fácil en ningún aspecto, su vida amorosa era un total desastre desde que su prometido había muerto en ese accidente, y con él parte de ella, un camión de transporte perdió el control e impactó de lado el vehículo en el que viajaban juntos, hubo terribles consecuencias además del fallecimiento de Serge; su prometido.

Lo único que la mantenía a flote ere su trabajo en la empresa Salvatore, en la cual se había desenvuelto satisfactoriamente con sus exquisitos diseños en ropa femenina, y eso tenía muy feliz a su jefe, el Señor Alessandro Salvatore.

Tenía un buen empleo, Un equipo de trabajo excelente y un jefe que la apreciaba tanto como a la hija que nunca tuvo. El único problema era su prepotente hijo: Mattia. Realmente no lo soportaba, la trataba como si fuera invisible o al menos así estaba mejor por qué a los demás empleados los trataba de lo peor, llegaba con su altanería, siempre rodeado de mujeres hermosas pero más falsas que un billete de 3 dólares.

- Jess, Cómo estás hija?

La toma por sorpresa Alessandro en los pasillos de la empresa.

- Hola Don Alessandro, muy bien ahora que lo veo a usted. Cómo va ese resfriado?

- Bah! no es nada!

- De seguro no ha ido a ver a su médico verdad?

Jess lo mira directamente a los ojos entre cerrandolos y con sus manos en la cintura a forma de reproche y reprimenda.

- Es difícil engañarte muchacha!!!

- A la hora de la comida yo misma lo llevaré y no quiero un no como respuesta

- Está bien, Está bien! tu ganas Jess. Oye no has visto a Mattia por aquí? me dijeron que anda paseándose por la empresa con una de sus amiguitas...

En su cara hay un atisbo de desilución. Y Jess pone los ojos en blanco sin que Alessandro la vea.

***En verdad que es un malagradecido ese imbécil**** pensó Jess

- No, no le eh visto y verdaderamente no quisiera encontrarmelo, no me malinterprete pero su hijo es arrogante con todos y yo pues parece que soy inexistente...

- Tendré que ser duro con él, y estoy cansado de sus actitudes tan irresponsables y sobre todo ese trato que le da a la mejor diseñadora de esta empresa, que no se da cuenta que gracias a tu talento este barco sigue navegando??

Jess sonríe y agradece el tener a Alessandro como jefe, que más que eso lo considera como a un padre.

- Bueno, bueno, basta ya que hara que me sonroje, voy al taller para verificar cómo va la colección de esta temporada.

- Ve, ve, si ves a mi hijo por favor dile que tenemos que hablar.

Jess aprieta sus labios en una línea recta deseando no verlo ni por accidente.

- Claro, yo le diré si lo veo, y recuerde que lo veo para la comida e ir al medico, ahorita mismo le hago una cita.

Se aleja del pasillo y toma el ascensor que lleva al departamente del taller. Al abrirse las puertas ahí está la última persona a la que quería ver: Mattia, con una mujer exuberante, hermosa rubia pero con actitud de cualquiera...

-****Demonios!!!, tenía que encontrarmelo aquí y de esta forma?**** Pensó Jess en su mente.

Estaba besuqueandose y demás con aquella mujer, al abrirse el ascensor y ver qué Jess entra se reincorporan como si nada, Jess les da la espalda y le dice:

- Sr. Mattia, su padre lo espera en su oficina para hablar, es importante.

Y él le responde:

- Ajá, si. Dile que después de la comida lo busco... Tu eres, su secretaria verdad?

Sin girarse a verlo Jess y tratando de no exasperar se tras dicho comentario le contesta:

- No Joven no soy su secretaria, soy Jess Peterson.

Hace una pausa y añade:

- Solo soy la diseñadora de la empresa.

Por fin llega al piso a dónde se dirige y sale del ascensor, da unos pasos y se detiene, se gira y añade:

- Un placer como siempre joven Mattia.

La mujer con la que estaba Mattia suelta una risita estúpida, El ni siquiera se inmuta y mira fijamente a quien le ha retado con una simple frase.

*** Las puertas se cierran y dejan a un Mattia consternado y sin decir nada****

-Maldito malcriado, a ver si se te olvida mi nombre!

Jess por fin llega al taller de confección y revisa unos detalles de las telas y algunos accesorios que llegaron para el siguiente desfile.

- Jessita cómo estás mi niña?

Le dice la amable señora jefa de modistas y va directamente a abrazarla.

- Muy bien Charlotte. Cómo va el trabajo?

- Excelente niña!! solo nos falta agregar los botones al último boceto que me entregaste, el del vestido largo...

Hablan detenidamente sobre los últimos detalles de la confección y de la lista de las modelos que llevarán la pasarela.

Luego de terminar va a su oficina que se encuentra dentro del taller, coge el teléfono y marca la extensión del señor Alessandro.

descuelga el teléfono....

- Don Alessandro ya casi acabo aquí con los pendientes del día, unos minutos más y lo veo en su oficina, paso por usted cómo quedamos.

No tiene respuesta del otro lado y luego cuelga...

- Que pasó? tal vez estaba ocupado.

Jess no le tomo importancia y cuelga el teléfono, organiza sus cosas y toma su bolso, se dirige hacia la oficina de Don Alessandro.

Camina algo distraída con su móvil verificando los mensajes del médico que verá al Sr. Alessandro. Casi llega a la puerta y se detiene, toca y no hay respuesta... Toca de nuevo y al ver que nadie contesta se dispone a entrar cautelosamente...

- Don Alessandro vámonos, la cita es a las ...

Levanta su vista y ve que el que está sentado en el escritorio no es eso sr. Alessandro, si no Mattia, que la mira expectante con una mirada fría e indecifrable...

- Señorita Peterson, busca a mi padre?

Jess traga saliva y se queda inmóvil, pero solo por un segundo.

- Si, tiene una

Mattia la interrumpe groseramente....

-Una cita? qué, ahora es también la amante de mi padre?

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***