Capítulo IV - El Baile -

- Narra Lizeth -

Después de un largo viaje al fin llegamos a España, la vista es hermosa y la nueva casa es muy acogedora. Hannibal vino con nosotros ya que tenía que atender unos negocios y de paso hacerme compañia. Al llegar nos dio la bienvenida él Señor Colín, un amigo cercano de papá y nos invitó al baile que daría esa noche.

Al llegar al lugar se podía ver a tanta gente reunida, charlando y bebiendo mientras en el fondo tocaba una orquesta. Tan pronto como nos integramos a las demás personas, se acercaron dos jóvenes uno de ellos alto y pelirrojo nos dio la bienvenida e invitó a mi hermana a bailar.

El otro chico permaneció indiferente y ni siquiera saludo a nadie. Me causó curiosidad el por que bailaba con nadie habiendo tantas damas esperando a que fuesen invitadas a bailar (incluida yo), así que no pude con tenerme y decidí preguntarselo.

--Lizeth: - ¿Baila usted? -

-- Joven: * tono serio y cortante* -No si puedo evitarlo. -

Me alejé del joven Andrew y me acerque a mi familia que se encontraba con el señor Colín, quien nos dijo que aquel joven se llamaba Andrew y que era hijo de un hombre importante, con un gran éxito en los negocios y empresas.

El chico pelirrojo que lo acompañaba se llamaba Zac hijo de un violinista famoso, el primer baile término e inmediatamente busque a mi hermana para saber como se había comportado el joven que la invitó a bailar. Nos dirigimos a uno de los balcónes para hablar tranquilamente.

--Lizeth: - Kimberly, ¿como se comportó el joven Zac? ¿Es bueno en el baile?

-- Kimberly: - Él es muy amable y educado, además sobra decir que es un exelente bailarín. -

Iba a continuar con mi interrogatorio cuando depronto escuchamos que en el otro balcón se encontraban el joven Andrew y el joven Zac hablando.

-- Zac: - ¿Por qué no bailaste con nadie? Hay tantas chicas lindas aquí. ¿qué tal la hermana de la señorita Kimberly, es muy hermosa no creés?

Nosotras casi sin poder evitarlo esperábamos emocionadas la respuesta.

-- Andrew: - No digas tonterías, bailaste con la única chica hermosa de aquí, y en cuanto a la señorita Lizeth diría que es apenas soportable.-

-- Zac: - ¡Vamos amigo no sabes lo que dices, ella es bastante agradable! 😌

Mejor regresemos antes de que termine el baile. -

*Se van hacía el salón*

-- Kimberly: - No puedo creer que se expresara así de ti. ¡En todo caso no tienes que darle importancia a las palabras de alguien tan grosero! -

-- Lizeth: - Tienes razón, además nadie se casaría con él aunque ofrecieran una fortuna, de hecho eso no sería suficiente para soportarlo. -

*se dirigen al salón para continuar con el baile*

Al comienzo del segundo y último baile la pase con Hannibal, fue maravilloso me sentía en un sueño bailando con él. Se veía tan atractivo con su traje de gala, en un momento del baile me di cuenta de que Hannibal tenía su mirada puesta en mi.

Fue tan especial ese instante, nuestros cuerpos bailaban pero las miradas decían otra cosa. Al terminar el baile pude sentir una mirada detrás de mi, esa mirada provenía de el joven Andrew.

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