CAPÍTULO 2: LA CABAÑA

ELIZABETH

—Hija siéntate por favor —mi padre señalo el sofá que se encontraba frente a él mientras cerraba y acomodaba el diario que estaba leyendo en la mesita a su lado.

—¿Qué sucede? me dijeron que me mandaste a llamar —algo muy característico de mi padre era que él jamás se tomaba el tiempo de siquiera llamar a alguien cuando necesitaba hablar de algo.

—No es nada malo, primeramente quería saber ¿cómo estás? —se cruzó de piernas y puso sus manos entrelazadas sobre esta.

—Pues supongo que bien... —esta era mi oportunidad de preguntarle por qué había contratado a Ethan—. Sabes, tengo una pregunta que está rondando mi cabeza desde que llego Ethan.

—¿El porqué lo contrate? —me interrumpió quitándome la pregunta de la boca.

—Exacto... Después de todo, no eres alguien que contrata ayudantes solo por que sí.

—Me había mandado una carta hace semanas, contándome que era hijo de Hernández y le hacía ilusión trabajar con nosotros —que tendría en la cabeza este chico para que le haga ilusión trabajar en algo como esto, si entras en esto, ya jamás vuelves a salir. O si sales, no sales limpio.

—¿Tu antiguo socio? —lo miré confundida, ya que no nos habíamos enterado de que tuvo algún hijo.

—El mismo, al parecer cuando viajo a Canadá para estar lejos de todo, tuvo a este chico.

—Que raro que jamás nos haya avisado —él asintió pensativo.

—Hernández habrá tenido sus motivos, pero como fue un gran aliado mío en su momento. Me pareció una buena forma de agradecerle todo, aceptando a su hijo aquí —sonrió, Hernández había muerto hace ya un tiempo, recuerdo que por mucho tiempo fue un gran amigo y socio de mi padre, hasta que un día aviso que se retiraría. Viajo a Canadá y nunca más se volvió a saber de él, supongo que tal vez su misteriosa retirada fue a causa de su hijo.

—Entiendo... Pues ahora tiene un poco más de sentido todo.

—Ira mejorando con el tiempo, confía en él. Se le ve un gran muchacho, si no entiende como nos manejamos aquí, tú sin problema puedes enseñarle —claro, ahora también sería maestra del chico que me hace temblar las piernas sin tocarme. Sonaba fácil, pero era bastante estresante.

—Si tú lo dices...

—Cambiando de tema, te llamé para algo más —dijo volviendo a su expresión seria—. Andy tiene unos encargos que me debe, por favor ve a buscarlos y ve con Ethan para que se vaya familiarizando con esto —asentí un poco disgustada de tener que ir con él, pero tampoco podía negarme a llevarlo. Eso llevaría a una discusión con mi padre que no quiero tener.

Me entrego el dinero que necesitaba para dárselo a Andy y ahora me tocaba a mí buscar a Ethan para que nos fuéramos. Normalmente me encontraba a Ethan recorriendo la casa o en el patio trasero haciendo alguna llamada, como no lo encontré en la primera opción, supuse que estaría en el patio trasero.

Efectivamente al pasar por la puerta de vidrio que daba al patio lo vi a él, con la mano en los bolsillos mirando el cielo. Me tomé un momento para mirarlo de espaldas y apreciar lo grande que era, si lo abrazara supongo que mis brazos apenas lo rodearían. En su nuca podía apreciar algunos tatuajes y otros que se escondían bajo su remera, me pregunto si algunos tendrán significado. Aun que llevemos unos días en la misma casa, no hemos hablado tanto. Solo algunas palabras de saludos y despedidas, era un chico bastante reservado y yo tampoco era la excepción. Era solitario, muchas veces lo miré cuando estaba distraído y en su mirada se veía algo extraño, como si algo lo estuviera atormentando. Aveces me recuerda tanto a mí.

Corrí lentamente la puerta de vidrio para no hacer ruido y que se diera cuenta de que estaba allí.

—Así que eres hijo de Hernández... —me acerqué a él hasta quedar a un paso detrás.

—¿Disculpa? —se dio la vuelta y me miro confundido.

—Me lo contó mi padre hace un rato.

—Ah sí... —se volvió a dar la vuelta dándome la espalda.

—¿Por qué jamás dijo que tenía un hijo? —tal vez me hacía parecer metida, pero me daba curiosidad.

—Era un hombre reservado y no quería meterme en problemas supongo... —elevo los hombros con indiferencia.

—¿Por qué elegir trabajar en esto?

—Por que quise —se dio la vuelta y me miro algo irritado—. ¿Algo más que quieras saber?

—Joder, solo quería saber de ti —dije apenada, ya que no me parecía lo mejor el que me contestara así cuando yo solo intentaba hablar con él.

—Per...

—Henry dijo que tenemos que ir juntos a un encargo atrasado, te espero en el garaje —dije cortante y salí de ahí sin esperar ninguna contestación de él.

Espere dentro del auto a que viniera y cuando lo hizo solo entro sin nada que decir, en todo el camino no cruzamos palabra alguna. Supongo que el orgullo de los dos era demasiado grande como para romperlo, aun así, sentía que él me debía una disculpa. Casi siempre cuando hablábamos terminábamos así, no podíamos hablar de más o ya era el principio de una discusión, él estaba a la defensiva casi siempre cuando intentaba saber de él. Al igual que yo cuando él intentaba saber de mí, me ponía muy tensa y terminaba yéndome de donde estuviera. Somos tan iguales en algunas cosas que eso hace que choquemos bastante.

Como si estuviera leyendo mis pensamientos, rompió él silenció.

—Perdón por estar a la defensiva siempre que intentas saber de mí —suspiro—. Es solo que no me gusta hablar de algunas cosas de mi pasado, en especial mi padre... —supongo que había algo detrás de todo que provocaba que fuera tan difícil hablar del tema.

—Entiendo... —dije y una pequeña sonrisa se formó en mi rostro.

Había dejado su orgullo por mí...

Luego de eso, el silencio volvió a reinar entre nosotros, pero esta vez ya no era un silencio incómodo.

Después de un largo rato en la carretera habíamos llegado a destino, era una alejada cabaña a lado de una carretera muy metida en el bosque. Un lugar difícil de encontrar y que solo muy pocas personas lo sabían, era casi imposible que alguien llegara aquí. Ethan y yo bajamos del auto, me dirigí hasta el baúl es busca de la protección que necesitábamos, después de todo. Uno nunca sabe lo que puede suceder.

—¿Armas? pensé que eran de confianza —pregunto confundido cuando le pase un revolver.

—No nos estamos cuidando de ellos, nos estamos cuidando de sí algo llega a salir mal —Ethan asintió y tomo el revolver escondiéndolo en su chaqueta. Yo hice lo mismo y empezamos a caminar metiéndonos cada vez más en lo profundo del bosque.

—Joder, por que tan escondidos... —escuche a Ethan decir con fastidio.

—¿Esperabas carteles luminosos?- dije rodando los ojos sonando obvia de que alguien que hacía estas entregas, no tendría el lugar totalmente a la vista—. Ahí esta... —vi la cabaña y aceleré el paso.

Por fin nos encontrábamos en la puerta de aquella misteriosa cabaña que tanto costaba encontrar, cualquiera diría que esto se trataba de un cuento de terror. Toque la puerta y se escucharon pasos acercándose, la puerta se abrió dejando ver a un chico alto, de cabello rubio con raíces oscuras su rostro perfilado mostraba una mirada de ojos verdes totalmente despreocupados, su figura alta y delgada era un buen factor a su estilo de ropa vintage.

—Llegaste —dijo con una sonrisa que mostró sus perfectos dientes blancos.

—Andy... —dije también sonriendo en forma de saludo.

Hace un tiempo atrás me atreví a confesarle mis sentimientos a Andy, era un chico simpático y atractivo que había llamado mi atención. Como era de esperarse él no desperdiciaba su belleza, eso significaba que así como yo, muchas chicas se le declaraban. Para mi mala suerte, no fui especial, me acepto pero solo me buscaba cuando necesitaba el cariño de alguien. Cuando me di cuenta de lo utilizada que me sentía, tan solo me aleje con la esperanza de que siguiéramos como amigos.

—Adelante tú y... —se quedó mirando a Ethan tratando de saber quien era.

—Soy Ethan, un nuevo ayudante de Martínez —le paso la mano a Andy y este la agarro para saludarlo.

—Debe tenerte mucha confianza... —comento Andy, ya que él también tenía el conocimiento de que mi padre no aceptaba a cualquiera.

—Al parecer si —contesto Ethan entrando a la casa.

—Debes decirle a tu padre que me perdone el retraso —Andy se rascó la nuca nervioso—. Es que la policía anda muy activa últimamente, por suerte rescatamos algunos cargamentos —lo escuche decir mientras subía unas escaleras al segundo piso. Luego de un momento bajo acompañado de tres chicos más que traían grandes bolsos negros llenos de lo que supongo sería la mercancía que tanto estaba esperando mi padre.

—¿Está la cantidad necesaria verdad? —le pase el dinero que me había dado mi padre y él asintió mientras la contaba— ¿Ethan me ayudas con esto? —llame la atención de Ethan quien se encontraba en silencio recostado en la pared.

—Te ayudo —dijo Andy mientras cargaba un bolso para llevarlo al coche.

—Tan amable tu amigo... —dijo Ethan entre dientes cuando estuvo cerca mío. Lo miré confundida sin entender a que venía ese comentario. ¿Acaso estaba celoso?.

Cargue el otro bolso faltante y fuimos hasta la camioneta, lo guardamos todo en el baúl y cuando lo cerré di un salto del susto al ver a Andy a mi lado sonriendo.

—Sigues teniendo mi número? —dijo sonriendo mientras recostaba su espalda en el coche.

—Jamás lo borraría —dije siguiendo ese juego que ya conocía. Andy podía ser muy simpático y agradable, pero aveces tenía un carácter egocéntrico insoportable.

—¿Puedes llamarme cuando necesites sabes? —se acercó a mí agarrando un mechón de mi cabello rojizo.

—Lastima que no te necesita —dijo Ethan apareciendo con una sonrisa de lado.

—No sabía que tenías algo con el novato... —Andy se alejó de mí riendo.

—No me dirás novato cuando...

—¡Chicos paren! —dije cuando empece a escuchar sonidos que no provenían de nosotros— ¿Escuchan eso?... —dije en voz baja.

Ethan y Andy pararon su discusión escuchando con atención que era ese sonido. Eran pasos que se escuchaban cada vez más cerca de nosotros. ¿Pero quién podría andar por este sector a estas horas, más en esta zona tan alejada de la carretera?. Andy hizo señas para que nos escondiéramos detrás del auto, caminamos agachados hasta escondernos detrás y esperar a saber de que se trataba eso.

—Parece que se encuentran dentro de la casa Señor... —se escuchó las voces de algunos hombres hablándole a alguien que parecía ser un líder. Asome mi cabeza un poco para ver de quien se trataba y mis ojos se abrieron a un gran tamaño debido a la sorpresa.

—¿Qué coño hacen policías aquí? —dije alterada.

°°

Ig: vibesgirlx

Capítulos
1 PRÓLOGO
2 CAPITULO 1: ETHAN
3 CAPÍTULO 2: LA CABAÑA
4 CAPÍTULO 3: ¿QUIÉN ERES TÚ?
5 CAPÍTULO 4: SÁLVAME
6 CAPÍTULO 5: MÍ LUGAR SECRETO
7 CAPÍTULO 6: LA VERDAD
8 CAPÍTULO 7: ¿ASI SE SIENTE?
9 CAPÍTULO 8: MAL TERCIO
10 CAPÍTULO 9: OTRA VEZ TÚ
11 CAPÍTULO 10: LA INVITACIÓN
12 CAPÍTULO 11: LA CANCIÓN
13 CAPÍTULO 12: EGOÍSTA
14 CAPÍTULO 13: MI VIDA ANTES QUE LA TUYA
15 CAPÍTULO 14: MENTIRAS
16 CAPÍTULO 15: DROGADO DE AMOR
17 CAPÍTULO 16: AMORES DE INFANCIA
18 CAPÍTULO 17: SENTIMIENTOS
19 CAPÍTULO 18: NADA ES LO QUE PARECE
20 CAPÍTULO 19: MENTIROSO
21 CAPÍTULO 20: ¿PREPARADOS?
22 CAPÍTULO 21: SENTÍ
23 CAPÍTULO 22: CUERPO DE CULPA
24 CAPÍTULO 23: MIL PEDAZOS
25 CAPÍTULO 24: NO ME OLVIDES
26 CAPÍTULO 25: AMNESIA
27 CAPÍTULO 26: VOLVER A ENAMORARTE
28 CAPÍTULO 27: RECUÉRDAME
29 CAPÍTULO 28: CAOS INTERIOR
30 CAPÍTULO 29: MARIPOSA
31 CAPÍTULO 30: MANIPULADORA
32 CAPÍTULO 31: TE RECUERDO
33 CAPÍTULO 32: ¿VIVIR FELICES?
34 CAPÍTULO 33: TE ODIÓ
35 CAPÍTULO 34: VOY POR TI
36 CAPÍTULO 35: LA VÍCTIMA Y EL SALVADOR
37 CAPÍTULO 36: ¿ESTO ES REAL?
38 CAPÍTULO 37: EL CÓMPLICE
39 NOTA DE AUTORA
40 EXTRA 1: LOS PROBLEMAS
41 EXTRA 2: LA NOCHE MELANCÓLICA
42 EXTRA 3: ACEPTA MI AYUDA
43 EXTRA 4: UN HOMBRO DONDE LLORAR
44 NOTA
45 EXTRA 5: MI PRIMER AMOR
46 EXTRA 6: DESEÓ MATERNAL
47 EXTRA 7: LOCURA EN LA PLAYA
48 EXTRA 8: LA ULTIMA VICTORIA
Capítulos

Updated 48 Episodes

1
PRÓLOGO
2
CAPITULO 1: ETHAN
3
CAPÍTULO 2: LA CABAÑA
4
CAPÍTULO 3: ¿QUIÉN ERES TÚ?
5
CAPÍTULO 4: SÁLVAME
6
CAPÍTULO 5: MÍ LUGAR SECRETO
7
CAPÍTULO 6: LA VERDAD
8
CAPÍTULO 7: ¿ASI SE SIENTE?
9
CAPÍTULO 8: MAL TERCIO
10
CAPÍTULO 9: OTRA VEZ TÚ
11
CAPÍTULO 10: LA INVITACIÓN
12
CAPÍTULO 11: LA CANCIÓN
13
CAPÍTULO 12: EGOÍSTA
14
CAPÍTULO 13: MI VIDA ANTES QUE LA TUYA
15
CAPÍTULO 14: MENTIRAS
16
CAPÍTULO 15: DROGADO DE AMOR
17
CAPÍTULO 16: AMORES DE INFANCIA
18
CAPÍTULO 17: SENTIMIENTOS
19
CAPÍTULO 18: NADA ES LO QUE PARECE
20
CAPÍTULO 19: MENTIROSO
21
CAPÍTULO 20: ¿PREPARADOS?
22
CAPÍTULO 21: SENTÍ
23
CAPÍTULO 22: CUERPO DE CULPA
24
CAPÍTULO 23: MIL PEDAZOS
25
CAPÍTULO 24: NO ME OLVIDES
26
CAPÍTULO 25: AMNESIA
27
CAPÍTULO 26: VOLVER A ENAMORARTE
28
CAPÍTULO 27: RECUÉRDAME
29
CAPÍTULO 28: CAOS INTERIOR
30
CAPÍTULO 29: MARIPOSA
31
CAPÍTULO 30: MANIPULADORA
32
CAPÍTULO 31: TE RECUERDO
33
CAPÍTULO 32: ¿VIVIR FELICES?
34
CAPÍTULO 33: TE ODIÓ
35
CAPÍTULO 34: VOY POR TI
36
CAPÍTULO 35: LA VÍCTIMA Y EL SALVADOR
37
CAPÍTULO 36: ¿ESTO ES REAL?
38
CAPÍTULO 37: EL CÓMPLICE
39
NOTA DE AUTORA
40
EXTRA 1: LOS PROBLEMAS
41
EXTRA 2: LA NOCHE MELANCÓLICA
42
EXTRA 3: ACEPTA MI AYUDA
43
EXTRA 4: UN HOMBRO DONDE LLORAR
44
NOTA
45
EXTRA 5: MI PRIMER AMOR
46
EXTRA 6: DESEÓ MATERNAL
47
EXTRA 7: LOCURA EN LA PLAYA
48
EXTRA 8: LA ULTIMA VICTORIA

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play