Pequeño hermano

Alexander: "Hermana ¿Qué es esa criatura?"

Leila: "Él se llama Nero, ven saluda" [llama a Nero para que se acerque y esté obedece]

Nero: "Hola" [dice esto en un tono neutro]

Alexander: "Wow se puede ve hermoso, ¿hermana me dejas acariciarlo?"

Leila: "Depende de él ¿Nero qué opinas?"

Nero: "…" [se acerca a la mano de Alexander y se deja acariciar]

Pero no contaba con que Alexander lo levantara y lo llevará en brazos

A decir verdad Alexander era el hermano más pegado a Leila y al contrario de ella, a él no le gustaba mucho la idea de entrenar junto a los caballeros, apenas es un niño así que debe estar asustado, si bien él también tiene la carga de aprender a manejar la espada por tradición, no sería malo que él desempeñe otras actividades distintas a las acostumbradas, se podría decir que su comportamiento era más parecida a la de su madre, siendo ella un poco más pacífica de entre todos los miembros de la familia

Ya Leila había roto el molde de crianza que planeaban imponerla desde que ella era tan solo una niña pequeña, esto lo atribuía a que se la pasaba mucho tiempo rodeada de otros chicos y por eso su comportamiento de cierto modo lo aprendía de ellos.

*suspiro* Recuerdo los viejos tiempos cuando me puse un pantalón y me regañó la maestra de etiqueta, también por llegar tarde a clase de baile, bueno cada vez que no llegaba a la hora acordada saltaba por la ventana, no era muy complicado solo debía tener cuidado pero si era unos pisos más alto solo debía correr por los pasillos y brincar las escaleras, esa era la única forma que tenía para intentar legar a tiempo, pero ahora solo trato de organizar mi horario

Pero no creo que Alex sea como yo, de hecho a sus cortos 6 años tenía su récord impecable, bueno no tanto, se podría decir que le hacíamos jugar un rato con algunos hechizos nuevos, pero nada que lo dañara; claro está que luego madre me regañaba pero ella sabía que nada malo iba a pasar.

Alexander: "Hermana ¿yo también puedo tener uno?"

Leila: "Quizá cuando seas mayor"

Nero: "Los del clan felino apreciamos que nuestros amos sean entuciastas"

Leila: "Bueno me voy ya es hora, avisas a mamá que estaré en la torre"

Alexander: "Ten cuidado hermanita" [se acerca le da un beso en la mejilla a Leila y a Nero uno en la frente]

Cuando Alexander se terminó de despedir volvió rápidamente a casa, mientras Leila acomodaba su morral frente a ella aparecieron unos pequeños destellos como chispas y de estas salió una persona con cabello marrón ligeramente platinado y unos ojos amirillos que brillaban junto a las chispas.

Charleston: "Vas tarde Lei"

Leila: "¿Cuándo aprendiste a aparecer asi?"

Charleston: "Es que la señorita ocupada no tiene tiempo para mí y mis clases particulares que estas en un nivel más bajo"

Leila: "Esta vez si tengo tiempo, que te parece quedarnos una hora más después de clases"

Charleston: "Bien entonces ¿te llevo?"

Leila: "¿Seguro que puedes llebarnos?"

Charleston: "Tu solo confía en Lynx ¿cierto?"

Lynx: "nyang~ si puedo"

Nero: [se subió encima de Carl y se acomodó en su morral al lado de Lynx] "nya~ vamos"

Leila: "Bueno vamos"

Charleston extendió su mano y Leila la tomó, él la jaló y la sostuvo por la cintura posando el brazo de Leila sobre su hombro, esta acción rápida hace que Leila se desoriente por un momento pero pronto vuelve en sí, pensando que es alguna broma pesada que quiere jugarle, así que para no perder contra él, eleva sus brazos y los entrelaza en el cuello de Charleston, esto lo termina sorprendiendo pero antes de hacer algo más usa un hechizo y se transfieren a la torre.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***