Atrapada

Una risa nerviosa salió de la boca de Zara, tenía una mirada confundida, sus ojos comenzaban a nublarse por lágrimas que se resistían a salir.

En su mente se repetía que eso no era posible, ella había sido buena chica, siempre con la idea de que esa no era su familia y no causaría problemas pero que a pesar del desamor existiera respeto.

Ella no se quedaría más tiempo después de cumplir su mayoría de edad, buscaría a su madre y también su propio destino.

No sabía si tenía padre, ella nunca lo conoció, no escucho de él más que algunas historias que su madre le contaba con entusiasmo, el día que se conocieron, cuando él le propuso matrimonio, esas historias se las contaba con mucha emoción, cuando hablaba sobre el día que él se fue su mirada se nublaba.

Zara no tenía la certeza de que ese hombre existirá, por que de existir era difícil creer que se separarán si era cierto que se amaban tanto como su madre describía.

En su interior creía fielmente de su benefactor, el amigo de su mamá le ayudaría y tal vez en el futuro ella podría devolver de alguna forma su amabilidad Zara podía trabajar, no necesitaba venderse con nadie, no quería creer las palabras de Patrick pero en el fondo de su corazón existía la espina clavada por lo dicho por Patrick, que al hablar con ella y verla a los ojos su mirada parecía sincera.

- No, no te creo, no creo que Wendy o Tú papá me hagan esto, sé que tú mamá no me quiere pero no le haría nada a tu hermana, ¿cómo pudo venir a escoger ...? - la mente de Zara se puso en blanco.

- Zara, puedes creerme o no, tú me gustas desde hace mucho tiempo, y no quiero que te hagan daño, así que si piensas regresar mañana entonces yo haré lo necesario para que Jonson ya no te quiera.

Patrick se refería a que aún si Zara lo odiará tomaría su virginidad a la fuerza si era necesario, era la única salida que resultó para que Jonson desistiera de estar con ella.

Patrick se levantó de la cama y se paró frente a Zara, le ayudo a ponerse de pie estaban de frente uno al otro y la miro a los ojos.

- Tienes que entender, esta noche papá y mamá estaban dispuestos a vender a su propia hija, entonces piensa que tú eres menos importante que Dorothy, seguramente ambos persuadieron a Jonson para que te eligiera. Por favor no seas tan ciega -

Patrick tenía una mirada que reflejaba su preocupación de su interior, también frustración por la incredulidad de Zara.

Zara se dejó caer en la cama, simplemente se desplomó al sentir que la sangre de su cuerpo se evaporaba, sus piernas temblaron, le era imposible mantenerse de pie.

Patrick sintió su miedo y dolor, ella se apoyo en su pecho, él comenzó a sentir las húmedas y tibias lágrimas de Zara sobre su camisa.

Después de mucho tiempo Zara se recompuso, comenzó a hacer su maleta y la escondió al día siguiente se levantaría un poco más temprano que los demás, en el lugar donde trabajaba tenía un locker, Patrick llevaría su maleta hasta ese lugar y la guardaría, Zara regresaría después de la escuela, debería ser un día feliz por terminar la escuela media, pero el futuro ahora se volvió incierto.

Cuando amaneció pasó algo que Patrick había predicho podía suceder, su habitación estaba cerrada con llave por afuera, no podía salir.

Corrió a la ventana, tal vez podría escapar desde ahí, pero se encontró con que la persona que se encarga de la jardinería estaba colocando maderos para clausurar la única salida que quedaba.

Se aterrorizó, ¡era cierto, lo que le dijo Patrick era cierto, ahora no la dejaban ir !.

Se abalanzó a la puerta y trato de mover el pomo, pero sólo conseguía que la se moviera algunos milímetros, golpeó y lloro frente al gran rectángulo de madera.

Estuvo por mucho tiempo frente a la puerta sus gritos eran desgarradores.

- ¡Ayuda !, ¡Por favor !, ... ¿Que hice yo para merecer esto ?, Por favor no me hagan esto ...

Zara suplicaba mientras lloraba y golpeaba la puerta que no cedía ante su ataque frenético.

Después de un rato se escuchó que desde afuera alguien comenzó a golpear la puerta con una hacha.

Enseguida la puerta comenzó a romperse, Zara miraba con emoción desde el interior de la habitación, cuando por fin vio a Patrick.

- No podemos solo hay una forma.

- ¿Estás seguro que solo hay esa forma? - ¡Vámonos !, ¡Mientras estes conmigo yo te protegeré !.

Ambos chicos comenzaron a salir entre los escombros de madera frente a la puerta, Patrick llevaba la maleta de Zara y le tomaba fuertemente la mano.

Alguien del personal de limpieza aviso a Adolfo que había salido a trabajar y que se encontraba en su oficina lidiando con las facturas por pagar, Dorothy aún seguía durmiendo mientras que Wendy había salido de compras.