cap 12

'Williams'

Me he tomado la libertad de comprarle algunos obsequios a Johan, pues es la primera navidad que paso a su lado y presiento que no será la última.

Pese a que me dejó claro desde un inicio que su corazón ya estaba siendo ocupado por alguien, no pierdo las esperanzas, pues estas son lo último que se pierde en el amor.

Luego de ver aquellas lágrimas en sus ojos sentí que mi corazón se estrujaba y deseaba encontrar a el responsable de tanto dolor y hacerle pagar por su sufrimiento, aunque claro, si estaba de esa manera por la ausencia de sus seres queridos que ya no están.. no habría forma de que pudiera hacer algo.

Decido dejarla a solas para que termine de alistarse y tome un respiro, por lo cual bajo hasta el primer piso donde mi abuelo aguardaba por ambos.

- Hijo. - habló mientras se ponía de pie pero negué dándole a entender que se sentará. - ¿Johan no ha terminado de alistarse?

- Aun no, acabo de dejarle uno de mis obsequios para que lo luzca esta noche. -respondí con una sonrisa y él asiente.

- Es una mujer hermosa, no creo que necesite arreglarse mucho para lucir bien. - *añadió mi abuelo y asentí sonriendo. *Es cierto, Johan es la mujer más hermosa que he visto, todo de ella me parece único y lo es.. es perfecta para mi*.* - *Tengo algo importante de lo que hablar contigo aprovechando que estamos solos.

- Pues dime. - lo alente y el asiente.

-Williams, aun no se por cuanto tiempo más podre estar a tu lado, hay situaciones inevitables en nuestras vidas y creo que debes estar preparado para lo que sea. - comentó asustandome un poco.

- Abuelo, ¿Acaso has enfermado? - pregunté con preocupación y él baja su mirada mientras sostiene su bastón.

- He estado realizando los estudios rutinarios y mi médico a encontrado un problema irreparable por mi larga edad.

- No abuelo..- dije viéndolo con mis ojos **entristecidos**. - Tu no puedes abandonarme, eres mi única familia y yo... ¿ que se supone que haré sin ti?

- Williams, aun me queda algo de tiempo pero no podemos comprar la vida, solo venimos de pasada a este mundo y cuando nos toca el tiempo de partir simplemente debemos aceptarlo.- *contestó y deje escapar un zolloso. *No quería que ese día llegara, no puedo dejar que todo surja como si nada, sin siquiera haberlo intentado todo*.* - Aparte de ello.. no estarás solo, Johan es una buena mujer y se que te acompaña en todo.

- Abuelo..

- Escucha lo que te diré. - me interrumpió y asentí limpiando mis lágrimas. - Cuando un hombre ama de verdad... lucha y se esfuerza por la persona dueña de ese amor, no se deja vencer ni decaer, es importante que guardes estas palabras para ti y las pongas en práctica. Tienes la suerte de la familia Lee, pues una hermosa mujer tocó a tu puerta y no debes de renunciar a ella por nada del mundo. - añadió para luego suspirar. - Williams, quiero que me prometas que estarás a su lado siempre, que cuidarás de ella como la hermosa joya que es y que te encargaras de hacerla feliz por lo que la vida los deje compartir juntos. Se que los problemas se presentarán porque la pareja perfecta es solo un mito pero.. apoyense el uno al otro y confíen en que su amor podrá contra todos los obstáculos.

-Abuelo, con respecto a eso.. - dije bajando mi cabeza pero no pude terminar de hablar, no quería decepcionarlo y mucho menos en su estado. - No quiero que me dejes solo. - añadi para luego caminar a él, inclinarme a su altura y tomar sus manos mientras las lágrimas salían sin permiso, no podía evitar sentirme triste, es mi única familia y no quiero perderlo.

- Williams, ya no eres un niño pero aun así tus lágrimas tocan mi corazón. - dijo mientras acariciaba mi cabello. - Anda, ponte de pie.- levanté mi mirada a él y me sonrió como lo hacía cuando era niño y lloraba por haberme lastimado. - Aún tenemos tiempo para disfrutar un poco más el uno del otro.

- Estoy de acuerdo con eso abuelo, puedes venir conmigo a mi casa en Los Angeles.- propuse y él asiente.

- Luego veremos ese asunto, por ahora lo mejor será disfrutar de esta noche y hacerle pasar una linda velada a tu prometida. - añadió y baje la mirada, ni siquiera sabía si podría llegar a conquistarla.

-Dime abuelo, ¿que deseas que haga por ti?- dije limpiando mis lágrimas mientras me ponía de pie.

- Antes de partir quiero verte casado Williams, ese es mi único deseo. - respondió y quede sorprendido, no sabía que decirle, ni siquiera tenía una excusa preparada para luego de que Johan me rechace.

- Pues prepárate abuelo, porque dentro de un mes nos casaremos. - *escuché decir a Johan y voltee mi mirada a las escaleras quedando totalmente encantado. *Espera.. ¿Ella acaba de decir que dentro de un mes nos casaremos*?*

- ¿Lo dices en verdad mi niña? - dijo mi abuelo mientras caminaba en su dirección y tomaba su mano para ayudarla a bajar. - Creí que aún no tenían fecha.

- No la teníamos pero.. ambos quisimos darte este anuncio como regalo de navidad, ¿cierto cariño? - preguntó volteando a verme, acto que también hace mi abuelo y asiento.

- ¡Que maravilloso regalo! - dijo emocionado para luego abrazar a Johan. - jamas me han gustado los obsequios pero este sin duda es el mejor. - dijo emocionado para luego caminar en dirección a el comedor mientras seguía hablando. - Le diré a señora Bong que destape el mejor vino, esto debemos de celebrarlo.

Ambos reímos al escuchar sus palabras y luego giro mi mirada a Johan.

- Johan..

- ¿Te gusta como me queda tu obsequio? - preguntó mientras giraba y sonreí para luego acercarme a ella y tomar sus manos.

- Te queda perfecto y te ves incluso mejor de lo que me lo había imaginado. - respondí y ella asiente mientras sonríe. - Pero.. lo que le dijiste al abuelo..

- Se lo que le dije.

- Johan, él estará ansioso esperando ese mes y aparte de ello.. - suspiro. - Él se irá a vivir conmigo a Los Angeles.

- Bueno, eso quiere decir que podría ayudarnos con la organización de la boda ¿no? - respondió y me sorprendí. ¿Porque es que esta diciendo esto? Ni siquiera se siente atraída por mi.

- Johan, se que dijimos que nos tomaríamos el compromiso enserió pero no quiero ponerte presión, creo que lo adecuado sería decirle la verdad al abuelo y..

- ¿Porque dices eso? ¿ya no quieres intentarlo? - preguntó decepcionada y sujete su rostro entre mis manos.

- Jamás en mi vida estuve tan seguro de algo como lo estoy con respecto a mis sentimientos por ti, pero el inconveniente es que el abuelo se dará cuenta de todo cuando llegue a Los Angeles. - ella niega en signos de no entender. - Las parejas aquí tienden a convivir en el tiempo de su compromiso y pese a que yo no este aquí.. debo de seguir con la tradición que ellos me inculcaron.

- Pero no tengo problemas con eso. - Dijo envolviendo mi cuello con ambos brazos para luego dejar un corto beso en mis labios. - Williams, demosnos una oportunidad y seamos marido y mujer para que el abuelo esté tranquilo sabiendo que todo estará bien, he escuchado su conversación accidentalmente y quiero que ambos sean felices, por ello creo que debemos empezar a organizar todo para casarnos en un mes.

No pude contener la emoción al oír todas las hermosas palabras que salían de su boca, deje a un lado el discurso y la atraje a mi besandola con locura, haciéndole saber a través de este beso que pienso dar todo de mi para enamorarla, para ganarme su corazón y enseñarle a aquel tipo que ella me ha elegido a mí.

- Entonces.. ¿estas dispuesta a mudarte conmigo apenas volvamos a Los Angeles? - pregunté mientras la tomaba de su cintura.

- Estoy dispuesta a renunciar a mi pasado y dejarte entrar en mi vida, me mudare contigo apenas lleguemos. - respondió y me fue inevitable no sonreír tontamente para nuevamente tomar su rostro en mis manos y besarla con cariño.

Créeme que no te arrepentirás mi dulce Johan, me ganaré tu corazón y te conquistare cada día que me sea posible, porque te quiero así, solo para mi.

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