Final sin un comienzo

Amiga, ¿estás segura de esto? – Pregunto Sofia con cautela, no es que quiera arruinar la felicidad que ve en los ojos de su amiga, es que al igual que todos, ella ha visto como es Rafael y las múltiples aventuras que se le conocen. Además, no es secreto para ella que Valentina a estado enamorada de él por años, así que es claro que le preocupe lo que pueda pasar si Rafael volviera a sus andanzas.

- Entiendo tu preocupación Sofí. – Dijo Valentina con una sonrisa tranquilizadora. – Pero te aseguro que es sincero, lo he visto en cada uno de sus detalles, además he visto como se ha alejado completamente de las fiestas y de sus “amiguitas”. – Dijo haciendo comillas con las manos en la última palabra.

- Está bien linda, solo quiero que seas feliz y ese tonto es tu felicidad, entonces yo te apoyaré totalmente. – Sonrió Sofía sinceramente mientras veía como los ojos de Valentina mostraban toda esa felicidad que su corazón rebosaba.

Además, no era solo el avance de su relación con Rafael lo que la tenía feliz, pues también está muy emocionada, ya que por sus excelentes calificaciones tiene dos ofertas laborales del mejor bufete de abogados de la ciudad para trabajar con ellos, una de las ofertas es en la ciudad y la otra es para una nueva sede fuera del país, en la que podría ir para ayudar con la instalación y manejo de los nuevos casos que van a tomar allí, y es que aunque su padre insistió muchas veces en que vaya a la compañía para trabajar como su gerente jurídica, Valentina quiere dedicarse de lleno a su carrera por lo que decidió que trabajaría como todos los demás sin importar que sea una Román.

Al principio estaba casi decidida a tomar la oferta para ir a la nueva sede, pero ahora había tomado la decisión que tomaría la oferta en la ciudad, pues, aunque la experiencia en el nuevo lugar sería mucho más amplia, sin contar con que tendría más oportunidades de crecimiento, ella en este momento no quiere irse de la ciudad, cuando su relación con Rafael es prácticamente un hecho.

Su padre que la adora no tuvo más remedio que aceptar cualquier decisión que ella tome, por lo que Valentina ya determino que después de terminar con los exámenes y demás se tomara solo una semana para arreglar todo e iniciar el trabajo en el bufete.

- Todo es perfecto. – Dijo Valentina extendiendo sus brazos para girar sobre su eje varias veces, estaba demasiado feliz por todo.

Sofía solo reía mientras negaba, ver a Valentina aún más animada que de costumbre era increíble, su amiga es ese tipo de persona que te alegra el corazón de solo verla y justo ahora era una máquina expendedora de alegría infinita.

- Bueno, pero no he visto a ti adorado tormento, ¿Dónde está? – Cuestiono Sofia.

- Tuvo que ir a visitar a su familia. – Respondió Valentina, con un poco de nostalgia, pues de hecho él le aviso de su llegada a la casa de su familia, pero desde eso ya no ha se han comunicado, y aunque solo ha pasado un día desde eso ya lo extraña.

- ¿No has hablado con él? – Pregunto Sofia curiosa.

- Bueno lo hicimos antes de ayer. – Dijo disminuyendo un poco su sonrisa. – Pero desde ese momento no se ha comunicado.

- ¿Por qué no lo haces tu? – Cuestiono Sofia intrigada por lo extraño de la situación.

- Ahhhhhh. – Suspiro Valentina. – Porque él me comento que debía resolver algunos asuntos y que estaría un poco ocupado, así que no quiero molestarlo. – Explico. – De todas formas, me dijo que estaría de regreso hoy o a más tardar mañana, así que puedo esperar. – Sonrió de nuevo, mucho más al recordar que Rafael le dijo que a su regreso le tenía una sorpresa.

Sofía negaba mientras sonreía, parecía que su amiga ahora estaba mucho más encantada con Rafael que antes, como si eso fuera posible, ella solo desea que todo salga bien.

Pero las cosas normalmente no son como uno desearía, y Valentina estaba a punto de descubrirlo por ella misma, peor aún lo sabría de primera mano y de la peor manera.

Pues la mañana de martes que de por sí había llegado con un clima más frío de lo normal, algo así como un preludio de lo que sería el día para Valentina llego con una noticia que le daba la vuelta al país entero y aledaños, con una fotografía se anunciaba lo que sería la noticia del año.

Valentina apenas se despertaba, pero lo había hecho con una opresión muy fuerte en su pecho, algo así como un mal presentimiento, de esos que sientes en todo el cuerpo, en el ambiente y que tu corazón ya prevé.

No se equivocaba pues solo debió tomar su celular para que las múltiples notificaciones llegaran sin invitación.

La noticia estaba allí, las letras en la pantalla parecían normales, inofensivas, pero a medida que las leía, cada palabra se transformaba en un golpe directo a su corazón, de esos que duelen más que cualquier disparo.

Valentina leyó la primera frase con incredulidad, mientras contenía las lágrimas que amenazaban con desbordarse de sus lindos ojos

...El heredero de los Alcázar se compromete.

...

Una sola frase, sencilla, pero para ella era como si no entendiera el idioma. Repasó las palabras una y otra vez, esperando que cambiaran, que dijeran otra cosa. Pero no fue así. La verdad estaba allí, cruel e inamovible, atravesándole el pecho. Fue entonces cuando supo que había perdido algo que jamás fue suyo.

Los titulares gigantes, la noticia del momento.

El compromiso más importante de la alta sociedad del país.

El heredero de los Alcázar, Rafael Alcázar se comprometía con la nueva joya del diseño, Sonia Hernández, hija de una de las familias más importantes del país del norte y eternos amigos de los Alcázar.

Felicitaciones a la pareja.

Esa y más notas al respecto estaban por todas las redes sociales, revistas y medios de comunicación de ambos países.

Pero para Valentina eso solo significaba una cosa, había llegado el final, sin ni siquiera haber tenido un comienzo.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***