Cap 1.. pajaros en la noche .

comienzo  

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                               Primera visita.    

¿Hola, me escucha usted?.¿ Señor, me escucha usted.? ¡¡Hoolaaa!!.  Al menos meresco un saludo, estuve parada esperando por 15 minutos que mis llamados valgan para usted una respuesta. -“He venido a tratar a ayudarle que usted, salve su atormentada alma de los tormentos y que encuentre un poco de paz” -mientras usted se mese- con sus piernas cruzadas, ¡taan…… relaajaadaamente…!, ni siquiera a sacado la mirada de aquel libro, que esta leyendo. ¿Como puede estar tan tranquilo? -¿amacandose y tarareando- una canción mientras lee? “Usted si que es un tipo extraño”- agrego reprimiendo la rabia.

 -hasta me da temor su serenidad. 

Chounse reacciono tan inesperada como seductoramente - debo confesarle algo. Pero antes, me pondre de pie -para acercarme a usted- , ¡no tema! -exclamo – . Me e, acostumbrado a las descacascaradas y griseasas paredes ; aveces de tanto mirarlas brota -por fuerza mayor- mi creatividad. Descubro rostros extraños e imágenes en ella, habeces esos rostros son amables, en otros percibo expresiones malignas, -como si estuvieran por acecharme-. Los ruidos de las rejas abriendose los conozco. –Y si que los conozco- agrego Chounse – podrá comprender que ya e armado una pesada rutina aquí. O para escapar de aquí – agrego –  y déjeme ponerla al tanto de que su presencia amenaza con engañar- a mi autoengaño- Pues, es usted tan atractiva que -acostumbrarme a su ausencia poco después que usted decida irse sin, retorno- , será una difícil tarea para mi. Por esa razón es que no e respondido ¿a caso no se dio cuenta, señorita? No entiendo que puede buscar en este aspero y tosco lugar alguien como usted. – Agrego Chounse mientras dio la espalda a Yesica para dar por concluido el intento de dialogo. 

–Tome mis visitas señor como una compañía. Tomeme como un oído, que a encontrado y como a alguien –  que lo desea escuchar – imploro Yesica. 

– Al parecer no a comprendido ¡ no deseo hablar con ninguna persona!Exclamo aspero.

-¿Por qué señor Chounse? No se aburre. ¿de la soledad y del encierro?. 

- Prefiero la soledad señorita Yesica. El encierro es inevitable.  

Yesica se fatigo de implorar por la atención de Chounse.

-¿ A caso odia a las personas señor? ¿es por eso que lo hizo? Pregunto enfadada y provocativa - Hablo del robo y del guardia asesinado; -y de las prostitutas. 

Chounse cambio su conducta drásticamente al tiempo la exprecion de su rostro; que, ahora dibujaba una extraña, como, temeraria sonrisa. 

“EMPEZABA A BROTAR LA PERSONALIDAD DE BOBY”.

- si- afirmo- en el fondo tengo odio por los humanos-. Tanto que aveces pienso no ser yo parte, de esta raza; y no me aflijo por ello. Y no lo digo de una manera egocéntrica ni altanera, -talvez, sea-; por que soy peor que ellos. Lo único que humildemente se; es que algo nos separa.

- ¿Y en que momento empezó a reflexionar de esa manera tan odiosa? Usted tuvo una vida social muy activa, incluso mas que cualquier  -o que-,  la mayoría de las personas.

-Veo que usted a estado siguiendo mi caso; ¡mi vida! Exclamo aspero con su sonrisa dibujada en su rostro y concluyo- me stuvo siguiendo de cerca ¿o me equivoco mi sensual psiquiatra?.

-Si. Afirmo Yesica. – ¿Y por que esa manera tan odiosa de pensar?\=repregunto \= Es, la que lo condujo -por consecuencia de sus actos- hasta aca. El que derramo -brutalmente- tanta sagre ¿Qué buscaba con los atentados?. 

-siempre he pensado asi; incluso cuando llevaba -“según usted”- una vida activamente social. Los hombres son como perros peleando por un hueso,- y con el perdón que merecen los fieles perros-. Compararlos con los hombres es ignorar “la lealtad”; es igual a llamarlos hipócritas. 

BOBY BROTABA CON MAS PRESENCIA.

Chounse prosiguió - ¿ no a notado a los hombres pelearse por el hueso doctora; incluso si quedarse con el, signifique ir por detrás del semejante a traición, y clavarle los colmillos en el cuello de el?. ¡ohoh! –exclamo de repente y siguio – veo que carga la biblia ¿a leído al profeta jeremias? Capitulo 17 versiculo 5. -Agrego firme Chounse - ¿ puede leerla para mi? De otro modo seguire perdiendo el tiempo, entre mis libros.

Yesica detecto el profundo odio que atraves de Boby demostraba Chounse por los humanos. Su peticion al citar las escrituras de la biblia podrían ser un reselo por la religión o una forma sutil de ausentarla.

-¿ por que me pide eso? Solo quiere provocar que me ausente de frente de usted y, de esa forma evadir hablar conmigo. Pero déjeme decirle – prosiguió Yesica – que se, a lo que apunta; quiere sacar de contexto algo tan sagrado como lo son “las sagradas escrituras”. Usando solo la parte que me pidió que le leyese- ¡ y no lo hare! -grito- en lugar de buscar provocarme para que me marche. ¿¡Por que no me pide que le lea algo de las sagradas escrituras, que heche agua a ese profundo odio, que lleva consigo casi como un fuego que le consume el interior señor Chounce!? – concluyo bien intencionadamente Yesica. 

Talvez la prisión lo había enfermado aun mas y ese odio, se hacia mas comprensible.

¿ a caso no a aprendido nada aquí; lo que a sufrido no le a enseñado, nada?¿ A caso no se da cuenta donde esta parado ahora mismo?. Ese odio del que habló, lo a traido hasta aca. -remarco nuevamente - Le confieso que vine con usted por que me parecio interesante, su caso; su vida que fue, y es , tan particular -. Sentí que la curiosidad me había atrapado.

 – mmm ¿curiosidad doctora?. 

– si , curiosidad. - No quiero irme hasta entender. 

–  Y….¿entender que?. -pregunto Chounse. al instante Yesica prosiguió 

-“La razón”. - Por la cual un hombre que logro superar su infancia -carente de todo- hasta llegar a convertirse -de muy joven- en un gran empresario- Yesica siguió enumerando- hasta lograr viajar a los mejores lugares del mundo, tener una familia tan hermosa como la suya. -halla hecho tan brutal acción-. “e analizado su caso ,  sus videos ,  mientras era investigado”.  ¡Pero ahora entiendo! \= me a decepcionado \= dijo con desepcion \= pensé que era un hombre inteligente. Hasta llegue a pensar que no se merecia estar aca. ¡Pero ahora entiendo! –repitio apurada - es su profundo odio - por los humanos. Creo que usted sufre de “minastropia”. - Su ideal es igual o peor….. a los de “WILLIAN S. GILBERT” -.  ¿O acaso el encierro lo a cambiado?.

 – Puede que asi sea, y no siento pena si la padesco; y perdóneme que sea tan ínti..ma…mente, directo , -pero.. créame que- la vida me a dado muchos motivos para padecerla. 

El señor Chounse nuevamente pasaba su moneda rápidamente por encima de sus nudillos haciendo una especie de ilucionismo, al tiempo Yesica no veía deseo en el, de dialogar con ella.

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