Capítulo 3

"TERMINAMOS"

—Él te  buscó por mucho tiempo —dijo Elena a su hija quien sostenía la foto de Marco —, estaba muy mal, su vida era un desastre que pensé que moriría tirado en algún lado.

—Hanna lo cuido incluso cuando él era muy grosero con ella, fui testigo de cuanto él se negó a volver a querer a alguien.

Elise no quiso seguir escuchando y con la foto en mano salió de su casa, caminó por muchas cuadras sin rumbo hasta llegar a un café de aspecto muy caro.

—Señorita ¿Tiene alguna reservación? —preguntó el recepcionista.

—No, solo quiero un asiento.

—Cerca de la ventana —sugirió dejando que pasara.

Elise hizo caso sentándose ahí.

—¿Qué va a ordenar?—preguntó la camarera.

"De momento me di cuanta que no sabia en nombre exacto del café, cada que iba a un café Marco era quien ordenaba"

—¿Huh? Yo... ¿Un capuchino? —contestó Elise con una sonrisa nerviosa.

Elise pasó un buen momento en silencio observando a la nada, tenia que aclarar sus pensamientos, era consiente que Marco no era culpable.

—Pero yo tampoco tengo la culpa... Yo no te dejé  por que quise.

Con algo de nervios se acercó al teléfono del café y marcó el numero de Marco esperando que siguiera siendo el mismo que conocía.

—¿Hola?— respondió al otro lado del teléfono.

Elise no dijo nada.

—Si es una broma voy a colgar...

—¡Espera! soy yo, Elise —respondió rápidamente.

Marco suspiró con pesadez.

—¿Pasa algo?—preguntó.

—Estaba recorriendo la ciudad y de casualidad estoy en un café cerca de tu trabajo, pensé que podríamos vernos...

—Ahora estoy algo ocupado, además no creo que sea correcto ahora.

—Por favor... tu y yo tenemos una historia, no creo que deba terminar así, por favor—susurro Elise con la voz temblando —Ven conmigo.

después de un largo silencio, Marco contestó.

—Creo saber que café es, iré en un momento.

Efectivamente Marco llego rápido, a la distancia era el marco que ella conocía, solo un poco mayor.

"¿Cuando dejaste tu pelo corto? ¿Qué paso para que empezaras a usar trajes? ¿Ya no usas pulseras coloridas? ¿Aun te gustan las motos? Yo creo que no se nada de ti ahora..."

Marco se acercó a ella con  un café en mano.

—Este es tu café favorito, Mocca con chocolate.

Elise sonrió ante ese gesto, después e todo Marco seguía siendo amable incluso sin notarlo.

—¿Qué es lo que querías hablar? —preguntó Marco.

—Tu novia... ¿Cómo la conociste?

—No creo que sea necesario...—dijo Marco queriendo evadir esa pregunta, sabia que solo seria doloroso para ella.

—Quiero saberlo —acepto Elise con una media sonrisa.

—La conocí en una cafetería, normalmente era muy insistente incluso cuando solo la trataba mal, finalmente su esfuerzo rindió frutos, empezamos a salir.

—¿Pero qué pasa conmigo? Nosotros... ¿Terminamos? si es así dímelo directamente, no quiero malinterpretar nada y como favor especial... si aun me quieres por favor no me des esperanzas en lo absoluto. Ahora mismo estoy siendo fuerte porque se que no lo seré después de irme de aquí...Finge no conocerme o verme, si te llamo por favor no seas amable con migo...

—Elise... yo lo siento, no puedo dejar a Hanna solo porque volviste, no soy ese tipo de persona. Yo... acepto que lo nuestro termino el día que te enterré. Ahora los dos tenemos una vida y tu una muy larga por vivir, te pido que lo hagas sabiamente y con mucho cuidado...—dijo Marco con una sonrisa triste.

—No debes ser muy confiada, normalmente nunca te fijas al caminar, siempre te quedas dormida al viajar, tienes que vivir a tu manera... Yo siempre desee vivir a tu lado y quiero que sepas que te amé hasta el final, incluso ahora se que te quiero y siempre que necesites algo puedes venir a mi, te puedo dar todo menos una vida juntos.

Elise limpio sus lagrimas asintiendo, era su despedida con Marco.

—Entonces realmente este es el final...Gracias Marco, por todo. Probablemente te llame diciendo que me arrepiento y quiero estar contigo, pero solo será por unos años, después me haré a la idea de que simplemente no eres mío... Yo solo quería decir esto, adiós y espero que seas feliz, se que Hanna es buena persona.

Elise no quiso escuchar mas y se fue, salir se sintió como si su corazón se hubiera quedado en ese café frente a Marco, no sabia si llorar o reírse de lo desafortunada que era.

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