Yo Mina

Estábamos al costado pensando que hacer hasta que vi a través de un espacio de armys, a Jungkook. Estaba saludando a una fan muy feliz mientras le acariciaba la cabeza. No se por que pero me puse celosa. No debería tener ese derecho. No soy su novia...cierto?

Estábamos por irnos a caminar hasta la hora del concierto hasta que decidí mirar una vez mas a Jungkook. Nuestras miradas se conectaron.

Me puse nerviosa porque mi amiga se percató de la situación. Me estaba por preguntar por eso hasta que, como si lo hubiese poseído un fantasma, mi Bias se levantó con torpeza de su silla y empezó a caminar hacia mi.

Todas las armys nos miraban. Algunas con odio y envidia, otras con alegría y curiosidad. No sabía donde meterme. Me sentía el centro de atención y eso no me gustó. Pero aún así, el chico ya estaba frente a mi.

"Hola, chica tímida" sonreía mientras se inclinaba" Creo que deberías decirme tu nombre para tener un apodo más corto.." decía con incomodidad.

Yo no podía evitar bajar la cabeza por la vergüenza que tenía. Había mucha gente observándonos.

"Yo..Mina" dije con inseguridad.

Él soltó una risita que me dio 100 años de vida.

"Esta bien, Yo Mina. Ven conmigo" decía mientras me sostenía la mano llevándome a la mesa de autógrafos.

Le hice una seña a mi amiga pero prefirió mantenerse al margen de todo eso. No entendía nada, eso era seguro. Pero tampoco pareció interesarle demasiado ser otro centro de atención. En el fondo, era tan tímida como yo.

"Aquí tienes" soltó, entregándome con delicadeza su autógrafo."Oh si, quieres una foto conmigo?"

En ese momento, todas las armys estallaron de indignación. Ninguna de ellas tenia permitido eso en la firma de autógrafos. Me sentí bastante despreciada.

No estaba segura pero asentí.

Estaba por hacer mi mejor pose hasta que noté que él había colocado su mano en mi cintura, acercándome más a él. Me sonroje y sólo sonreí tímidamente.

"Gracias por ser mi army😊" dijo con timidez.

Luego nos despedimos y volví a donde estaba mi mejor amiga. Se veía muy shockeada. No entendía nada aún.

Yo estaba contenta, verificando que tuvieramos los boletos. No podría soportar si ocurría de vuelta como con los tickets.

"Aquí están! Vamos!" dije agitando gloriosamente los boletos en el aire.

Estaba por llegar a la puerta cuando descubrí que mi amiga aún seguía allí.

Corrí hacia ella, la agarré por los hombros y la agite de un lado a otro para hacerla reaccionar.

Susurró algo pero no le entendí. Acerque mi oído a su boca.

"QUE MALDITA PERRA SUERTUDA!" grito. Si antes no había quedado sorda, ahora no iba a escuchar ni la mitad del concierto.

La mire con los ojos bien abiertos furiosamente.

"OYE! NO ME GRITES ASÍ! AHORA ME QUEDE SORDA!"

Mi amiga soltó una carcajada.

"Te lo mereces por no haberme contado sobre tu misterioso chico coreano" dijo con exactitud.

Me quedé sorprendida. Estaba casi segura de que se había creído la historia de que habían pedido su número. No sabía que decirle.

"Esta bien, me dices luego. Ahora vamos al concierto.."

Me acerqué mas a ella. No la había escuchado.

"QUE?!" y se inclinó a mí y me gritó fuerte:

"QUE VAMOS AL CONCIERTO!"

La mire mal de vuelta.

"OYE!" y me llevo hacia afuera tomándome del brazo.

Fuimos a caminar un rato y llegó la hora del concierto. O bueno, como dijo mi amiga, 30 minutos antes.

Entramos y el lugar era una verdadera maravilla.

Era un gran escenario con miles y miles de asientos en los alrededores del frente. Había reflectores, algunos apagados, y unos artefactos para los efectos especiales.

Sólo despues de mirar todo eso, me di cuenta de lo lejos que habíamos llegado.

"Ya estamos aquí" dije orgullosa.

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