VENGANZA

SASHA

Mientras desayunaban Boris miraba a Sasha detenidamente, no había pronunciado palabra alguna en ningún momento salvo para pedir en la confitería.

De repente al niño lo asaltaron muchas dudas y deseaba encontrar las respuestas. Por su lado Sasha seguía con su acostumbrada frialdad, pero sin dejar de observar al pequeño con discimulo.

Sabía que lo poco que le había leído fue suficiente para despertar el interés en Nahuel y era conciente de que el resto simplemente lo haría cambiar de opinión sobre el Nacher.

Sonrió para sus adentros.

— Así que ¿tú solías vivir aquí? — preguntó Boris sin lograr contenerse.

— Así es.

— ¿Y qué pasó? — Sasha le clavó la oscura mirada al pequeño — Digo ¿por qué te mudaste?

— ¿Qué te hace pensar que me mudé?

— Si conservaras tu casa anoche no habriamos ido a un hotel.

— Buen punto Boris, pero quizás la tenga alquilada ¿no crees?

— Si, es posible. Pero igual te mudaste de una forma u otra ¿por qué lo hiciste? - Sasha miró por la ventana en silencio.

La lluvia caía fina y lentamente mientras las personas deambulaban inmersas en sus mundos.

— Anda, termina de desayunar que se nos hará tarde — dijo Sasha sin responderle.

Boris molesto obedeció.

Aquel sujeto nunca respondía sus preguntas y eso lo molestaba en verdad. Momentos después ambos salían del lugar para adentrarse en el interior del carruaje que se puso en marcha.

Sasha se tomaba su tiempo para dejar su galera, su bastón y sacar el diario. En ésta ocasión a Sasha no se le pasó por alto ver la actitiud del niño que miró el diario con gran interés. Sonrió para sus adentros. Suspiró profundo y empezó a leer.

NAHUEL

Tras acabar su show bajó del escenario entre furioso y excitado con una gran idea en su mente. Kurt se dirigió a Nadir, Yamato y Carmen pidiéndole que permitan a Gastón entrar y le habiliten uno de los cuartos.

A su vez le pidió a Nadir un cuchillo.

— ¿Qué tienes en mente Nahuel? — dijo algo asustada Carmen.

— Kurt, soy Kurt. Nahuel no está aquí.

— Como sea ¿qué piensas hacer? — Intervino Nadir.

Kurt sonrió con picardía siendo el centro de las miradas de los tres que lo rodeaban.

— Tranquilos, no lo voy a matar. Solo quiero hacerle pagar por lo que me hizo hace unos días atrás. Y de paso ustedes se beneficiarán económicamente.

Nadir le entregó uno de los cuchillos que él tenía mientras Carmen le abría uno de los cuartos y Yamato fue en busca de Gastón. Kurt entró al cuarto y se ocultó entre las sombras esperando al que me violó para vengarse en cuenta mía.

Gastón entró en el cuarto con su mirada de lujuria total, sabía que él aguardaba como animal salvaje. Kurt se dejaba ver desde la cintura para abajo.

Gastón se detuvo en el camino como dudando pero Kurt con voz sensual dijo:

— No seas tímido, desnudate pero cierra la puerta.

Gastón no perdió el tiempo para hacer el estriptis solo para Kurt sin imaginarse lo que le esperaba. No tardó en estar desnudo y acercarse a Kurt quien se le acercó dejandose ver a lo que el pelirrojo enloqueció de placer.

Kurt se dejaba besar, abrazar y lamer asi lo arrojó a la cama y sin que aquel que abusó de mí se diese cuenta kurt lo ató a los barrotes de la cama.

Luego sujetó el cuchillo y presionandolo en el pene del pelirrojo kurt dijo:

— Tú...maldito enfermo - la voz de Kurt era fría y sin emoción — Me violaste y yo era virgen pero ahora me vengaré de tí.

— ¿Qué? N-No...p-por favor....

— Me recuerdas a mí, así te suplicaba yo ¿lo recuerdas maldito? - Kurt apretaba peligrosamente más haciendo que Gastón temblase y empalidezca más aún. Esto fascinó a Kurt en verdad ya que deseaba vengarse de semejante loco — Te castraré asi se te acabarán las malditas ganas de joderme.

— No te...precipites Naruto

— ¿Por qué? — Kurt lamió una mejilla de Gastón con placer — Si te gusta

— ¡No!

— Parecería que sí.

— ¿Qué quieres? Pagaré lo que sea — sollozó Gastón temblando.

Kurt se alejó de él y abrió la puerta para que Nadir entre, éste al ver aquello quedó helado. Kurt nuevamente acercó el cuchillo a las partes intimas de Gastón quien temblaba.

— Lo castraré Nadir.

— ¡Nadir! — rugió Gastón — ¡Haz algo maldita sea!

— Gastón — dijo Kurt nuevamente — Sigues deseando violarme maldito enfermo. Me destrozaste por dentro y por fuera. En cuanto a tí Nadir...solo te interesa la plata ¿cierto? ¿Cuánto quieres pedirle a Gasgón? Vamos no seas timido que en estos momentos Gastón está generoso ¿cierto?

— S-Si ¡Pagaré lo que sea! ¡Lo que sea!

— Si no deseas pedirle dinero es cosa tuya, yo no quiero su dinero....me contento con castrarlo, después de todo me violó éste enfermo.

Kurt se disponía a castrar a Gastón pero Nadir lo detuvo justo a tiempo ya que sabia que era su oportunidad y ni lerdo ni perezoso lanzó la suma de dinero que deseaba tener.

Gastón le dijo a Nadir que le diga a uno de sus guardias que baje uno de los baules mas pequeños y se lo entregue. El de ojos violetas se fue y cerró la puerta.

Durante unos minutos esperaron, en los cuales Kurt creía que Nadir acabaria ayudando a Gastón sujetándolo y permitiendole a mi violador vengarse de Kurt.

Era un riesgo de estaba dispuesto a correr ya que necesitaba saber hasta dónde llegaria ese ojos violetas.

Pero para tranquilidad suya Nadir no lo traicionó, fue mas fuerte su avidez de dinero y se aprovechó de la situación.

Cuando le hizo saber que ya habia cobrado y no solo él sino todos los que trabajaban en el club, Kurt incluido, se suponia que Gastón debería ser liberado pero Kurt no quería soltarlo.

— Eres un violador, un asqueroso violador que nunca será juzgado por pertenecer a la clase alta, a la asquerosa aristocracia. Estás protegido por sus reglas, los conozco perfectamente, tú estás escudandote en tu mugroso dinero. ¿Por qué deberia dejarte ir de forma entera? — no le interesaba las excusas de aquel ni de Nadir — ¡Me violaste maldito y sé que te vengarás de mi por esto! Volverás a violarme ¿cierto?

En un determinado momento tanto Kurt como Gastón se miraron a los ojos y éste último pudo recién notar la gran tristeza y desesperación que Nahuel sentía.

El gran daño que le habia hecho a ese hermoso rubio. Y supo que estaba en todo su derecho al querer vengarse.

— Nahuel....tienes razón en hacerme esto — le dijo sorprendiendolo — Después de todo te causé un gran daño...sé que no sirve de nada pero....lo siento...

Aquellas palabras llegaron a Kurt permitiéndole detenerse y darle otra oportunidad. Suspiró hondo, se le acercó al punto que sus labios rozaron. Gastón sentia el delicioso aroma de ese rubio y su corazón se disparó.

— Gastón....no me violes de nuevo...sé que estás obsecionado conmigo pero...intenta respetarme cuando te diga que no.

Luego se incorporó y dejó que Nagato lo libere. Antes de irse le dijo al pelirrojo:

— Otra cosa, soy Kurt no Nahuel, gracias a tu asquerosa acción salí de su interior. Él aparecerá al amanecer y nada recordará de ésto, ni sabe que fue violado. — Ambos lo miraron asombrados — Si en verdad sientes lo que le hiciste te sugiero que no lo molestes. No te aparezcas durante el día.

Luego sin decir más nada se retiró al camerin a vestirse y quitarse el maquillaje para luego salir al club. Se colocó un vistoso pantalón rojo sangre y una camisa negra.

Zapatos rojos y se sujetó mejor la peluca roja. Su rostro estaba libre de maquillaje.

Cuando salió Carmén le entregó un bolso lleno de dinero, era la parte que le correspondia del pago de Gastón.

Kurt guardó aquello junto en sus cosas dentro del bolso que solia llevar. Al entrar al club vió a Gastón junto con su grupo de amigos.

"Maldito, me das asco".

Kurt desvió la mirada y se dirigió a la barra.

Necesitaba serenarse ya que a él le tocaba recordar ese horrendo momento días atrás. Pero él era Kurt y siempre tenia el control de todo.

— Hola, me alegra verte de nuevo Nahuel.

Su voz, aún a Kurt, logró estremecerlo. Cerró sus ojos apretando sus labios. Su salvador estaba allí. Transcurridos unos momentos los volvía a abrir y lo miró intensamente.

— Sasha...soy Kurt. Nahuel no está aquí.

— ¿Qué? — Sasha parecía confindido.

— Luego de semejante experiencia ¿creíste que seguiría igual?

— No pero....

— Si quieres verlo y hablar con él tendrás que venir durante el día — diciendo aquello bebió el trago que el barman le sirvió como el caballero de clase alta que una vez fue. — Si vienes a la noche solo me verás a mí...Kurt — Volteó para mirar a Sasha intensamente — Y si te soy sincero no me molestaría verte....Sasha.

— Yo....no se qué decir.

— No te preocupes, no estoy loco...

— Lo sé, son consecuencias de....

— Exacto — lo cortó ya que prefería evitar aquel recuerdo tan doloroso que noche a noche lo perseguía atormentándolo - Pero dime ya que estás aqui ¿por qué viniste?

—Vine a verte.

— A Nahuel le haces falta ¿sabes? Él te necesita más de lo que crees.

Sasha se sonrojó al oír ésto, eso le gustó y hasta lo alegró a Kurt. Aquellos momentos en que pudo charlar con él ayudaron a Kurt a relajarse. Luego de unos instantes Kurt dijo:

— Muy divertida la charla Sasha en serio lo digo, pero debo irme.

Cuando quiso irse, Sasha lo sujetó:

— No, aguarda....sigue conmigo por favor.

Kurt lo miró con curiosidad y sonrió ya que descubría que Sasha era similar a Nahuel. Les costaba a los dos expresar lo que sienten.

Pero decidió quedarse a su lado a charlar hasta casi entrado el amanecer.

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