Te Adoro

Cuando llegamos a casa de Bianca, ella me ayudo a bajar con mi hija, cambie de ropa a Antonia le di pecho y ella se durmió. Bianca me esperaba en el comedor, quería que le contara qué estaba pasando con nosotras, y de quien era la casa donde me fue a buscar, ese día me quedaría en su casa, teníamos mucho que hablar. 

Bianca: Bueno mi negra, necesito saber que ha pasado con ustedes, ya va un mes desde aquel día en que volví por mi celular. Ese día yo volví con la policía a la casa, pero estaba desolada, día tras día fui con la esperanza de encontrarte, pero nada. Un día hace como quince días, lo encontré a él en la casa estaba tomando y se notaba que había consumido algo, ya que estaba en otro mundo. Y bien ahora quiero que me digas que rayos ha pasado con sus vidas en estos días. Amiga entiende que me preocupo por ti y por eso necesito saber que les ha pasado y saber cómo poder ayudarlas. 

Suspire pesadamente, sabía que debía contarle a Bianca todo, que no debía ocultar nada, pero cómo ella reaccionaría?  

Yo: Bianca mira ese día cuando te estaba esperando, tocaron a la puerta de mi habitación, yo abrí pensando que eras tú, pero era ÉL. Me llevo a la casa del campo no quería que los vecinos me vieran o alguien pusiera la denuncia 

Bianca: Pero Negra porque no me llamaste? O contestaste las veces que te llame? Tu mamá estuvo acá hace una semana, está preocupada por no saber de ti, dime que es lo que está pasando. 

Yo: Bianca mira lo que pasó fue que el rompió mi celular para que nadie se pudiera comunicar conmigo, -seguí, relatando todo lo que había pasado desde el día que me fui al campo, a ratos miraba a una Bianca enojada y luego asombrada con lo que le contaba- 

Bianca: Ay no amiga no me digas que la casa a la que te fui a buscar fue la de Alex?  

Yo solo asentí- total ya había notado que le había agradado mi PRINCIPE AZUL. 

Bianca: Muero de amor por ese hombre tan maravilloso, pero Negrita piensa que siempre después de una mala viene una buena. Quizá es Alex, el amor de tu vida el cómo tú dices “PRINCIPE AZUL”. 

Yo solo me encogí de hombros, sabía que Alex hubiese sido importante, pero no, él merece una mujer mejor, una que sea solo para él, una que no esté marcada, como lo estoy yo. 

Pasamos la tarde conversando y cuidando de mi beba, para mí fue genial estar más tiempo con Bianca, ella ayudaba a ver las cosas desde otra perspectiva, es como mi hermana mayor, aunque no lo sea. 

Ya al caer la noche estábamos preparando la cena, cuando el teléfono de Bianca sonó. Yo que estaba más cerca conteste: 

Yo: ¿Aló, bueno? -no decían nada, solo se escuchaba una respiración- y corte la llamada. 

Nuevamente sonó el teléfono, y otra vez contesté yo 

Yo: ¿Aló, bueno? -ya iba a cortar, cuando lo escuche- 

NN: Me has hecho falta Pau, tú y la beba han sido la alegría de mi hogar, dime donde estas? Te necesito. 

No sabía si contestar, o colgar, y mi corazón quería salir de mi pecho con la velocidad que latía...  

NN: Aló Pau sé que estás escuchando, solo te diré que no voy a renunciar a ti. 

No dije más y colgué. -Alex mi Príncipe, tienes que ser feliz con una princesa, y yo no soy de ese tipo de mujeres. Dios te bendiga y cuide siempre y solo se feliz. - 

Llego a mi lado Bianca con mi beba en brazos 

Bianca: ¿Negra que paso? Quien llamo? 

Yo: Alex 

Bianca: Pero cómo? ¿Qué te dijo? Va a venir? 

Yo: Bianca mi amiga, solo te voy a pedir una cosa, pase lo que pase, jamás le dirás a Alex donde estoy, yo no soy para él. 

Bianca: -de mala gana- OK, ahora me vas a decir que es lo que piensas hacer con tu vida de aquí en adelante, supongo que por ningún motivo piensas volver con ÉL? Porque te aviso altiro que dejamos de ser amigas  

Yo: tranqui Bianca tengo más o menos pensado que voy a hacer y lo que menos quiero es pensar en el diablo. 

Bianca: muy bien pues entonces cuéntame qué vamos a hacer, porque de tu vida no me sacas ni a cañón. 

Yo: Tú sabes muy bien que por eso te adoro. - le cuento el paso a paso de lo que tengo pensado hacer, la verdad no es tan descabellado, solo es lo mínimo que se me ocurre para sacar adelante a mi princesa- 

Ya cerca de las ocho de la noche, vamos rumbo a casa de mi madre, sé que me quedaría más tiempo, pero la casa de Bianca queda cerca de la casa de ÉL, y es mejor estar lejos de ese tipo. 

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