Capítulo 14

ELIZABETH

Vamos en el auto, yo sentada en el asiento del conductor. Miro hacia delante, estoy enojada con Sean, no tenía razón para tratar así a su propio hermano sin razón alguna...

– ¿Por qué no me dices nada? –*me mira*

– Dijiste que no quería que te hablara, Sean

*Suspira*– Te dije que no quería que me regañaras, no que no me hablaras

– ¿Por qué tratas así a tu hermano? ¿Cuál es el motivo?

– Y estás haciendo lo que te pedí que no hicieras...

– ¡No te estoy regañando como dices, Sean!. Te hice una pregunta, ¿que te hizo Connor?

*Suspira*– Es que no me gusta que ande detrás tuyo como perro en celo

– ¡Basta!. Connor no tiene ninguna intensión conmigo, créeme está enamorado de otra persona –*me cruzo de brazos mirando por la ventana*

– ¿Cómo sabes eso? ¿Eh? –*me mira enojado*

– Hablamos, él me contó sobre una mujer de la que está enamorado y créeme que no soy yo

*Aprieta el volante*– Quiero que te alejes de él, ¿entiendes?. No le hables, no dejes que se acerque a ti

– ¿Perdón? ¿Quien te dio ese derecho?

– ¡SOY TU NOVIO, ELIZABETH! –*me grita y golpea la puerta del auto*

*Me sobresalto*– ¡Eres mí novio no mí padre! ¿Entiendes?

– ¡No, no soy tu padre! ¡PORQUE ÉL ESTÁ MUERTO! –*me grita*

*Lo miro helada*

*Cierra los ojos*– Perdoname, amor. No quise...

– Deten el auto, Sean... –*le digo*

– Elizabeth, perdón no quería hacerte...

– ¡QUE DETENGAS EL AUTO! –*golpeó el tablero*– ¡DETEN EL AUTO!

*Frena el auto*– Elizabeth.... espera

*Bajo del auto*– Eres un inmaduro, Sean. Tu celos llegaron muy lejos –*cierro la puerta con fuerza*

ELIZABETH

Se pasó de la raya está vez, sus celos por Connor llegaron muy lejos hasta hablar de mí padre, él no sabe nada y aún así se atreve a hablar de él. Llego a mí apartamento con cero ganas, caminando, veo mí hermana y a mí... Madre, que raro...

– ¿Mamá? ¿Que haces aquí? –*la miro*

– Vine a verte, Elizabeth... –*me dice con voz ahogada*– Te extrañe –*me abraza*

*Miro a Helena extrañada*– Yo también mamá, te extrañe mucho. Pero no nos quedemos aquí, vayamos adentro

Entramos a mí apartamento, mí mamá no ha dejado de abrazarme y llorar, yo también libero algunas lágrimas. Luego hablamos un poco, parece sorprendida de que tenga una relación con Sean, no enojada ni nada de eso sino más bien preocupada...

– Aamm... la verdad es que no me esperaba eso, hija –*me dice mirándonos a ambas*

*La miro tristemente*– ¿No estás feliz, mamá?

– Si, bueno estoy feliz por ti. Pero, ¿tu eres feliz?

*Sonrío*– Si, soy feliz con él, mamá, llevamos dos meses de novios y me siento bien con él. Lo amo y él a mí

– Eso es lo importante, hija. Pero no voy a negar mí preocupación por esto

*La miro*– ¿Por qué te preocupas, mamá?. Ya te dije que soy feliz con Sean

– Si, entiendo eso. Pero es un hombre poderoso, que viaja mucho y que viajará más, conocerás a miles de mujeres hasta la más bellas

*Helena la mira*– ¿Insinúas que puede que Sean le sea infiel a mí hermana en sus viajes? ¡Por favor, mamá!. No empieces

– No estoy insinunando eso, es una típica preocupación de madre... –*me mira*– Hija, se que no fui una madre compañera contigo

*Suspiro*– Eso ya quedó en el pasado, mamá...

– Está bien, pero ahora como madre déjame darte un consejo por experiencia... Si es que el señor Carter llega a serte infiel y lo hizo consiente de lo que hacía. Aunque te suplique de rodillas, te prometa la luna y las estrellas... no lo perdones

– Mamá... –*le susurro*

– No lo hagas, Elizabeth. Porque vivirás la vida entera insegura de cada mujer que cruce tu camino cuando estés con él. Pensaras: "¿Le gustará esa? ¿me engañara con aquella?". Y no quiero que vivas infeliz por eso

*La miro*

SEAN

Al día siguiente regreso a la empresa. Anoche intente hablar con Elizabeth por teléfono y no me contestó, entiendo que cruce la línea hablando de su padre pero si quiere que lo solucionemos tenemos que hablar y no evitarnos. Decido ir a su oficina...

*Entro*– ¿Podemos hablar, Elizabeth?

– Estoy con mucho trabajo, Sean. Podemos hablar más tarde

– No, hablemos ahora. Deja el trabajo para después –*le quito los archivos de la mano*– Ayer te llamé diez veces

– Si, pero necesitaba tiempo, además mí madre y hermana estaban conmigo

– Que bueno. ¿Que me dices? ¿Almorzamos juntos?

*Suspira*– Sean, necesito tiempo, ¿si?. Ya hablamos de esto, ya no te disculpes solo tiempo

– ¿Entonces me perdonas? ¿Si? –*le suplico*

– Estás perdonado entonces –*dice riendo*

– ¡Genial!. Ahora quiero hacer que me perdones, ¿que te parece si te saco a cenar esta noche?

– ¿Está noche?. Aamm... bueno, está bien

– ¡Genial, Elizabeth!. Hoy hago turno doble aquí tengo que organizar unas cosas, pero tu ve y arreglate, ponte linda y pasaré por ti –*le doy un beso y me voy*

ELIZABETH

Me alegra perdonar a Sean, parece que él de verdad está arrepentido y quiere hacer las cosas bien, lo amo de verdad lo hago, él también me ama lo sé.

Las horas pasan rápido, salgo para irme a arreglar a lo de Jane...

– Me alegro que por fin hayas perdonado a Sean

*Suspiro*– Si, se disculpo. Aunque no estaba en mis planes perdonarlo

– Lo bueno es que lo hiciste, ahora te vamos a poner súper linda para esta noche

Jane me da un hermoso vestido blanco al cuerpo, hasta sobre la rodilla con un pequeño corte en la pierna y un escote bastante pronunciado

Me gusta como me queda, me hace ver bien, creo. Me miró al espejo mientras me pongo el pequeño collar y los aretes...

– Te ves hermosa, Lizy. Me sorprende el cuerpo que tienes

*Le sonrío*– Ay... No es para tanto, Jane.

– Es la verdad, amiga mía... Estás hermosa –*dice ella*

– Bien, estoy lista. Solo tengo que esperar a Sean, dijo que vendría a las 21:30

SEAN

Ya casi termino todo en la oficina, sino dejaré algunas cosas para mañana pero terminaré todo lo que pueda. Seguro que ya no hay nadie en la empresa, solo el guardia de la entrada que espera a que yo salga para cerrar todo...

– Bueno, hasta aquí lo dejo –*me levanto y me veo en el reflejo de la ventana*– Bien... –*tocan la puerta*– Pasa, ¿eres tu Adrew?

*Entra*– No soy Adrew, señor Carter. Perdón por la hora

*Me giro para ver a Emma*– ¿Señorita Emma? ¿Que hace aquí?

– Es que su madre me envió por unos papeles que necesita mañana –*me sonríe*

La miro fijamente es toda una belleza, sus ojos son hermosos y ni hablemos de su cuerpo. De nuevo esa sensación, trago saliva con dificultad...

– Aamm... ¿Que papeles necesitabas? –*le pregunto*

– Me dijo que eran sobre un contrato, que se los había entregado a usted –*me dice*

– No lo recuerdo pero permíteme buscarlos –*abro los cajones*

*Se acerca a mí*– Usted es verdaderamente atractivo, señor Carter

*La miro*– ¿Señorita...?

*Se para frente a mí*– Lo que escucho, me parece muy guapo, Sean Carter. ¿Yo no le parezco guapa?

– Emma... –*susurro*– No viniste por ese trato, ¿no...?

*Niega con la cabeza*– No... –*pasa su mano lentamente por mí torso*– Vine por otro tipo de trato de usted...

*Me acerco a su rostro*– Estás jugando con fuego

– Quizás quiera quemarme, señor Carter... Me encanta jugar –*me dice seductoramente*– ¿Que va a hacer señor? ¿Viene a jugar conmigo?

– Acepto su juego, señorita... Esto no saldrá de aquí –*la acerco a mí y la beso*

Mí hermano tenía razón, no sirvo para los noviazgos, no sirvo para ser fiel...

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