Cao 14

'Johan'

Los días en Tokio se habían finalizado por lo que nos encontrábamos volviendo a Los Angeles; No podré jamás olvidar la hermosa despedida de año que dimos en compañía del abuelo, quien nos invito a cenar en un hermoso campo para que podamos apreciar lo precioso de la noche en aquel lugar.

No se como le diré a Jey el motivo de mi partida pero.. no creo que le afecte mucho, pues no ha vuelto a escribirme desde aquella ves y pese a todo.. él también se casará pronto por lo que considero necesario apartarme de él para poder acostumbrarme a su ausencia.

Apenas aterrizó el avión, Williams se ofreció a llevarme a casa para recoger mis cosas y pese a que me negué, él dijo que debía de aceptarlo ya que oficialmente soy su prometida y él debería de encargarse de mi desde ahora en adelante.

- ¿Que sucede? estas muy callada. - dijo Williams y voltee a verlo.

- Es que.. hay algo que debo decirte para que no te sorprendas a el momento de llegar pero.. no encuentro la forma de hacerlo. - contesté y él tomó una de mis manos y la acaricio con ternura.

- Sea lo que sea que tengas para decirme lo entenderé, si no quieres mudarte hoy mismo puedo esperar hasta que te sientas cómoda y segura. - respondió y lo vi por un instante para luego suspirar bajando mi cabeza.

- Williams, no vivo sola en el apartamento al que nos dirigimos, llevo años compartiendo espacio con mi mejor amigo. - contesté y no obtuve respuesta de su parte. Levante mi mirada para saber la causa de su silencio y lo encontré viendo al frente sin decir nada. - Williams..

- Es el hombre del cual estas enamorada ¿verdad? - preguntó volteandose a verme y asentí. - Ya veo.

- Él.. va a casarse dentro de poco y por ello..

- Por ello crees que lo mejor es venir a vivir conmigo, para acostumbrarte a la idea de perderlo. - *comentó interrumpiendome y no supe que decir. *¿Se sentía herido por esto*?* - Johan, no estoy molesto contigo si es lo que piensas, comprendo el que te llegaras a enamorar de alguien más y no puedo cuestionarte nada de eso.. a fin de cuentas, no llegue antes que él.

- Williams, quiero intentar amarte, quiero olvidar estos sentimientos que siento por él y entregarte los a ti pero.. tengo miedo de no lograrlo, de lastimarte y..

- ¿Cuantas veces has pensado en él cuando estuvimos en Tokio? - preguntó dejándome sorprendida, la verdad es que no recuerdo haber estado pensando en Jey, ni siquiera he recordado saludarlo en las fiestas.

- La verdad es que.. no, no recuerdo haber pensado en él. - *contesté mirando mis manos con asombro. *¿Acaso no piensas seguido en la persona que amas cuando esta ausente? si la respuesta es si, ¿Porque yo no lo he hecho*?*

- Entonces no puedo dejar de intentarlo, si no has pensado ni una sola ves en él cuando estabas conmigo.. no pienso darme por vencido. - respondió con una sonrisa para luego acercar mi rostro al suyo y besar tiernamente mis labios, correspondi de inmediato pasando mis brazos por su cuello y profundizando el tierno beso.

Al llegar a la puerta de mi hogar, ambos bajamos de él carro y lo invité a pasar para luego llevarme una sorpresa, el lugar estaba completamente vacío.

- Bueno, creo que no tendré la posibilidad de conocerlo aún. - comentó Williams y asentí para luego invitarlo a sentarse mientras yo recogía todas mis cosas. - ¡Johan! - dijo desde la sala.

- ¡Dime! - respondí desde la habitación.

- ¿¡la portátil que esta sobre esta mesita es tuya!?- preguntó y salí de la habitación para luego asentir. - entonces la guardaré.

Volví a la habitación para seguir empacando mis cosas, realmente tenía mucho que llevar y si no fuese por la ayuda de Williams, no creo que hubiese terminado rápido.

Al salir de la habitación con todas mis cosas, me dirigí a la cocina para tomar la taza que mi padre me había regalado de niña pero luego de tomarla y girar.. me encontré encontré una sorpresa.

Era una nota de Jey.

...Johan:...

Aprovecho tu ausencia para mudar mis cosas a la casa en la que viviremos con Yuli, se que no es la mejor forma de decir adiós pero.. no tenía el valor de hacerlo personalmente, te enviare la invitación a la boda por correo y realmente deseo que estés presente en ese día importante para mi. Se y comprendo que Yuli no es de tu agrado pero.. me gustaría que asistieras por mi.

......Gracias por los mejores años de amistad, siempre podrás contar conmigo cada ves que me necesites.......

......Te quiero Johan, con amor..🌸 Jey. 🌸**......

Me era inevitable no sentirme triste al leer esta nota pero la verdad de todo es que también me marchaba, dejando atrás este hogar en el que fui feliz, en el cual calle por mucho tiempo lo que sentía por él.

Volteo mi mirada con lagrimas en mis ojos y veo a Williams parado en la puerta con sus brazos abiertos, dándome un motivo para que corriera a él y llore descargando todo el dolor que mi corazón guardaba.

...

'Williams'

Me dolía en el alma ver la tristeza cargada en los ojos de Johan, pero más allá de que quisiera.. no podía odiar a ese sujeto por dos razones, la primera, nadie está obligado a sentir lo que no quiere, es el corazón quien elige a la persona con la cual estamos predestinados y la segunda, si él hubiese tomado importancia a los sentimientos de Johan, yo no tendría la oportunidad que tengo hoy.

Quizás es egoísta de mi parte pensar así pero.. yo solo quiero hacerla feliz y darle el amor que él no le ha dado.

- Llegamos señor. - anunció Louis, mi chófer por lo que asiento y salgo del carro para luego extenderle mi mano a Johan quien la toma y baja de el vehículo quedando totalmente asombrada.

- ¿Esta es tu casa? - preguntó con asombro por lo que sonreí y la envolvía con mis brazos desde atrás.

- Esta es NUESTRA casa. - respondí y ella se giró a verme. - Aquí vivirás una hermosa historia de amor conmigo, aquí te haré feliz cada día de tu vida y te daré una razón para que me ames.

- Williams..

- No. - dije colocando una mano en su boca.- No digas que agradeces el gesto pero que no sabes lo que pasará, no sigas negando lo que puede llegar a pasar Johan, solo deja que el tiempo me de la oportunidad de lograrlo. - ella sonríe y quita mi mano de su boca.

- Solo iba a decir que me sentiré como una princesa en este hogar, es una casa muy enorme. - respondió riendo y reí de igual manera para luego dejar un beso en su frente.

- Más que princesa serás una reina. - dije tomándola de las mejillas. - Mi reina. - ella sonríe y me da un corto beso para luego alejarse de mi y sonrojarse. - No te preocupes por compartir habitación, si no quieres hacerlo lo entenderé.

- Solo.. esperemos a estar casados para compartir nuevamente la habitación. - respondió y asentí para luego tomar su mano y guiarla a casa.

Me tomó solo un poco de tiempo para mostrarle toda nuestra casa y presentarla con el personal, todos estaban encantados al verla aquí y la recibieron con mucho cariño.

Luego de ese proceso la lleve hasta una habitación y pedí a los empleados que trajeran sus cosas y las acomodaran mientras ella se duchaba.

Quiero darle la vida de una princesa, esa que no tuvo por culpa de un maldito hombre que se lo ha arrebatado todo.

Baje las escaleras pensativo y fui interceptado por el jardinero, quien venía con no muy buena cara.

- Señor.

- ¿Que sucede Alfred? - pregunté al ver su cara preocupante.

- Es que.. la señorita Luana esta aquí y dice que desea hablar con usted. - respondió dejándome congelado.

¿¡Que demonios hace esa mujer aquí!? ¿¡Acaso no entiende que ya no es bienvenida en esta casa!?

Enfurecido me dirigí a la entrada de mi hogar para luego ver a Luana, la mujer que destruyó todas mis ilusiones cuando tenía 19 años, esa que me engaño por mucho tiempo con alguien a quien consideraban un buen amigo.

- Williams..

- Te daré solo un minuto para desaparecerte de aquí o de lo contrario.. sabrás de lo que soy capaz.

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