Capítulo 2 – Exiliada

punto de vista de ana

Nunca había sentido tanta vergüenza en mi vida.

Podía soportar las miradas inquisitivas, incluso las palabras duras, pero aquella mañana, cuando mis padres me miraron como si fuera una desconocida… sentí que se me rompía algo por dentro. Algo que jamás podría volver a armar.

Todo había pasado tan rápido. Una fiesta. Un desconocido. Una habitación. Y luego, el infierno en casa.

No entendía cómo lo supieron, ni por qué la furia fue tan desproporcionada. Bueno… sí lo entendía. Mis padres no soportaban perder el control, y yo, con un solo desliz, había tirado por la borda sus planes, su "inversión" en mí. Rechazar el compromiso con Nicolás Morales fue solo la chispa. Irme con alguien desconocido, sin nombre ni apellido, fue dinamita pura.

No me dieron opción. Al día siguiente, sin siquiera preguntarme mi opinión, me informaron que me iría a estudiar a Estados Unidos. Un castigo disfrazado de oportunidad.

—Necesitas alejarte, reflexionar, madurar —dijo mi madre, como si mis decisiones hubieran sido infantiles berrinches.

No lloré frente a ellos. No les di ese poder. Pero lloré en mi habitación, durante horas, mientras hacía la maleta. Lloré en silencio, para que no escucharan, para que no supieran lo rota que me sentía. Y luego, apagué mis emociones como quien apaga una luz. No por fortaleza, sino por pura supervivencia.

El vuelo a Nueva York fue largo. Las voces a mi alrededor eran ruido blanco. Solo el zumbido de mis propios pensamientos me acompañaba. Me preguntaba si alguna vez lograría olvidar esa noche. Si alguna vez sabría siquiera qué ocurrió realmente. ¿Fue solo una aventura etílica o algo más? ¿Fue un error? ¿O un escape desesperado? No tenía respuestas.

Solo tenía un nombre que no conocía, y un vacío enorme en el pecho.

 

Instalarme en Nueva York no fue fácil. No tenía a nadie. Mis padres habían pagado todo: matrícula, alojamiento, incluso una tarjeta con límite para sobrevivir. Pero eso no me hacía sentir libre, solo más vigilada desde la distancia.

Tomé clases de diseño gráfico en una universidad pequeña, pero respetable. Me dediqué a estudiar con obsesiva disciplina. Lo que fuera para no pensar. Para no recordar.

Pero el olvido no llegó. Porque, dos meses después de mi llegada, algo en mí cambió.

Primero fue el cansancio. Dormía demasiado o no podía dormir en absoluto. Luego, los mareos. Después, la náusea persistente que no desaparecía con nada. Pensé que era el estrés. El cambio de país. La presión de estar sola.

Hasta que, una tarde, sentada en la cafetería de la universidad, olí el café y corrí al baño a vomitar.

Fue ahí, frente al espejo empañado del baño, con el rostro pálido y las manos temblorosas, que lo supe.

Me compré una prueba de embarazo como si fuera una criminal. La metí en la mochila, la escondí bajo libros, y regresé al departamento sintiéndome más sola que nunca.

La prueba no tardó en mostrar las dos líneas. Claras. Inconfundibles.

Me senté en el suelo del baño con la prueba entre las manos, sin aire, sin palabras. Una parte de mí esperaba que se tratara de una pesadilla. Pero no lo era.

Estaba embarazada.

De un hombre cuyo nombre no sabía.

Lloré. Mucho. De rabia, de miedo, de desconcierto. Me pregunté una y otra vez cómo era posible. ¿Cómo no me había cuidado? ¿Cómo me había expuesto así? Pero no recordaba nada con claridad. Solo sabía que aquella noche había cruzado una línea sin retorno… y que ahora llevaba una vida dentro de mí.

No. Dos vidas.

Semanas después, una ecografía me reveló que no esperaba uno, sino dos bebés.

Gemelos.

Me reí en la consulta. Una risa nerviosa, rota, incrédula. El médico me miró raro, pero no dijo nada. Yo tampoco. Apenas podía procesarlo.

Gemelos. No sabía si era una bendición o un castigo.

Decidí guardar silencio. A todos. Incluso a mis padres.

No podía soportar más reproches. Más decepción. Más control.

Esta vez era mi decisión. Mi caos. Mi carga. Mis hijos.

No sabía cómo iba a hacerlo sola. Pero sabía que no los iba a abandonar.

No podía.

 

Esa noche, de regreso a casa, me senté en la cama y me acaricié el vientre plano con una ternura que no sabía que tenía. Cerré los ojos y susurré:

—Hola, pequeños… no sé cómo voy a hacer esto, pero les prometo que voy a intentarlo. Que no voy a fallarles.

No sabía cómo sería el futuro. No sabía si algún día volvería a ver al hombre de aquella noche. No sabía si él merecía saberlo. No sabía si yo quería que lo supiera.

Pero en medio de todo ese caos, sentí por primera vez en mucho tiempo… algo parecido a la paz.

Estaba rota. Asustada. Sola.

Pero dentro de mí, la vida comenzaba a tomar forma.

Y eso lo cambiaba todo.

 

Más populares

Comments

Sonia Avila

Sonia Avila

ella, está decidida a no abandonar a sus bebés seguir con el embarazo

2025-05-12

0

Total
Capítulos
1 Sinopsis:
2 Capítulo 1 – La noche que lo cambió todo
3 Capítulo 2 – Exiliada
4 Capítulo 3 – El eco de una noche
5 Capítulo 4 – Ecos del pasado
6 Capítulo 5 – Lo reconocí
7 Capítulo 6 – Su rostro en mi memoria
8 Capítulo 7 – Las piezas comienzan a encajar
9 Capítulo 8 – Verdades compartidas
10 Capítulo 9 – Ecos del pasado Liam
11 Capítulo 10 – La visita inesperada
12 Capítulo 11 – Somos cuatro
13 Capítulo 12 – Bienvenidos al mundo
14 Capítulo 13 – Entre la vida y el pasado Parte 1: Hogar de cuatro corazones
15 Capítulo 13 – Entre la vida y el pasado Parte 2: Secretos que arden
16 Capítulo 14: El peso del pasado y el futuro
17 Capítulo 15: Entre la culpa y el deber
18 Capítulo 16: Lo que calla el corazón
19 Capítulo 17: Verdades que rompen cadenas
20 Capítulo 18: Caminos cruzados
21 Capítulo 19: La noche en que se entregaron
22 Capítulo 20: Bajo la misma piel
23 Capítulo 21: Herencia y escándalo
24 Capítulo 22: El precio del amor
25 Capítulo 23: Sombras entre globos
26 Capítulo 24: Entre miradas y susurros
27 Capítulo 25: Contra el poder
28 Capítulo 26: La calma antes de la embestida
29 Capítulo 27: Un día cualquiera… o eso parecía
30 Capítulo 28: Nada fuera de lo común
31 Capítulo 29: Jugadas silenciosas
32 Capítulo 30: El eco de las decisiones
33 Capítulo 31: La verdad a medias
34 Capítulo 32: La tormenta que se avecina
35 Capítulo 33: La verdad, el arma más fuerte
36 Capítulo 34: Un Hunter nunca pierde
37 Capítulo 35: Un respiro entre tempestades
38 Capítulo 36: Entre flores y cicatrices
39 Capítulo 37: Voces del pasado
40 Capítulo 38: Bajo el ojo público
41 Capítulo 39: Voz propia
42 Capítulo 40: Cuando el amor respira en paz
43 Capítulo 41: Entre lo que fui y lo que soy
44 capítulo 42
Capítulos

Updated 44 Episodes

1
Sinopsis:
2
Capítulo 1 – La noche que lo cambió todo
3
Capítulo 2 – Exiliada
4
Capítulo 3 – El eco de una noche
5
Capítulo 4 – Ecos del pasado
6
Capítulo 5 – Lo reconocí
7
Capítulo 6 – Su rostro en mi memoria
8
Capítulo 7 – Las piezas comienzan a encajar
9
Capítulo 8 – Verdades compartidas
10
Capítulo 9 – Ecos del pasado Liam
11
Capítulo 10 – La visita inesperada
12
Capítulo 11 – Somos cuatro
13
Capítulo 12 – Bienvenidos al mundo
14
Capítulo 13 – Entre la vida y el pasado Parte 1: Hogar de cuatro corazones
15
Capítulo 13 – Entre la vida y el pasado Parte 2: Secretos que arden
16
Capítulo 14: El peso del pasado y el futuro
17
Capítulo 15: Entre la culpa y el deber
18
Capítulo 16: Lo que calla el corazón
19
Capítulo 17: Verdades que rompen cadenas
20
Capítulo 18: Caminos cruzados
21
Capítulo 19: La noche en que se entregaron
22
Capítulo 20: Bajo la misma piel
23
Capítulo 21: Herencia y escándalo
24
Capítulo 22: El precio del amor
25
Capítulo 23: Sombras entre globos
26
Capítulo 24: Entre miradas y susurros
27
Capítulo 25: Contra el poder
28
Capítulo 26: La calma antes de la embestida
29
Capítulo 27: Un día cualquiera… o eso parecía
30
Capítulo 28: Nada fuera de lo común
31
Capítulo 29: Jugadas silenciosas
32
Capítulo 30: El eco de las decisiones
33
Capítulo 31: La verdad a medias
34
Capítulo 32: La tormenta que se avecina
35
Capítulo 33: La verdad, el arma más fuerte
36
Capítulo 34: Un Hunter nunca pierde
37
Capítulo 35: Un respiro entre tempestades
38
Capítulo 36: Entre flores y cicatrices
39
Capítulo 37: Voces del pasado
40
Capítulo 38: Bajo el ojo público
41
Capítulo 39: Voz propia
42
Capítulo 40: Cuando el amor respira en paz
43
Capítulo 41: Entre lo que fui y lo que soy
44
capítulo 42

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play